Este miércoles tomé el Transmilenio en la estación de la calle 100. Confieso que durante todo el camino estuve muy prevenido, porque la gran mayoría de gente iba sin tapabocas. Es una situación preocupante, sobre todo en un momento como este en el que estamos atravesando por picos de enfermedades respiratorias. Llegué a casa y mirando noticias me encontré con que, según la Organización Panamericana de la Salud , una de cada diez personas que enfrentaron el COVID severo, hoy enfrentan el síndrome postCOVID. Se dice que los síntomas pasan desde problemas con el desarrollo de la diabetes, hasta causar trastornos mentales.
Creo que hoy la mayoría se ha relajado con el autocuidado, como si de verdad el COVID hubiera desaparecido. Eso lo único que nos deja en evidencia es que no estamos valorando nuestra vida ni la de las personas a las que amamos. Entiendo que después de las cuarentenas y las restricciones, lo más normal sea querer volver a la vida antes de la pandemia, pero creo que, si aún no es posible, debemos esperar un poco más, porque el descuido puede terminar causándonos mucho daño.
La situación en el Transmilenio me hizo pensar que necesitamos adoptar tres actitudes que son fundamentales para poder salir adelante y lograr que el COVID no nos vuelva a dar tan duro:
La primera sin duda es cuidarnos a nosotros mismos. Y esta actitud nace desde el amor propio. Tenemos que cuidar nuestra propia salud y entender que nadie lo va a hacer por nosotros. Si no tomamos las medidas de protección, nos exponemos a pasar momentos desagradables que fácilmente podrían ser evitados.
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Pero segundo, creo que esa primera actitud permite vivir también cuidando a los demás. Siempre he dicho que cuidar es una de las mejores formas de demostrar el amor. Cuando nos protegemos, nos damos la oportunidad de proteger a aquellos que están cerca y que pueden ser más sensibles a cualquier enfermedad.
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Y lo tercero es vivir con una actitud de amor por la vida. Gozar cada uno de los momentos con responsabilidad, sabiendo que cuando lo hacemos en el presente, nos aseguramos un mejor futuro.