Ser humano es generar compasión hacia otros: querer ayudar a estar bien

Un estudiante preguntó a la antropóloga estadounidense Margaret Mead cuál consideraba ella que fue el primer signo de civilización en los humanos. El alumno y sus compañeros esperaban que Mead hablara del anzuelo, la olla de barro o la piedra de moler. Pero no. Ella dijo que el primer signo de civilización en una cultura antigua fue un fémur fracturado que luego apareció sanado.

Mead explicó que en el reino animal, si te rompes una pierna, mueres. No puedes procurarte comida o agua ni huir del peligro, así que eres presa fácil de las bestias que rondan por ahí. Ningún animal con una extremidad inferior rota sobrevive el tiempo suficiente para que el hueso se suelde por sí solo. De modo que un fémur quebrado y curado evidencia que alguien se quedó con quien se lo rompió, le vendó e inmovilizó la fractura. Es decir, lo cuidó.

Ayer recordé esta anécdota de la antropóloga estadounidense cuando leí la noticia del hallazgo en Valencia del fósil de un niño de seis años con lesiones graves en el oído. Esto implica que su clan cuidó de él sin esperar nada a cambio. Este primer neandertal con síndrome de Down ilumina el origen de la compasión humana.

Ser humano es generar compasión hacia otros. Es sentir el dolor del otro y querer ayudarlo a estar bien simplemente por hacerlo, sin esperar nada a cambio.

Como dice Juan Francisco Vázquez Pérez: “los seres humanos no solo somos egoístas, inteligentes o estúpidos, sino también seres dispuestos a cuidar de nosotros mismos y de otros.

Los seres humanos necesitan ser cuidados por otros porque son extremadamente vulnerables y, sin cuidados, serían incapaces de sobrevivir. Además, cuidan de sí mismos y buscan su bienestar de modo natural, y también cuidan a sus crías y a sus parejas. Cuando se ven separados de ellas, experimentan un gran sufrimiento y el reencuentro supone un enorme alivio”.

Ojalá no dejemos que el fanatismo, las ideologías religiosas y políticas nos deshumanicen hasta el punto de perder la compasión. Si quieres ser humano, sé compasivo.