La muerte de la pequeña Danna Valentina Méndez causó conmoción en Colombia y abrió el debate del respeto entre ciclistas y conductores en las carreteras del país.
El ciclismo es uno de los deportes que más alegría y gloria le ha dado a nuestro país, acabamos de celebrar el triunfo de Egan Bernal en el Tour de Francia y nuestros ojos se ponen en los jóvenes que se preparan en las carreteras soñando con ser un día campeones.
También son muchas las personas que recorren las carreteras haciendo ciclismo recreativo, por eso la muerte de Danna Valentina en un absurdo accidente nos ha impactado a todos, y ha sido la oportunidad para entender lo que está sucediendo en las carreteras entre los vehículos y los ciclistas.
Los datos de accidentes y muertes de ciclistas son demasiado altos, según la Agencia de Seguridad Vial, hasta julio de este año van 246 casos de ciclistas muertos en las carreteras del país, eso significa que hay un aumento del 31% frente al mismo periodo de 2018.
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Se hace necesario entender que todos merecemos la vía y nadie debe ser despreciado porque vaya en bicicleta o en moto, siempre hay que proteger al más débil, se requiere la mejor actitud de los que están al volante y los que van en la bicicleta.
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Se trata de garantizar una distancia mínima, evitar frenadas o movimientos bruscos y usar la velocidad requerida en cada zona.
Se trata de entender que cumplir las normas viales y proteger a los ciclistas en la vía no es solo una muestra de cultura, sino una muestra de condición humana.
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No esperemos más ciclistas muertos para entender que ser buenas personas tiene que notarse en nuestras acciones cotidianas.
Escuche la opinión completa de Alberto Linero en Mañanas BLU aquí:
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