Mientras el presidente Gustavo Petro
decide radicalizar su posición en medio del agravamiento de la crisis del sistema de salud, utilizando principalmente su cuenta en la red social X para atacar a todos los actores del sistema sin reconocer las fallas cometidas por su gobierno, se calienta la política de cara a las elecciones del año entrante, por medio del anuncio del Ejecutivo de convocar a una consulta popular intentando salvar sus reformas sociales.
La consulta popular, cuyo costo sería cercano al medio billón de pesos, se convierte en una oportunidad de oro para los diferentes sectores políticos, incluyendo al Gobierno y a la oposición, para montar la estructura y agitar a sus seguidores, prácticamente convirtiéndose en una primera vuelta electoral de cara al larguísimo año electoral en 2026, que incluye consulta interpartidista, elecciones a Congreso
y las dos vueltas de la elección presidencial.
En un evento con los precandidatos presidenciales del Centro Democrático en Medellín, el expresidente Álvaro Uribe
anunció que su partido hará pedagogía en contra de las reformas del Presidente Petro “en todas las calles de Colombia”, a lo que respondió el Presidente Petro instando a la creación de “los comités del Sí”, para intentar sacar adelante sus reformas.
El presidente Petro hábilmente decidió volver a posicionar al expresidente Álvaro Uribe como su principal contradictor, con el fin de polarizar al electorado y quitarle oxígeno político a los candidatos de centro, que podrían tener opción de llegar a la Casa de Nariño.
Hablando de la Consulta Popular, no tiene un camino fácil para salir adelante: primero debe pasar el examen en plenaria del Senado de la República. Según el ministro del Interior, Armando Benedetti, las preguntas están definiéndose, no serían más de 12 y serían enviadas en las próximas semanas al Congreso. Según las cuentas de Benedetti, si la consulta llegara a ser aprobada en mayo en el Legislativo, se haría entre agosto y septiembre de este año.
Es decir que el caldeado ambiente político de la consulta popular sería el que podría recibir en Colombia a una comisión del Senado de Estados Unidos, que estará en el país en esa misma época tras una invitación que les hizo el presidente del Congreso Efraín Cepeda, quien lidera una visita a Washington de un grupo de parlamentarios colombianos, para denunciar diferentes situaciones que se viven hoy en el país.
Y mientras el presidente Petro intenta usar la crisis de la salud para impulsar la campaña política para intentar mantener a la izquierda en el poder, millones de personas hoy madrugan a buscar medicamentos y citas médicas que cada vez son más escasos.