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Hay que dejar a un lado esa actitud vanidosa de pensar que nos las sabemos todas

Es bueno abrirse a la experiencia de la conversación y abandonar el desprecio por lo que el otro tiene por decir.

Albert Linero Instagram @PLinero.jpeg
Albert Linero
Foto: Instagram @PLinero

Una de las novelas que leí en mi adolescencia y que me impactó mucho fue Fahrenheit 451 del escritor estadounidense Ray Bradbury. Esta se trata de una sociedad distópica, en la que los libros estaban prohibidos y existían personas encargadas de quemar todo el que se encontraran. Pero quizá lo que más me impresionó y recuerdo mucho del texto, es que, en medio de esa situación, existían personas que habían aprendido de memoria los libros para que su esencia no se perdiera. Pienso en una escena en la que, a uno de estos personajes, al preguntársele quién era, se identificaba con el texto que había aprendido. Los seres humanos eran los libros.

Todo esto me llamó mucho la atención, y por eso cuando ayer me encontré con la noticia de la existencia de una biblioteca humana, me emocioné. Esta biblioteca, que nació en Dinamarca y está presente en más de 80 países, consiste en poder conversar con personas que tienen conocimientos en diferentes temas adquiridos desde su experiencia de vida.

Esto me gusta, primero porque creo que la sabiduría de los libros es fundamental y espero que nunca vayan a desaparecer, pero segundo, porque entiendo también la fuerza de la humanidad y de las experiencias vividas. Lamento que algunos a veces se olviden de lo que los otros pueden enseñarnos a partir de todo lo que han aprendido e investigado.

Soy de los que cree que una persona sabia es un libro al que hay que leer; aquellos que han atravesado por experiencias que han marcado sus vidas, tienen toda la autoridad para hacernos crecer con sus testimonios. Es bueno abrirse a la experiencia de la conversación y abandonar el desprecio por lo que el otro tiene por decir, porque es allí donde podemos encontrar muchas veces luces para iluminar nuestras propias situaciones de vida.

Yo me voy a proponer una escucha más atenta para sacar aprendizajes de todas las conversaciones que tenga. En parte, es necesario también dejar a un lado esa actitud vanidosa de pensar que nos las sabemos todas. En las palabras más sencillas, puede estar la mejor enseñanza.

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