La reunión de anoche en la Casa de Nariño entre el presidente Gustavo Petro y el nuevo presidente de la Corte Suprema, Gerson Chaverra, es fundamental para bajar las tensiones que se han producido en torno al proceso de elección de nuevo fiscal general y sobre todo para ratificar la importancia del respeto a la separación de poderes.
Aunque desde el despacho del presidente Petro habían invitado al magistrado Chaverra a una reunión protocolaria desde el pasado 25 de enero cuando fue elegido como el primer afrodescendiente en ser presidente de ese alto tribunal, solamente se concretó esa reunión anoche, apenas a 48 horas de la definitiva sala plena de la Corte Suprema para definir si lo logra una nueva fiscal general de la nación.
Asistió a este encuentro acompañado del vicepresidente de la Corte, Octavio Augusto Tejero, mientras que el presidente Petro estuvo acompañado del director del DAPRE, Carlos Ramón González; fue una reunión tranquila pero firme, duró más de una hora cerca de una hora y 15 minutos y en esa reunión hubo total franqueza la petición de la corte fue clara se necesitan garantías del gobierno nacional para que haya un normal tránsito a una elección tranquila de fiscal general de la nación la corte considera que mete mucho ruido y rechaza vehementemente las marchas convocadas por FECODE y otros sectores dirigidas el mismo día de la elección de fiscal, es decir, este jueves, con una arenga que considera que es ofensiva, elección de fiscal ya.
La Corte le recordó al presidente Gustavo Petro que tiene su normatividad definida, que tiene sus tiempos reglados, que está actuando en el marco de la Constitución y de la ley, y que considera presiones inaceptables que haya grupos de la población que pretendan que tome una decisión en uno o en otro sentido, eso sí, diciendo que respeta, por supuesto, el derecho de los colombianos a manifestarse, pero no en ese contexto, peligroso y complicado, en un ambiente cada vez más crispado.
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En esa reunión el presidente Petro le dijo al magistrado Gerson Chavera que él no está organizando, ni apoya, ni él ni su gobierno, marchas contra la Corte Suprema de Justicia. Al final quedaron claros los puntos sobre los cuales debe haber respeto a la separación de poderes y una colaboración armónica, que es quizás lo más importante de esta reunión. Luego del encuentro, el presidente Petro publicó un mensaje en Twitter en el que, entre líneas, que no hay que atacar a la Corte, pero sí convoca a los maestros a que organicen nodos para manifestarse contra lo que él considera van a ser supuestamente ataques en contra de la democracia.
El presidente luego de esto mantiene prudente silencio y todo el país espera con mucha expectativa a que mañana la Corte Suprema pueda sentarse de manera tranquila a definir si elige o no fiscal general. Si no lo hace, lo que espera el país también es que el gobierno y el presidente respeten la decisión de la magistrados.
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Escuche la opinión de Ricardo Ospina: