El "terremoto" judicial y político que viene por la audiencia de Salvatore Mancuso de la JEP

De nuevo se aplazó la decisión de la JEP sobre si acepta o no el sometimiento del exjefe paramilitarSalvatore Mancuso, quien permanece en un centro de detención temporal en Estados Unidos, a la espera de que se resuelva su situación migratoria y legal.

Aunque todo estaba listo para que este jueves 2 de noviembre se hiciera la audiencia para notificar formalmente la determinación de la Jurisdicción Especial de Paz, nuevamente a última hora se frustró esa posibilidad, tras una solicitud de los abogados de Mancuso, teniendo en cuenta varios hechos relacionados con la seguridad de la familia del exjefe paramilitar.

Al final, la JEP aceptó la petición de Mancuso y hoy se realizará una audiencia reservada para que el exjefe paramilitar explique por qué considera que su seguridad y la de su familia no ha sido reforzada de manera suficiente, ad portas de que el país conozca la magnitud de los señalamientos que hizo contra empresarios, políticos, ganaderos y otras personalidades que según su declaración, tuvieron vínculos con el paramilitarismo.

Mancuso hoy argumentará una serie de preocupaciones en materia de seguridad y algunos movimientos en torno a testigos de los hechos que confesó el exjefe paramilitar que han encendido las alarmas y han llevado a solicitar que se concreten las medidas de protección anunciadas.

Lo que está en juego es la reacción que tendrá la opinión pública ante el “terremoto” que viene en materia jurídica y política, una vez la JEP autorice la publicación de la declaración que rindió Salvatore Mancuso de manera reservada, en la que según se ha podido conocer, “encendió el ventilador” con nuevas acusaciones que podrían generar importantes consecuencias penales para los presuntos responsables.

Se da por descontado que la JEP admitirá como compareciente a Salvatore Mancuso, con una serie de condiciones, pero en torno al exjefe paramilitar faltan algunos asuntos que podrían estar dilatando la decisión sobre su caso, sobre todo en materia de protección a testigos y en torno a su rol como gestor de paz tras su postulación por parte del presidente Gustavo Petro .

Hay que tener plena claridad en la necesidad de que el nuevo “ventilador” de Mancuso debe ser contrastado con otros medios de prueba, como documentos y testimonios, para darle su verdadera magnitud y evitar una “cacería de brujas”. Toda la verdad sobre los horrores del conflicto armado debe conocerse, pero teniendo mucho cuidado con evitar que se termine torciendo con intereses políticos.