El sedentarismo, el otro filo de la pandemia que amenaza nuestras vidas

He quedado impresionado con los resultados de la encuesta que fueron entregados el día de ayer por el Ministerio de Salud, en el marco del Estudio Nacional de Evaluación de los Servicios prestados por las EPS. En la misma participaron más de 18.000 personas y se evidenció un aumento acelerado en tres enfermedades.

En el 2020 se registró que la cifra de personas que sufrían de hipertensión era del 11.30 %, en el 2021 esa cifra ascendió al 22.43 %.

Los participantes del estudio que se registran con diabetes hoy son un poco más del doble que en 2020, pasamos del 3% a un 6.1 %. Otro tanto presentan las cifras de enfermedades mentales que registra un cambio de 1.5% de los encuestados en 2020 a 3,28% a la fecha.

Es evidente que la pandemia ha generado unas dinámicas de vida que se reflejan en la salud física y emocional de todos; esta encuesta se presenta como una oportunidad para cuestionar el modo de vida que estamos llevando. Además de las causas médicas, propias de cada una de estas enfermedades, está el sedentarismo como un catalizador de las mismas.

Frente a esto requerimos un modo de vida más proactivo, más armónico y concentrado en hacer de la vida una experiencia de bienestar.

Es posible que no contemos con todas las condiciones que se requieren para una vida plena, pero hay que luchar por construirlas, evitando adicionalmente que el estrés y la ansiedad impacten negativamente la salud.
Un modo de vida que además de ocuparse de las tareas diarias se reoriente hacia tres situaciones:

• Cuidarse físicamente, que implica aprender a comer balanceadamente, hacer ejercicio físico y estar atento a la salud.
• Gestionar adecuadamente las emociones, durante muchos años se ha despreciado el valor y el efecto de las emociones en la vida, es hora de entender que también somos lo que sentimos y que se requiere buscar esas emociones de bienestar que generan serenidad y fortaleza para ser verdaderamente productivos.
• Generar experiencias espirituales que permitan encontrarle sentido a las batallas diarias. Ejercicios de contemplación, meditación, oración ayudan a saber que no todo se define en lo que podemos tocar.
• Ser sano, también, es tu responsabilidad.

Escuche la reflexión de Alberto Linero en Mañanas BLU: