Cinco indicadores de que algo no está bien en nuestra salud mental

Ayer leía una nota periodística en la que se comentaba el último informe del Centro para la Prevención y el Control de Enfermedades, que es la principal agencia federal de salud de Estados Unidos, en el cual se presentaban algunas alarmas por la salud mental de los estudiantes de secundarias de este país.

Se planteaba allí que casi tres de cada cinco adolescentes se sintieron tristes o desesperanzados en el 2021, la cual es la cifra más alta en los últimos diez años. Ahora, en Colombia, las cifras no son muy alentadoras, ya que según el Instituto Nacional de Medicina Legal y Ciencias Forenses 4.159 personas se quitaron la vida por problemas emocionales durante el 2021 y 2022. Es decir, hay que ponerle mucha atención a la salud mental.

La “OMS define la salud mental como "un estado de bienestar en el cual cada individuo desarrolla su potencial, puede afrontar las tensiones de la vida, puede trabajar de forma productiva y fructífera, y puede aportar algo a su comunidad”. Es la capacidad de responder desde la armonía interior a los desafíos que continuamente realiza la vida.

La psicóloga Pilar Guerra Escudero plantea que estas actitudes son indicadores de que algo no está bien en nuestra salud mental:

1. Negatividad: exacerbar la crítica y alimentarse de pensamientos que avizoran lo peor siempre.
2. Miedos: preocupaciones y cambios de humor: experimentar que todo ocasiona temor, estar lleno de preocupaciones muchas veces irracionales, pero sobre todo vivir sin ánimo y triste.
3. Procrastinación: encontrar excusas para no hacer lo que corresponde en el momento preciso.
4. Aislamiento: encerrarse en sus propios pensamientos y negarse a la conexión social.
5. Apatía: perder la ilusión por los proyectos que tenemos y en general por la vida misma.
   

La salud mental exige que cuidemos la calidad de nuestros pensamientos. Es decir, que busquemos que ellos nos impulsen a construir mejores situaciones de vida y nos muestren lo hábiles y capaces que somos para la vida; gestionar las emociones aceptándolas, expresándolas de manera adecuada y aprovechándolas en la realización de nuestros sueños. Propiciar experiencias espirituales que nos ayuden a crecer integralmente. Trabaja en tu salud mental