Las fuertes inundaciones en el Parque Nacional de Yellowstone (noroeste de Estados Unidos) mantienen cerrado todos los accesos al paraje natural por segundo día consecutivo y las autoridades no tienen expectativas de que pueda reabrirse pronto en su totalidad."Debido a las inundaciones récord y a la previsión de más precipitaciones, hemos decidido cerrar Yellowstone a todas las visitas", afirmó ayer en un comunicado el superintendente a cargo de la gestión del parque, Cam Sholly.Según Sholly, la prioridad entonces estaba siendo evacuar la zona norte del parque, donde aún se están sufriendo "múltiples fallos en carreteras y puentes, desprendimientos de tierra y otros problemas".Efectivos del parque, así como autoridades del condado de Park y del propio estado de Montana, continúan trabajando sobre todo en el municipio Gardiner (Montana), cuyos habitantes permanecen aislados y sin electricidad ni agua potable.Gardiner es una localidad de menos de mil habitantes que cuenta con la única entrada para vehículos al parque que no se había cerrado hasta ahora en lo que va de año.Además de Gardiner, las autoridades de Park informaron este martes a través de Facebook que hay otras ciudades en el condado que están experimentando inundaciones, lo que hace "inseguro viajar hasta ellas e imposible evacuarlas".En este sentido, también instaron a la población del área a que no beban el agua que sale de sus grifos debido a la rotura de una de las tuberías principales que abastece la zona."No sabemos cuándo se podrá reabrir hasta que las aguas de la inundación bajen y podamos evaluar los daños en todo el parque", aseguró Sholly el lunes para terminar añadiendo que "es muy probable" que la zona norte permanezca cerrada "durante un tiempo".Las imágenes de enormes riadas arrasando incluso viviendas a su paso por esta área del reconocido parque siguen poniendo de manifiesto la gravedad de unas inundaciones que, desde las autoridades de Yellowstone, definieron como "históricas".Un fenómeno sin precedentes al noroeste de Estados Unidos que coincide con un domo de calor iniciado la semana pasada en el suroeste del país.En las últimas horas, según el Centro de Predicción Meteorológica de EE. UU., esta burbuja de calor se ha desplazado a los estados del centro provocando que 125 millones de personas estén bajo alerta de calor y humedad.Le puede interesar: escuche el podcast Titanes del ciclismo
Colin Nathaniel Scott, de Oregon, había ido al famoso parque en Wyoming con su hermana en junio para disfrutar sus piscinas termales naturales. Él resbaló y cayó mientras su hermana lo filmaba con su teléfono celular, de acuerdo a un informe del accidente preparado por funcionarios del parque y conseguido por el canal local de noticias KULR bajo una petición de libertad de información. El informe dice que el incidente ocurrió el 7 de junio después de que Scott y su hermana, Sable Scott, ingresaron en una zona muy peligrosa de aguas hirvientes ácidas que está claramente marcada como área restringida. "Hay un cierre en el lugar para evitar que la gente haga eso y proteger los recursos (naturales) porque ellos son muy frágiles", dijo el subdirector de los guardaparques de Yellowstone, Lorant Veress, al canal KULR. "Ellos estaban moviéndose específicamente en esa área para encontrar un lugar donde poder meterse y bañarse", dijo Sable contó a las autoridades que su hermano se agachó para comprobar la temperatura del agua termal cuando resbaló y cayó a ella. Los rescatistas encontraron su cuerpo dentro de la piscina, pero no pudieron retirarlo ese día debido a una tormenta eléctrica, de acuerdo al informe. Al día siguiente, indica el informe, los rescatistas no lograron encontrar el cuerpo. Una de las pocas evidencias recuperadas fueron unas sandalias de la víctima."En poco tiempo hay una gran disolución", indicó Veress. Yellowstone es uno de los parques más visitados de Estados Unidos. De acuerdo al historiador del parque, Lee Whittlesey, 22 personas, incluidos siete niños, han muerto desde 1870 en las aguas termales del parque, donde las temperaturas alcanzan hasta los 121 grados Celsius. El más reciente hecho mortal ocurrió en 2000, cuando una empleada del parque de 20 años de edad se zambulló en las aguas termales que ella confundió con un arroyo.