La Organización Mundial de la Salud (OMS) ha convocado hoy una reunión de urgencia de sus expertos para analizar el actual brote de virus de Marburgo en Guinea Ecuatorial, con al menos nueve fallecidos y 16 casos sospechosos.El encuentro también analizará la situación actual de la investigación de vacunas contra el virus similar al del ébola: aunque hay una treintena de candidatas, todas están en periodo de tests clínicos y ninguna ha sido todavía aprobada.Guinea Ecuatorial confirmó el lunes su primer brote de la enfermedad del virus de Marburgo en la provincia de Kié-Ntem, del oeste de la parte continental del país africano y fronteriza con Camerún y Gabón.El virus de Marburgo causa una fiebre hemorrágica viral altamente infecciosa de la misma familia que la más conocida enfermedad del virus del Ébola.En el pasado se han detectado brotes y casos esporádicos de esta enfermedad en otros países de África como Ghana, Guinea, Angola, la República Democrática del Congo, Kenia, Sudáfrica y Uganda.La enfermedad por el virus de Marburgo es tan mortífera como la del ébola y se estima que en África ha causado la muerte de más de 3.500 personas.La enfermedad, para la que no hay vacuna ni tratamiento específico, fue detectada en 1967 en la ciudad alemana de Marburgo -origen de su nombre- por técnicos de laboratorio que resultaron infectados cuando investigaban a monos traídos de Uganda.Le puede interesar:
La Organización Mundial de Salud (OMS) no descartó el jueves un riesgo de transmisión regional e internacional del virus del ébola tras una nueva epidemia de esta fiebre hemorrágica en el noroeste de la República Democrática del Congo.La reaparición de este virus en la ciudad de Mbandaka ha causado dos muertos desde el 21 de abril. A fecha de 27 de abril, "267 contactos han sido identificados", según la OMS, que juzga "difícil de evaluar la envergadura de la epidemia"."El riesgo de propagación regional e internacional de esta epidemia no está excluido porque la ciudad de Mbandaka bordea con el río Congo y dispone de conexiones fluviales y terrestres con la capital Kinshasa, la República de Congo, la República Centroafricana y Angola", indica la OMS en un comunicado.Además, añade la OMS, Mbandaka dispone de conexiones aéreas con Kinshasa y la provincia de Ubangi del Sur, que limita con República Centroafricana y República del Congo.Aun así, la OMS califica por ahora de "moderado" el riesgo a nivel regional y "débil" en el plano internacional y desaconseja imponer restricción a los viajes o al comercio con RD Congo.En cambio, el riesgo de propagación dentro de ese país se considera "elevado" debido a la presencia de reservorios de animales y huéspedes intermedios, a la frecuencia elevada de epidemias de ébola en el país, de factores ambientales y de un sistema de salud debilitado por epidemias de cólera, sarampión y COVID-19.Identificado por primera vez en 1976 en RD del Congo, entonces llamada Zaire, el virus del Ébola se transmite al hombre por animales infectados. La transmisión entre humanos ocurre a través de líquidos corporales.Sus principales síntomas son fiebre, vómitos, hemorragia y diarreas.Desde su identificación en 1976, RD del Congo ha experimentado 14 epidemias de ébola.Escuche el podcast de Cómo como aquí:
Una segunda persona falleció este lunes por el nuevo brote de ébola declarado este fin de semana en el noroeste de la República Democrática del Congo (RDC), confirmaron hoy a Efe fuentes de la Organización Mundial de la Salud (OMS)."Está confirmado. (Ella) era un contacto del primer caso y murió ayer. Puedo deciros que tuvo un entierro seguro y digno", dijo este martes a Efe por teléfono una responsable de comunicación de la oficina de la OMS para África.De acuerdo a esa misma fuente, las autoridades sanitarias han rastreado ya y están monitorizando un total de 145 contactos y "la campaña de vacunación empezará pronto".La mujer, de 25 años, falleció en la ciudad norteña de Mbandaka, capital de la provincia noroccidental de Ecuador, tras empezar a experimentar síntomas doce días antes.Según detalló la OMS a través de la red social Twitter, se trataba de un contacto de "alto riesgo", al ser la cuñada del primer fallecido.Las autoridades congoleñas declararon este sábado un nuevo brote de la enfermedad en el país -el decimocuarto- tras confirmar un nuevo caso en Mbandaka, según confirmó a Efe el coordinador de los programas contra esta enfermedad en la RDC, Steave Ahuka.El paciente, de 31 años, empezó a sangrar persistentemente el pasado jueves mientras era atendido en el hospital tras presentar algunos síntomas propios de la enfermedad, como fuertes dolores de cabeza y fiebres, y falleció el viernes 22 de abril.Ese fue el primer caso de ébola registrado en la RDC desde que la OMS anunciase el 16 de diciembre de 2021 el fin del decimotercero y último brote de la enfermedad en el país, que provocó once casos y seis muertos en la provincia nororiental de Kivu del Norte.Desde 2018 hasta 2020, el noreste de RDC -incluyendo las provincias de Kivu del Sur, Kivu del Norte e Ituri- vivió su peor brote de ébola, con al menos 2.299 muertos, según los últimos datos de la OMS.Esta enfermedad, descubierta en 1976 en la RDC -entonces llamada Zaire-, se transmite por contacto directo con la sangre y fluidos corporales de personas o animales infectados.Esta fiebre causa hemorragias graves y puede alcanzar una tasa de mortalidad del 90 %, mientras sus primeros síntomas son fiebre repentina y alta, debilidad intensa, y dolor muscular, de cabeza y de garganta, además de vómitos.Desde 2014 a 2016, esta enfermedad provocó la muerte de unas 11.300 personas en África occidental -Guinea-Conakri, Liberia y Sierra Leona-, si bien la OMS advirtió que estas cifras pueden ser conservadoras.
El virus de Marburgo es un primo del Ébola ligeramente menos mortal para el que no hay vacunas ni tratamiento. Detectado recientemente en Guinea, se manifiesta por una fiebre aguda acompañada de hemorragias externas e internas, con una tasa media de mortalidad del 50%.¿Dónde surge el virus?Este virus, conocido antiguamente como fiebre hemorrágica de Marburgo, fue bautizado por la ciudad alemana donde se detectó por primera vez, en 1967, en un laboratorio cuyo personal estuvo en contacto con monos con la enfermedad, importados de Uganda.El mismo año se detectaron otros dos focos en laboratorios de Fráncfort, Alemania, y en Belgrado (Yugoslavia, hoy Serbia). Siete personas murieron por la enfermedad.¿Cómo se transmite?El virus forma parte de la familia de los filoviridae (filovirus), como el Ébola (con el que comparte numerosas características), y se transmita al ser humano a través de los murciélagos de la fruta (rousettus), habitualmente considerados como los huéspedes naturales de este virus.Se contagia entre humanos por el contacto directo de los fluidos corporales de las personas infectadas, o con superficies o materiales, según la Organización Mundial de la Salud (OMS).¿Cuáles son los síntomas?Los primeros síntomas de la enfermedad por virus de Marburgo son dolores musculares, dolor de cabeza y conjuntivitis, seguidos de malestar en la garganta, vómitos, diarreas, erupciones cutáneas y hemorragias.Esto hace que sea difícil distinguir esta enfermedad de otras patologías como el paludismo, la fiebre tifoidea, el cólera u otras fiebres virales hemorrágicas.La enfermedad tiene un periodo de incubación de 2 a 21 días, según la OMS, y después manifiesta sus síntomas de forma repentina, con una fiebre fuerte, cefaleas intensas y gran malestar.¿Qué tratamientos existen?No hay ninguna vacuna ni ningún tratamiento homologado a día de hoy. Según la OMS, se están desarrollando varios tratamientos a base de productos sanguíneos, terapias inmunitarias y tratamientos con medicamentos.La rehidratación por vía oral o intravenosa y el tratamiento de los síntomas específicos mejoran la tasa de supervivencia.Pero se trata de un virus particularmente mortífero, con una media de un fallecido cada dos casos.La tasa de mortalidad varió del 24% al 88% durante las anteriores epidemias, en función de la fuente viral y de la gestión de los casos.¿Cómo frenar una eventual pandemia?"Para evitar la propagación masiva del virus de Marburgo hay que atajarla ya", afirmó Matshidiso Moeti, directora regional de la OMS para África.Para ello, el investigador y responsable del departamento de virología del Instituto Pasteur en Dakar, Ousmane Faye, considera que "hay que reforzar la vigilancia, identificar todos los contactos próximos para poder aislarlos por si desarrollan la enfermedad, evitando así la transmisión".Epidemias anterioresEn África, las epidemias anteriores y los casos esporádicos se dieron en Sudáfrica, Angola, Kenia, Uganda y en República Democrática del Congo.La pandemia más grave registrada hasta ahora se dio en 2005, en el norte de Angola, y dejó 329 muertos de 374 personas infectadas.Primer caso en África occidental El caso registrado en un pueblo del sur de Guinea fronterizo con Sierra Leona y Liberia, es el de un hombre que falleció el 2 de agosto tras la aparición de síntomas el 25 de julio, precisó la OMS.Las autoridades siguen a cerca de 155 contactos cercanos. De ellos, tres miembros de la familia del enfermo fallecido, y un sanitario, fueron designados como contactos de alto riesgo, y su salud se vigila de cerca.Este caso de la enfermedad por virus de Marburgo fue detectado apenas dos meses después de que Guinea, uno de los países más pobres del mundo, declarase el fin de la epidemia de Ébola que estalló en el país a principios de año, y que causó doce fallecidos.Se reforzó en consecuencia la vigilancia en las fronteras.
Guinea registró un primer caso de la enfermedad provocada por el virus de Marburgo, sumamente virulento que provoca fiebre hemorrágica, informó este lunes la Organización Mundial de la Salud (OMS). Se trata también del primer caso que se registra en África occidental.La OMS considera "alta" la amenaza a nivel nacional y regional, pero "baja" a nivel internacional.El gobierno guineano confirmó asimismo la aparición del virus.El caso fue detectado en la prefectura de Guéckédou, en el sur del país. Se trata de un hombre fallecido el 2 de agosto y cuyos síntomas remontan al 25 de julio, precisó la OMS.Muestras extraídas al paciente fallecido y analizadas en laboratorio en Guéckédou, así como en el Laboratorio Nacional Guineano de la fiebre hemorrágica, confirmaron el virus, al igual que análisis complementarios efectuados por el Instituto Pasteur de Senegal, indicó la OMS.El paciente fue atendido en una clínica de la localidad de Koundou, en Guéckédou, adonde fue enviado un equipo de investigadores médicos para estudiar la agravación de sus síntomas.En un tuit, el director general de la OMS, Tedros Adhanom Ghebreyesus, alertó sobre la necesidad de llevar a cabo un "esfuerzo concertado para prevenir la transmisión y proteger a las comunidades".Un primer equipo de diez expertos de la OMS, entre ellos epidemiólogos y socioantropólogos, se encuentra en el lugar para apoyar a las autoridades sanitarias nacionales.Asimismo, se ha reforzado la vigilancia transfronteriza para detectar eventuales casos y los países vecinos están en alerta.Tres miembros de la familia del paciente fallecido y un trabajador sanitario fueron identificados como contactos estrechos de alto riesgo y se encuentran bajo vigilancia, mientras que se trata de identificar la fuente de la infección y otros contactos, precisó la OMS.La enfermedad del virus de Marburgo se transmite al hombre por murciélagos que se alimentan de frutas y se propaga en la especie humana por contacto directo con fluidos corporales de personas infectadas, o con superficies y materiales, según la OMS.La enfermedad comienza de súbito con una fuerte fiebre e intensos dolores de cabeza. Las tasas de mortalidad variaron entre un 24% a un 88% en epidemias anteriores, según la cepa viral y la atención a los casos, agregó.La prefectura de Guéckédou es la misma donde se declaró la reciente epidemia de Ébola, y donde se detectaron los primeros casos de este virus en África occidental entre 2014 y 2016.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) y Guinea anunciaron oficialmente este sábado el final de la segunda epidemia de ébola en este país africano, unos meses después de la reaparición de esta enfermedad derrotada gracias a la experiencia adquirida entre 2013 y 2016."Tengo el honor de tomar la palabra en este día de declaración del final de la enfermedad del virus Ébola" en Guinea, dijo el responsable de la OMS, Alfred Ki-Zerbo, durante una ceremonia en Nzérékoré (sudeste), donde el virus reapareció a finales de enero."Quisiera, en nombre del Estado, declarar el final del resurgimiento de la enfermedad del virus Ébola en la República de Guinea", indicó por su parte el ministro guineano de Salud, Rémy Lamah.Según un comunicado de la OMS difundido este sábado, se registraron 16 casos confirmados y siete probables durante esta segunda epidemia en Guinea. Once pacientes sobrevivieron y 12 fallecieron.El comunicado no precisa si esos 12 muertos corresponden todos a casos confirmados. Un anterior balance brindado por la OMS el jueves informaba de cinco muertos.La epidemia de 2021 fue rápidamente derrotada en comparación con la anterior.La epidemia de 2013-2016, considerada como la peor provocada por el virus desde que este fue detectado en 1976, apareció en Guinea y se propagó a los vecinos Liberia y Sierra Leona, matando a 11.300 personas. Pero, según la OMS, este balance estaría subestimado.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) decretó hoy el fin del brote de ébola declarado el pasado 1 de junio en el noroeste de la República Democrática del Congo (RDC).Esa epidemia, que afectó a la provincia de Ecuador y es la undécima que sufre la RDC, causó 130 casos (119 confirmados y 11 probables), 55 muertes y 75 contagios que se curaron, informó la oficina regional para África de la OMS en un comunicado.Desde Kinshasa, el ministro congoleño de Sanidad, Eteni Longondo, confirmó también el fin del brote."Esta undécima epidemia de la enfermedad por el virus del Ébola tuvo la particularidad de extenderse mucho más a las zonas sanitarias de ríos y lagos", explicó Longondo en una rueda de prensa en la capital congoleña, citado por medios locales."Esto constituyó un gran desafío logístico en cuanto al desarrollo de las actividades de respuesta en un sistema de salud ya debilitado por epidemias anteriores y por una débil participación de la comunidad en las recomendaciones sanitarias", añadió el ministro.El brote se dio por terminado después de que transcurrieran 42 días desde que el último paciente positivo diese por primera vez negativo y sin que hayan aparecido nuevos casos positivos desde entonces, criterio para declarar la conclusión de estos brotes."Superar uno de los patógenos más peligrosos del mundo en comunidades remotas y de difícil acceso demuestra lo que es posible cuando la ciencia y la solidaridad se unen", afirmó la directora regional de la OMS para África, Matshidiso Moeti.Más de 40.000 personas de alto riesgo fueron inoculadas por vacunadores que utilizaron un innovador almacenamiento en cadena de frío para mantener la vacuna contra el ébola a temperaturas tan bajas que alcanzaron los 80 grados centígrados bajo cero.Los congeladores ARKTEK, que pueden mantener las vacunas a temperaturas muy bajas hasta una semana, permitieron a los especialistas vacunar a las personas en comunidades sin electricidad en Ecuador, según la OMS."Abordar el ébola en paralelo a la COVID-19 no ha sido fácil, pero gran parte de la experiencia que hemos adquirido en una enfermedad se puede transferir a otra y subraya la importancia de invertir en la preparación para emergencias y la creación de capacidad local", agregó la doctora botsuanesa.Ecuador ya sufrió el noveno brote del virus del Ébola entre mayo y julio de 2018, cuando se registraron 54 casos, entre ellos 33 muertos y 21 supervivientes.Las autoridades congoleñas declararon el pasado 25 de junio el fin de la décima epidemia, que asoló tres provincias del noreste del país (Kivu del Norte, Kivu del Sur e Ituri) desde el 1 de agosto de 2018, con un resultado de 3.463 casos, 2.280 fallecidos y 1.171 supervivientes, según las últimas cifras emitidas por la OMS.Esa epidemia fue la peor de la historia de la RDC y la segunda más grave del mundo, después de la que asoló África occidental de 2014 a 2016, en la que murieron 11.300 personas y hubo más de 28.500 casos, aunque esas cifras -según la OMS- pueden ser más altas.El doctor Guyguy Manangama, responsable de MSF en la respuesta a la epidemia de ébola en la provincia de Ecuador, explicó que esa menor letalidad podría deberse a la existencia de "algún tipo de inmunidad natural entre las personas en la provincia de Ecuador, ya que esta región ha experimentado brotes de ébola antes".La enfermedad del Ébola, descubierta en la República Democrática del Congo en 1976, entonces llamada Zaire, se transmite por contacto directo con la sangre y fluidos corporales de personas o animales infectados.Esta fiebre causa hemorragias graves y puede alcanzar una tasa de mortalidad del 90 %. Sus primeros síntomas son fiebre repentina y alta, debilidad intensa, y dolor muscular, de cabeza y de garganta, además de vómitos.
La República Democrática del Congo registró este domingo su segunda muerte por ébola, 48 horas después de un primer caso que marcó un repunte de la epidemia, cuyo fin debía ser declarado el lunes, indicaron las autoridades sanitarias locales.Una niña murió a causa de la fiebre hemorrágica en la ciudad de Beni, que fue uno de los epicentros de la epidemia, declarada el 1 de agosto de 2018, precisó la misma fuente.Le puede interesar: ¿Cómo se ha afrontado la pandemia del coronavirus en el mundo?Este segundo caso había estado en el mismo centro de salud que la víctima registrada el viernes, un hombre de 26 años. "Se trata de una co-paciente del caso confirmado del 10 de abril", según el comunicado del comité multisectorial de respuesta a la enfermedad de ébola.El deceso del viernes se produjo al cabo de 52 días sin que se declarasen nuevos casos de ébola en el país, indicaron las autoridades congoleñas y la Organización Mundial de la Salud (OMS).La República Democrática del Congo y la OMS preveían proclamar oficialmente el fin de la epidemia el lunes, tras un periodo sin nuevos casos y después de que la última paciente de ébola hubiera sido dada de alta el 3 de marzo.Pero ahora, el país deberá esperar a que pasen 42 días (el doble de lo que puede durar, como máximo, la incubación) sin que haya nuevos casos para proclamar el fin de la epidemia, que ha matado a 2.276 personas, según las autoridades sanitarias congoleñas.
Las autoridades en el Valle del Cauca intensificaron sus controles y monitoreos en el departamento tras la alerta mundial que hay por el virus del Ébola.Los controles se realizan con mayor intensidad en el puerto de Buenaventura debido al gran número de embarcaciones que llegan al terminal marítimo, como también en el aeropuerto Alfonso Bonilla Aragón de Palmira.Según la secretaria de Salud, María Cristina Lesmes, toda la red de salud pública estará en alerta porque, aunque el departamento está preparado para enfrentar cualquier patología, en el caso del Ébola se debe reforzar el plan de contingencia.“Tenemos un puesto designado y de control en Buenaventura, también en el aeropuerto de Palmaseca donde son los dos lugares en los que podríamos tener pacientes que lleguen con esta enfermedad”, dijo Lesmes.No deje de ver: OMS declara el ébola ""emergencia"" sanitaria mundial “Tenemos la formación suficiente en el manejo de estos pacientes, sin embargo, con la nueva alerta mundial renovamos nuestro plan de atención”, agregó la funcionaria.Adicionalmente, Lesmes indicó que es importante que, ante cualquier sospecha de alguna persona con estos síntomas o características del virus, se debe indicar a las autoridades.En el caso de los buques mercantes, el comandante del navío debe notificar la presencia de persona enferma en su interior para proceder con el protocolo respectivo de salud.Escuche la entrevista completa aquí:
Una investigación española ha constatado que los supervivientes al ébola generan unos anticuerpos "en pequeña cantidad", denominados "unicornio", que son capaces de identificar las zonas vulnerables del virus y neutralizarlo, un primer paso para obtener una vacuna eficaz para todas sus variantes. Los investigadores del Servicio de Microbiología y del Instituto de Investigación del Hospital Universitario 12 de Octubre de Madrid son los responsables de este hallazgo tras investigar muestras de tres pacientes infectados por el virus que fueron tratados en España. El investigador principal y jefe de este servicio, Rafael Delgado, explicó, en declaraciones a la prensa, que el estudio se enmarca dentro de una nueva estrategia llamada "vacunología inversa" para conseguir frente a algunos agentes vacunas, bien porque no las hay, como el caso del VIH, o porque no son al cien por cien eficientes, como en el de la gripe. Esta estrategia consiste en descubrir cuáles son las zonas más vulnerables del virus, que generalmente están en la superficie -en las proteínas que lo envuelven- y a partir de ahí conseguir vacunas que sean capaces de inducir los anticuerpos que identifiquen esas áreas. En este caso, han demostrado que en pacientes supervivientes de ébola existen anticuerpos especiales en muy pequeña proporción pero que reconocen esas zonas recónditas y más vulnerables del virus, que están presenten en todas las variedades del Ébola -son cinco-. "Hemos podido demostrar que en esos pacientes existen anticuerpos en pequeña cantidad, que tienen propiedades muy especiales, son muy efectivos porque van dirigidos frente a zonas absolutamente críticas para el virus, y tienen una eficacia muy grande para bloquearlo", expuso Delgado. Se trata de la primera vez que estos anticuerpos "unicornio" se detectan en muestras reales de pacientes que han superado la infección, ya que antes habían sido identificados en clones creados en laboratorio. "Estos anticuerpos, si estuvieran en cantidades más altas, seguramente serían protectores frente a todas las variedades de virus ébola circulante. El reto sería inducir grandes cantidades de estos anticuerpos tan especiales mediante una vacuna", explicó Delgado. Esa vacuna, según resaltó el investigador, estaría modificada para "expresar" esas zonas que son de mayor vulnerabilidad en la superficie del virus. "Esa sería la aplicación más importante", afirmó. En concreto, sería mediante la modificación de la envoltura del virus en laboratorio y así se conseguiría inducir una mayor producción de estos anticuerpos "unicornio". Delgado señaló que la expectativa es conseguir una vacuna eficaz pero aún se están dando "los primeros pasos", ya que primero tiene que investigarse en ratones, unos resultados podrían estar listos en un año. De manera similar, la estrategia se está utilizando también para avanzar en una vacuna universal con una eficacia más prolongada en el tiempo para el virus de la gripe y para otra contra el VIH, ya que se ha demostrado, según Delgado, que existen anticuerpos igualmente protectores que reconocen las regiones más vulnerables y escondidas del virus. "Inducir estos anticuerpos mediante vacunas es ahora el reto de la vacunología en el futuro", insistió el investigador. Y es que la mayoría de las vacunas funcionan por su capacidad de inducir la producción de anticuerpos que reconocen y neutralizan la envoltura que los virus tienen en su superficie, que es el caso de algunas "muy eficaces" como las de hepatitis B o el sarampión. Sin embargo, en el caso del ébola, la gripe o el VIH, uno de sus inconvenientes es la variabilidad y capacidad de estos virus para "esconder" esas áreas más vulnerables de su envoltura. La investigación, realizada en colaboración con la Unidad de Enfermedades Infecciosas del Hospital de La Paz, de Madrid, se publica en un suplemento especial de la revista científica The journal of Infectius Diseases.