En medio del pico respiratorio que vive el país y el aumento de casos de COVID-19, el Ministerio de Salud entregó el reporte de las vacunas disponibles en Colombia para hacerles frente a estos dos temas.Unas de las vacunas disponibles es contra la influenza, que está destinada a niños de 6 a 23 meses, gestantes, talento humano en salud, adultos mayores de 60 años y personas con patologías de riesgo.También está disponible la vacuna bivalente contra el COVID-19 que se dirige a aquellos que recibieron su última dosis hace seis meses o más y forman parte de grupos de riesgo. Esta última también protege contra la nueva variante JN.1, derivada de la variante Ómicron BA.¿Qué vacunas están disponibles?En cuanto a la disponibilidad de vacunas, el Gobierno ha asignado y distribuido la vacuna Moderna Bivalente a las 38 entidades territoriales. Se dispone de 343.056 dosis en todo el país, con 138.900 adicionales a distribuir, según las necesidades manifestadas por las entidades territoriales.Esta vacuna Moderna Bivalente es conocida como Spikevax Original/Ómicron BA.4-5 y previene la enfermedad grave, muerte y síndromes crónicos relacionados con COVID-19 en mayores de 18 años pertenecientes a grupos poblacionales con alto riesgo de complicaciones.¿Dónde se pueden encontrar estas vacunas?Estas pueden obtenerse en más de 3.000 puntos de vacunación distribuidos en todo el país.El Ministerio de Salud también aseguró que la población de riesgo (mayores de 60 años, talento humano en salud y mayores de 18 años con patologías de base), cuya última dosis fue hace seis meses o más, puede recibir la dosis adicional contra la COVID-19.Aquellos ciudadanos que no recuerden su historial de vacunación pueden acudir al punto de vacunación más cercano para obtener información y confirmar si necesitan de la dosis adicional.Le puede interesar:
En medio de las actuales alertas epidemiológicas relacionadas con virus respiratorios y los repuntes de los casos de COVID-19 en el país, la Organización Panamericana de la Salud (OPS), en conjunto con el Ministerio de Salud y el Instituto Nacional de Salud (INS), hizo un llamado a la población para tomar medidas preventivas.La OPS en sus informes ha registrado un incremento en los casos de COVID-19, influenza y otros virus respiratorios en el hemisferio norte, una tendencia esperada durante el invierno. Por lo que, hay que mantener una vigilancia continua ya que muchos viajeros llegan a Colombia desde países como Estados Unidos y Europa o los colombianos que viajaron allí vuelven al país después de la temporada de vacaciones, lo que podría propiciar incrementos locales de infecciones respiratorias.Y es que, según el Instituto Nacional de Salud, a la fecha, hay presencia continua de distintas variantes de ómicron en el país. Destacan la variante JN.1, de interés según la OMS, que se evidencia desde la semana del 24 de diciembre y tiene su origen en la variante ómicron BA.2.86. Aunque estas variantes son altamente contagiosas, tienen una baja capacidad de producir enfermedad grave, hospitalización y muerte.En cuanto a la ocupación de camas UCI, se informó que, hasta el 8 de enero de 2024, el 65.4 % de las UCI pediátricas están ocupadas, con un 3.06 % de casos por COVID-19, y el 67 % de las 7.510 camas de UCI para adultos se encuentran ocupadas, con un 0.52 % por COVID-19, dejando un 33 % de camas disponibles.En el país hay disponibilidad de vacunas seguras y efectivas contra la influenza y la COVID-19. Durante 2023, se administraron 1.274.186 dosis de la vacuna contra la COVID-19 en esquema primario, refuerzos y dosis adicionales, con un 35 % destinado a niños y niñas de 6 meses a 17 años.Además, se pusieron a disposición 757.400 dosis de la vacuna bivalente contra COVID-19 en todo el país. La protección contra la influenza inició en mayo de 2023, y hasta la fecha se han aplicado 4.352.469 dosis en grupos poblacionales de mayor riesgo.En medio de esta situación, lo que mejor se puede hacer es tomar acciones, incorporando conductas como el lavado de manos, uso de tapabocas y la búsqueda oportuna de atención médica.Recomendaciones claveMantener el esquema de vacunación al día: especial énfasis en COVID-19 e influenza, con dosis adicional disponible para grupos de alto riesgo.Medidas de prevención personal: ante síntomas respiratorios, adoptar medidas como el uso de mascarillas, lavado frecuente de manos y distanciamiento físico.Búsqueda de atención médica oportuna: especialmente ante síntomas graves en grupos de mayor riesgo, como niños menores de dos años, adultos mayores, mujeres embarazadas o en posparto, personas con comorbilidades y aquellos con inmunosupresión.Consulta de información en fuentes confiables: mantenerse informado a través de fuentes oficiales como la OMS/OPS, MinSalud e INS para obtener información actualizada y confiable.Le puede interesar:
La variante JN.1 de Ómicron se encuentra en Colombia desde la semana del 24 de diciembre, así lo ha identificado el Instituto Nacional de Salud (INS). Aunque la familia de ómicron, incluyendo la variante XBB, ya circulaba en el país desde marzo de 2023, la reciente identificación de la JN.1 genera preocupación debido a su predominancia en los Estados Unidos, Europa y su conexión con el pico de contagios en el hemisferio norte.La Organización Mundial de la Salud (OMS) ha declarado la variante JN.1 de interés, ya que es responsable del aumento de casos en Norteamérica y Europa durante la temporada invernal. A pesar de su alta capacidad de propagación, las variantes de Ómicron suelen mostrar baja severidad en términos de enfermedad, hospitalización y mortalidad.El INS también reportó un aumento esperado de casos respiratorios durante el último trimestre del año, intensificándose en diciembre y enero debido a la mayor interacción social en festividades, la afluencia de viajeros desde América del Norte y Europa, y los cambios climáticos. Este fenómeno se ha visto reflejado en las estadísticas, mostrando un incremento significativo de casos de COVID-19 y otros virus respiratorios.Comparando cifras desde el 5 de noviembre al 2 de diciembre, con 1.066 casos y una incidencia del 2,36 por cada 100 mil habitantes, a los datos del 3 al 30 de diciembre, con 1.647 casos y una incidencia del 3,64%, se evidencia un aumento considerable. Sin embargo, este crecimiento se considera dentro de las expectativas para la temporada.El INS, a través de análisis de circulación y secuenciación genómica, confirma que coexisten en el país distintas variantes de Ómicron, destacando la XBB desde marzo de 2023 y la nueva variante JN.1 desde la última semana de diciembre, con origen en la variante Ómicron BA.2.86.En cuanto a la vacunación, se insta a la población a recibir las vacunas disponibles en el país, que ofrecen inmunidad cruzada contra todas las variantes de Ómicron en circulación. Estas medidas preventivas son fundamentales para mitigar el impacto de las nuevas variantes y proteger a la población contra posibles complicaciones de salud.
Lejos del horror de los primeros tiempos de la pandemia, que comenzó hace cuatro años, el COVID-19 se volvió menos peligroso pero sigue siendo un problema importante de salud pública, con especificidades persistentes en comparación con otras enfermedades.La normalización se acelera El año 2023 marcó una nueva etapa en la normalización del COVID. La tendencia se aceleró ya el año anterior, después de unos 2020 y 2021 dominados por una pandemia de efectos históricos.La Organización Mundial de la Salud (OMS) no considera desde mayo que el COVID constituya una emergencia internacional. Si bien sigue afirmando que la pandemia continúa, esa decisión es altamente simbólica.El año también vio el final del "COVID cero". China, último gran país en aplicar esta política de excepción, que tiene por objeto eliminar la circulación de la enfermedad y no sólo limitarla, la abandonó a principios de año.Un virus mucho menos peligroso ¿Por qué esta normalización? En primer lugar, porque una infección por COVID parece hoy mucho menos peligrosa que en 2020, cuando numerosos países decretaron confinamientos sin precedentes frente a los efectos mortales del SARS-CoV-2, el virus causante de la epidemia.Es el resultado de vacunas eficaces, distribuidas desde 2021, y de la inmunidad adquirida por la población en oleadas sucesivas de infecciones por el virus.La letalidad, que corresponde al riesgo individual de morir después de una infección, "disminuyó mucho en comparación con la era pre-vacunal", afirma a la AFP Antoine Flahault, epidemiólogo de la universidad de Ginebra."Es del orden de uno por mil o quizás menos", en tanto el riesgo se contaba en porcentaje al comienzo de la pandemia, subraya.Un nivel comparable con una infección estacional por el virus de la gripe, aunque es arriesgado designar cuál de los dos es el más peligroso.Un problema que sigue siendo importanteEl COVID se convirtió en una enfermedad respiratoria más. Pero sigue planteando importantes problemas de salud pública, a veces debido a sus particularidades.A diferencia de otras enfermedades como la gripe, el COVID experimenta varias olas al año. Por lo tanto, difícilmente se puede calificar de enfermedad invernal, pero un brote puede coincidir con la estación clásica de las epidemias, como es el caso en este momento."El COVID-19 es una de las enfermedades que progresan actualmente" en numerosos países, advirtió el domingo María Van Kerkhove, epidemióloga de la OMS.Este auge está en parte relacionado con la aparición de una subvariante: el JN.1, explicó. Nueva declinación del ómicron y versión dominante del virus desde hace dos años, no parece particularmente peligroso pero sí muy transmisible.El contagio sigue siendo alto En general, esta es la gran particularidad del COVID en comparación con otras infecciones como la gripe."En un año, hay entre 5% y 10% de personas que contraen la gripe", pero muchas más contraen el COVID, señala Flahault, subrayando que esto hace aumentar mecánicamente la mortalidad a nivel poblacional, pese a que el riesgo individual sea limitado.Sin embargo, el número exacto de muertes no está claro, ya que muchas están relacionadas con la enfermedad pero no le son atribuidas.Las cifras oficiales de la OMS indican que desde el inicio de la epidemia, hace cuatro años, unos 7 millones de personas murieron por COVID, pero la propia organización admite que el nivel real probablemente sea de unos 20 millones o más.¿Y el Covid largo? Más allá de la mortalidad, queda la cuestión de las secuelas duraderas, llamadas "Covid largo": cansancio, dificultades respiratorias.La realidad de estos síntomas ya no es dudosa, al igual que se sabe que su origen es fisiológico y no psicológico. Sin embargo, sigue siendo difícil determinar su frecuencia y si el COVID los causa con más frecuencia que otras enfermedades.Las secuelas de la gripe, por ejemplo, no se les prestó tanta atención, destaca Flahault.En cualquier caso, varios estudios publicados este año son bastante tranquilizadores al negar la idea de una explosión de los casos de COVID a lo largo del tiempo.Un estudio realizado entre la población sueca, publicado en septiembre en el Journal of Infectious Diseases, muestra un "riesgo menos elevado" de un covid largo después de una infección por ómicron, en comparación con las variantes anteriores.Le puede interesar:
Llegó diciembre con su alegría y emoción por lo que las fiestas, reuniones y novenas se convierten en espacios con aglomeraciones. Es por esto que el Ministerio de Salud está alertando el impacto del último pico respiratorio del año para las festividades decembrinas.La interacción social y los cambios climáticos asociados al fenómeno de "El Niño" se unen en esta temporada y pone en riesgo a grupos vulnerables, incluyendo mujeres embarazadas, menores de 5 años, adultos mayores, y aquellos con condiciones médicas preexistentes como diabetes, hipertensión, cáncer o enfermedad renal.De acuerdo con el análisis epidemiológico realizado por el Sistema de Vigilancia en Salud Pública (SIVIGILA), este año se ha observado una marcada circulación viral, destacando el virus sincitial respiratorio y el rinovirus, afectando tanto a niños como a adultos mayores. Además, el informe revela la coexistencia de diversos virus, incluyendo enterovirus, rinovirus, adenovirus, parainfluenza, influenza B y el SARS-CoV-2.En las últimas semanas de octubre y la primera de noviembre, se registró un aumento significativo de infecciones respiratorias en niños menores de cinco años, siendo el virus sincitial respiratorio la principal causa (36%), seguido por rinovirus (20.4%) y SARS-CoV-2 (5.8%). En adultos mayores de 60 años, la mitad de los contagios fueron generados por el virus sincitial respiratorio (25%) y el SARS-CoV-2 (25%).Las autoridades han advertido de la importancia de completar esquemas de vacunación y tomar medidas preventivas.Hasta la semana epidemiológica 46 (del 13 al 18 de noviembre), se han registrado 6,674,307 atenciones por infección respiratoria aguda en consulta externa y urgencias, mostrando una disminución del 2.98% en comparación con el periodo anterior.En cuanto al SARS-CoV-2, el informe más reciente destaca que la variante Ómicron EG.5 tiene una participación del 60%, manteniéndose como la variante dominante en el país y desplazando a las variantes XBB.1.5 (20%) y XBB.1.16 (20%).Ante la inminente temporada de grandes aglomeraciones y reuniones familiares, el Ministerio de Salud le pidió a los colombianos reforzar medidas de protección. Además, con el flujo de viajeros del hemisferio norte, se recomienda asegurar las dosis de influenza y Covid-19 antes de la primera semana de diciembre.Le puede interesar:
Nuevamente el COVID-19 enciende alarmas tras la aparición de una nueva variantes llamada arcturus, la cual hace parte del linaje de ómicron, lo que da cuenta que los síntomas son muy similares.Según el reporte del Instituto Nacional de Salud (INS), ya se identificaron los primeros casos de la variante arcturus en el país, específicamente en Boyacá y Bogotá. Además, sobre los síntomas, la entidad aseguró que no solo se podría tener tos, fiebre y dificultades respiratorias, sino que ahora se podrían presentar irritación en los ojos o conjuntivitis.¿La nueva variante del COVID-19 es peligrosa? Experto respondeEn diálogo con Blu Radio, el epidemiólogo Jaime Ordóñez, quien explicó que aunque puede subir la probabilidad de contagio, esta no es más letal; es decir, no representa una amenaza y no hay motivos, según él, para "preocuparse"."Se detectó en abril en la India (...) No es que se demorara mes y medios en pasar de Colombia a Brasil. Posiblemente llegó mucho antes, pero como hacemos pocas pruebas y mucho menos secuencias genómicas, pues no demoramos en identificarla. La OMS dice que esta variante tiene mayor capacidad de replicarse e incluso de evadir la inmunidad de las vacunas, también es menos agresiva; o sea, no hay un nivel de preocupación clínico", explicó el experto.INS alerta por otras enfermedadesSin embargo, no es la única enfermedad circulando en el país, pues en Santa Marta se presentó un brote de H1N1 en un colegio, que ya deja como saldo la muerte de una estudiante de 11 años.Responde el INS que por ahora solo hay reporte de brote en esa ciudad, lo que significa que aún no representa una situación de salud públicaSin embargo, mantienen la vigilancia en todo el país porque se puede presentar un aumento de casos de H1N1 debido a la llegada del segundo pico respiratorio en el país.Le puede interesar:
El director general de la Organización Mundial de la Salud (OMS), Tedros Adhanom Ghebreyesus, subrayó que la emergencia internacional por la COVID-19 está en mejor situación que en 2020, sin embargo, sigue la presión."El número de muertes por la enfermedad ha aumentado durante las pasadas ocho semanas y desde entonces más de 170.000 personas han fallecido por covid-19", recordó el experto etíope, aclarando que ésos son sólo los decesos reportados y el número real podría ser "mucho mayor".Sin embargo, lo que ha alertado a las diferentes autoridades sanítales del mundo son las nuevas variantes que dejó el virus, las cuales cada vez tienen más probabilidades de infección.En Mañanas Blu, cuando Colombia está al aire, Ryan Gregory, profesor de biología de la Universidad de Guelph en Ontario, habló sobre los nuevos nombres de los linajes de COVID-19 y de dónde vienen.“Los nombres que le han dado a las nuevas variantes pueden sonar muy peligrosas, estas provienen de la cultura mitológica griega porque se necesitaba identificar las variantes del virus. Antes solo era ómicron, pero han venido surgiendo más nombres, por lo que se necesita seguir con un sistema para nombrar las enfermedades, pero, en realidad, no se crean con un sentido cómico”, aseveró.Por otro lado, aseguró que las variantes, aunque en ocasiones no son tan peligrosas, si pueden ser más contagiosas.“El número de variantes derivan de dos grupos de ómicron, ambos están causando un gran número de infecciones en todo el mundo y hay que estar muy pendientes porque ya no hay picos de contagios sino un alza en la tasa de enfermos”, aclaró.Además, manifestó que es muy difícil que una persona determine que variante tiene solo con los síntomas.“Solo basándose en los síntomas es muy difícil saber que una persona identifique cuál de las nuevas variantes de COVID-19 pudo haber contagiado porque son muy similares. Siempre es mejor que lo verifique la ciencia”, explicó.Escuche el podcast ¿Cómo es vivir en Corea? Le puede interesar:
China asegura que ya ha pasado el pico de casos graves de covid, pese a que el país se prepara este viernes para unas fiestas por el Año Nuevo Lunar antes de las cuales el número de desplazamientos han crecido un 55 % interanual y en las que se teme la propagación de la covid por las áreas rurales.Las autoridades sanitarias del país asiático aseguraron este jueves que el pasado 5 de enero alcanzaron la cota máxima de pacientes ingresados con cuadros graves de covid-19, cifras que descendieron hasta un 44,3 % llegados al 17 de enero.En el caso de las visitas a los departamentos de atención para pacientes con fiebre, el tope se alcanzó el pasado 23 de diciembre, con una caída de hasta el 94 % entre la mencionada fecha y el 17 de enero, según el Departamento de Emergencias Médicas de la Comisión Nacional de Sanidad.Los ingresos en las salas de urgencias cayeron hasta un 44 % tras llegar a sus máximos números el 2 de enero, siendo además que el 95 % de las consultas y el 85 % de los pacientes ingresados en los centros hospitalarios no tenían relación con la covid.AUMENTAN LOS VIAJES ANTES DEL AÑO NUEVO LUNARUnas cifras que se tienen que enfrentar al comienzo de las vacaciones del Año Nuevo Lunar, que en este 2023 caen entre el 21 y el 27 de enero, y al periodo de 40 días conocido como ‘chunyun’, que enmarca la mayor migración anual del mundo.China registró un crecimiento en el número de desplazamientos del 55,1 % con respecto al año anterior, en las primeras festividades de este tipo en dos años que se celebran sin las restricciones a la movilidad propias de la política de ‘cero covid’.El desmantelamiento de estas medidas permitió que se alcanzaran este jueves 46,1 millones de desplazamientos, que, si bien representan el mencionado aumento interanual, son unos números aún un 44 % inferiores a los datos de las mismas fechas de 2019, el último año anterior a la pandemia, informaron medios locales.Los viajes por carretera se contabilizaron en 35 millones, un aumento interanual del 65,3 %, mientras que los realizados por avión y tren cifraron 1,3 millones y 8,9 millones de pasajeros respectivamente, un 38,1 % y un 27,6 % más que en 2022, aunque todos estos porcentajes siguen por debajo de los recogidos en 2019.UNA VACUNA ARN MENSAJERO CONTRA ÓMICRONAnte tantos desplazamientos, las autoridades chinas pidieron recientemente a las localidades que se preparasen para una posible propagación del virus en las áreas rurales, donde acostumbran a volver los ciudadanos chinos en estas fiestas, ante la “relativa escasez de recursos sanitarios”.Unos recursos sanitarios que en el futuro pueden contar con una vacuna ARN mensajero para combatir la variante ómicron del laboratorio chino Sinopharm, que recibió la aprobación de la Administración Nacional de Productos Médicos para iniciar los ensayos clínicos.La vacuna de Sinopharm sería la segunda del tipo ARN mensajero desarrollada por un laboratorio chino que recibe el beneplácito de las autoridades chinas para los ensayos.Según un reciente estudio de la Universidad de Pekín, alrededor de 900 millones de personas se han contagiado ya por la covid, además de contabilizarse unas 60.000 personas fallecidas por la enfermedad entre el pasado 8 de diciembre y el 12 de enero de acuerdo a cifras oficiales.La cifra de muertes por covid en China durante las vacaciones por el Año Nuevo Lunar, con motivo del alto número de desplazamientos, podría alcanzar las 36.000 diarias, según un estudio de la compañía británica de análisis del sector sanitario Airfinity.Le puede interesar: 'El Camerino'
Se cumplen tres años después de que China anunció su primera muerte por COVID-19: un hombre de 61 años que frecuentaba el mercado de la ciudad de Wuhan en el que se comenzó a transmitir el virus. A este momento se siguen presentando variantes y sublinajes que reafirman que la enfermedad aun no se ha ido. El doctor Jairo Méndez, asesor regional en enfermedades virales de la Organización Panamericana de la Salud, OPS, habló en Mañanas Blu sobre el nuevo sublinaje de ómicron y aclaró cómo lo están llamando los expertos.“Primero que quisiera aclarar que el nombre de 'Kraken' no existe y que ese tipo de normarse que se han popularizado realmente no tienen un soporte ni han sido respaldado por la OMS, de hecho esta variación sigue siendo de la variante ómicron dentro de esta están los sublinajes o subvariantes y dentro de estas, está en particular, es una que se ha visto en Estados Unidos incrementándose durante los últimos meses que se llama XBB1.5 entendemos que la nomenclatura puede ser un poco compleja, pero estamos trabajando para facilitar el nombre”, indicó el doctor.El doctor Méndez se refirió a la transmisibilidad de esta variante 1.5, pues ómicron y sus diversas subvariantes son los responsables los nuevos contagios en varios países del mundo. El virus está mutando constantemente y este sublinaje ya fue detectado.“En general, ómicron es una de las variantes que más capacidad de transmisión tiene y lo sabemos desde casi un año que está circulando esta variante y efectivamente estos nuevos sublinajes tienen capacidades de transmitirse más rápido. Si bien no es significativo se ha visto que está en particular puede tener un poco más de capacidad de evadir la respuesta inmune y hace que se pueda transmitir más fácil y rápidamente. Estamos siguiendo muy de cerca para determinar el verdadero impacto que pueda tener”, enfatizó.El colombiano habló del por qué le siguen saliendo sublinajes a la variante de ómicron y no a otras variantes del SARS-CoV-2 o como lo conocemos al COVID-19.“Lo que estamos viendo al interior de ómicron es qué hay una cantidad de virus que evolucionan de manera independiente y, lo más importante,que mientras el virus siga transmitiéndose, la posibilidad de generar nuevas variaciones va a existir. Es un proceso biológico y eso va a seguir ocurriendo y además ocurre con otros virus como la influenza”, indicó.Finalmente, el doctor Méndez aclaró que el virus sigue circulando y que en esta región hay regiones que no se han vacunado y resaltó la importancia de la vacunación que demostró que con la inmunización se redujeron las muertes y la letalidad del virus del COVID-19.Varios países y regiones han impuesto restricciones a los viajeros procedentes de China ante el temor a nuevas variantes, lo que ha provocado la ira de Pekín, que defiende que ha compartido información "de forma, abierta, puntual y transparente" y que las medidas no tienen en cuenta "ni a la ciencia ni a los hechos ni a la situación epidémica real".
China vive un enorme brote de COVID-19 tras desmontar en diciembre las estrictas restricciones sanitarias aplicadas durante años.Pero cada vez más países se muestran preocupados por la falta de información y transparencia en torno a los contagios chinos.Los siguientes son los motivos de la preocupación mundial:Datos poco fiablesPekín admitió que la escala del brote se volvió "imposible" de rastrear tras el fin del testeo obligatorio en diciembre.La Comisión Nacional de Salud dejó de publicar cifras nacionales diarias de contagios y muertes por el virus.Tal responsabilidad fue transferida al Centro de Control y Prevención de Enfermedades chino (CCPE), que solo ofrece cifras una vez por mes, luego de que China rebajó el 8 de enero sus protocolos de manejo de la enfermedad.China ha reportado solo 15 muertes por covid-19 desde que comenzó a levantar las restricciones el 7 de diciembre, y poco después redujo los criterios para determinar si una muerte fue causada por el coronavirus.Esto generó preocupaciones de que la ola de contagios no está debidamente reflejada en las estadísticas oficiales.Las autoridades admitieron la semana pasada que la cantidad de información recogida es "mucho menor" que cuando era obligatorio realizar pruebas PCR.Yin Wenwu, del CCPE, dijo que las autoridades recogen información de hospitales y gobiernos locales, así como llamadas de emergencias y ventas de medicamentos para la fiebre, todo lo cual "cubrirá las deficiencias" en los datos.Hospitales y crematorios chinos enfrentan un repunte de pacientes y cadáveres, en especial en áreas rurales.Varios países, como Estados Unidos, Australia y Canadá anunciaron la semana pasada la obligación de someter a prueba a quienes llegan desde China, dada su falta de transparencia con las cifras de contagios.Cálculos incompletosAlgunas autoridades locales y regionales comenzaron a compartir en diciembre cifras diarias estimadas de contagios, pero la magnitud de brote sigue sin estar claro.Autoridades sanitarias en la provincia costera de Zhejiang indicaron que un millón de pobladores estaban infectados por semana. Las ciudades de Quzhou y Zhoushan dijeron que al menos 30 % de la población contrajo el virus.La ciudad oriental de Qingdao también calcula unos 500.000 infecciones diarias, y el centro industrial sureño de Dongguan proyectó hasta 300.000 diarios.Pero el funcionario de salud Wu Zunyou aseguró el jueves que el pico de contagios ya pasó en las ciudades de Pekín, Chengdu y Tianjin, mientras que la provincia de Guangdong, la más poblada del país, dijo lo mismo el domingo.El principal experto en enfermedades infecciosas de Shanghái, Zhang Wenhong, declaró a la prensa estatal que esa megaciudad habría entrado a su período de más contagios el 22 de diciembre, con unos 10 millones de pobladores infectados.Anotaciones filtradas de una reunión de autoridades sanitarias en diciembre revelaron que creían que 250 millones de personas se contagiaron en China en los primeros 20 días de diciembre.Modelos independientes de contagios trazan un cuadro preocupante. Investigadores de la Universidad de Hong Kong calcularon que cerca de un millón de chinos podrían morir este invierno boreal como consecuencia de la apertura.La firma de análisis de riesgo sanitario Airfinity proyectó 11.000 muertes y 1,8 millones de contagios diarios, con un total de 1,7 millones de muertos para fines de abril.¿Nuevas variantes?Muchos países citaron la preocupación por posibles nuevas variantes como el motivo para testear a quienes llegan de China.Pero aún no hay evidencia de nuevas variantes que hayan emergido de la actual ola de contagios.Xu Wenbo, alto cargo del CCPE, dijo en diciembre que China está creando una base de datos genética con muestras de COVID obtenidas en hospitales que les permitirían rastrear mutaciones.Expertos chinos en salud han señalado que las subvariantes de ómicron BA.5.2 y BF.7 son las más comunes en Pekín, ante el temor público de que aún circule la variante delta, más mortal.En muchos países occidentales, esas variantes han sido superadas por las subvariantes más transmisibles XBB y BQ, que aún no son dominantes en China.Pekín sometió 384 muestras de ómicron a la base de datos mundial GISAID, según su página web.Pero el total de entradas chinas a esa base de datos, 1.308, es inferior a las de otros países, incluyendo Estados Unidos, Reino Unidos, Camboya y Senegal.Las muestras recientes chinas "se asemejan a variantes conocidas que circulan mundialmente", indicó GISAID el viernes.El virólogo Jin Dong-yan, de la Universidad de Hong Kong, comentó en un podcast reciente que la gente no debe temer variantes más mortales en China."Muchos lugares en todo el mundo han experimentado (contagios a gran escala), pero no ha surgido una variante más mortal o patogénica", comentó Jin."No digo que la emergencia de una variante (más mortal) sea imposible, sino que la posibilidad es muy baja", agregó.Le puede interesar: