La Policía Nacional capturó este jueves a Darwin García Pérez, alias 'Maradona', quien es hermano del actual alcalde del municipio de Acandí, Chocó, Luis Fernando Martínez Pérez.Este hombre es señalado de ser uno de los más importantes coordinadores del tráfico de migrantes en el Urabá antioqueño y chocoano, por el tapón del Darién hacia los Estados Unidos.Según los investigadores, alias 'Maradona' también tenía orden de captura por el delito de concierto para delinquir por sus vínculos con el Clan del Golfo, pues sería la persona encargada de coordinar todo el negocio ilegal del narcotráfico en esa región.Acandí es un pequeño pueblo de cerca de 14.000 habitantes con altos índices de pobreza y que se convirtió en un paso obligado para los migrantes que atraviesan el Darién en su camino buscando nuevos horizontes.De acuerdo a las autoridades todo el tráfico migratorio por el tapón del Darién le genera al Clan del Golfo, por lo menos, unos 12.000 millones de pesos anuales.
Aunque sigue habiendo un éxodo de migrantes que buscan llegar a Estados Unidos tras una travesía por el Urabá antioqueño, Chocó y posteriormente Panamá para cruzar la selva del Darién, las autoridades destacan una reducción de quienes hacen su paso de manera irregular durante 2024 frente al año anterior, cuando por allí transitaron 323,714 personas.La situación ha causado que también se registren menos rescates humanitarios en la espesa selva, pues solo este año brindó asistencia a 540 migrantes en condiciones críticas de salud, pero que en un flujo normal sería hasta el doble, lo que implica recursos, tiempo y riesgos para las operaciones, según señaló el director general del Servicio Nacional de Fronteras (Senafront), Jorge Gobea.El caso más reciente se registró en el sector de Cañas Blancas, específicamente en La Cruz, donde por el mal clima un árbol cayó sobre un grupo de migrantes y patrullas del vecino país intentan establecer si hay fallecidos, teniendo en cuenta que se reportan varios heridos, que debido a las fracturas que sufrieron no han podido desplazarse."El estudio socioeconómico y geopolítico del área de la región de los países que son productores migrantes como Venezuela, Haití y Ecuador y la postura del país también como las posturas migratorias de las devoluciones más de 60 vuelos en este año en este periodo se han mandado gran cantidad de colombianos hasta Colombia es una serie de acciones que van a incidir directamente en el fenómeno", destacó el funcionario sobre el perfil que tienen identificado de estos migrantes.La reducción de migrantes irregulares es atribuida a factores con el clima, pero también según el Senafront a operaciones estratégicas y controles reforzados, como barreras para canalizar los migrantes, en un solo corredor humanitario instalado en la frontera oriental, además de la desarticulación de estructuras criminales.Este año también 27 alertas biométricas detectaron posibles amenazas, fortaleciendo los controles en las fronteras. Este año transitaron por allí 100.011 migrantes.
Aunque con respecto al año anterior las cifras son menores, la problemática migratoria sigue generando preocupación en autoridades de la región, pues según reveló el presidente de Panamá, José Raúl Mulino, ya son 300.634 las personas que han cruzado la selva del Darién camino a Norte y Centroamérica.El mandatario destacó que si bien se trata de una reducción de hasta el 41 % de personas que han realizado esta travesía con respecto a 2023, la cifra inquietante la registran 55 personas que han perdido la vida en este peligroso paso en el que venezolanos, colombianos y ecuatorianos siguen encabezando la lista de nacionalidades.Menores de edad también han quedado a la deriva, se han perdido 180 de ellos que han quedado a disposición de las autoridades del vecino país."Lo preocupante es que han quedado 180 menores no acompañados a la disposición de las autoridades. Es un problema muy serio porque, de donde tengo entendido, son menores de distintas edades", aseguró el presidente Mulino.Mulino reconoció que, si bien la migración de Venezuela no terminará hasta que dicho país pueda resolver su situación interna, esperan seguir trabajando de la mano con otros países de la región para garantizar menores flujos y muchos más seguros, además en los que no estén involucrados grupos armados que se lucran de estas rutas.
Unicef alertó este miércoles que el número de niños, niñas y adolescentes que cruzaron separados o no acompañados la peligrosa selva del Darién en su travesía irregular hacia Norteamérica aumentó en un 35 % entre enero y noviembre, en comparación con el mismo lapso del 2023.El Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia o Unicef precisó que en los primeros 11 meses de este año 4.476 niños, niñas y adolescentes que cruzaron la selva fronteriza entre Panamá y Colombia fueron identificados como "separados o no acompañados", frente a "los poco más de 3.000" reportados en igual período de 2023, lo que representa "un incremento de un 35 % con respecto al año anterior"."En lo corrido de 2024, cerca del 60 % de la niñez no acompañada o separada tenía entre 13 y 17 años. Esto representa un cambio significativo en comparación con años anteriores, cuando la mayoría de los niños y niñas (con o sin familias) que llegaban solos a territorio panameño eran menores de 5 años", destaca el ente de la ONU en un comunicado.Alertó en este sentido de que "particularmente los adolescentes viajando solos se encuentran más expuestos durante su travesía migratoria a situaciones como exclusión educativa, hurtos, trata, explotación y abuso incluyendo la violencia sexual y anemia".Y que estos tienen además "necesidades diferenciadas de atención para salvar sus vidas y proteger su dignidad".El flujo migratorio por la jungla ha experimentado este año una bajada del 41 %, al totalizar hasta este martes 300.549 personas frente al acumulado para la fecha en 2023, dijo el director del Servicio Nacional de Migración (SNM), Roger Mojica.En el 2023 se registró la cifra récord de más 520.000 personas que atravesaron la selva, la gran mayoría venezolanos, aunque en este flujo hay personas de más de 50 países.Unicef indicó este miércoles, citando datos de la oficina migratoria panameña, que entre enero y noviembre pasado ingresaron a Panamá a través de la selva del Darién 63.647 niños, niñas y adolescentes, lo que representa una reducción del 44 % de niñez migrante o en búsqueda de refugio que cruza la espesa frontera entre Panamá y Colombia comparado con el mismo periodo del año 2023."El 18 de diciembre se conmemora el día internacional del migrante, oportunidad para no olvidar que 1 de cada 5 personas que llega a Panamá a través del Darién es un niño, niña o adolescente. Sin importar de dónde vengan, las razones por las que migran o si lo hacen solos o en familia, ante todo son niños", afirmó el ente de Naciones Unidas.
El Servicio Nacional de Fronteras de Panamá informó que en las últimas horas logró rescatar a una mujer de nacionalidad venezolana de 49 años que sufrió una grave lesión en una de sus piernas, misma que la obligó a quedarse sola durante varias horas en la inhóspita selva del Darién. La migrante que se disponía a realizar su tránsito hasta Norteamérica tuvo que desistir de su viaje por una fractura.El reporte entregado por las autoridades indica que las unidades del Servicio Nacional de Fronteras fueron advertidas por la hija de la mujer, una joven de 17 años, quien explicó que había dejado a su madre kilómetros atrás por la incapacidad de la venezolana de seguir caminando por las trochas que hay en la selva del Darién.El subcomisionado Alexis de Gracia, jefe de la Primera Brigada Oriental del Darién, entregó el reporte del procedimiento que se realizó para destacar a la mujer."De inmediato es alertada la patrulla cazador, la cual se desplaza en un reconocimiento, ubicando a la ciudadana con una lesión del tibia y el peroné", manifestó.Por ahora la migrante se recupera en territorio panameño, pero se espera que en los próximos días regrese a su país de origen debido a la larga recuperación que debe afrontar tras la fractura sufrida en su tránsito por la frontera entre Colombia y Panamá.Destacan desde el Servicio Nacional de Fronteras que este caso demuestra los riesgos y peligros que enfrentan diariamente cientos de personas que intentan cruzar el Darién en busca de mejores oportunidades en Centroamérica y Norteamérica.
El Servicio Nacional de Fronteras de Panamá confirmó la captura de dos hombres de la etnia indígena, Emberá Wounaan, luego de que fueron sorprendidos transportando a 20 migrantes en una piragua artesanal. El operativo se realizó en el río Tuqueza, de la localidad de Charco Chivo, donde los señalados fueron aprehendidos por las autoridades.Según la información entregada por las autoridades los acusados de traficar ilegalmente a los migrantes viajaban por el afluente cuando fueron ubicados por las autoridades fronterizas que lograron detener la embarcación y realizar una inspección que dio como resultado la captura de los hombres que no pudieron entregar soporte de los extranjeros que viajaban con ellos.La mayor Zuly Rodríguez, del Servicio Nacional de Fronteras de Panamá, realizó un llamado para que la población local no incurra en el tráfico de migrantes que, en este caso, fue de 20 personas de múltiples nacionalidades."Senafront despliega nuevas tácticas en áreas críticas. Hacemos un llamado a los residentes para que no se dediquen a estas actividades ilegales que ponen en riesgo la vida de los migrantes y la seguridad de las comunidades", destacó la funcionaria.Hay que recordar que en menos de 10 días es el segundo procedimiento hecho en el Tapón del Darién que acaba con la captura de personas por presuntamente traficar migrantes. El pasado 12 de octubre se habían aprehendido tres personas en plena selva, es decir, ya son cinco los capturados por este delito en territorio panameño.Las dos personas relacionadas con el delito de tráfico de migrantes fueron entregadas a la Fiscalía de Atención Primaria de Bajo Chiquito en donde se legalizó su captura y se le dictaron medidas cautelares a los hombres.
Recientemente, el Servicio Nacional de Fronteras de Panamá reportó la captura de tres personas presuntamente involucradas en el tráfico de migrantes por la selva del Darién. Los operativos realizados por el Tercer Batallón Chucunaque permitieron la ubicación y posterior captura de las personas que afectaban a los migrantes cobrándoles altas sumas de dinero.El ejecutivo de la Primera Brigada Oriental de Panamá, Oriel de Gracia, destacó que los hombres fueron dejados a disposición del Ministerio Público que judicializará a estas personas que vulneran los derechos de los migrantes a la vez que pone en riesgo su vida.“En coordinación con el Ministerio Público logran dar con la aprehensión de tres ciudadanos, quienes se mantenían supuestamente cometiendo un delito contra la humanidad en fragancia en su modalidad de tráfico ilícito de migrantes”, dijo.Ante esta situación que no parece tener fin ni solución, investigadores de la Universidad de Medellín y la Universidad de Antioquia insistieron en que la problemática migratoria debe ser controlada con una visa humanitaria, ya que según cifras de Migración Colombia hasta agosto de 2024 habían atravesando el Tapón del Darién cerca de 230.000 personas, la mayoría venezolanos, haitianos, ecuatorianos, chinos y colombianos.La profesora del programa de Protección Internacional de la Universidad de Antioquia, Talia Basmagi, propuso usar una visa humanitaria para poder responder a las problemáticas que pasan en el territorio y que se salen del control de las autoridades.“Si bien, esto no es una solución para todo el tránsito ni saliendo ya después de la frontera de Colombia pues no habría como ninguna implicación en términos de los derechos de que se puedan proteger los derechos de las personas tener una visa humanitaria en Colombia si permitiese, por lo menos, responder ante las situaciones que suceden en nuestro territorio”, agregó.Por último, destacan los docentes que el trabajo de los gobiernos de Colombia y Panamá deben seguir en la ruta de implementar planes de presencia estatal en la frontera de ambos países pues solamente en el 2023 se registró que personas de 118 nacionalidades diferentes hicieron el tránsito desde Urabá hasta la zona del Darién.
Autoridades panameñas rescataron a 74 migrantes que habían salido de tierras colombianas y que eran transportados por cuatro coyotes. Las personas de por lo menos ocho nacionalidades diferentes se transportaban por el mar Caribe y fueron devueltos a la frontera con Colombia.Mediante operativos de vigilancia las autoridades panameñas lograron identificar dos embarcaciones clandestinas que transportaban a 74 migrantes. El proceso fue ejecutado por unidades del Batallón Puerto Obaldía quienes procedieron a las persecuciones de las lanchas que intentaron huir.La información dada a conocer por el Servicio Nacional de Fronteras de Panamá evidenció que una vez se hizo el contacto visual y las advertencias con las embarcaciones, procedentes de territorio colombiano, se empezó con la persecución a mar abierto que resultó con la retención de los vehículos.Una vez se efectuó el operativo se realizó la captura de los cuatro coyotes de nacionalidad colombiana y que responderán ante las autoridades panameñas por el delito de tráfico de migrantes. Además, se determinó que en una embarcación iban 36 personas y en la segunda lancha se contaron 38 migrantes, mismos que fueron devueltos al pueblo de La Miel en la frontera con Colombia.Sobre el procedimiento realizado, Blu Radio conoció que entre los migrantes rescatados de las embarcaciones había personas con nacionalidades de Venezuela, Ecuador, Eritrea, Bangladesh, Somalia, Nepal y Ghana.Finalmente, el Servicio Nacional de Fronteras de Panamá indicó que además del decomiso de las lanchas también se incautó un teléfono celular y un radio satelital que eran usados por el grupo delincuencial dedicado a transportar los migrantes por las aguas de Panamá con destino a otros países de Centroamérica.
Luis Miranda, subsecretario adjunto principal de comunicaciones del Departamento de Seguridad Nacional de Estados Unidos, habló en El Radar sobre la situación migratoria y las medidas implementadas para reducir el flujo irregular de migrantes en la frontera sur. Sin embargo, señaló que desde junio se ha observado una reducción general en el flujo irregular, gracias a una proclama presidencial que limita el acceso al asilo. Miranda también destacó la importancia de reducir el flujo irregular de migrantes debido a los problemas que conlleva, incluyendo las amenazas que sufren en manos de los carteles que controlan este flujo.Además, enfatizó que es necesario asegurar que los mecanismos de protección sigan existiendo para aquellos migrantes que tienen reclamos legítimos de protección. En cuanto al Tapón del Darién, Miranda mencionó que se han llevado a cabo reuniones tripartitas entre Colombia, Panamá y Estados Unidos para abordar esta problemática. Se reconoció la responsabilidad compartida y se trabajó en conjunto para reducir la migración irregular y expandir los caminos legales de migración.Sobre los colombianos que migran a Estados Unidos, Miranda afirmó que, si bien ha habido una disminución en los últimos meses, sigue siendo un número significativo. Destacó que cruzar la frontera de Estados Unidos sin autorización es una violación de las leyes y que existen consecuencias, como la deportación y la prohibición de ingresar a Estados Unidos durante cinco años o más.En cuanto al asilo, Miranda explicó que las medidas implementadas han restringido el acceso al mismo para aquellos que han cruzado ilegalmente. Se ha triplicado el porcentaje de personas en proceso de deportación acelerada. El asilo está destinado a proteger a personas que sufren persecución directa bajo ciertas categorías protegidas, y no para aquellos que buscan oportunidades económicas o huyen de violencia generalizada.Respecto al proceso de asilo regular, Miranda mencionó la importancia de los centros de movilidad, que brindan información y ayudan a las personas a acceder a los mecanismos legales. Además, destacó la existencia de otras vías, como las visas laborales temporales, que ofrecen una alternativa más segura que cruzar ilegalmente la frontera. Miranda también mencionó que la migración venezolana irregular ha disminuido y que existe un proceso de paro humanitario que permite a los venezolanos solicitar protección sin cruzar ilegalmente la frontera. Este proceso ha sido utilizado por muchos venezolanos y ha brindado mejores resultados que cruzar ilegalmente.Escuche la entrevista completa aquí:
Según cifras de Human Rights Watch, en el último año, más de medio millón de personas han cruzado el tapón del Darién, una peligrosa selva pantanosa en la frontera entre Colombia y Panamá. Migrantes de diversas nacionalidades, como venezolanos, haitianos y ecuatorianos, se ven expuestos a abusos por parte de grupos criminales, incluidos actos de violencia sexual, y reciben escasa protección o ayuda humanitaria.Juanita Goebertus, directora para América Latina de esta organización, aseguró que han evidenciado historias desgarradoras de mujeres que cruzan la selva portando la píldora del día después por temor a ser violadas."Hemos entrevistado a más de 300 personas, incluidos migrantes, y estuvimos con organizaciones humanitarias en Necoclí, donde constatamos que algunas de estas organizaciones tienen disponible la píldora del día después para las mujeres que deseen llevarla. A través de estas entrevistas, pudimos ver la violencia sexual que enfrentan las mujeres durante el cruce entre Colombia y Panamá", señaló Goebertus."Esta situación ha llevado a muchas a tomar la decisión de portar la píldora como medida preventiva. Es una realidad atroz a la que se enfrentan, y lo más preocupante es que ni Colombia ni Panamá están tomando medidas para prevenir estos abusos, ni mucho menos para investigarlos, juzgarlos o sancionarlos. En nuestra experiencia global, nunca habíamos visto este fenómeno en otros contextos de migración masiva", añadió.Una de las historias destacadas es la de María, una migrante venezolana residente en Ecuador, quien vivió en carne propia los horrores del cruce por el Darién."Uno ve personas muertas, animales como lobos. Hay que echar creolina alrededor de la carpa, todo está mojado, incluso la ropa, y te mueres de frío. En Ecuador también vivíamos situaciones difíciles: robaron la casa de mi mamá, violaron a la vecina, y yo no quería que mis hijos pasaran por lo mismo", contó María.Desde enero de 2022, más de 440.000 venezolanos han cruzado el tapón del Darién, lo que convierte a esta nacionalidad en la más numerosa entre quienes atraviesan esta peligrosa ruta.