En las últimas horas, la denuncia que se ha hecho desde la población señala comportamientos extraños en la flora y fauna de la laguna de Suesca, producto de eso, la aparición de peces y aves muertos ha aumentado y con ellos la preocupación de los habitantes.“El 25 de abril empezamos a notar decenas de peces muertos alrededor de la laguna y algunos otros respirando con dificultad, pasadas la horas ya o estábamos hablando de miles, se acercaron las autoridades competentes para estudiar lo que sucede”, señala Juan David Pinzón, habitante de la zona y quien ha denunciado la situación.En relación con ese hecho, la Corporación Autónoma Regional (CAR) hizo presencia en la zona con el objetivo de establecer los hechos que llevaron a la alerta de los habitantes. Se realizaron estudios de laboratorio para determinar posibles causas, descartando por ahora, en un comunicado, que los peces hayan muerto por envenenamiento intencional.Al tiempo, los pobladores manejan la misma hipótesis, adhiriendo a que podría deberse al mal tiempo en gran parte del departamento de Cundinamarca, que ha dejado grandes precipitaciones de agua en la región de Cucunubá y llevando sedimentos a la superficie de la laguna como algas, material vegetal muerto y deshechos de la actividad agrícola.“Estamos hablando de un desequilibrio en el ecosistema, todos los síntomas de los peces están relacionados son falta de oxigenación y con mala calidad del agua por falta de nutrientes, por lluvias de los últimos días”, enfatiza Juan David, añadiendo que la laguna ha ido cambiando su color a un verde más intenso que se podría dar por el verano de semanas anteriores.Los pobladores y la región están a la espera de los resultados que puedan arrojar los estudios de laboratorio ambientales realizados por la CAR en la zona, para así determinar las causas finales de este desequilibrio en la laguna de Suesca.Escuche el podcast El Camerino:
Según el pronóstico del Ideam, durante los siguientes días de febrero podrían descender aún más las temperaturas. Por esta razón, las áreas ubicadas entre los 2.300 y 2.900 metros sobre el nivel del mar deben tomar medidas preventivas.Las heladas son un fenómeno meteorológico que consiste en el descenso de las temperaturas en las madrugadas y durante las mañanas. Afecta principalmente a los cultivos, congela el tejido de las plantas y daña sus células luego de meses de cuidado por parte de sus dueños.Las zonas más expuestas al fenómeno de las heladas son:Cundinamarca: Bojacá, Cajicá, Chía, Chipaque, Choachí, Chocontá, Cogua, Cota, Cucunubá, El Rosal, Facatativá, Funza, Fúquene, Gachancipá, Guachetá, Guasca, Guatavita, La Calera, Lenguazaque, Madrid, Subachoque, Suesca, Susa, Sutatausa y Zipaquirá.Boyacá: Tunja, Aquitania, Arcabuco, Belén, Betéitiva, Busbanzá, Caldas, Cerinza, Chiquinquirá, Chivatá, Ciénega, Cómbita, Corrales, Cucaita, Cuítiva, Chíquiza, Duitama, Firavitoba, Floresta, Gámeza, Iza, Villa de Leyva, Mongua, Monguí, Motavita, Nobsa, Oicatá, Paipa, Paz de Río, Pesca, Ráquira, Saboyá, Samacá.Santander: Tona.Norte de Santander: Pamplona.Cauca: San Sebastián.Nariño: Ipiales, Pupiales.Le puede interesar. Escuche El Mundo Hoy:
Los bloqueos plantean graves dificultades a los productores de alimentos en todo el país. En medio de la crisis, empresarios no han tenido más remedio que regalar comida para que no se desperdicie. Matilde Espinosa, propietaria de la lechería El Garzal, en Suesca, pasó por esta situación y contó su experiencia en Mañanas BLU.El mensaje de la empresaria, que se viralizó rápidamente, decía: “Tenemos 2.203 litros de leche que no pueden salir de Suesca. ¿Saben de alguien en Sesquilé o Suesca que quiera esta leche? No la queremos botar”.“No queremos botar ni desperdiciar comida en un país donde la gente se muere de hambre”, dijo Matilde Espinosa.La empresaria contó que el llamado en redes dio resultado y que logró regalar 1.600 litros de leche.“Ayer fueron muchas personas de la vereda, vecinos, fueron llegando poco a poco y ahí se fue toda la leche”, narró.Ahora, Espinosa tiene la esperanza de que se levanten los bloqueos para que la productora que le compra pueda llegar a recoger la producción.“Si esto sigue como va, ya los productos lácteos no se conseguirán en los mercados”, aseguró.“Es importante que la leche, que los pollos, que los huevos no se pierdan en los camiones”, añadió.Escuche a Matilde Espinosa en Mañanas BLU:
Hacia el año de 1955, Lirio Rodriguez y Maria de Jesús Fresneda estudiaban a unos 100 metros de la laguna de Suesca, en la escuela de la vereda el Hatillo, del municipio que lleva el mismo nombre que el cuerpo de agua."Yo recuerdo que la profesora nos llevaba a un paseo a los de la escuela. De ahí a dónde íbamos y nos metíamos a balar eran como unos 3 kilómetros, pero se metía uno al agua y eso era una belleza, era hermosísimo", recuerda Lirio.La infancia de los dos cerca de esta laguna los termino uniendo para toda la vida, llevan casados 51 años, tienen 4 hijos, 8 nietos y 3 bisnietos, y son felices.No obstante, en sus corazones hay una amarga nostalgia porque una parte de su historia está desapareciendo junto a la laguna.La laguna de Suesca fue por años un atractivo turístico y una fuente de vida para los locales del municipio."La bordeaba el ferrocarril del norte que iba de Bogotá hasta Chiquinquirá, había hasta 4 trenes diarios y la gente era encantada de ver esa belleza. Nosotros disfrutábamos de este recurso porque lo que es agua es vida", dijo el hombre de 76 años oriundo de Suesca.Esta Sequía no es nueva, según las autoridades ambientales la laguna pasó de tener 5,70 metros cúbicos de agua a 1,3.Mientras tanto, la Corporación Autónoma Regional de Cundinamarca comenzó con un plan de recuperación que incluye limpiezas de alcantarillas y estudios del terreno.Sin embargo, la CAR explica el panorama árido de la laguna también se debe a la disminución de lluvias que está en menos del 16% usual, y ‘a la cantidad de sedimentos y vegetación que le están quitando capacidad’ de sobrevivir.Para el señor Lirio, la desaparición de la laguna también es por falta de conciencia y de sentido de pertenencia, porque muchas personas también ‘se adueñan de los terrenos cercanos’ y ya no le dan chance a la laguna de correr.
El próximo lunes 8 de marzo, comienza el plan de recuperación de corto, mediano y largo plazo para salvar la laguna de Suesca, en Cundinamarca. En primer lugar, se intervendrá la red de alcantarillas y recuperación de canales alrededor de la laguna.Estos trabajos, según anunció la CAR, se harán de forma manual y con maquinaria para trabajar de la mano con las juntas de acción comunal de Cucunubá y Suesca.Fernando Sanabria, director de la CAR Cundinamarca, dijo que a esta actividad invitarán a campesinos.“Vamos a elaborar algunos estudios para luego contratar e identificar si la laguna tiene alguna fuga por aguas subterráneas o consecuencia de la minería”. Además, en los próximos tres meses se presentará el plan de manejo ambiental para que sea aprobado y, se hará la revisión de recursos para su implementación.Asimismo, se estructurará un programa de vigilancia y control de la laguna y, se hará revisión de concesiones de agua. El director de la CAR, además, dijo que el espejo de agua está sufriendo actualmente de una excesiva cantidad de sedimentos y vegetación que le están quitando capacidad.
El Gobernador de Cundinamarca, Nicolás García, señaló que después de hacer un recorrido por la laguna de Suesca, junto con el director de la CAR, Luis Fernando Sanabria, realizaron un consejo extraordinario en el que participaron también los alcaldes de Cucunubá y Suesca.Allí, según las autoridades, se ideó un plan para trazar la línea se acción que permita trabajar desde la próxima semana en las medidas que mitiguen los bajos niveles de agua que está presentando la laguna de Suesca.Dentro de las acciones se encuentra la habilitación de alcantarillas que presentan taponamientos, la creación de nuevas alcantarillas que faciliten la llegada de agua lluvia a la laguna, la campaña de pago por servicios ambientales para proteger el entorno.Además, se hará un estudio hidrográfico “que brinde tranquilidad a la comunidad sobre la no afectación de la minería a la laguna”.También, a “largo plazo, se plantearon acciones complementarias de compra de predios y siembra de especies nativas”.
La secretaria de Ambiente de Cundinamarca, Nidia Riaño y la alcaldesa de Suesca, Zuly Quilaguy, realizaron un recorrido por la laguna de Suesca que les permitió evaluar las condiciones en las que se encuentra este lugar actualmente, con el fin de tomar acciones que ayuden a salvarla.De acuerdo al comunicado dado a conocer y a la visita realizada, en primera instancia se plantea adelantar una limpieza y mantenimiento de las alcantarillas que rodean la laguna de Suesca para dar paso a que el agua lluvia llegue de manera correcta al cuerpo de agua. Esta acción en conjunto con el Instituto de Infraestructura y Concesiones de Cundinamarca ICCU y las administraciones municipales de Suesca y Cucunubá.“En segundo término, en el marco del programa Pago por Servicios Ambientales PSA que tenemos en convenio con la Corporación Autónoma Regional de Cundinamarca -CAR y Másbosques, vamos a buscar la posibilidad de iniciar un acuerdo de conservación con los propietarios del área aledaña a la quebrada Santa Helena”, expresó la secretaria de Ambiente de Cundinamarca.Además, expresó que, para esta labor, enviarán a un equipo de trabajo al lugar con el fin de adelantar labores comunitarias sobre el tema.Finalmente, la Gobernación de Cundinamarca dio a conocer que, a largo plazo, se hará restitución de pinos y eucaliptos por especies nativas que consuman menos agua.
La laguna de Suesca se encuentra ubicada entre los municipios de Cucunubá y Suesca, en el departamento de Cundinamarca, y en los últimos días se ha convertido en el centro de atención debido a la sequía que se está presentando en este lugar.Entre los sectores que más tiene prendida la alerta es la parte de la cuenca alta del río Bogotá. El lugar se seca irremediablemente día tras día.“Es un proceso natural que no se puede detener. Pero en el caso de la laguna de Suesca es un proceso que se ha venido observando desde hace más de 30 años. Yo lo he venido observando con las visitas que hago desde los años 90”, explicó Alfonso Pérez, ingeniero geógrafo y exdirector de la CAR, en entrevista con Noticias Caracol en un informe especial.De acuerdo a la información que se ha registrado a lo largo del tiempo, en los años sesenta la laguna de Suesca mantuvo su forma, esto basado en una aerofotografía.No obstante, para el año 2003 el afluente hídrico de este lugar comenzó a desaparecer en el costado sur y fue en el 2016 cuando quedó en evidencia que el tamaño de la laguna continúo reduciéndose hasta cambiar por completo su parte central.En la actualidad, las imágenes reveladas por Google Earth producen gran tristeza por el desolado panorama al que pasó a ser la laguna de Suesca. Allí se puede observar un muelle en medio de un desierto.“Eso que queda, a la velocidad en que vamos, en dos meses ya no habrá nada, absolutamente nada de agua en la laguna”, dice Hernán Sandino, ingeniero civil y propietario de uno de los predios más afectados por la sequía, en entrevista con Noticias Caracol.Sin embargo, esto no es todo, pues de acuerdo a Hernán Sandino, a la laguna de Suesca no solo la ha afectado el cambio climático o la falta de lluvias por los últimos días, también la afecta la negligencia de las autoridades ambientales por ayudar y proteger esta fuente de vida del departamento.“Hay gente que tiene su cabañita, necesita agua para sus necesidades. Hay otra gente que riega sus pastos o sus cultivos con agua que sacan de la laguna o de los arroyos que la alimentan”, afirmó Alfonso Pérez, exdirector de la CAR e ingeniero geógrafo, en diálogo con Noticias Caracol.Según la CAR, ellos se encuentran trabajando arduamente en un plan que les permita reforestar la parte alta de la cuenca del río Bogotá con el fin de mitigar el daño en esta zona de la laguna.Por ahora, habrá que esperar a que con una temporada de lluvias se logre recuperar lo que por décadas se ha perdido.Mire el informe completo de Noticias Caracol aquí: