La solicitud se hizo debido a los abusos que se han documentado y han dado la vuelta al mundo desde el comienzo del conflicto armado hace ya casi un año.En un comunicado, el grupo de expertos advirtió de que, en caso de no acabar con esta situación de forma inmediata, 24 millones de niños sudaneses que han visto sus derechos violados corren el riesgo de sufrir una "catástrofe generacional".El comité alertó de que, de esos niños, 14 millones necesitan ayuda humanitaria urgente, mientras que 19 millones no van a la escuela y otros 4 millones están desplazados, lo que convierte a Sudán en la mayor crisis de desplazamiento infantil del mundo, según datos del Fondo de Naciones Unidas para la Infancia (Unicef).Además, el órgano de Naciones Unidas advirtió de un fuerte aumento del número de niños muertos o víctimas de la violencia sexual como arma de guerra en comparación con hace un año.También se mostró muy preocupado por el reclutamiento de menores por parte del Ejército sudanés y de las Fuerzas de Apoyo Rápido (FAR), especialmente en Darfur y otras zonas, por lo que instó a ambas partes a poner fin a este alistamiento forzoso.Según los informes recibidos por el comité, muchas escuelas de todo el país han sido destruidas y al menos 170 se han convertido en refugios de emergencia para desplazados internos, lo que pone en peligro el derecho de los niños a la educación durante muchos años y los expone al riesgo de la explotación sexual y el tráfico de personas.En cuanto a la situación sanitaria, el comité recordó que dos tercios de los sudaneses carecen de acceso a los servicios de atención sanitaria debido a la escasez de suministros médicos, que ha provocado el cierre de entre el 70 % y el 80 % de los hospitales del país.El Comité de los Derechos del Niño es el órgano de la ONU que supervisa la aplicación de la Convención sobre los Derechos del Niño por parte de sus Estados miembros y está formado por 18 expertos independientes.
Los sangrientos combates entre una fuerza paramilitar y el ejército de Sudán han dejado más de 700.000 desplazados internos desde que iniciaron a mediados de abril, el doble de lo registrado hace una semana, afirmó este martes la agencia de la ONU para las migraciones."Ahora hay más de 700.000 desplazados internos por los combates que comenzaron el 15 de abril. Es más del doble del número" contabilizado el martes pasado, que era de 340.000 personas, explicó Paul Dillon, portavoz de la Organización Internacional para las Migraciones (OIM).Incluso antes de que comenzaran los combates, 3,7 millones de personas estaban registradas como desplazados internos en Sudán, recordó Dillon."Muchos desplazados internos se refugian en casas de familiares, mientras que otros se reúnen en escuelas, mezquitas y edificios públicos", explicó el portavoz de la OIM.Unas 150.000 personas han huido a países de la región desde que estallaron los enfrentamientos, según cifras compiladas por el Alto Comisionado de la ONU para los Refugiados (ACNUR).Sudán se encuentra sumido en el caos desde que el 15 de abril estallaron enfrentamientos entre el ejército del general Abdel Fatah al Burhan y las paramilitares Fuerzas de Apoyo Rápido (FAR) del general rival Mohamed Hamdan Daglo.Las negociaciones que se llevan a cabo en Arabia Saudita para lograr un alto al fuego están estancadas. No hay "ningún avance importante", dijo el lunes a AFP un alto diplomático saudita, bajo anonimato.Los combates han causado hasta ahora unos 750 muertos y al menos 5.000 heridos, según la oenegé Acled.El conflicto ha provocado múltiples advertencias de las agencias de la ONU sobre una crisis humanitaria "catastrófica".Le puede interesar:
Al menos 528 personas han muerto y más de 4.500 han resultado heridas por los enfrentamientos que se iniciaron hace exactamente dos semanas entre el Ejército de Sudán y el poderoso grupo paramilitar Fuerzas de Apoyo Rápido (FAR), informó este domingo, 30 de abril, el Ministerio de Salud sudanés en un comunicado.Sin duda, esta situación ha afectado a miles de personas, entre ellos al futbolista colombiano Brayan Angulo, del equipo sudanés Al-Merrék, y su esposa, Angie Villa, quienes decidieron huir de Sudán por las terribles cosas que estaban sucediendo. Ellos estuvieron en Sala De Prensa Blu y hablaron de toda la travesía que vivieron.“Yo firmé un contrato con Al-Merrék, equipo sudanés, en Agosto. Mi esposa llegó a los tres meses (...) Al principio nos costó mucho, pero luego nos acostumbramos. Luego fue complicado por toda la situación que hay”, comentó el futbolista colombiano.Según cifras oficiales, el total acumulado de heridos es de 4.599 y se han registrado 528 muertos en todos los hospitales de los diferentes estados de Sudán entre el primer día de combates, el 15 de abril, y hasta el jueves 27 de abril.“Fueron días muy difíciles, de tristeza y angustia. El primer día de la guerra me cogió por sorpresa, me cogió sola en el apartamento (...) Uno piensa que es como en Colombia, nada grave, pero empecé a escuchar tiros y todo eso. En redes sociales ví que habían tomado el aeropuerto, con muertos, bombas, incendios”, contó Angie Villa sobre la dura situación que atravesó.Ante esto, Angulo contó que para ese momento él estaba en otro hotel por lo que no quiso decirle nada a su esposa. “A las dos horas eso eran misiles. Cuando me asomé por la ventana, lo primero que vi, cuando me levanté, es que estaban tratando de derribar un avión”, dijo.“Hubo una tregua y al tercer día dije si no salimos hoy, tendríamos que esperar a otra tregua que podría ir de una semana a quince días”. Cinco minutos más adelante, nos encontramos en el aeropuerto y era como el centro de toda la guerra y ahí dije hasta aquí llegamos”, comentó Angulo.Sin embargo, las personas de la milicia lo arrodillaron y le preguntaron a qué se dedicaba, afortunadamente, el colombiano iba con un compañero del club lo que lo ayudó, pues él tenía el uniforme del equipo.Luego de toda la travesía que tuvieron que pasar, Brayan Angulo y su esposa pudieron salir de Sudán y actualmente se encuentran en Egipto.Le puede interesar: 'Historias detrás de la historia'
Los sudaneses aprovecharon la nueva tregua, anunciada con la mediación de Estados Unidos, para abastecerse de agua y alimentos o huir hacia zonas más seguras o países vecinos de Sudán, en medio de múltiples dificultades por el cierre de bancos y tiendas o la subida de los precios.Según medios locales y testigos, una calma tensa prevalece en Jartum y la vecina ciudad de Um Dorman, sin que se registraran importantes violaciones de la nueva tregua como sucedió en otras pausas anunciadas desde el estallido de los enfrentamientos el pasado día 15 entre el Ejército y el grupo paramilitar de las Fuerzas de Apoyo Rápido (FAR).Medios locales han mostrado imágenes de centenares de sudaneses en la estación de autobuses de Jartum para intentar desplazarse a zonas más seguras o a países vecinos como Egipto (norte), en un viaje que puede durar hasta dos días, y donde un billete puede costar hasta diez veces más de lo normal.Muchos habitantes de Jartum se quejan, no obstante, de las dificultades de abandonar la ciudad debido a la carestía de los billetes, la escasez de medios de transporte debido a la falta de gasolina, según las mismas fuentes.Miles de habitantes de la capital salieron a las calles en un intento de abastecerse de agua y alimentos, en medio de muchas dificultades por el cierre de las tiendas y la falta de liquidez en efectivo por el cierre de los bancos desde el inicio de los enfrentamientos.Mientras tanto, el independiente Comité Central de Médicos de Sudán informó hoy de que al menos 291 civiles han muerto y 1.699 resultaron heridos en los últimos diez días, una cifra que la Agencia de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR) eleva a más de 459 muertos y 4.079 heridos."Muchos heridos y muertos no están incluidos en este recuento (...) muchos no han podido llegar a los hospitales debido a la dificultad de movimiento y la inseguridad en el país", dijo el citado comité en un escueto comunicado.Por otro lado, helicópteros y cazas del Ejército sudanés sobrevolaron esta mañana varios suburbios de Jartum y Um Dorman, donde según los testigos, se escuchan sonidos de explosiones o tiroteos de cuando en cuando, aunque sin que se informara de víctimas o combates.El Ejército sudanés y las FAR, que se comprometieron a cumplir con la nueva pausa, se han acusado mutuamente en sendos comunicados de violar la tregua.Le puede interesar:
El secretario de Estado estadounidense, Antony Blinken, dijo que los generales sudaneses en disputa acordaron un alto el fuego de tres días desde el martes, 25 de abril, para tratar de poner fin a los enfrentamientos."Tras intensas negociaciones durante las últimas 48 horas, las Fuerzas Armadas Sudanesas (SAF) y las Fuerzas de Apoyo Rápido (RSF) acordaron un alto el fuego en todo el país desde la medianoche del 24 de abril, que durará 72 horas", declaró Blinken en un comunicado dos horas antes de que la tregua entrara en vigor."Durante este periodo Estados Unidos espera que el Ejército y los FSR respeten plenamente y de inmediato el cese el fuego", agregó.El secretario de Estado indicó además que Estados Unidos trabaja con sus aliados para el inicio de una "comisión" que estaría a cargo de negociar un cese permanente de hostilidades en Sudán.Blinken habló previamente el lunes con su homólogo keniano sobre el conflicto sudanés y recientemente multiplicó los contactos con los generales rivales, así como con países de la región y con la Unión Africana.El éxodo masivo de extranjeros se aceleró este lunes en Sudán, sacudido por feroces combates entre el ejército y un grupo paramilitar que abocaron el país al borde "del precipicio", advirtió el secretario general de la ONU, Antonio Guterres.Las explosiones, los bombardeos y los disparos no han dejado de resonar desde hace diez días en la capital sudanesa, Jartum, y otras zonas, provocando centenares de muertos.Sin embargo, las capitales extranjeras lograron negociar con los dos beligerantes la evacuación de su personal diplomático y de ciudadanos de sus países.Esta espiral "corre el riesgo de una conflagración catastrófica dentro de Sudán que podría envolver a toda la región y más allá", aseguró este lunes Guterres.Pese a esta advertencia, el emisario de la ONU en Sudán, Volker Perthes, permanecerá en este país del este de África, a diferencia de numerosos diplomáticos y otros ciudadanos extranjeros.En total, se evacuó a más de 1.000 ciudadanos de la Unión Europea (UE), según el jefe de la diplomacia del bloque, Josep Borrell.España anunció la salida de 100 personas, españoles pero también latinoamericanos.Estados Unidos evacuó en helicópteros a su personal diplomático, menos de 100 personas.China y varios países árabes también evacuaron a cientos de sus nacionales.Unos 700 empleados de la ONU, embajadas y de organizaciones internacionales "fueron evacuados hacia Puerto Sudán", una ciudad a orillas del mar Rojo, indicó Naciones Unidas.Los más de 5 millones de capitalinos no tienen desde hace días agua ni electricidad, y la comida empieza a faltar.Los enfrentamientos, que se desarrollan principalmente en Jartum y Darfur, en el oeste de este país de 45 millones de habitantes, estallaron el 15 de abril entre el ejército del general Abdel Fatah al Burhan, gobernante de facto de Sudán desde el golpe de 2021, y su rival, el general Mohamed Hamdan Daglo, líder de las paramilitares Fuerzas de Apoyo Rápido (FAR)."Temo por su futuro"Más de 420 personas murieron y 3.700 resultaron heridas hasta ahora, según la Organización Mundial de la Salud (OMS).Los habitantes de Jartum sólo tienen una idea en mente: abandonar la ciudad, que se hunde en el caos.Los dos bandos se acusan mutuamente de haber atacado las cárceles para liberar a cientos de presos, saquear casas y fábricas.También se han registrado enfrentamientos en torno a bancos, que fueron vaciados.En un país donde la inflación ya es de tres dígitos en tiempos normales, el precio del arroz o de la gasolina está por las nubes."A medida que huyen los extranjeros, que pueden hacerlo, se agrava el impacto de la violencia en una situación humanitaria ya crítica en Sudán", advirtió la ONU.Atrapadas en el fuego cruzado, sus agencias y muchas otras organizaciones humanitarias han suspendido sus actividades en el país.Cinco trabajadores humanitarios, entre ellos cuatro de la ONU, murieron y, según el sindicato de médicos, casi tres cuartas partes de los hospitales están fuera de servicio.El hambre amenazaEn tanto, los encarnizados combates entre las fuerzas de los dos generales en el poder no dan tregua.Los tiroteos se intensifican en la capital y sus alrededores. Aviones de combate sobrevuelan la zona mientras van avanzando los blindados paramilitares.La disputa entre Burhan y Daglo surgió de los planes de integrar las FAR al ejército regular, un requisito clave del acuerdo para restaurar la democracia en Sudán tras el golpe militar que depuso al gobernante autocrático Omar al Bashir en abril de 2019.Le puede interesar Así vivió una colombiana la guerra en Sudán: “Escuchábamos las explosiones y disparos”:
Este lunes, 24 de abril, según información del consulado de Colombia en El Cairo, Egipto, en conjunto de la Cancillería, se confirmó que diez colombianos han sido evacuados de la República de Sudán debido a la delicada situación de orden público que se presenta en ese país.Según la cancillería colombiana, algunas de estas personas lograron salir con el apoyo de las misiones diplomáticas de España, Francia y de las Naciones Unidas acreditadas en Sudán; otros ciudadanos colombianos salieron por sus propios medios.El grupo de connacionales evacuados está compuesto por cuatro mujeres, tres hombres y tres menores de edad: “Algunos de ellos salieron vía aérea hacia Djibouti, y otros se encuentran desplazándose vía terrestre hacia la República Árabe de Egipto”.Adicionalmente, la Cancillería informó que el consulado de Colombia en El Cairo, Egipto, está atento a brindar la asistencia consular que requieran los connacionales y para ello habilitó una línea de Whats App que funciona 24 horas +20127833733 y el correo electrónico ccairo@cancilleria.gov.co.Crítica situación de orden público en Sudán, ¿por qué?Un médico de Médicos Sin Fronteras (MSF) describió una situación "catastrófica" en Darfur, en el oeste de Sudán, con niños heridos de bala y pacientes atendidos en pasillos, en medio de unos mortíferos combates que empezaron hace casi una semana.En un comunicado, MSF citó el testimonio de Cyrus Paye, médico en el hospital Sud de El Fasher, capital del estado de Darfur del Norte."La mayoría de los heridos son civiles alcanzados por balas perdidas, y muchos de ellos son niños", aseguró Paye."Sufren facturas causadas por balas, heridas de bala o metralla en las piernas, el abdomen o el pecho. Muchos necesitan transfusiones de sangre", añadió.El establecimiento en el que trabaja es una unidad de maternidad y no tiene capacidades quirúrgicas, pero con los combates se tuvo que "reorganizar el hospital para poder atender a los heridos", explicó el médico."La situación es catastrófica (...), hay tantos pacientes que no queda más remedio que atenderlos en el suelo, en los pasillos, porque simplemente no hay suficientes camas", agregó.Los combates oponen desde el 15 de abril al ejército regular del general Abdel Fatah al Burhan, jefe de facto de Sudán desde el golpe de Estado de 2021, y al grupo paramilitar Fuerzas de Apoyo Rápido (FAR), de Mohamed Hamdan Daglo.Tienen lugar principalmente en la capital, Jartum, y en la región de Darfur, ya azotada en los años 2000 por un encarnizado conflicto.Le puede interesar: 'Cómo saber cuándo cambiar las llantas'
Las embajadas de varios países, incluyendo Colombia, empezaron la evacuación de sus ciudadanos en Sudán tras el golpe de Estado que estalló la semana pasada y que hoy tiene a su población en medio de la confrontación; miles de personas están huyendo por el conflicto entre grupos militares rivales, el cual ya ha dejado más de 420 muertos y 3.700 heridos.Dos colombianas fueron evacuadas de Sudán hacia España en coordinación con el Gobierno de español y el consulado de Colombia; una de ellas, Elmita Acosta, contó en diálogo con Mañanas Blu cómo fueron esos últimos días allí y lo que tuvieron que enfrentar con su familia desde que la rebelión se dio hasta que lograron salir.“Ha sido una semana muy intensa. De manera súbita empezó esta guerra, pero gracias a Dios logramos salir. Hace más de una semana empezaron confrontaciones entre las fuerzas militares y paramilitares de este país en una lucha por poder, esto fue en la zona céntrica, en la capital, y se ha ido intensificando y por eso todas las embajadas decidieron retirar sus operaciones”, narró.Según detalló, desde el sábado pasado no pudieron salir y quedaron confinados “porque las confrontaciones eran muy intensas”. Junto con su familia, añadió, se refugió en el pasillo de su apartamento lejos de las ventanas para “poder aguantar”, pues no tenían provisiones porque “nadie podía salir”.Acosta comentó que las personas “están aterrorizadas” y muchos sudaneses están sin esperanza, solo tratando de escapar del país. “Escuchábamos las explosiones y disparos”, recordó sobre lo que alcanzaban a percibir.Se viene “algo más intenso” en esta guerra“La capital está quedando prácticamente vacía porque hay un cese al fuego que termina esta noche a las 6:00 y después de eso, al parecer, se avecina algo mucho más intenso (…) Los civiles no sé si toman partido o más bien están tratando de sobrevivir”, relató Acosta.Escuche la entrevista completa en Mañanas Blu:
El avión de la Fuerza Aérea Española en el que viajaban 72 personas evacuadas de Sudán aterrizó este lunes en la base aérea de Torrejón de Ardoz, próxima a Madrid.En el avión viajaban 34 españoles y ciudadanos de otras 11 nacionalidades, entre ellos dos colombianos, según el Ministerio de Asuntos Exteriores. Además de portugueses, italianos, polacos, irlandeses, mexicanos, venezolanos, argentinos y sudaneses, residentes en el país africano y también turistas que se encontraban allí en el momento del golpe de Estado.La aeronave militar española con los evacuados despegó este domingo por la noche de la capital sudanesa con destino a Yibuti, desde donde partió hacia la base aérea de Torrejón, donde fueron recibidos hoy por el ministro de Exteriores, José Manuel Albares.Además de los evacuados en el operativo este lunes, un grupo de españoles decidió voluntariamente permanecer en Sudán o abandonarlo por otros medios, mientras que otras personas habían conseguido salir del país antes de la puesta en marcha de este dispositivo.El operativo puesto en marcha por las Fuerzas Armadas españolas estuvo compuesto por cuatro aviones militares que operaron entre Yibuti y España para transportar todo el material y personal implicado en la operación, que se llevó a cabo desde el aeropuerto de Jartum.En el país africano aún permanecen 62 militares españoles de distintas unidades que participaron en el rescate y que llegarán a Madrid "en las próximas horas", aseguró la ministra de Defensa, Margarita Robles, en un vídeo distribuido por su departamento.Esta operación de rescate fue coordinada por los Ministerios de Asuntos Exteriores y de Defensa.España, como otros países, aprovechó la tregua de tres días que establecieron el pasado viernes las partes en conflicto, el Ejército sudanés y el grupo paramilitar Fuerzas de Apoyo Rápido (FAR), con motivo del fin del Ramadán para evacuar a sus nacionales, aunque dicha pausa no fue totalmente respetada.