Carlos Mauricio Navarro Durán, hijo de la famosa comerciante de productos de Belleza Stella Durán, quien fue la última persona que pagó el Seguro Obligatorio de Accidentes de Tránsito (SOAT) de la camioneta con placa CJE 825, en la cual se encontraron en la noche de este jueves cuatro cadáveres en la Autopista Norte con calle 223 en Bogotá, se pronunció sobre el caso y dio explicaciones. De acuerdo con el hijo de Stella Durán, quien reside desde hace varios años en España, él dejó el vehículo en Colombia. En declaraciones que dio a la Policía, Carlos Mauricio Navarro aseguró que la camioneta quedó en una concesionaria y blindadora cuando salió de Colombia, con traspaso abierto para ser vendida. Blu Radio tuvo acceso al historial del vehículo, en el que aparecen registradas al menos tres direcciones de inmuebles en el norte de Bogotá. Cabe recordar que hace cuatro años, Stella Durán fue capturada en medio de un escándalo de corrupción en el Instituto de Vigilancia de Medicamentos (Invima) por la presunta expedición y falsificación de registros sanitarios. "El nombre de esta persona aparece en el RUNT"; dijo el coronel Edgar Cárdenas, comandante operativo de la Policía de Bogotá. El oficial dijo que se cuenta con información en el sentido de que Carlos Mauricio Durán estaría fuera del país. El crimenCuatro personas asesinadas fueron halladas por las autoridades al interior de una camioneta Toyota Prado con placa CJE 825, en la Autopista Norte con calle 223 en Bogotá, en el sentido sur - norte.Información de autoridades confirmó que las víctimas son tres hombres y una mujer, quienes fueron ultimadas de un disparo en la cabeza.La presencia del vehículo fue alertada por vecinos del lugar a las autoridades, que, al atender el llamado, procedieron a descartar que se tratara de un carro bomba. "Se hace una primera verificación a través de lo que se logra ver por los vidrios y se observan unos cuerpos. En la inspección que realiza la Policía Judicial se encuentran tres cuerpos de hombre y uno de una mujer. Estamos estableciendo a través de la investigación cuál puede ser la hipótesis y qué fue lo que sucedió", declaró el coronel Edgar Cárdenas, comandante operativo de la Policía de Bogotá. La señal de alarma se dio a las 10:15 de la noche de este jueves y según funcionarios que participaron en las labores de levantamiento, inicialmente se encontraron los cuerpos de dos hombres envueltos en bolsas de color negro. Empacadas, al lado, estaban las que serían sus prendas de vestir. Posteriormente, hacia las 11:00 de la noche, otro cuerpo se encontró en el mismo baúl del vehículo. La primera hipótesis que manejan las autoridades, se acuerdo con el coronel Helbert Benavides, comandante encargado de la Policía Metropolitana de Bogotá, es que esta masacre se dio por un ajuste de cuentas.“Lo primero que estamos investigando es esa hipótesis, Sin embargo, aún es demasiado temprano para confirmarlo”, agregó el coronel en diálogo con Blu Radio.El oficial agregó que los cuerpos, que tenían disparos en la cabeza, aún no han sido identificados. Asimismo, dijo que las personas pudieron haber sido asesinadas en otro lugar de la ciudad.“La primera pista que estamos trabajando es sobre la placa del vehículo (CJE 825), toda vez que no se encontraron documentos de identificación de los cadáveres. Estamos revisando las cámaras para ver qué recorrido hizo en la ciudad”, indicó.El coronel Benavides agregó que, de los datos recopilados, cree que los asesinatos fueron cometidos ayer mismo porque los cuerpos estaban en un estado considerable de rigidez.
La historia de la estafa es muy simple: una señora y sus socios arman toda una industria esotérica, que se encarga de vender productos con poderes estéticos y psíquicos, que hacen volver a los seres amados, retener a los que se quieren ir y atraer a los que no quieren llegar. A la hora de bautizar a dichos productos se les ocurren los más diversos nombres: Leche de la mujer amada, Kamasutra, Rompesaragüey y Kariaquito, entre otros.Como estamos en Colombia, país de bobos que se creen vivos, el negocio prospera en muy poco tiempo y la señora se vuelve millonaria vendiendo la Leche de la mujer amada, que hace posible retener aún en contra de su voluntad al ser amado, pues se trata -según sus fabricantes- de un “protector contra las fuerzas del mal, un potenciador del poder personal, un purificador de energías negativas y un generador de buena fortuna”.El negocio resultó tan bueno que les alcanzó a los fabricantes para amasar una fortuna de 10.000 millones de pesos, dinero que también utilizaban para pagarles a funcionarios del Invima para que adulteraran las licencias que les permitía vender los productos.Es decir, armaron una empresa criminal, pues la única manera de obtener licencias del Invima para vender productos chimbos es sobornando a los funcionarios. ¿Productos chimbos? Pero claro, la Fiscalía que allanó todos los almacenes que conforman la cadena de fabricantes y vendedores de la Leche de la mujer amada, descubrió que todos los súper poderosos productos son fabricados con productos de aseo. En otras palabras: son ambientadores para el hogar, como comprobaron los especialistas del Invima que analizaron sus componentes.Hoy, la señora y su socio están detenidos, mientras hay millones de colombianos encartados con la Leche de la mujer amada, a la que le atribuyeron poderes de los que carece. Su único poder comprobado es que sirve para ambientar salas, baños y cocinas. Para nada más.