Cinco zonas de los departamentos de Meta, Guaviare y Caquetá fueron identificadas como las de mayor deforestación en el país, por lo que fueron priorizadas por el Gobierno Nacional para su intervención a través de la campaña artemisa de la fuerza pública durante el primer trimestre del año.Se trata de la Marginal Selva Yaguará en Caquetá; Mapiripán, en el Meta; la Serranía del Chiribiquete y Calamar, en Guaviare; así como Yarí Sur y Ciudad Yarí en Caquetá. La priorización se realizó durante la instalación del primer puesto de mando unificado ambiental, en el cual participan el Ministerio de Defensa, el Ministerio de Medio Ambiente y Desarrollo Sostenible, la Fiscalía General de la Nación, el Ideam, Parques Nacionales Naturales, las Fuerzas Militares y la Policía Nacional.Durante el PMU también se identificaron las 13 zonas del país más afectadas por la deforestación, debido a la ganadería ilegal o la siembra de cultivos ilícitos por parte de grupos armados ilegales.El PMU, según explicó la viceministra de Defensa, Sandra Álzate, permitirá que estas entidades monitoreen de manera permanente la afectación a los Parques Nacionales Naturales y las zonas protegidas en el país. Asimismo, permitirá que las autoridades que hacen parte del PMU coordinen de manera eficaz las operaciones e intervenciones que se requieren para prevenir y frenar la deforestación.Igualmente, el Ministerio de Defensa informó que en la última semana se han entregado a las autoridades 5 de las 17 personas que aparecen en el cartel de los más buscados por deforestación.Le puede interesar. Escuche El Mundo Hoy:
El Gobierno de Estados Unidos anunció una donación a Colombia de 288.909 dólares para ayudar a la conservación del parque nacional natural Serranía de Chiribiquete, que hace parte del Patrimonio Mundial de la Humanidad de la Unesco, y de las pinturas rupestres de La Lindosa.La embajada de EE.UU. en Bogotá detalló en un comunicado que el dinero estará destinado para apoyar las labores de conservación de las pinturas rupestres que se encuentran en el departamento del Guaviare, en los límites de la Amazonía colombiana y la Orinoquía.El dinero, agregó la información, proviene del "Ambassadors Fund for Cultural Preservation" (AFCP, por sus siglas en inglés), que desde hace 20 años apoya a Colombia en iniciativas para conservar su patrimonio cultural e inmaterial.La Serranía de Chiribiquete es conocida como centro sagrado indígena y cuna del jaguar, así como tesoro arqueológico y biológico dentro del que destacan las pinturas rupestres de La Lindosa y los tepuyes, mesetas abruptas con paredes verticales y cimas relativamente planas.Igualmente tiene un papel fundamental en la reducción de la vulnerabilidad ante los efectos negativos del cambio climático global ya que provee el 31 % del agua superficial de la Amazonía, con una oferta hídrica estimada de 70.264 millones de metros cúbicos del líquido.OTRAS INICIATIVAS APOYADAS POR ESTADOS UNIDOSEstados Unidos también donó en 2019 una suma de 199.979 dólares al Ministerio de Cultura para recuperar los monumentos que se encuentran en el Puente de Boyacá, ubicado en el centro del país y donde el 7 de agosto de 1819 Simón Bolívar derrotó definitivamente el poder colonial español.Estos monumentos estaban en un "estado de deterioro debido a condiciones ambientales, y vandalismo, entre otras", razón por la cual hoy el embajador Phillip Goldberg hizo una visita junto a la ministra de Cultura, Angélica Mayolo, y el gobernador de Boyacá, Ramiro Barragán, para desvelar las esculturas y placas recuperadas.Según el Ministerio de Cultura, desde 2001 Estados Unidos ha destinado un millón de dólares en doce proyectos para proteger y preservar el patrimonio colombiano."Quiero expresar nuestra sincera y afectuosa gratitud a la Embajada de Estados Unidos en Colombia, por su disposición y voluntad para trabajar de la mano del Ministerio de Cultura y las entidades territoriales por la preservación, disfrute y sostenibilidad del patrimonio cultural de todos los colombianos", expresó Mayolo.
El biólogo Patricio von Hildebrand es una de las personas que más conoce de las pinturas rupestres ubicadas en el Parque Nacional Natural de Chiribiquete y que fueron incluidas por la Unesco en la lista de Patrimonio Mundial de la Humanidad.En entrevista con BLU Radio, el alemán, que vivió 10 años en la zona, relató que durante este tiempo realizó una investigación que, en parte, permitió este reconocimiento.“En el Chiribiquete hay poco petroglifo, pero sí mucha pintura rupestre sobre roca, sobre todo en la parte norte del parque. Hay más de 50 murales enormes con más de 70.000 murales históricos”, dijo.Añadió que, si bien no se ha podido precisar la fecha en que fueron realizadas, algunas pueden datar de hace 20.000 años.“Esas pinturas tienen motivos de animales, de plantas y de gente. En los motivos de gente hay motivos de personas que tienen una cintura estrecha, que es una característica típica de los indígenas Carijona, que, al parecer, desaparecieron a principios del siglo XX”, dijo.Vea aquí: Unesco declara la Serranía de Chiribiquete como Patrimonio de la HumanidadSin embargo, Von Hildebrand resaltó que hay indicios de que la tribu continúa habitando en la zona. “Hicimos unos sobrevuelos sobre esos sitios y detectamos unas malokas. Por respeto a ellos no volvimos”, expresó. Según la Unesco, una de las características "más impresionantes" de Chiribiquete es la existencia de numerosos tepuyes (mesetas abruptas y cimas planas), donde se han contabilizado más de 75.000 imágenes rupestres en esas formaciones rocosas.Una de ellas es Cerro Azul-La Lindosa, al que se accede por un camino abierto en medio de la selva y que parte de un punto en las vastas llanuras del Guaviare al que se llega por tierra desde San José, la capital regional, distante unos 50 kilómetros.Una vez se inicia la subida al cerro de más de 200 metros de altura y casi en línea recta, se entra en un ecosistema donde corren cauces de agua cristalina, árboles de largas raíces color naranja que asoman en el suelo y forman una especie de corredor para subir a la cima, troncos cubiertos por verdes tapetes de musgo, mariposas multicolor, orquídeas salvajes, hormigas rojas y una multitud de insectos.Después de media hora de subida el visitante tropieza con una gigantesca roca blancuzca que parece haber sido instalada en la cima, el tepuy de Cerro Azul, cuya majestuosidad apenas da tiempo al asombro, sustituido de inmediato por la admiración que producen las pinturas rupestres que decoran la montaña de piedra.Figuras antropomorfas, formas geométricas, animales y plantas pintadas por el hombre primitivo en las paredes de esta formación de origen precámbrico componen un mural de unos 100 metros de largo por más de 20 de alto, el principal de los miles que tienen el Cerro Azul y la Serranía de la Lindosa.
El Parque Nacional de Chiribiquete, en las selvas del sureste de Colombia, considerado la Maloca del Jaguar, fue incluido por la Unesco en la lista de patrimonios de la humanidad, anunció el organismo este domingo."Nueva inscripción en la lista del #PatrimonioMundial de la @UNESCO_es: Parque Nacional de Chiribiquete - La maloca del jaguar, #Colombia. ¡Felicitaciones!", escribió la oficina de las Naciones Unidas para la Educación Ciencia y Cultura en su cuenta en Twitter.Con un extensión de 2,7 millones de hectáreas que abarcan cinco municipios amazónicos en las regiones del Guaviare y Caquetá, el mayor parque natural del país conserva una de las principales diversidades biológicas del planeta y lugares sagrados para las poblaciones indígenas.Esta es la novena declaratoria de patrimonio mundial en Colombia, el segundo país más biodiverso del mundo por detrás de Brasil. El presidente colombiano, Juan Manuel Santos, celebró la declaratoria y advirtió que su gobierno expandirá el territorio protegido en la zona. "Mañana estaremos en el parque para ampliar y proteger aún más nuestra biodiversidad #PatrimonioMundial", escribió el mandatario en Twitter.El territorio, que es considerado área protegida desde 1989, se ampliará en 1,5 millones de hectáreas este lunes, según informó la presidencia.Durante décadas, la guerra opacó los tesoros del parque. Pero a raíz del acuerdo de paz firmado en 2016 con la entonces guerrilla comunista Farc se fueron revelando los secretos de sus tepuyes, las grandes rocas de cientos de metros de alto y ancho que albergan más de 75.000 pinturas rupestres milenarias.Las declaratorias de ampliación del territorio protegido realizadas por el gobierno en las últimas décadas han llegado acompañadas del descubrimiento de nuevas vegetaciones y animales.Entre ellas la del "chlorostilbon olivaresi", un tipo de colibrí que se configura como la única especie endémica de la Amazonía colombiana, así como del jaguar, el gran felino que solo se encuentra en el continente americano y es amenazado por la destrucción de su hábitat a causa de la deforestación.Otros patrimonios de la humanidad en Colombia son el Puerto de Cartagena, los parques nacionales de los Katios, San Agustín y Tierradentro, el Centro histórico de Santa Cruz de Mompox, el Santuario de Fauna y Flora de Malpelo, el Paisaje cultural del Café y el Sistema Vial Andino Qhapaq Ñan.