A pocos días de finalizar el año, miles de ciudadanos en Bogotá salen de sus hogares para disfrutar de las vacaciones en otras partes del país. Por lo mismo, delincuentes aprovechan la temporada navideña para acechar las viviendas de aquellos que viajan en estas fechas.De acuerdo con cifras de la Secretaría de Seguridad, entre diciembre del 2023 y enero del 2024 se presentaron más de 1.300 robos en las casas de la capital, con un promedio de 22 por día: 821 ocurrieron sin uso de armas; 280 con herramientas tales como palancas para forzar puertas y ventanas; y 87 utilizando llaves maestras.Las autoridades registraron que las localidades con más denuncias en la última temporada de fin de año fueron las de Suba, con 171 denuncias; Kennedy, con 147; y Engativá, con 140. Frente a lo anterior, expertos recomiendan cinco medidas fundamentales para proteger su vivienda si va a salir de vacaciones en esta temporada:Asegurar puertas y ventanas: verifique que cada una de las entradas de su hogar se encuentre bien cerrada y, de ser posible, implemente refuerzos adicionales.Dejar su vivienda con alguien de confianza: pídale a sus amigos, familiares o conocidos que se encuentren en la zona para que estén atentos a su casa.Instalar dispositivos de monitoreo: si cuenta con los recursos, implemente cámaras de seguridad o sistemas tecnológicos que permita vigilar la residencia en tiempo real.Evitar las redes sociales: si sale de viaje, trate de no publicar sus planes, pues esto podría facilitar el actuar de los delincuentes.Informar al personal de seguridad: si vive en edificios residenciales o conjuntos, informe a los guardias que están al tanto del lugar sobre su viaje.De acuerdo con expertos, lo anterior servirá para que usted como viajero no sea una víctima de la criminalidad organizada. “La delincuencia está siempre pendiente de las oportunidades que como ciudadanos les podemos brindar", dijo el criminólogo de la Universidad Manuela Beltrán, Diego Cardozo.
En una operación reciente, la Policía Metropolitana de Bogotá logró capturar a tres personas y detener a dos menores de edad, todos implicados en un caso de hurto. Los hechos ocurrieron en el barrio Jazmín, donde las autoridades, alertadas por la central de radio, recibieron información sobre un vehículo tipo taxi que había participado en el robo a un comercio.Actuando rápidamente, los uniformados identificaron y detuvieron el taxi en la carrera 38 con calle 2. A pesar de los intentos de los delincuentes de evadir a la policía usando ropa de cambio para confundir a las autoridades, fueron capturados.Durante la operación, se incautó un arma de fuego tipo revólver, se recuperó un celular robado, y se decomisó el taxi utilizado en el crimen. Además, se recuperó tanto la mercancía robada como el dinero producto de las ventas. Los detenidos fueron puestos a disposición de las autoridades competentes para proceder con las investigaciones y judicializaciones correspondientes.Con ayuda de drones capturan delincuentes que comercializaban droga en BogotáEn un operativo reciente, la Policía Metropolitana de Bogotá logró la captura de dos personas involucradas en el tráfico de estupefacientes, gracias a la utilización de drones. El hecho se desarrolló en la Calle 22 con Carrera 15, cuando las patrullas de vigilancia, pertenecientes a la Estación de Policía Mártires, fueron alertadas sobre la presencia sospechosa de dos individuos que se encontraban comercializando drogas en plena vía pública.Al percatarse de la presencia policial, los sospechosos, ambos ciudadanos extranjeros de 22 años, intentaron huir. Sin embargo, gracias a la intervención de los operadores de los Sistemas Aéreos Remotamente Tripulados (SIART), que realizaron un seguimiento desde el aire, las autoridades lograron capturarlos rápidamente.Durante el procedimiento de registro, a los detenidos se les encontraron 26 cigarrillos de marihuana elaborados de manera artesanal. Los capturados fueron puestos a disposición de la Fiscalía General de la Nación para responder por el delito de tráfico, fabricación o porte de estupefacientes.
La concejal del Centro Democrático Sandra Forero denunció que el sistema para geolocalizar y para tomar video de las llamadas de la línea 123 de la Policía Nacional dejaría de operar en la capital del país el viernes 16 de agosto.“La Secretaría de Seguridad sabía que este contrato se terminaría, por lo que la Personería le realizó un control de advertencia el 8 de agosto y aun así no tomó medidas al respecto”, dijo la funcionaria.En la denuncia, Forero aseguraba que dentro del Plan Anual de Adquisiciones de la Secretaría de Seguridad no se tenía planteado una nueva contratación para continuar con la prestación del servicio; por lo que, a partir del viernes, la línea de emergencia 123 de Bogotá entraría en crisis.>>> Lea también: Piden investigar presunto plan para matar a policía que se tragó billetesA lo anterior, desde el Distrito aclararon la polémica y afirmaron que este canal de denuncia seguirá funcionando con total normalidad.“En diciembre de 2023 se inició un plan piloto para probar una nueva tecnología en particular, que permite ofrecer a los usuarios la atención de cierto tipo de incidentes a través de videollamada y chat silencioso. De las cuatro millones de llamadas procedentes, ingresadas en el último año, 4.000 ciudadanos autorizaron acceder al servicio de videollamada, es decir el 0,12 % y 795 personas al chat silencioso, es decir el 0,01 %”, comunicó la Secretaría de Seguridad.Bajo ese contexto, el Distrito aseguró que lo que finaliza es el plan piloto de la herramienta. Además, reiteró que, si bien las funciones ofrecían un beneficio para la atención de los incidentes, estas no eran estrictamente necesarias para prestar el servicio.“Por lo tanto, la Secretaría Distrital de Seguridad, Convivencia y Justicia reitera que la Línea 123 seguirá funcionando, prestando los servicios y garantizando la atención de emergencias, como se ha venido haciendo hasta ahora”, finalizó el escrito.
La Unidad Nacional de Protección ordenó ajustar los protocolos de seguridad de sus instalaciones en Bogotá, teniendo en cuenta los recientes ataques al esquema de seguridad de la familia presidencial y a la vicepresidenta Francia Márquez.La entidad dice que esto se hace con el fin de seguir prestando los servicios de la unidad y garantizar la seguridad de sus funcionarios. Ordena adoptar medidas perimetrales e internas en la sede central de la Unidad Nacional de Protección ubicada en Puente Aranda. Algunas de estas medidas son: reforzar el control de tránsito y de circulación de vehículos en el perímetro de la sede. También se tomarán acciones para fortalecer la seguridad del ingreso a la sede, por eso recomiendan a sus funcionarios portar el carné visible para que les puedan permitir la entrada."La anterior decisión, se encuentra fundamentada en los recientes incidentes presentados al entorno y esquema de seguridad de la familia presidencial y de la vicepresidenta; aunado a las reiteradas acciones violentas acaecidas en los departamentos de Nariño y Cauca, lo cual, nos obliga a tomar acciones que prevengan posibles ataques contra las instalaciones y objetivos estratégicos, por parte de grupos armados organizados y delincuenciales", se lee en el documento.Estas medidas se toman luego de que el vehículo asignado al hermano del presidente Petro, Juan Fernando Petro, fue atacado con un objeto contundente en la avenida circunvalar en el centro de Bogotá. Más recientemente, el esquema de seguridad de la vicepresidenta también recibió un impacto de proyectil, al parecer de fusil, cuando se movilizaba por timba, en Cauca.
Más de 1.500 policías garantizarán la seguridad de los bogotanos durante la final de la Copa América entre Colombia y Argentina, que se llevará a cabo este domingo 14 de julio, informó el brigadier general José Gualdrón, comandante de la Policía de Bogotá.El dispositivo de seguridad estará compuesto por hombres y mujeres distribuidos en tres turnos, con una delegación específica en sectores con pantallas gigantes para ver el partido, así como en bares, gastrobares, restaurantes y zonas de parques. Además, se dispondrán de dos helicópteros y seis drones para reforzar la vigilancia.“La Policía Metropolitana de Bogotá está lista y preparada para atender todos los requerimientos en materia de prevención y seguridad con motivo del evento deportivo de la final de la Copa América que será entre Colombia y Argentina”, aseguró el brigadier general Gualdrón. Los uniformados estarán distribuidos en distintas zonas de la ciudad, incluyendo parques y zonas de restaurantes y gastrobares.El comandante destacó que la ciudad contará con recursos logísticos y humanos proporcionados por la Dirección de la Policía Nacional para asegurar este importante evento deportivo.Finalmente, el brigadier general Gualdrón hizo un llamado a la ciudadanía para que actúen con civismo y responsabilidad, y concluyó: “Si nuestra selección gana, no debemos excedernos en el consumo de alcohol, no conducir bajo sus efectos, respetar las señales de tránsito y evitar que la euforia nos lleve a la irresponsabilidad”.
La Policía Metropolitana de Bogotá presentó el plan con el que buscarán preservar la sana convivencia este domingo, antes, durante y después de que se juegue la final de la Copa América, dónde la Selección Colombia enfrentará a la Selección Argentina.Por medio de seis drones y dos helicópteros, las autoridades estarán monitoreando desde el aire el comportamiento de los bogotanos en los puntos en dónde el Distrito ha dispuesto de pantallas gigantes para la transmisión de este evento deportivo.En tierra, serán 2.500 policías que estarán recorriendo y custodiando las calles, con especial atención en las zonas dónde están ubicados los bares y gastrobares de la ciudad.El comandante de la Policía de Bogotá, general José Daniel Gualdrón, invitó a los ciudadanos a ser medidos a la hora de celebrar y a evitar conducir bajo los efectos del alcohol.Además, destacó la importancia de evitar el porte y uso de armas y ser cuidadosos con el manejo de la pólvora.El llamado de las autoridades es a cuidar y respetar los espacios públicos y los vehículos que se encuentren en las calles de Bogotá.
La extorsión sigue siendo uno de los delitos que no solo tiene en alerta a las autoridades, sino que tiene aterrorizados a los ciudadanos, sobre todo los que habitan el sur de Bogotá. En lo que va del 2024, los casos de extorsión denunciados ante las autoridades han aumentado en un 70 %, según el general Daniel Gualdrón, comandante de la Policía de Bogotá, porque las víctimas han perdido el miedo de denunciar.De acuerdo con el general, más del 60 % de estos casos se les atribuyen a grupos de delincuencia común, bandas pequeñas que delinquen en distintos puntos de la ciudad, mientras que el otro 40 % a las estructuras ya determinadas como Los Satanás o el Tren de Aragua, incluso, muchos de los casos se originan en las cárceles.“En total van poco más de 320 casos denunciados hasta la fecha. Poco más de 200 atribuidos a delincuencia común, bandas que se hacen pasar por estructuras más grandes y el resto, 120, atribuidas a los Satanás, al Tren de Aragua y desde las cárceles. Está en incremento, claro, porque seguimos motivando la denuncia. Es que la única manera que nosotros podemos poder capturar a estos delincuentes”, indicó el general Gualdrón.De acuerdo con el general, las cifras relacionadas con este delito van en aumento; sin embargo, no porque haya incrementado el número de casos, sino porque las víctimas han acudido más a las autoridades para denunciar.“Es que la única manera en la que nosotros podemos capturar a estos delincuentes, a través de la misma denuncia para establecer de dónde vienen las amenazas y nuestros investigadores van priorizando. Muy pronto vamos a tener la información y dar a conocer las capturas de una estructura criminal que incluso a uno de ellos se le atribuye más de 50, 60 hechos de extorsión”, precisó.Le puede interesar:
El general Daniel Gualdrón, comandante de la Policía Metropolitana de Bogotá, entregó nuevos detalles sobre el atraco masivo en el restaurante Masa en el norte de la ciudad, ubicada en la calle 81 con la carrera novena en la localidad de Chapinero. Según contó, los ladrones serían parte de una misma banda que ya ha cometido hechos similares por esa zona.“Es una de las hipótesis, el modus operandi y cómo llegan, cómo abordan los establecimientos, cómo huyen, quizás tienen la correlación de los hechos anteriores que se están presentando y es lo que estamos haciendo con la Fiscalía y nuestra pelea judicial, realmente perfilando si es una banda o son unos delincuentes que llegan allí y analizan el sector, actúan y salen. Pero de acuerdo con las caras y modus operandi, creemos que se está estructurando allí una bandita, una banda”, comentó.En diálogo con Mañanas Blu, con Néstor Morales, el general Gualdrón indicó que ya, incluso, hay tres denuncias sobre este robo, el cual ocurrió este martes 6 de febrero sobre las 7:15 de la noche; cuatro hombres llegaron a la panadería, dos entraron armados y los otros se quedaron afuera.“Hay tres denuncias en el mismo momento que llegó allí nuestro secretario de Seguridad, nuestro comandante operativo y nuestra Policía Judicial, con nuestra fiscal y también se destacó un fiscal para que, junto con nuestros investigadores, en líneas de tiempo y estamos ahorita en las 36 horas de recolección de videos, de entrevistas, de actividades de recolección de huellas y demás, poder establecer realmente cuál fue la actividad delincuencial que utilizaron estos bandidos”, añadió.Sobres las hipótesis que manejan, el general Daniel Gualdrón señaló que por ahora están investigando para establecer concretamente cómo llegaron, por dónde salieron y demás. Esto, porque, según dijo, en noviembre del año pasado pasó un hecho similar en el mismo sector en un centro comercial.“(…) Para ver la correlación de estos bandidos o demás, pero las denuncias son importantes. Con la que tenemos y si no tuviéramos denuncia por oficio, aperturamos de acuerdo con lo que tenemos en redes sociales o medios de comunicación o las mismas empresas de seguridad o los negocios que nos aporten los administradores para establecer estas investigaciones”, recalcó.Vea la entrevista completa en Mañanas Blu, con Néstor Morales:
Se trata de una banda conocida como ‘Los Hestias’, conformada por colombianos y venezolanos y que es responsable de amenazar, extorsionar y atentar contra comerciantes en Kennedy y Rafael Uribe Uribe. Los delincuentes son los responsables de varios atentados, entre ellos, las granadas en moteles de Venecia, sur de Bogotá.Los 17 capturados que fueron judicializados, de acuerdo con la investigación, están aliados a la banda liderada por alias ‘Satanás’, cabecilla de la organización que lleva su alias y que fue judicializado en noviembre de 2023, tras ser capturado en Ecuador. Los criminales enviaban panfletos con amenazas para que las autoridades colombianas beneficiaran a ‘Satanás’.“No van a parar las muertes en Bogotá de gente hasta que saquen al patrón Satanás para un patio con todos sus beneficios”, se lee en varios panfletos que los delincuentes hacían llegan a sus víctimas, acompañados con videos en los que se ven granadas y armas de fuego.Entre los procesados están los cabecillas de la banda, entre ellos, Eduardo Pérez, alias ‘Happy’; Gabriel Carvajal, alias ‘Cachorro’; y José Daniel Barrios, alias ‘Orejas’, quienes tiene en su contra otros procesos por delitos como homicidio y tráfico de drogas.“Hay indicios de que, al parecer, hicieron disparos en los locales comerciales y lanzaron granadas donde las personas se negaban a pagar o no cumplían con las exigencias económicas”, indicó la Fiscalía y agregó que hay por lo menos 10 denuncias que señalan a ‘Los Hestias’ de las exigencias ilegales de dinero a comerciantes y trasportadores en Bogotá, durante el último año.La banda, dice la investigación, opera principalmente en sectores como El Amparo y la Puerta 6 de Corabastos en Kennedy, donde, además, hay indicios de su participación en múltiples crímenes y torturas, derivadas del control de territorios y ajustes de cuentas.Varias de las víctimas que habrían sido asesinadas por esta red fueron encontradas abandonadas en carretas y entre bolsas en el sector, de acuerdo con las evidencias recopiladas por la Fiscalía.Le podría interesar:
El aumento del salario mínimo ha generado preocupación en el gremio de la seguridad privada, ya que se prevé que el costo del servicio se incrementará. La Confederación Nacional de Vigilancia Privada (CONFEVIP) advierte que este aumento del 12% podría afectar la estabilidad laboral de más de 400 mil guardias de seguridad en todo el país.Desde CONFEVIP, expresan su inquietud por las posibles consecuencias del aumento decretado por el gobierno nacional. Aunque comprenden que por razones legales o principios de la corte se haya establecido en un 12%, sugieren que les hubiera gustado que el salario mínimo se fijara de acuerdo con el Índice de Precios al Consumidor (IPC). Este incremento, sin duda, encarecerá el costo del servicio de vigilancia, lo cual preocupa al gremio, ya que buscan que este servicio sea accesible para los ciudadanos, las empresas y el negocio inmobiliario.Miguel Ángel Díaz García, presidente de CONFEVIP, destaca la importancia de un salario mínimo que no genere un encarecimiento excesivo del servicio, permitiendo que tanto las empresas como los colombianos se beneficien de la seguridad que brindan los vigilantes.“Expresamos nuestra preocupación sobre las consecuencias que pueda tener el incremento decretado por parte del gobierno Nacional. Como gremio de la seguridad privada, nosotros hubiésemos querido que el salario mínimo se fijara por un valor semejante al del IPC, entendemos que por cuestiones de ley o por principios de la corte se tuvo que aumentar al 12%, lo cual, sin duda, encarece el costo del servicio de la vigilancia. Un costo que debería ser accesible para los colombianos, las empresas y el negocio inmobiliario y así estos se puedan favorecer de este gran servicio que prestan los vigilantes”, explicó.El gremio teme que, debido al aumento, las empresas de seguridad privada opten por reemplazar el talento humano con tecnologías avanzadas como cámaras, alarmas y otros sistemas de seguridad, lo cual afectaría directamente la empleabilidad de más de 450 mil personas, incluyendo a jóvenes y adultos mayores.En cuanto a las tarifas del servicio de seguridad privada, la Superintendencia de Vigilancia Privada confirma que se incrementarán dos veces en 2024. Se establece una tarifa mínima para el servicio en el sector comercial y estratos residenciales, calculada en 9.06 salarios mínimos legales mensuales vigentes, con ajustes adicionales según factores como la presencia de armas o perros.En resumen, el gremio de la seguridad privada busca conciliar el incremento salarial con la accesibilidad del servicio, evitando posibles desplazamientos de personal a favor de tecnologías, y así preservar la estabilidad laboral en el sector.