La percepción de confiabilidad puede influir directamente en la integración social y el desarrollo de las naciones. El Índice de Confiabilidad Global 2024, elaborado por la firma de investigación de mercados Ipsos, arrojó datos reveladores sobre la percepción de confianza en 32 países alrededor del mundo. Este estudio confirmó que, por cuarto año consecutivo, los médicos son los profesionales más confiables, con un 58 % de aprobación global. Les siguen de cerca los científicos 56 % y los profesores 54 %, destacando la valoración positiva hacia sectores relacionados con la salud, la educación y la ciencia.Cuál es la profesión en la que confían más los colombianosEn el caso de Colombia, los resultados mantienen una línea similar a la global, aunque con un ligero incremento en la confianza hacia médicos 60 % y científicos 62 %, unas cifras que resaltan la importancia que los colombianos otorgan a los profesionales que lideran en áreas clave para la sociedad, especialmente tras la experiencia de la pandemia.El top cinco de las profesiones más confiables en el país lo completan los profesores 54 %, el personal de servicios en restaurantes 44 % y los miembros de las fuerzas armadas 43 %.Estos resultados son un recordatorio de cómo la percepción de confiabilidad puede influir directamente en la cohesión social y el desarrollo de las naciones, con un cambio hacia una mayor integridad y un enfoque constante en el servicio a la sociedad.
Un hombre mató a tiros este viernes por "motivos personales" a un clérigo de la sureña ciudad iraní de Kazerun tras el rezo del mediodía, en el último ataque contra un religioso en la República Islámica de Irán, informó la agencia estatal IRNA.La agresión mortal contra el clérigo Mohammad Sabahi se produjo en la principal mezquita de Kazerun, situada en la provincia de Fars, tras el habitual rezo de los viernes, informó el gobernador de la urbe, Mohammad Ali Bekhard, en unas declaraciones recogidas por IRNA.El clérigo, responsable del rezo de los viernes de su ciudad, fue trasladado a un hospital de la zona, donde murió a causa de las heridas sufridas. Tras matar a Sabahi, el atacante se suicidó, indico Bekhard.La fuente señaló que el asesinato se debió a motivos “personales”, según la investigación inicial.A lo largo del año pasado se multiplicaron las agresiones contra clérigos en Irán.Así en abril de 2023, el importante clérigo Abbas Ali Soleimani fue asesinado a tiros en un banco del norte de Irán en la norteña ciudad de Babolsar por un guarda de seguridad que afirmó que confundió a su víctima con el hermano del director de la sucursal bancaria, con quien tenía problemas.El guarda fue ejecutado en diciembre de 2023.En abril de ese año un conductor atropelló a dos clérigos y acuchilló a uno de ellos en la ciudad santa de Qom.Ese mismo mes, otro conductor atropelló "de forma deliberada" a un clérigo en el norte de Teherán, informaron entonces medios oficiales.
Un sacerdote de la Diócesis de Socorro y San Gil se encuentra enfrentando un juicio penal por presuntamente abusar de un joven de 16 años. Los hechos ocurrieron en 2007, en una finca del religioso, ubicada en el municipio de Chitaraque, Boyacá.Blu Radio conoció que el próximo 1 de octubre se realizará la audiencia para el inicio del juicio contra el sacerdote Jaime Vargas Ruiz. El procedimiento judicial se llevará a cabo a las 9:00 de la mañana en un juzgado de Moniquirá, Boyacá, donde fue radicada la denuncia por la víctima que hoy tiene 33 años.La víctima rompió su silencio y en el año 2020 interpuso la denuncia en la Fiscalía y ante monseñor Luis Augusto Campos Flórez, obispo de la Diócesis de Socorro y San Gil.El pasado 8 de agosto de 2024, tras 4 años de investigación, el Tribunal Eclesiástico Metropolitano de Bogotá le notificó a la víctima que había terminado el proceso contra el sacerdote Vargas Ruiz, y como decisión fue expulsado de la iglesia católica.“Se establece como pena la expulsión del estado clerical del sacerdote Jaime Vargas Ruiz al haber sido encontrado culpable de delictum contra sextum cum minore", (no cometerás adulterio con un menor), según el derecho canónico.En el fallo eclesiástico se ordena a la Diócesis de Socorro y San Gil pedir perdón por lo sucedido a la víctima del abuso sexual al que fue sometido por el sacerdote Jaime Vargas hace 17 años."Ofrece acogida, escucha y acompañamiento, así como la disponibilidad para atender los requerimientos necesarios para adelantar un proceso de sanación espiritual y/o psicológica”, señala el documento en poder de Blu Radio.Al conocer la decisión del Tribunal Eclesiástico, la víctima solicitó que se remitiera copia íntegra del expediente al juzgado de Moniquirá que lleva el juicio penal en la justicia ordinaria contra el sacerdote por el delito de acto sexual violento.En el proceso hay testimonios de la víctima, sus padres y otro sacerdote. También está el concepto de una psicóloga, un informe de psicología forense y una evaluación psicológica forense.Igualmente, la declaración del actual obispo de Socorro y San Gil, monseñor Luis Augusto Campos Flórez, quien fue él que recibió la denuncia de la víctima en 2020 y procedió a iniciar la investigación eclesiástica.Se investiga a fondo el caso y no descartan la posibilidad de que haya más víctimas de abuso sexual por parte del sacerdote Jaime Vargas.Blu Radio también conoció que el sacerdote Jaime Vargas Ruiz presentó el recurso para revocar la decisión del Tribunal Eclesiástico Metropolitano de Bogotá que lo expulsó, por lo que será el Ministerio de la Fe del Vaticano el que defina la solicitud.
El sacerdote católico húngaro Gergö Bese, cercano al primer ministro, Viktor Orbán, y conocido por su postura crítica hacia la "propaganda LGTBI+", ha sido suspendido por la Iglesia católica tras revelarse su participación en orgías homosexuales, según informó el portal Népszava.La Diócesis de Kalocsa-Kecskemét suspendió al párroco Bese por órdenes del Vaticano, que abrió una investigación sobre "serias acusaciones" en su contra, reporta el medio húngaro 444.hu.Según la diócesis, la decisión impuesta es "la más severa" que se aplica en Hungría.Bese ha bautizado, entre otros, la sede de Orbán, el antiguo Monasterio de la orden de Carmelitas y las redacciones de medios afines al Gobierno húngaro, como Megafon y Pesti Srácok.En anteriores declaraciones a los medios húngaros, el cura había advertido de los "peligros de la propaganda LGTBI+", apoyada por empresas como los gigantes Google, Apple o Microsoft.El sacerdote defendía, según recoge 444.hu, que la familia tradicional "está bajo ataque" por parte de grupos liberales que promueven lo que él considera una "desviación (de la normalidad)".Tras su suspensión el viernes, Bese eliminó sus perfiles en redes sociales y reconoció haber cometido "un error", al asegurar que ha "pecado contra la Iglesia" y su comunidad.De acuerdo con los medios locales que han tenido acceso a los vídeos, el cura no solo participó en las orgías, sino que también las grabó y subió las grabaciones a plataformas de pornografía gay."Pido perdón a todos los que he ofendido y decepcionado", declaró Bese en un comunicado.El portal 444.hu califica al sacerdote como "el más ardiente partidario del Gobierno de Orbán", que apoyaba abiertamente el cristianismo político.Fuentes gubernamentales, según informa el medio Népszava, han sugerido que el antiguo párroco de Dunavecce abandone el país durante un tiempo.El caso de Bese ha sido comparado en la prensa local con el de József Szájer, el exeurodiputado del Fidesz de Orbán, que participó a finales de 2020 en una orgía homosexual en Bruselas, violando las restricciones por la Covid.El eurodiputado, uno de los redactores de la Constitución húngara de 2011, que limitó los derechos de la comunidad LGTBI en el país y que definió el cristianismo como una base de la nación, dimitió tras el escándalo y se retiró de la política.Desde que llegó al poder en 2010, el Gobierno de Orbán ha promovido leyes que socavan los derechos de la comunidad LGTBI, prohibiendo el registro legal del cambio de sexo y dificultando la adopción para parejas del mismo sexo.En 2021, el Parlamento aprobó una ley que vincula la homosexualidad con la pedofilia y prohíbe hablar sobre la homosexualidad o cambio de sexo a menores de edad, ya sea en las escuelas o en los medios dedicados a este público.
El pasado martes 4 de junio, alrededor de las 12:00 del mediodía, la población de Ocaña, Norte de Santander, quedó consternada por la noticia del asesinato del sacerdote Ramón Montejo, de 45 años de edad, a manos de dos hombres armados. Estos lo interceptaron cuando se disponía a sacar su camioneta para dirigirse al corregimiento de Buenavista, donde había prestado sus servicios durante 10 años.Según lo reportado hasta el momento, los hombres atacaron al presbítero por la espalda, causándole varias heridas. Durante el forcejeo, aparentemente, el sacerdote cayó al suelo y los delincuentes tomaron posesión de la camioneta para huir.Un video revelado por Noticias Caracol evidenció que el atraco ocurrió en un parqueadero ubicado en el barrio Jesús Cautivo de Ocaña. Allí se refleja que en medio del robo se escucharon varios gritos, pues los transeúntes que pasaban por el lugar se acercaron al portón del parqueadero, pero no se atrevieron a abrirlo.Minutos después, un hombre, al parecer uno de los cómplices del robo, abrió la puerta desde el interior del establecimiento y permitió la huida a los ladrones, quienes no mostraron preocupación por el sacerdote caído en el suelo y pasaron por encima de él con la camioneta.De inmediato, la Policía Nacional activó un plan candado para dar captura de los responsables del asesinato y logró identificar a uno de los presuntos responsables, quien ahora se encuentra en poder de las autoridades.¿Quién era el sacerdote Ramón Montejo?El sacerdote Ramón Montejo se destacó durante su vida espiritual por la entrega y devoción a la iglesia, según lo dice un escrito que emitió por estos hechos la Diócesis de Ocaña. Además participó en varias gestiones humanitarias para traer de vuelta a la libertad a ciudadanos que se encontraban secuestrados en la zona del Catatumbo.Vea el video aquí:
Un exvicario parroquial en una zona de los Alpes suizos se ha declarado en huelga de hambre desde el pasado 3 de mayo para reclamar que se le restituya en el puesto tras ser declarado inocente en un caso de presuntos abusos sexuales, informó la agencia de noticias suiza ATS.El sacerdote, Gilles Roduit, quiere volver a un cargo cuya designación depende tanto de la abadía de San Mauricio, una de las más importantes del país, como de la cercana diócesis de Sion, pero la segunda de estas instituciones aún no ha autorizado su regreso."Simplemente pido justicia, nunca pensé que llegaría a estos extremos pero la situación se ha vuelto insoportable", indicó el sacerdote en declaraciones a una radio local.Tanto la diócesis como la abadía solicitaron a Roduit que dejara el cargo durante las investigaciones, parte de las que se han lanzado en todo el país en busca de posibles abusos sexuales cometidos por eclesiásticos durante las últimas décadas.Las acusaciones contra Roduit al parecer procedían de una antigua parroquiana que alegaba haber sufrido tocamientos cuando tenía 12 años, aunque los tribunales, y finalmente la propia Santa Sede, decidieron que el caso no tenía bases suficientes para llevarse a juicio."Mi huelga de hambre durará hasta que se haga justicia, es decir, que o bien sean restablecidas mus funciones o que por el contrario se aporten dudas serias que merezcan la apertura de un proceso", afirmó el sacerdote.La diócesis de Sion se muestra reticente a la restauración de Roduit en su antiguo puesto ya que, en opinión de su portavoz Pierre-Yves Maillard, esa decisión no puede basarse únicamente en sentencias judiciales sino también en "consideraciones eclesiales y pastorales".La abadía de San Mauricio se fundó en el siglo V y es una de las más antiguas de Europa occidental con actividad interrumpida hasta la actualidad.El pasado año, el abad de la institución, Jean Scarcella, dejó temporalmente su cargo tras ser encausado en investigaciones por presuntos abusos sexuales y ocultamiento de éstos en la Iglesia Católica suiza, siendo sustituido por un administrador apostólico nombrado directamente por el Vaticano.Informes dados a conocer el pasado año documentaron al menos más de un millar de casos de abusos sexuales en la Iglesia católica suiza, en su mayoría a menores, desde mediados del siglo XX.
El padre Chucho, reconocido sacerdote estuvo presente en 'The Suso's Show', donde reveló haber enfrentado una situación que muchos han experimentado en algún momento de su vida.Cuando el padre estaba terminando uno de sus estudios de filosofía se enamoró, lo que lo llevó a sentir la necesidad de ser sincero consigo mismo y reunir coraje para tomar una decisión de gran importancia."Fui con la verdad al rector y le dije al rector, creo que tengo que salir, voy a salir un tiempo, porque siento que estoy o me he enamorado", mencionó el padre Chucho.Él ya tenía listas sus maletas para salir del seminario e ir en busca del amor. En ese momento el rector lo felicitó por su honestidad y valentía, adicionalmente le dijo que era una señal más de que iba a ser un buen sacerdote y que tenía una crisis por enamoramiento apasionado.Sin embargo, un compañero de él estaba pasando por la misma situación de enamoramiento y le recomendó que fuera honesto e incluso sincero con el rector para que después no salieran con chismes "Cuando el salió de hablar con el rector, nunca más me volvió a hablar porque ese día lo echaron del seminario", mencionó el padre Chucho sobre su compañero. ¿Quién es el padre Chucho?El padre Chucho es un sacerdote colombiano que ha ganado gran popularidad por su carisma, su labor social y su presencia en los medios de comunicación. Ha sido elogiado por su trabajo con los más necesitados, pero también ha sido criticado por algunas de sus opiniones y acciones.Ha participado en diferentes programas de televisión y radio, además tiene un canal de YouTube con más de un millón de suscriptores y es muy activo en sus redes sociales.¿Por qué se dio a conocer el padre Chucho?En 2003, comenzó a participar en el programa "El Minuto de Dios" del padre Rafael García Herreros.Su carisma y sencillez lo convirtieron en uno de los sacerdotes más queridos por los colombianos.Ha participado en otros programas de televisión y radio, ha escrito varios libros.
Dos de las víctimas del jesuita esloveno Marko Rupnik, conocido por ser el autor de mosaicos en las iglesias de todo el mundo, contaron este miércoles públicamente por primera vez los abusos sexuales y psicológicos a las que fueron sometidas y pidieron "transparencia" en el proceso canónico que se reabrió contra él en el Vaticano.Por primera vez, dos de las exreligiosas de la comunidad de Loyola en Liubliana que sufrieron los abusos por parte de Rupnik, que era el guía espiritual del centro, salieron a la luz y explicaron en rueda de prensa que estiman que otras 20 religiosas de esta institución fueron abusadas por el jesuita y que entorno al caso se construyó "un muro de silencio" que esperan que ahora se pueda romper.Durante más de una hora, Gloria Branciani, nacida en Roma en 1964, relató con todo detalle y profundamente emocionada que cuando era estudiante de Medicina fue completamente manipulada por Rupnik que consiguió hacer con ella lo que quiso "para que creciese su espiritualidad".La mujer contó los abusos sexuales cometidos en el estudio de mosaicos donde trabajaba en Roma, en el carro donde la llevaba por Eslovenia "para que conociese la cultura" o incluso la obligó a relaciones entre tres personas, junto con otra religiosa también captada por el jesuita diciéndole que era "la máxima representación de la Santísima Trinidad".Brancini describe una situación de total "abuso de conciencia" y que llegó un momento que solo deseaba morirse, pero que consiguió salir de la comunidad.La exreligiosa intentó denunciar todo a su superiora, pero ésta le aconsejó que callase, al igual que con el padre espiritual de Rupnik que incluso le dijo que debía abandonar la comunidad y denunció que en todo este tiempo nadie le ha creído.Con el tiempo, otra de las religiosas Mirjan Kovac recibió los testimonios de otras de sus compañeras de los abusos durante años de Rupnik y decidió también reaccionar ante los abusos de poder y psicológicos que también sufrió.Ambas mujeres han sido llamadas a testificar a la Congregación para la Doctrina de la Fe, responsable de los procesos canónicos en materia de abuso sexual de menores o de adultos vulnerables, después de que el papa Francisco decidiera reabrir el caso en octubre de 2023 después de que este se hubiese cerrado en un primer momento sin apenas consecuencias lo que había costado al Vaticano duras críticas por la gestión de este asunto.Las dos mujeres se presentaron hoy junto a la abogada que les representará en este caso, Laura Sgro, conocida por varios juicios en el Tribunal Vaticano, y que hoy adelantó que "se están evaluando" nuevos pasos judiciales aunque no quiso especificar cuáles ni dónde."Hasta ahora la gestión de este caso no ha sido clara y por eso nos hemos expuesto para estimular una mayor transparencia", explicó Gloria Brancini.Por el momento, se sabe que una diócesis de Eslovenia confirmó que había acogido a Rupnik, después de que fuese expulsado de la Compañía de Jesús, a la que perteneció, por "su obstinada negativa a observar el voto de obediencia".Cuando estalló el caso, los jesuitas admitieron que Rupnik había sido sancionado con algunas restricciones como la prohibición del ejercicio del sacramento de la confesión, de la dirección espiritual y del acompañamiento de los ejercicios espirituales después de una investigación por abusos sexuales y psicológicos a religiosas en los años 90.También se explicó que, según la cronología que publicó en su página la Compañía de Jesús, que la Congregación para la Doctrina de la Fe emitió en mayo de 2020 un decreto que castigaba al jesuita con la excomunión por el delito de "absolución de un cómplice de un pecado contra el sexto mandamiento", pero poco después, con un acto extraordinario, se levantó la excomunión.Se desconoce por qué motivo se levantó la excomunión al artista. Según algunos medios, el papa es la única autoridad que puede hacerlo, mientras que otros apuntan a que la sentencia pudo haber sido impugnada por el padre Rupnik y cambiada después por otro tipo de sanciones.Con la posible apertura de un nuevo proceso, esta vez por los abusos sexuales, el sacerdote puede ser condenado a la expulsión del sacerdocio.Le puede interesar:
Un sacerdote católico polaco que organizó una orgía y negó el auxilio al prostituto que había contratado y que enfermó tras haber ingerido drogas fue acusado hoy por la fiscalía de delitos que suman ocho años de cárcel.Tomasz Z., cuyo nombre se oculta por razones legales, se enfrentará a un juicio por "crímenes contra la libertad sexual y la decencia", "denegación de auxilio" y por "proporcionar drogas" a una persona cuyos servicios sexuales fueron contratados para celebrar una orgía en la casa parroquial de Dąbrowa Górnicza (sur) en agosto del año pasado.El sacerdote, que poco después de los hechos decidió instalarse unas semanas en Turquía para eludir la atención pública, deberá permanecer durante al menos los dos próximos meses en arresto, a la espera de que comience el juicio.Los hechos se remontan a finales de agosto, cuando el padre Tomasz, párroco del santuario de la Virgen de los Ángeles de Dąbrowa Górnicza, organizó una fiesta en la residencia parroquial en la que participaron varios sacerdotes y un prostituto.Según fuentes policiales, los asistentes ingirieron drogas de varios tipos y el hombre que estaba contratado para prestar servicios sexuales perdió el conocimiento, tras lo cual una ambulancia acudió al domicilio, pero una vez allí, los curas impidieron a los enfermeros entrar y pidieron sacar ellos mismos al enfermo.Finalmente, la policía se personó en el lugar de los hechos, se pudo dar asistencia médica al hombre que estaba inconsciente y el incidente recibió un amplio eco en los medios, lo que finalmente provocó el relevo del obispo de la diócesis de Sosnowiec (sur), Grzegorz Kaszak.La investigación llevada a cabo por la fiscalía trata aún de esclarecer si el hombre que perdió el conocimiento por la ingestión de drogas, y que en el proceso tiene la consideración de víctima, era o no un trabajador sexual y cobró por asistir a la fiesta o lo hizo gratis.En declaraciones posteriores a los hechos, Tomasz Z. remitió una carta a los medios de comunicación en la que declaró que "si algo similar le hubiera sucedido a una persona cualquiera, que tuviera una profesión diferente, y no a un clérigo, no habría habido ningún problema".Le puede interesar:
El sacerdote nicaragüense Fernando Calero fue detenido por la Policía, con lo que suman tres los curas encarcelados en las últimas 24 horas, denunció este viernes la abogada e investigadora nicaragüense exiliada Martha Patricia Molina."Policía sandinista secuestra al sacerdote Fernando Calero, párroco de Nuestra Señora de Fátima (en el municipio de) Rancho Grande, (departamento de Matagalpa). Se desconoce su paradero", señaló Molina, autora del estudio titulado 'Nicaragua: ¿Una Iglesia perseguida?', a través de su cuenta de la red social X (antes Twitter).Según la investigadora, Calero fue "secuestrado por la Policía Nacional en su parroquia" tras haber mencionado al obispo encarcelado Rolando Álvarez, quien preside la Diócesis de Matagalpa, en una misa."No existe una acusación formal en contra de él y no se tiene información de su paradero", explicó.Calero se suma a los sacerdotes Carlos Avilés y Héctor Treminio, vicario general y tesorero de la Arquidiócesis de Managua, respectivamente, que fueron detenidos el jueves por la Policía y civiles.La semana pasada, las autoridades detuvieron al obispo Isidoro Mora, a dos sacerdotes y a dos seminaristas.Ni el Gobierno ni la Policía Nacional han confirmado o negado la presunta detención de los religiosos.El cardenal nicaragüense y arzobispo de Managua, Leopoldo Brenes, aún no se pronuncia sobre esos arrestos.Quien sí lo hizo fue el exiliado obispo auxiliar de Managua, Silvio Báez, a quien el papa Francisco ordenó dejar Nicaragua en 2019 por motivos de seguridad, quien se declaró indignado por los encarcelamientos de tres sacerdotes de la Arquidiócesis de Managua.Dos obispos, cinco sacerdotes y dos seminaristas presosEn el caso de Mora, obispo de la Diócesis de Siuna, en el Caribe de Nicaragua, fue arrestado un día después de mencionar en una homilía al obispo Rolando Álvarez, condenado en febrero pasado a más de 26 años de prisión por delitos considerados traición a la patria tras negarse a abandonar su país.Mora es el segundo obispo detenido en Nicaragua. El primero fue Álvarez, quien el 10 de febrero pasado fue condenado a 26 años y 4 meses de prisión, despojado de su nacionalidad, y suspendidos sus derechos ciudadanos de por vida por delitos considerados traición a la patria.Esa condena fue dictada un día después de que Álvarez rechazó subirse a un avión que lo iba a llevar, junto con otros 222 excarcelados políticos nicaragüenses, hacia Estados Unidos, lo que provocó la indignación del presidente Ortega, quien en una cadena nacional lo calificó de "soberbio", "desquiciado" y "energúmeno".Las relaciones del Gobierno de Daniel Ortega y la Iglesia católica viven momentos de gran tensión, marcadas por la expulsión y encarcelamiento de sacerdotes, la prohibición de actividades religiosas y la suspensión de sus relaciones diplomáticas.El Gobierno de Nicaragua excarceló en octubre pasado a 12 sacerdotes y los envió al Vaticano, aunque entre esos religiosos no se encontraba el obispo Álvarez.Nicaragua atraviesa una crisis desde abril de 2018, que se ha acentuado tras las elecciones de noviembre de 2021, en las que Ortega fue reelegido para un quinto mandato, cuarto consecutivo y segundo junto a su esposa, Rosario Murillo, como vicepresidenta, con sus principales contendientes en prisión. Le puede interesar: