Durante diciembre es común que las personas visiten ríos y quebradas para pasar un tiempo de calidad con amigos y familia. Sin embargo, muchas veces estos momentos se convierten en tragedias debido a las corrientes súbitas o remolinos que, en un abrir y cerrar de ojos, arrastran todo a su paso.Blu Radio consultó con el Departamento Administrativo de Gestión del Riesgo de Antioquia, DAGRAN, para conocer el panorama de personas que han muerto ahogadas por inmersión en estos afluentes, donde reportaron que van 41 casos. De estos, 4 han sucedido en Guatapé, 2 en El Peñol, 1 en La Ceja, 1 en San Carlos, 1 en San Rafael, 1 en Chigorodó, 1 en Puerto Triunfo, 1 en Nechí, 1 en El Bagre, 2 en Mutatá, 1 en Cocorná, 2 en Dabeiba, 2 en Rionegro, 1 en Campamento, 2 en Valdivia y 18 en San Luis."El embalse, si bien se le puede ver tranquilo, tiene zonas que son muy pantanosas, tiene zonas que tienen otros climas muy diferentes, porque usted sobre la superficie puede tener calor, pero en otro punto puede tener frío. Eso es lo que hace que se vuelva un embalse peligroso, y no es para nadar; es un embalse para navegar, para que conozcan el destino, y que siempre tengan esa precaución de que el embalse no es para nadar", dijo recientemente a Blu Radio el alcalde de Guatapé, David Vallejo.Entre los casos más recientes se encuentra el de Andrés Mestra, un joven de 28 años, oriundo del municipio de Turbo, que perdió la vida en la quebrada La Tebaida, en jurisdicción de San Luis. Al caso de Andrés se le suma el de Fabio Giraldo, un joven que se encontraba de paseo con su familia en el río Cocorná, en un lugar conocido como María Parda, cuando fue arrastrado por una corriente que le causó la muerte.Para evitar este tipo de accidentes durante esta recta final de diciembre, se recomienda estar atentos a las alertas de las autoridades y comunidades locales sobre corrientes súbitas en el departamento, evitar las partes profundas, con remolinos o muchas rocas, esperar al menos tres horas de reposo para entrar al río después de consumir alimentos, supervisar a los menores, no dejarlos solos en ningún momento, respetar las señales, carteles o advertencias ubicados en algunos afluentes, y no hacer malabares o clavados peligrosos en zonas no permitidas o poco conocidas.Si ya la corriente lo atrapó, algunos expertos recomiendan no luchar contra ella, mantener la calma y la respiración, nadar suavemente manteniendo la orientación hacia un punto de referencia visible o hacia algún objeto del cual pueda agarrarse. Si no logra escapar, manténgase a flote pataleando, grite y agite los brazos en busca de auxilio.
Este jueves inició oficialmente la operación de la patrulla fluvial de la Policía en el río Cauca, con el fin de vigilar y garantizar la permanencia de las autoridades en esta importante zona que divide a Cali del sector de Juanchito. Esta embarcación fue denominada como La Sultana.Esta es una lancha con la capacidad de movilizar hasta 12 personas, no solo realizará recorridos en el río por su paso por capital del Valle, sino que beneficiará a todo el área Metropolitana, comprendida también por los municipios de Jamundí, Candelaria, Yumbo y Vijes.Esto nos va a permitir mantener controlado este perímetro de la ciudad, que por aquí en las noches se ha vuelto una especie de autopista del delito y así podemos controlar que no entren armas, drogas, explosivos a la ciudad, y también podemos prevenir que saquen personas reclutadas para los grupos armados ilegales", aseguró el alcalde Alejandro Eder.Esta patrulla también busca proteger al río Cauca de posibles daños ambientales, un propósito al que se sumó la gobernadora Dilian Francisca Toro, quien anunció que se encuentra negociando con la banca internacional la posibilidad de cambiar deuda con acciones para la recuperación del afluente."Estamos hablando con la CAF y el BID precisamente para canjear deuda y poder tener los recursos para mejorar y proteger nuestro río Cauca, no hemos cuantificado cuanto necesitamos. Y estamos pensando hacer ahora, el malecón de Juanchito, enfocado en el cuidado del río, disminución de la erosión y poder lograr la recuperación de la navegabilidad de nuestro río", dijo la mandataria.En medio de la presentación de esta lancha, la gobernadora del Valle del Cauca anunció la compra de otra embarcación con las mismas características, para patrullar el río Cauca en el resto del departamento.
Hace tres años, el 27 de agosto de 2021, se rompió el jarillón que protegía a más de 200 mil personas de la subregión de La Mojana de las inclementes aguas del río Cauca. El líquido empezó desde entonces a correr a través de un boquete que alcanzó un kilómetro de abertura, por el que entró la desidia a ahogar la despensa agrícola del Caribe. Los cultivos de arroz se encharcaron y el ganado tuvo que ser llevado a tierras secas y lejanas, mientras en el éxodo morían miles que no soportaban el agitado camino. Pero en febrero de este año, el camino empezó a secarse y los campesinos corrieron a hacer créditos para volver a cultivar, pues se había logrado el cierre de aquel boquete de 'Caregato'. Algunos hasta celebraron que había vuelto la prosperidad a la región. Pero tres meses después, la desesperación volvió, de la mano de una fuerte corriente del río Cauca para la que no hubo contención y que arrasó las toneladas de arena que habían puesto en sacos. Ahora los campesinos, como Pedro Ramos, dicen que este 27 de agosto solo les queda una cosa por hacer: cantarle el cumpleaños al boquete. "Vamos a ir en la tarde a 'Caregato'. Vamos a tomarle una foto a llevarle un pudín, unas velas y a cantar por la angustia que hace tres años vivimos aquí porque de todos modos es bastante duro", señaló Ramos. Lo de La Mojana no es un canto por la vida sino por la pobreza, un reclamo para que algún día cierren este jarillón roto.
Los alcaldes de los municipios del sur oriente del Valle firmaron un acuerdo para iniciar proyectos conjuntos que permitan reactivar el turismo sobre el río Cauca. Una de las acciones más destacadas es el fortalecimiento turístico del entorno de la tradicional zona de Juanchito.Lo que se busca por parte de los alcaldes es convertir a Juanchito en un zona multipropósito, que logre aprovechar al máximo los parajes del río y atraer un mayor número de visitantes. Es por eso, que la viceministra para las políticas de Defensa y Seguridad, Daniela Gómez, confirmó que ya se iniciaron las labores de vigilancia y control de la Policía para brindar seguridad sobre el río Cauca."Desde el Ministerio de Defensa nos comprometimos con acompañar de manera decidida con las garantías de seguridad para que estos municipios se puedan proyectar y recibir muchos turistas nacionales, por eso ya hemos desplegado las primeras embarcaciones que están vigilando el río Cauca y las comunidades ribereñas", indicó la viceministra.Para la alcaldesa de Candelaria, Gessica Vallejo, la unión de los municipios representa un paso significativo hacia el desarrollo sostenible de la región, pues se coordinan acciones para potenciar el turismo y enfrentar de manera más efectiva los desafíos de seguridad."Esta alianza intermunicipal permite trabajar de manera coordinada, y así los municipios podrán optimizar recursos, aprovechar sus fortalezas y enfrentar de manera acertada las problemáticas que nos han impedido proyectar el turismo en esta bella zona", puntualizó la mandataria de Candelaria.La vigilancia sobre el río Cauca también hace parte de la estrategia de las autoridades para garantizar la seguridad regional de cara a la COP16.
Con el propósito de seguir blindando a Cali para evitar hechos terroristas y acciones de los grupos armados en la ciudad, el alcalde Alejandro Eder anunció que en este segundo semestre del 2024, se realizarán patrullajes fluviales a lo largo del río Cauca.Estos recorridos serán adelantados por la Policía, desde los corregimientos de El hormiguero y Navarro, y seguirán por el cauce que colinda con las comunas 21, 15, 7 y 6, que es la zona aledaña a este afluente."Nunca se ha protegido el río Cauca. Todas las drogas o buena parte de ellas y las armas, entran a Cali por el río. Los niños que reclutan para los grupos armados del sur del país se los llevan por ahí. El río se vuelve entonces una autopista de criminalidad, por eso tenemos como objetivo, por primera vez, tener patrullajes sobre el río Cauca", aseguró el alcalde Eder.Mientras tanto, desde el Concejo de Cali señalan que esta estrategia debe comenzar a operar en el menor tiempo posible pues es una problemática que desde años atrás se había diagnosticado."Los grupos terroristas se evitan los puestos de control terrestres y se ahorran costos de transporte en el río, por lo que los patrullajes fluviales son una medida que necesitamos desde hace tiempo", dijo el concejal Juan Felipe Murgueitio.Por su parte, el concejal Roberto Ortiz señaló que estas patrullas fluviales deben complementarse con el apoyo en tierra, para que la capacidad de reacción sea adecuada: "Se deben complementar con los patrullajes terrestres, sobre todo en la comuna 21 y el sector de Alfonso López, que haya grupos que trabajen día y noche, porque de nada se logra que en el río estén las lanchas, sin en tierra no se tiene lo mismo", indicó.Junto a los Farallones de Cali y los principales accesos a la ciudad, el río Cauca se suma a las zonas priorizadas por las autoridades, para frenar las economías ilícitas que ponen en riesgo la integridad de los caleños.
El Tribunal Administrativo de Antioquia ordenó a los organismos de gestión del riesgo establecer un plan de acción para proteger a comunidades rurales en el municipio de Caucasia por la erosión del río Cauca. El pronunciamiento de la autoridad judicial se produce tras una acción popular de la Defensoría del Pueblo.Una reciente decisión del Tribunal Administrativo de Antioquia decidió amparar los derechos colectivos de cerca de tres mil pobladores de la vereda La Uribe y sus inmediaciones en el municipio de Caucasia, quienes por años han estado en grave peligro por la erosión e inundaciones generadas por el río Cauca.El pronunciamiento ordena tanto al Departamento de Gestión del Riesgo de Desastres de Antioquia como a la Unidad Nacional de Gestión del Riesgo de Desastres, estructurar un plan de contingencia y un cronograma de actividades para evitar que estas situaciones sigan ocurriendo, así como ejecutar acciones de prevención.El defensor del Pueblo, Carlos Camargo, visitó la zona y afirmó que desde la entidad han sido testigos del deterioro en el territorio por cuenta de las problemáticas que ha traído consigo aquello que está por solucionarse con el segundo río más grande del país.“Hemos acompañado a la población a través de nuestro equipo en terreno que ha sido testigo de la gravedad de la erosión, la cual no sólo borró del mapa a la vía que conduce a la vereda, Puerto España sino que avanza progresivamente hacia la llanura aluvial donde recibe un número importante de familias”, afirmó.Desde la Defensoría también invitaron a la nueva administración municipal de Caucasia para que articulada con las entidades de gestión del riesgo, en su plan de desarrollo incluyan esta obras, y den lo más pronto posible cumplimiento a la orden judicial.
Un paseo familiar en Jamundí, Valle del Cauca, terminó en tragedia, con la muerte de una menor de 15 años y su papá, quienes resultaron ahogados en el río Cauca. Los hechos se registraron en inmediaciones del puente de La Balsa, en el corregimiento de Robles, cuando la familia Ospina llegó hasta el lugar para disfrutar del tradicional paseo de domingo.La angustia se apoderó de todos, cuando la jovencita de 15 años comenzó a ahogarse y su padre trató de rescatarla, sin embargo, la fuerza de la corriente terminó arrastrándolos a los dos, provocando su fallecimiento. "Al parecer, la muchacha sufrió un calambre y empezó a pedir ayuda y el papá se tiró, pero no tenía los conocimientos y se ahogaron los dos", indicó el comandante del cuerpo de Bomberos del corregimiento de Robles, el capitán Élier Viáfara.Para atender la emergencia también fue necesaria la presencia de los bomberos de Buenos Aires, Cauca, logrando la recuperación del cuerpo de la menor, mientras que continúan en la búsqueda del cuerpo de su padre.Le puede interesar:
Tres navidades completa La Mojana sumergida entre las aguas del río Cauca por cuenta del rompimiento del boquete en el sector de ‘Caregato’ en agosto 2021 lo que ha obligado, nuevamente, a que las comunidades exijan cambios en la dirección de la Unidad Nacional de Gestión del Riesgo, UNGRD, por falta de atención "oportuna" y "diligente" a la tragedia invernal que padecen.Arnulfo Betancourt, presidente del colectivo ‘Pacto Social Por La Mojana’, advirtió que no están de acuerdo con el direccionamiento que Olmedo López le ha dado a la UNGRD, a lo que se suma que muchos de los recursos destinados a la emergencia “han estado mal invertidos”.Todo ello, derivado de los presuntos incumplimientos para ejecutar el cierre de boquete de 'Caregato', en lo que tiene que ver con el envío de maquinaria amarilla para agilizar las obras que se requieren en la zona."Yo pienso que es una persona que la deben de cambiar porque no ha ejercido las funciones tal como lo dispone el mandato y como, en muchas ocasiones, lo ha pedido el presidente de la República. Hay veces que estos funcionarios desvirtúan las buenas intenciones que puede tener, inclusive, el mismo Gobierno Nacional".Ahora bien, la expectativa se centra en la posible llegada de la maquinaria amarilla que, para finales de la próxima semana, debería estar arrancando los trabajos para cerrar los 200 metros de boquete que aún hacen falta para contener las aguas del río Cauca.Según el censo de damnificados entregado por la misma UNDGR, más de 37.000 familias en siete municipios de los departamentos de Sucre, Bolívar y Córdoba se encuentran padeciendo por las graves inundaciones.Le podría interesar:
Un ultimátum al Gobierno nacional enviaron las comunidades que componen el colectivo ‘Pacto Social por La Mojana’ para que, a partir de la próxima semana, arranquen los trabajos de cierre del boquete de ‘Caregato’, luego de conocerse que desde este fin de semana llegará la maquinaria amarilla que prometió la UNDGR para poner fin a la crisis invernal que atraviesa la subregión por la filtración en la zona de las aguas del río Cauca.Con la firma de los contratos para el inicio de dichos trabajos, las comunidades esperan que a la zona lleguen alrededor de 20 vehículos entre retroexcavadoras, volquetas, cargadores, dos dragas y los insumos para la construcción de espolones que, como principal función, evitarán el ingreso de las aguas mientras culmina el proceso de intervención. Arnulfo Betancourt, habitante de la subregión y presidente del colectivo ‘Pacto Social por La Mojana’, expresó que "la suspensión del ingreso de agua es lo primero que harán, según lo acordado por los contratistas, en el marco del cierre de los 200 metros de boquete que son fáciles de tapar, debido al buen tiempo que tenemos y al descenso en el nivel del agua de los ríos Cauca y Nechí".Betancourt, además, confirmó que, si se dan nuevos incumplimientos por parte del Gobierno Nacional, tres vías nacionales que comunican a la costa Atlántica con el interior del país serán bloqueadas en medio de lo que han denominado como “la hora cero”."Hay poca fe y poca credibilidad en el Gobierno Nacional, pues hasta no ver la maquinaria, no creer. La gente dice que hasta que no vean a la maquinaria trabajando para agilizar las obras en el boquete de 'Caregato', no desistirán de la idea de salir a la protesta social". Como se recordará, aunque hasta hace unos meses tan solo faltaban 30 metros de boquete para sellar el chorro en ‘Caregato’, el aumento en los niveles del río Cauca por las fuertes precipitaciones de las últimas semanas produjo la apertura de otros 170 metros. Vea también
Entre los municipios de Caucasia y Cáceres, en el Bajo Cauca de Antioquia, autoridades destruyeron tres minas ilícitas en una operación conjunta en la que se ubicaron e intervinieron estas tres unidades de producción ilícitas a orillas del Río Cauca.Las minas estaban dotadas con siete dragas, tres motores industriales y diez motobombas con las que extraían más de 1000 gramos de oro al mes, dejando rentas de hasta 280 millones de pesos mensuales.Las rentas ilícitas eran usadas por los grupos armados que delinquen en la región para adquirir material de guerra con el que atentan contra la población civil y la fuerza pública.De igual forma, la destrucción de estas minas logra detener el daño ambiental en un área aproximada de cuatro hectáreas, la cual tardará cerca de 40 años en recuperarse por completo.Escuche el podcast Emprender, fallar y triunfar:
