La tarde de este domingo 8 de diciembre Barrancabermeja vivió un lamentable hecho de intolerancia que terminó en tragedia. En el barrio Versalles, ubicado en la Comuna 5, una discusión entre vecinos se convirtió en una violenta riña que resultó en la muerte de un hombre y la captura de su agresor.La víctima, identificada como Gonzalo Muñoz, de 23 años, perdió la vida luego de recibir dos puñaladas en el pecho a manos de su vecino, un hombre en condición de discapacidad que se moviliza en silla de ruedas. El fatal altercado ocurrió en las celebraciones decembrinas.Ante la gravedad de las heridas, los bomberos voluntarios trasladaron de inmediato a Muñoz al Hospital Regional del Magdalena Medio. Lamentablemente, a pesar de los esfuerzos médicos, la víctima murió minutos después de su ingreso.El agresor fue rápidamente capturado por las autoridades y puesto a disposición de la Fiscalía. Actualmente, permanece detenido por el delito de homicidio mientras avanza la investigación sobre los motivos y las circunstancias del ataque. Según algunos testigos, la discusión entre ambos hombres se habría originado por diferencias personales que escalaron hasta llegar a la violencia extrema."Se realiza la captura de un ciudadano de 49 años, el cual, lesionó con arma blanca a Gonzalo Muñoz, de 23 años, esta persona, Gonzalo, fue trasladado a un centro asistencial, pero lamentablemente debido a la gravedad de la herida falleció. Los hechos que rodean este trágico suceso están enmarcados dentro de la intolerancia social ya que fue una rica entre vecinos los cuales se encontraban celebrando con ingesta de licor que provoca la riña entre los vecinos", informó el coronel Edwin Nieto, comandante de la Policía del Magdalena Medio.Las autoridades continúan con la investigación para esclarecer todos los detalles de esta tragedia, que deja un saldo fatal y un profundo dolor en la comunidad. La familia de la víctima, consternada por lo sucedido, espera justicia.
Ante las pruebas obtenidas por la Fiscalía General de la Nación, Andrés Felipe Arenas Mantilla aceptó su responsabilidad en el asesinato de un joven en hechos ocurridos el pasado 8 de agosto en un parque de Bucaramanga. Un juez de conocimiento de la capital santandereana avaló la negociación judicial con la Fiscalía y condenó a Andrés Felipe Arenas Mantilla a una pena de 18 años y 3 meses de prisión por su responsabilidad en el delito de homicidio agravado."El día de los hechos, en inmediaciones del parque Bolívar de Bucaramanga, el hoy condenado y la víctima, de 18 años, sostuvieron una riña con armas cortopunzantes. El joven intentó huir del sitio, pero Arenas Mantilla, en un acto de intolerancia, lo persiguió y lo atacó con un arma blanca, causándole la muerte", afirmó en un comunicado la Fiscalía General de la Nación. "Tenemos una preocupación y es el aumento de los casos de intolerancia social que termina casi siempre con víctimas en Bucaramanga y el área metropolitana", señaló el general Henry Bello, comandante de la Policía Metropolitana. En el área metropolitana de Bucaramanga durante el 2024 se han presentado más de 220 homicidios.
Las autoridades de Rionegro, Oriente de Antioquia, capturaron a dos hombres, de 30 y 35 años, que serían hermanos y están señalados como presuntos responsables del asesinato de su vecino, Jorge Rafael Cueto, un hombre originario de Cartagena.Los hechos ocurrieron en el sector Barro Blanco, específicamente en Altos de la Represa, donde al parecer, los dos hombres estaban departiendo con un alto volumen y consumiendo bebidas alcohólicas, situación que presuntamente podría haber sido el detonante de este violento crimen. Según el alcalde de Rionegro, Jorge Rivas, las autoridades al momento de ser alertadas, fueron inmediatamente al lugar de los hechos, sin embargo, los señalados se dieron a la fuga, sin mucho éxito pues fueron capturados momentos después."Son vecinos que estaban precisamente departiendo en un momento de intolerancia donde estos de alguna forma ocasionaron el asesinato de esta persona", indicó el mandatario."Pues fue una captura realizada por la Policía judicial, dentro de la investigación eran personas que no eran del municipio de Rionegro, los cuales huyeron y fueron capturados donde se encontraban en ese momento", complementó.Vale la pena recalcar, que con este ya serían 19 los homicidios reportados este año en el municipio, además, alrededor de 30.000 dosis de estupefacientes se han incautado, 800 personas han sido detenidas por otros delitos y 80 motos han sido recuperadas.
Blu Radio conoció detalles del momento exacto de la muerte del hijo del general William Rincón, inspector general de la Policía, Juan Felipe Rincón. Según una testigo del hecho, todo ocurrió porque, presuntamente, este joven de 21 tenía conversaciones con dos menores de 15 y 8 años, conversaciones que se daban por Instagram y a través de las cuales el joven le habría compartido y pedido fotos y videos explícitos a las menores.Destacan las personas que presenciaron la balacera que esa habría sido la razón por la cual la familia de estas dos niñas, entre ellas un tío, quien fue capturado luego del asesinato, citó al hijo del general en el barrio Quiroga, sur de Bogotá, para confrontarlo. De acuerdo con el relato, fue el escolta del joven la única persona que disparó en el lugar, pese a que en un video se logra ver una segunda arma, de elaboración artesanal, involucrada.“Yo quiero que todo salga a la luz y todo se sepa cómo pasó realmente. Lo que pasa es que el hijo del general al parecer estaba hablando con dos menores de edad, una de 15 y una de 8 años. La familia de la menor de 8 años, un familiar se dio de cuenta de las conversaciones y lo que decidimos hacer fue citarlo al punto del Quiroga para confrontarlo sobre los hechos y obviamente entregarlo a las autoridades”, dijo la testigo a Blu Radio.Hay un video de cámaras de seguridad del sitio en el que ocurrió el hecho en el que se puede ver a dos personas armadas, el escolta y un hombre con un chaleco azul. Sin embargo, el hombre que se ve en el video con el chaleco tenía un arma ‘hechiza’ que, según el relato, no disparó, armas que ya está en poder de las autoridades.“Cuando él llegó (Juan Felipe Rincón), se generó una riña, ya que el escolta lo que hizo fue empezar a amedrentarnos a todos con el arma y empezó a dispararnos a todos. En medio de toda esa balacera, él hirió de gravedad al hijo del general, el cual a la hora se reportó que ya está muerto. Y en medio de esa balacera resultaron dos personas gravemente heridas, las cuales ahorita están en el hospital y ahorita las están acusando por algo que no fue así”, añadió la testigo.El hecho ocurrió exactamente a las 11:45 de la mañana detrás del colegio Clemencia de Caicedo, ubicado en la calle 32 sur con carrera 23. Fue por vecinos del sector alertando por un tiroteo que la Policía llegó a este punto de la ciudad donde se encontró con el escolta del joven con su arma de dotación en la mano, en la escena había otras personas lesionadas por arma de fuego, quienes fueron trasladadas al Hospital del Tunal en un vehículo tipo chana, entre ellas el presunto asesino.
Un hombre de 43 años fue asesinado en el barrio La Gloria, Bucaramanga, presuntamente por Wilmer Sandoval, conocido como ‘alias Guayaba’, exnovio de su pareja actual. Según familiares de la víctima, el agresor mantenía una "obsesión enfermiza" con la mujer, quien había terminado la relación por los malos tratos y ya había iniciado contacto con otra persona.El ataque ocurrió en plena calle 16B cerca de la vivienda de José Luis Torrencilla. Testigos relatan que, tras un cruce de miradas, Sandoval se acercó sin mediar palabra y lo hirió en varias ocasiones, causándole heridas fatales. Aunque fue trasladado a la Clínica Comuneros por sus familiares, Torrencilla llegó sin signos vitales.La Policía avanza en la investigación y utiliza cámaras de seguridad para localizar al sospechoso, quien cuenta con antecedentes por homicidio y daño en bien ajeno. El crimen, motivado por celos e intolerancia, conmocionó a la comunidad del sector.
Este jueves, 31 de octubre, se vivió una noche violenta de Halloween en la capital del país, en la cual fueron asesinadas, de acuerdo con cifras de la Policía, seis personas en un total de cinco localidades tales como Kennedy, Bosa, Ciudad Bolívar, San Cristóbal y Suba. Las autoridades recibieron más de 5.000 llamados de alerta para atender emergencias durante la noche del 31 de octubre.Riñas en Halloween en BogotáLas muertes, según informó el general Daniel Gualdrón, comandante de la Policía de Bogotá, se dieron principalmente por riñas como consecuencia de hechos de intolerancia. Por fortuna, según el alto oficial, no se registraron niños extraviados, pero sí hubo un hecho que lamentar y es que dos niños resultaron gravemente heridos con una antorcha cuando intentaban tomarse una foto esto en la localidad de Bosa.“También tuvimos más de 5.663 motivos de policía que se conocieron, más de 3.500 llamadas al 123. Se generaron dos rodadas de temas de los moteros, no tuvimos niños intoxicados. Se nos presentó un hecho lamentable de dos menores en Bosa, en el cual se estaban sacando allí una fotografía y se cae una antorcha y sufren quemaduras estos dos menores, fueron atendidos y gracias a Dios se encuentran fuera de peligro”, agregó el general.Destacó el general Gualdrón que desafortunadamente son los adultos, por sus malos comportamientos, los que terminan empañando estas noches de Halloween con estas acciones violentas. Seis de ellas terminaron en tragedia para seis familias y sus hijos por el mal comportamiento de los mayores.Muertos en accidente de tránsitoEn la noche también se presentaron varios muertos por accidentes de tránsito, en los cuales estuvieron involucrados varios motociclistas. En el primer caso de la avenida Boyacá, el conductor de una motocicleta perdió el control de su vehículo y terminó colisionando contra un andén.En la madrugada, en la localidad de Bosa el parrillero de una moto perdió la vida luego de que el conductor se estrellara también contra un andén.
En video quedó registrado un caso de intolerancia en el que tres personas resultaron heridas con arma blanca y un menor de edad golpeado con objetos contundentes. La riña fue ocasionada por dos familias del municipio de Barbosa, los Urrego y los Álvarez que, al parecer, llevan años en disputa.En un video se puede apreciar como un grupo de personas se agreden, tanto físicamente como verbalmente, usando objetos contundentes y armas blancas, pues en medio de los insultos, se logra escuchar detonaciones y se puede visualizar a varias personas en el suelo. En la grabación también se escucha a una de las ciudadanas incitando al altercado: "Vaya pues mija, dele, dele".Desde la Alcaldía de Barbosa rechazaron el hecho de intolerancia, el cual fue atendido por la Policía Nacional que, al llegar al lugar de los hechos, impusieron cuatro comparendos."Hoy la invitación es al diálogo, a que tengamos tolerancia, que nos respetemos. Invitamos a toda la comunidad a que se acerque a la administración municipal, vamos a acompañar todos estos procesos desde las vías legales. También vamos a brindar todo el acompañamiento profesional que sea necesario para evitar todos estos actos de intolerancia y que la convivencia y la seguridad sean las que primen en el municipio de Barbosa", mencionó Juan David Rojas Agudelo, alcalde de Barbosa.Al parecer, el menor herido tendría 10 años y habría sido golpeado en la cabeza con un objeto contundente. Los otros tres adultos, que resultaron lesionados con arma blanca, no presentaron heridas de gravedad y fueron atendidos en el Hospital San Vicente de Paúl de Barbosa.
Uno en el cementerio y otro en la cárcel, ese fue el final de una violenta riña que se presentó entre dos hermanos en el barrio Café Madrid, al norte de Bucaramanga. Las autoridades informaron que la pelea entre los hermanos habría comenzado porque uno de ellos maltrato a la mamá. "De acuerdo a lo manifestado por el agresor, quien es hermano de la víctima, todo comenzó con una discusión verbal, la cual se tornó violenta al punto que ambos desenfundaron armas cortopunzantes e iniciaron una riña en la cual la víctima recibió dos heridas, una en la región precordial y una en el brazo derecho", dice el informe de la Policía Metropolitana de Bucaramanga. Arturo Amado, de 34 años, fue trasladado al Hospital Local del Norte donde ingresa sin signos vitales. Esta persona tenía antecedentes judiciales por los delitos de homicidio y fuga de presos, informó la Policía. En la reacción una patrulla de la Policía Nacional logran la captura en flagrancia de Alberto Amado Ortiz, como responsable de asesinar en medio de la riña a su hermano mayor. Amado Ortiz, no tiene antecedentes judiciales, señalaron las autoridades. Ahora deberá responder por el homicidio de Arturo Amado. "La intolerancia social es otro de los motivos por los cuales siguen aumentando los casos de homicidios en Santander", señaló el gobernador Juvenal Díaz. En las últimas horas también se presentaron otros dos homicidios en Bucaramanga y Floridablanca. Estos asesinatos estarían relacionados con temas del microtráfico, según la Policía Metropolitana de Bucaramanga.
Autoridades en Medellín investigan un grave hecho de intolerancia ocurrido en las últimas horas donde un hombre de 42 años identificado como Arlex Montero Ruiz murió por graves heridas causadas por su hijastro.Los hechos ocurrieron cerca de las 5:30 a.m. de este sábado 6 de julio en una vivienda del barrio Horizontes del corregimiento de San Antonio de Prado suroccidente de Medellín.Según el reporte inicial de las autoridades, los hechos ocurrieron cuando Montero Ruiz habría llegado en estado de embriaguez a su casa y en medio de una discusión con su hijastro de 16 años este lo habría agredido con un arma cortopunzante para defenderse.La víctima fue trasladada en un vehículo de la policía a un centro asistencial de la zona a donde llegó sin signos vitales por la gravedad de las lesiones, mientras que el menor de edad fue aprehendido por las autoridades.Precisamente estos casos de violencia intrafamiliar preocupan, pues durante el primer semestre del año se incrementaron hasta en un 4% respecto al mismo periodo de 2023. El alcalde Federico Gutiérrez pidió cooperación a la ciudadanía para evitar este tipo de situaciones que ya superaron los 6.200 casos en lo corrido de 2024."Nosotros tenemos el deber de luchar en contra de las estructuras criminales, pero es triste ver como día a día también vemos un aumento de la violencia contra nuestras mujeres y especialmente contra nuestros niños y nuestras niñas y ahí es donde también hay que hacer un llamado como sociedad, la tarea es de todos", expresó el mandatario.De acuerdo con el Sistema de Información para la Seguridad y Convivencia de Medellín, ya son al menos 33 los homicidios que durante 2024 han registrado producto de casos de riña o intolerancia.
En Rionegro, Oriente de Antioquia, un motociclista que se rehusó a un comparendo, intentó atropellar a los agentes de tránsito, luego de ser requerido por conducir en zona prohibida.El altercado tuvo lugar en la variante San Antonio a la altura de la entrada a la urbanización Pietra Santa, de este municipio del oriente antioqueño. Eran dos agentes de movilidad los que realizaban el operativo de control cuando vieron a un motociclista cruzando por una zona exclusiva de peatones, poniendo en riesgo a niños y padres que a esa hora se movilizan con destino al colegio de la zona.Al momento de ser abordado para realizar el comparendo, el motociclista se muestra alterado y reacciona agresivamente tirándole la motocicleta a los agentes con la intención de atropellarlos. En un momento los agentes intentaron grabar para evidenciar su actitud, pero el infractor les quitó el celular y lo arrojó a un techo.“Al evidenciar esta infracción trataron de intervenir el conductor, pero este reaccionó bruscamente contra ellos agrediéndolos y tirándoles la moto, razón por la cual los agentes inmovilizaron a este conductor", explicó Juan Muñoz subsecretario de movilidad de Rionegro.Ante la insistencia en la agresividad del ciudadano que se negaba a recibir el comparendo, los agentes de tránsito tuvieron que reducirlo en plena vía pública, mientras llegaba la Policía. Los oficiales reciben valoración en un centro asistencial debido a los golpes recibidos.