Tras el último día en el que las autoridades hacen vigilancia intensificada sobre los casos de lesionados con pólvora, se confirmó que Antioquia cerró con 149 casos ocurridos durante las fiestas decembrinas y de año nuevo, uno menos que el año anterior.Los análisis epidemiológicos indican que el 72% de las lesiones por pólvora ocurrieron en municipios del Valle de Aburrá y el Oriente antioqueño, con 83 y 25 casos, respectivamente. En el Nordeste se presentaron 11 casos, en el Bajo Cauca nueve, en Urabá nueve, en el Occidente siete, en el Magdalena Medio tres, en el Suroeste uno y en el Norte uno.Para reforzar la pedagogía y generar mayor consciencia sobre sus riesgos, la Gobernación de Antioquia anunció que adelantará campañas contra el uso de la pólvora durante todo este año. Así lo explicó la subsecretaria de Salud Pública, Dora Raquel Arcia."Durante el año 2025 estamos concentrados en adelantar campañas pedagógicas y educativas para resignificar nuestras celebraciones y evitar el uso de la pólvora en fiestas culturales, deportivas, religiosas, decembrinas y en el Día de la Alborada", aseguró.Uno de los puntos que llama la atención de las autoridades es que si bien la mayor cantidad de los casos ocurrieron en vía pública (85 lesionados), 42 personas resultaron lesionadas en su vivienda, 15 en parques públicos y cinco en zona rural, siendo los voladores, las papeletas, los tacos y los totes los artefactos más lesivos.Los reportes oficiales indican que la mitad de las personas lesionadas estaban manipulando la pólvora. La otra mitad de los afectados se encontraba en actividades diferentes: observando la quema de pólvora, en su vivienda, en establecimientos comerciales, en transporte o transitando por sectores donde estaban quemando pirotecnia.En cuanto a las lesiones más frecuentes, la red hospitalaria de todo el departamento reportó 15 personas con daño ocular, 14 con amputaciones y seis con daño auditivo. Entre los lesionados se encuentran 71 personas con afectación en las manos, 36 en el rostro, 18 en miembros superiores, 16 en el tronco, 10 en el cuello, 5 en miembros inferiores, dos en los genitales y dos en los pies.La Administración Departamental también identificó que en 45 de los casos las personas lesionadas estaban bajo efectos del alcohol y que siete de los menores de edad que resultaron afectados se encontraban en compañía de personas embriagadas. Del total de quemados por pólvora, 106 fueron hombres y 43 mujeres.Según el más reciente informe del Instituto Nacional de Salud, Antioquia lideró la lista de quemados, le sigue Bogotá con 144, Nariño (107), Norte de Santander (95), Cundinamarca (74), Cauca (72) y Córdoba (55).
Santander y Norte de Santander no lograron reducir las cifras de personas quemadas con pólvora durante las festividades de diciembre y el primer puente de enero de 2025. Según el último reporte del Instituto de Nacional de Salud, Santander registró 52 casos de quemados con pólvora con un aumento del 2 % en comparación del año anterior. Por su parte en Norte de Santander la cifra es alarmante, con un aumento del 45 % pasando de 62 a 90 casos de víctimas de la manipulación de fuegos artificiales.De acuerdo con el reporte, Norte de Santander ocupa el cuarto lugar de los departamentos con mayores cifras de quemados y Santander el octavo lugar a nivel nacional.En Santander uno de los casos ocurrió en Bucaramanga donde una niña de 2 años resultó quemada con pólvora cuando se encontraba durmiendo y un volador entró por la ventana.Según relató Engelbeth Vásquez, papá de la niña "no estábamos tomando, compartimos en familia y mi esposa se acostó al lado de la niña, la había arropado con una cobija que ayudó, de alguna manera, a protegerla".Otros dos hechos que involucraron a menores, uno con un lamentable saldo de la muerte de un niño, ocurrieron en Barrancabermeja. Los niños ingirieron pólvora, un ‘tote’ y una ‘martinica’.Infortunadamente, el primer caso fue fatal. Un menor de 6 años tuvo complicaciones y tras una falla hepática ocasionada por intoxicación con fósforo blanco falleció en días pasados.El segundo caso involucró a una bebé de tan solo 18 meses, quien según las autoridades ingirió una de las llamadas ‘martinicas’ ante un evidente descuido de su progenitora.Tras lo ocurrido, el gobernador de Santander, Juvenal Díaz Mateus, dijo que este tema preocupa bastante y esto no puede pasar.“Yo quiero aprovechar para hacer un llamado a los padres de familia para que evitemos en lo posible la manipulación de pólvora por parte de los niños, uno perdió la vida, el otro lo logramos salvar, pero eso no debe pasar”, expresó el mandatario.
Engelbeth Vásquez, papá de la niña de 2 años quemada con pólvora en Bucaramanga, pidió justicia, a las autoridades y exigió que este hecho no quede impune, ya que la niña estaba durmiendo cuando el volador entró por la ventana."No estábamos tomando, compartimos en familia y mi esposa se acostó al lado de la niña, la había arropado con una cobija que ayudó, de alguna manera, a protegerla", afirmó Vásquez, padre de la menor que se recupera de sus quemaduras.El padre rechazó que aún existan personas que no sigan las normas de convivencia ni la ley."Cómo es posible que las personas, que se las dan de vivos, de bravos y de machos ocasionen el daño a un bebe totalmente inocente, por eso exigimos todo el peso de la ley y les pedimos a las autoridades a la Fiscalía a todos los entes de control, dar con el responsable", enfatizó Vásquez.Señaló que la niña la habían llevado a dormir, luego de compartir en familia que, incluso, la pequeña estaba acompañada por su mamá al momento de los hechos, dado que el volador alcanzó a quemar parte de su brazo y su abdomen, estando sola la historia podría ser otra. La menor, quién fue remitida al Hospital Internacional de Colombia (HIC), se recupera de las heridas, según el parte médico."La niña recibe tratamiento multidisciplinario en la unidad de quemados, tras haber sufrido quemaduras de segundo grado en un 4% de la superficie corporal total, afectando el hemiabdomen inferior y el miembro superior derecho".El padre de la niña aseguró que están a la espera de otros exámenes médicos para verificar el correcto funcionamiento de sus ojos y oídos, con el fin de tener la certeza, que no se registraron otras complicaciones.
El Instituto Colombiano de Bienestar Familiar (ICBF) expresó su creciente preocupación ante la alarmante cifra de 358 niños, niñas y adolescentes quemados con pólvora en las recientes festividades de Fin de Año. Además, se registró un nuevo caso de intoxicación por fósforo blanco en una menor de un año en Risaralda, lo que subraya los peligros asociados con el mal uso de productos peligrosos.Ante esta situación, el ICBF activó un protocolo de protección y seguimiento, iniciando 90 procedimientos de verificación de derechos. Además, las autoridades llevaron a cabo 45 procesos administrativos de restablecimiento de derechos, relacionados con las lesiones de los menores involucrados en estos incidentes.En un esfuerzo por mitigar estos riesgos, se dictaron 31 amonestaciones con curso pedagógico obligatorio para padres y cuidadores de los niños afectados. Asimismo, 78 familias recibieron atención especializada, incluyendo asistencia y asesoría para garantizar el bienestar de los menores. En otros casos, 57 situaciones fueron remitidas a las comisarías de familia para que se adelanten las acciones legales y de restablecimiento de derechos pertinentes.Según el Instituto Nacional de Salud (INS), los departamentos más afectados por las quemaduras fueron Antioquia, Bogotá, Nariño, Norte de Santander, Cauca, Cundinamarca, Santander, Tolima, Córdoba y Huila, con un notable aumento de incidentes en regiones como Huila, La Guajira, Guaviare y San Andrés en comparación con el mismo periodo del año anterior. Aunque las cifras de 2024 (358 casos) son menores que las del año pasado (403 casos), la situación sigue siendo alarmante.El ICBF hizo un llamado urgente a los padres, madres y cuidadores, recordándoles que está terminantemente prohibido que los menores manipulen, transporten o compren pólvora. Las autoridades reiteraron que la prevención es clave para evitar más tragedias y proteger los derechos de los niños y adolescentes durante las festividades.
De acuerdo con el reporte entregado por las autoridades, durante la celebración del Año Nuevo, en Neiva se registraron dos homicidios y nueve personas lesionadas con arma blanca y de fuego en hechos de intolerancia derivados de la ingesta de alcohol.El coronel Alexander Castillo, comandante de la Policía Metropolitana de Neiva, indicó que uno de los casos de violencia está relacionado con un hombre de 30 años, identificado como Héctor Andrade Epia, quien fue asesinado por su pareja sentimental en medio de una discusión.“En la carrera 30A con calle 29, barrio Puertas del Sol, sur de Neiva, el señor Héctor Andrade Epia pierde la vida en medio de un acto de intolerancia con su pareja, presunta agresora. En el barrio La Vorágine, entre dos personas, el señor Francisco Javier Bastidas, luego de llegar en una motocicleta, se presenta una discusión con otra persona, y allí pierde la vida tras ser impactado con un arma de fuego”, indicó el oficial.Quemados con pólvora en HuilaPor su parte, la Secretaría de Salud del Huila reportó 20 personas quemadas con pólvora tras la llegada del nuevo año y 20 más lesionadas en lo corrido del mes de diciembre, para un total de 40 personas afectadas, incluyendo menores de edad.Neiva, Pitalito, Acevedo y El Pital son los municipios con las cifras más altas de quemados con juegos pirotécnicos durante la celebración de las fiestas decembrinas en el Huila, pese a las campañas de prevención que se realizaron durante el mes de diciembre, expresó Sergio Zúñiga, secretario de Salud Departamental.
Aunque las diferencias no son notables en las estadísticas de quemados con pólvora en Antioquia, este 31 de diciembre y el 1 de enero, durante las celebraciones de Fin de Año, hay una reducción del 8 % por ciento con respecto al año anterior.Además, en el periodo con el que se compara resultaron lesionados 12 adultos y 12 menores de edad, conteo que por ahora va en 15 mayores de edad y dos niños, en La Estrella y El Santuario, quienes manipulaban totes y cohetes. Los otros nuevos casos son en Medellín (cinco casos), Caldas, La Ceja, Nechí, Ebéjico, Guarne, Santo Domingo y Barbosa donde las víctimas son mayores de edad, mientras que las autoridades de Medellín registraron 133 casos de quema de pólvora y cinco más de almacenamiento y venta de la misma, durante esta misma celebración.Aún así, las autoridades departamentales continúan reiterando que el camino es el autocuidado, además de la protección a los menores de edad, que para este caso ya son 33 de los afectados.La secretaria de Salud de Antioquia, Marta Cecilia Ramírez, indicó que desde el ente departamental buscan crear estrategias para los siguientes tres años, en los que también buscan trabajar con las parroquias para que no usen pólvora en las fiestas patronales, además de los equipos de fútbol y sus barras, para que no se use pirotecnia en los eventos deportivos.El año pasado en Antioquia se registraron en total 150 casos de personas quemadas con pólvora, de las cuales 87 ocurrieron en el Valle de Aburrá y 57 de ellas fueron en Medellín. Este año, las autoridades departamentales mantendrán la vigilancia intensificada a casos de lesiones por pólvora hasta el 12 de enero.Según el Instituto Nacional de Salud, entre el 31 de diciembre de 2023 y el 1° de enero de 2024 se registraron 539 lesionados con pólvora en el país.
En el Hospital Internacional de Colombia de Piedecuesta, en Santander, se recupera de las quemaduras en su cuerpo una menor de dos años que fue víctima de la irresponsabilidad de un vecino que lanzó un volador que entró a la vivienda donde la pequeña descansaba con su familia. El caso ocurrió a la 1:30 de la mañana el primero de enero de 2025 en Bucaramanga, fue el reporte inicial de las autoridades. Se conoció que la niña tiene quemaduras de 1 y 2 grado de gravedad en un 10% de su cuerpo. Las lesiones se presentan a nivel del de miembro superior derecho y abdomen. "Está estable" dice la información conocida popr Blu Radio. La niña inicialmente fue atendida en la Clínica San Luis de Bucaramanga hasta donde fue llevada por sus familiares. Posteriormente por la grave del caso fue trasladada al Hospital Internacional de Colombia de Piedecuesta. "Presuntamente un volador ingresa por una de las ventanas de la residencia. La madre intentó apagar el artefacto, pero este detonó, causando lesiones en el abdomen y las extremidades inferiores de la niña. Tras recibir primeros auxilios, la menor fue trasladada a un centro asistencial, donde actualmente se recupera satisfactoriamente", informó el Brigadier General Henry Yesid Bello Cubides, comandante de la Policía Metropolitana de Bucaramanga.El alcalde de Bucaramanga, Jaime Andrés Beltrán Martínez, lamentó este caso y solicitó a las autoridades avanzar en la investigación para hallar al responsable. "En este momento estamos brindando toda la colaboración a esta familia, en la recuperación de la menor y en la asesoría jurídica necesaria. Con ayuda de la Policía Nacional encontraremos al responsable de este hecho para que responda por lo que hizo", escribió en sus redes sociales el mandatario. La Policía reiteró la importancia de evitar el uso de pólvora en los hogares y pidió a los padres de familia supervisar estrictamente a los niños, niñas y adolescentes para prevenir accidentes. “Por ningún motivo debemos manipular pólvora dentro de nuestras viviendas, ni en lugares donde haya menores de edad. La principal recomendación es que sean los expertos los encargados de hacer uso de estos elementos”, enfatizaron las autoridades.En otro caso de quemados con pólvora, un hombre del municipio de San Gil resultó herido en una de sus manos al sufrir la explosión de un elemento pirotécnico. Las autoridades confirmaron que el sujeto fue llevado a un centro médico de la localidad y por fortuna se encuentra fuera de peligro.
Alarmadas están las autoridades de salud en Pasto tras el incremento de las cifras de personas lesionadas que, en la noche del 31 de diciembre, dejaron un saldo de 14 personas quemadas y cinco más en la madrugada del 1 de enero de 2025, para un total de 39 personas que no acataron la orden de la Alcaldía de Pasto de no utilizar pólvora.“En el municipio hay mucha preocupación porque continuamos subiendo las cifras; sin embargo, dijo Castillo, es satisfactorio en un 30 % en relación a años anteriores con personas quemadas”, recalcaron. Pero, desafortunadamente, llevamos 38 casos en el municipio de Pasto. Solo el día 31 de diciembre, con corte a las doce de la noche, se registraron 14 nuevos casos, muchos de ellos en estado de embriaguez, donde desafortunadamente la mayoría son personas mayores de edad, todos hombres.Según el parte médico, 28 personas registran quemaduras de primer y segundo grado por la utilización de las "papas bomba", que han causado la amputación de dedos a cuatro hombres en los distintos barrios de la capital de Nariño, aseguró la Secretaría de Salud de Pasto.“Es muy triste que la comunidad no haya entendido el mensaje del alcalde Nicolás Toro, de no abusar en la utilización de la pólvora. Los resultados son muy preocupantes porque en la noche de Año Nuevo, 14 personas resultaron afectadas y otras cinco en la madrugada del 1 de enero. Esto es muy reprochable porque las autoridades hacen los operativos, pero a la gente le falta sentido de pertenencia y conciencia para no seguir en esas prácticas”, insistió la señora Castillo.“Estamos realizando un barrido por los centros asistenciales y hospitales de la ciudad, porque casi el 90 % de las personas que acudieron a recibir atención registran quemaduras de segundo y tercer grado por culpa de la utilización de papas explosivas, con una cifra de 28 casos”, manifestó la funcionaria.Entre los afectados están personas cuyas edades oscilan entre los 18 y 54 años, y solo tres menores de 17 años fueron reportados entre los lesionados, precisó la Secretaría de Salud de Pasto.
Según el más reciente reporte del Instituto Nacional de Salud, 1.035 personas resultaron quemadas en diciembre y hubo un incremento el 31 de diciembre, siendo este el día con mayor reporte de casos en el país. De esos, 310 son menores de edad y 725 son adultos.En Bogotá, según la Secretaría de Salud, 10 personas resultaron lesionadas luego de manipular estos materiales pirotécnicos. Estos se suman a los 135 casos de diciembre, 38 de ellos menores de edad y 13 tienen menos de cinco años.“Es lamentable que sigamos reportando estos casos. La mayoría de los afectados tuvieron lesiones y quemaduras que comprometen sus manos, sus caras. Tenemos personas con lesiones oculares y un total de 5 personas hospitalizadas durante esta última jornada del 31 de diciembre y 1 de enero”, dijo Julián Fernández, subsecretario de salud pública de Bogotá.El número de casos de quemados entregado por el INS (1.035), aunque sigue siendo muy alto, representa una reducción del 18,1 % en comparación con los 1.263 casos del período 2023-2024. Aunque la mayoría de las lesiones ocurrieron durante la manipulación de pólvora (64,7 %), actividades como observación (27,4 %) y almacenamiento (0,5 %) también contribuyeron a los incidentes. Los artefactos más involucrados fueron los totes, que representaron el 27,6 % de los casos, seguidos por voladores (21,4 %) y cohetes (9,2 %). Además, las quemaduras y laceraciones fueron las lesiones predominantes, con un 48 % y 44 % respectivamente, destacando la gravedad de estos eventos.A nivel territorial, algunas regiones mostraron aumentos preocupantes. Huila reportó un incremento del 66,7 %, pasando de 24 casos en 2023-2024 a 40 en 2024-2025. Asimismo, Atlántico tuvo un aumento del 52,2 %, alcanzando 35 casos. En contraste, otros departamentos lograron reducciones significativas, como Nariño (-46,3 %) y Valle del Cauca (-56,4 %), con 79 y 24 casos respectivamente en la última temporada. Bogotá, aunque mostró una variación positiva del 1,6 %, sigue liderando en el número absoluto de casos, con 125 incidentes reportados.Por otro lado, las intoxicaciones relacionadas con fósforo blanco y licor adulterado con metanol también fueron objeto de monitoreo. Se registraron 4 casos de intoxicación por fósforo blanco, dos en Barranquilla y dos en Santander, uno de los cuales resultó en fallecimiento. En cuanto al licor adulterado con metanol, se reportó un único caso en la temporada actual, representando un aumento del 300 % respecto al año anterior.
El reloj marcó las 12:00 de la noche de este fin de año y durante seis horas más la Policía Metropolitana recibió 6.764 llamadas a la línea de emergencia 123, de las cuales 4.216 eran procedentes para ser atendidas por las autoridades que, además, registraron 214 riñas en todas las modalidades, 147 casos de violencia intrafamiliar y por lo menos 358 quejas por perturbación por ruido en la capital de Antioquia.Aunque parecía ser un ambiente de alegría, esta se vio opacada por casos como el registrado en el barrio Santa Domingo No. 2, donde una menor de 5 años resultó lesionada con arma blanca a manos de un familiar, pues en medio de una riña entre su mamá y él, la agredió y posteriormente fue capturado por las autoridades.En otro caso, también en hechos de intolerancia, Juan Guillermo Franco fue asesinado en el barrio Santa Cruz, situación en la que dos personas más resultaron heridas. El tercer caso se registró en el Doce de Octubre, donde en medio de una celebración se formó una riña que dejó seis personas lesionadas con arma de fuego, una de ellas una joven de 16 años.Esta madrugada del primero de enero también se registraron 133 casos de quema de pólvora y cinco más de almacenamiento y venta de la misma, según las autoridades.Ya van 120 quemadosAdemás, 10 personas se quemaron con elementos pirotécnicos entre este 31 de diciembre y las 8:00 de la mañana de este 1° de enero, según indicó la Gobernación de Antioquia. Los nuevos casos son en Medellín, Caldas, Ebéjico, Guarne, Santo Domingo, donde las víctimas son mayores de edad y La Estrella y El Santuario, donde se lesionaron niños de seis años por manipulación de cohetes, y totes, respectivamente.