El papa Francisco, de 88 años, sufrió este jueves una caída en su residencia, la casa de Santa Marta, se hizo un hematoma en el antebrazo derecho, sin fracturas, y se le inmovilizó como medida de precaución, informó la oficina de prensa del Vaticano.A pesar de la caída, Francisco continuó con su agenda de trabajo - que consistía en cinco audiencias - sin problemas, aunque con el brazo inmovilizado con una venda blanca como se observa en las fotos distribuidas por el Vaticano, como la reunión que tuvo con el colegio de sacerdotes argentinos de Roma.Se trata de la segundad caída del papa en poco tiempo, ya que el pasado 7 de diciembre, el pontífice, que tiene graves problemas de movilidad, apareció con un gran hematoma a la altura de la barbilla.En aquel momento Francisco sufrió "una contusión cuando se golpeó con la mesilla de noche", según el director de la oficina de prensa de la Santa Sede, Matteo Bruni.También en esa ocasión, el pontífice continuó con su agenda y la celebración del décimo consistorio, en el que nombró a 21 nuevos cardenales y en el que apareció con el vistoso moratón a un lado derecho de la cara.Francisco sufre de una grave gonalgia en la rodilla derecha que le impide caminar por lo que usa una silla de ruedas o en algunas ocasiones se ayuda con un bastón.
El papa Francisco expresó este domingo su cercanía a los habitantes de Los Ángeles, en California, Estados Unidos, y aseguró que reza por ellos, durante el rezo del ángelus asomado a la plaza de San Pedro desde el palacio pontificio."Estoy cerca de los habitantes de Los Ángeles, en California, donde en los pasados días se han producido incendios devastadores. Rezo por todos vosotros", dijo el papa.Este sábado, el papa envió un telegrama en le que expresó su tristeza "por la pérdida de vidas y la destrucción generalizada causada por los incendios".En el mensaje, enviado en nombre del pontífice por el secretario de Estado, el cardenal Pietro Parolin al arzobispo de Los Ángeles, José Gómez, también aseguraba su cercanía a las comunidades afectadas por esta tragedia y rezaba "por los esfuerzos del personal de rescate de los servicios de emergencia".Los incendios de estos días en Los Ángeles hasta el momento han dejado un saldo de 16 víctimas fatales, una cifra que se teme pueda aumentar una vez que los equipos de rescate puedan comenzar a buscar entre los escombros y más de 150.000 personas continúan bajo orden de evacuación.El nivel de destrucción que ha alcanzado la ciudad de las estrellas sobrepasa las 12.000 estructuras y el último reporte de AccuWeather aumentó la estimación de los daños totales y las pérdidas económicas de 135.000 a 150.000 millones de dólares.
El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, entregó este sábado al papa Francisco la Medalla de la Libertad con Distinción, la máxima condecoración civil en Estados Unidos, informó la Casa Blanca en un comunicado.Biden habló con el papa por teléfono para ofrecerle la condecoración, que se otorga “a personas que han hecho contribuciones ejemplares a la prosperidad, los valores o la seguridad de Estados Unidos, la paz mundial u otros importantes esfuerzos sociales, públicos o privados”, indicó Washington.Estaba previsto que el mandatario entregara al papa la medalla en una visita oficial a Italia, en la que también iba a reunirse con la primera ministra, Giorgia Meloni, y el presidente, Sergio Mattarella, pero que canceló por los graves incendios forestales de California.Esta es la única vez que Biden, que el próximo 20 de enero entregará la presidencia a Donald Trump, otorga la condecoración.En el comunicado, la Casa Blanca destacó del papa Francisco cuyo nombre es Jorge Bergoglio, que durante décadas “sirvió a los sin voz y vulnerables en toda Argentina” y que “su misión de servir a los pobres nunca ha cesado”.“Como maestro desafiante, nos ordena luchar por la paz y proteger el planeta. Líder acogedor, tiende la mano a las distintas religiones”, subrayó.Y aseguró que no se parece a ningún papa anterior: “Por encima de todo, es el papa de la gente: una luz de fe, esperanza y amor que brilla en todo el mundo”.
El papa Francisco pidió este jueves el respeto de los derechos de todos los venezolanos, incluidos los arrestados en los últimos meses, y deseó el inicio de negociaciones para "el bien común del país", en su tradicional discurso de inicio año a los embajadores de los países acreditados ante la Santa Sede.En el largo discurso, que leyó un colaborador ya que el papa explicó que sigue "resfriado", el pontífice repasó las guerras y la situación en el mundo, mencionó a Venezuela y "la grave crisis política en la que se debate".Y aseguró que "esta podrá ser superada sólo con la adhesión sincera a los valores de la verdad, de la justicia y de la libertad, a través del respeto a la vida, a la dignidad y a los derechos de cada persona, incluidos los de quienes han sido arrestados a causa de los sucesos de los últimos meses".Abogó además por superar la situación "al rechazo de cualquier tipo de violencia" y deseó "el comienzo de negociaciones de buena fe y finalizadas al bien común del país".Francisco también citó en su discurso a Bolivia, "que está atravesando una preocupante situación política, social y económica" y a Colombia, al desear que "con la ayuda de todos se pueda superar la multiplicidad de los conflictos que lastiman al país desde hace demasiado tiempo".Garantizar la libertad religiosa en NicaraguaEl pontífice también hizo referencia, ante los 184 embajadores de los países con los que el Vaticano mantiene relaciones diplomáticas, a la situación en Nicaragua, donde, subrayó, "la Santa Sede, que está siempre dispuesta a un diálogo respetuoso y constructivo".Y mostró la preocupación "por las medidas adoptadas con respecto a personas e instituciones de la Iglesia" en Venezuela, donde han sido arrestados y expulsados del país sacerdotes y obispos, así como interrumpido las relaciones diplomáticas.Francisco instó "a que a todos sean garantizados adecuadamente la libertad religiosa y los demás derechos fundamentales"."Efectivamente, no hay verdadera paz si no viene garantizada también la libertad religiosa, que implica el respeto a la conciencia de los individuos y a la posibilidad de manifestar públicamente la propia fe y pertenencia a una comunidad", agregó.
Por primera vez en los dos mil años de historia de la Iglesia católica, el papa Francisco nombró a una mujer, Simona Brambilla, al frente de un "ministerio" del Vaticano, anunció este martes la Santa Sede.Brambilla, de 59 años y de nacionalidad italiana, fue nombrada prefecta del Dicasterio para la Vida Consagrada y las Sociedades de Vida Apostólica, el "ministerio" de la Curia (gobierno vaticano) responsable de las órdenes y congregaciones religiosas.Esta exsuperiora general en Italia de las Misioneras de la Consolata era ya la número dos de este dicasterio desde octubre de 2023.Según Vatican News, medio oficial del Vaticano, desde la elección de Francisco en 2013, y hasta 2023, el porcentaje de mujeres que ocupan funciones en la Santa Sede y en la administración del Estado del Vaticano pasó de 19,2 % a 23,4 %.En el Estado de la Ciudad del Vaticano, el papa argentino ya nombró a dos mujeres para altos cargos en los diez años de su pontificado: en 2016, a Barbara Jatta, directora de los Museos Vaticanos, y a sor Raffaella Petrini, secretaria general de la Gobernación en 2022, cargo habitualmente asignado a un obispo.No obstante, el último Sínodo celebrado a finales de 2024 puso de manifiesto la falta de visibilidad de las mujeres en la Iglesia y su gobierno.Si bien "las mujeres y los hombres tienen una dignidad igual como miembros del pueblo de Dios", "las mujeres siguen topándose con obstáculos para obtener un mayor reconocimiento" de su papel, constató el documento final aprobado por el papa.Asociaciones especialmente activas en Europa y Norteamérica lamentan la marginación de las mujeres por un sistema considerado patriarcal, a pesar de su papel central en las parroquias de todo el mundo.Al cierre del Sínodo, la cuestión de la ordenación de las mujeres quedó en suspenso, al constatar los participantes que sigue habiendo muchas reticencias, sobre todo en una franja conservadora de la Iglesia y en ciertas regiones.
El papa Francisco exhortó este domingo, 5 de enero, a la comunidad internacional a tomar medidas contundentes para garantizar el respeto al derecho humanitario en los conflictos armados en todo el mundo. Sus palabras tuvieron lugar durante el rezo del Ángelus, desde la ventana del Palacio Apostólico."Que la comunidad internacional reaccione con determinación para que en los conflictos se respete el derecho humanitario", declaró Francisco ante una multitud de fieles reunidos en la plaza de San Pedro del Vaticano, pese a la lluvia.El pontífice añadió: "Basta de ataques contra los civiles, basta de atacar escuelas, hospitales, y lugares de trabajo".Asimismo, instó a perseverar en la oración por la paz en Ucrania, Palestina, Israel, Líbano, Siria, Myanmar y Sudán."La guerra es siempre una derrota, siempre", reiteró Francisco, en su constante llamado a poner fin a los conflictos armados que devastan el mundo.
El papa Francisco hizo este miércoles, 1 de enero de 2025, un llamado a los países con tradición cristiana para que cancelen o reduzcan las deudas de las naciones más empobrecidas.Durante el rezo del Ángelus en el marco del Año Nuevo, que coincide con la Jornada Mundial de la Paz, el pontífice aprovechó para abogar por esta causa en favor de los más necesitados.“Animo a los Gobiernos de los países de tradición cristiana a que den un buen ejemplo, cancelando o reduciendo al máximo la deuda de los países más pobres”, expresó Francisco desde el Palacio Apostólico, frente a los fieles reunidos en la plaza de San Pedro del Vaticano.El Sumo Pontífice resaltó la importancia de la condonación de la deuda como parte del Jubileo, una festividad que tendrá lugar en 2025, durante la cual la Iglesia concede indulgencias y el perdón de los pecados.En este sentido, el papa exhortó a “traducir este perdón al ámbito social, para que ninguna persona, familia o nación siga cargando con el peso de la deuda”.En el contexto de la Jornada Mundial de la Paz, Francisco también agradeció las diversas iniciativas de oración en favor de la paz, mientras hacía un llamado a terminar con los conflictos armados en todo el mundo.El pontífice mencionó especialmente las guerras que afectan a Ucrania, Gaza, Israel, Myanmar, entre otras regiones, recordando los devastadores efectos de los conflictos.“He visto imágenes y fotografías de la destrucción que causa la guerra. La guerra siempre destruye, siempre es una derrota, siempre”, concluyó Francisco.
El papa pidió este miércoles a las autoridades políticas soluciones para promover la armonía social en todo el continente americano y en particular en Haití, Venezuela, Colombia y Nicaragua, durante su mensaje de Navidad, desde la logia central de la basílica de San Pedro."Que el Niño Jesús inspire a las autoridades políticas y a todas las personas de buena voluntad del continente americano, con el fin de encontrar lo antes posible soluciones eficaces en la verdad y la justicia, para promover la armonía social, en particular en Haití, Venezuela, Colombia y Nicaragua", pidió el papa en su mensaje.Y agregó: "Que se trabaje, especialmente durante este Año jubilar, para edificar el bien común y redescubrir la dignidad de cada persona, superando las divisiones políticas".Como es tradicional, Francisco aprovechó su mensaje de Navidad para recordar los conflictos y los problemas en el mundo, antes de impartir la bendición 'Urbi et Orbi' ante una plaza de San Pedro a la que acudieron unas 30.000 personas.El papa también pidió "que callen las armas en la martirizada Ucrania" y !que se tenga la audacia de abrir la puerta a las negociaciones y a los gestos de diálogo y de encuentro, para llegar a una paz justa y duradera".Y continuó: "Que callen las armas en Oriente Medio. Con los ojos fijos en la cuna de Belén, dirijo mi pensamiento a las comunidades cristianas de Israel y Palestina, en particular a Gaza, donde la situación humanitaria es gravísima""Que cese el fuego, que se liberen los rehenes y se ayude a la población extenuada por el hambre y la guerra", añadió el pontífice.Y aseguró que lleva "en el corazón también a la comunidad cristiana del Líbano, sobre todo del sur, y a la de Siria, en este momento tan delicado" y animó a buscar soluciones que permitan la reconciliación nacional en Libia."Que se abran las puertas del diálogo y de la paz en toda la región, lacerada por el conflicto". añadió y también recordó los conflictos en Myanmar o en Sudán, entre otros.Francisco recordó que este martes se abrió la Puerta Santa con la que inició el Jubileo, que se celebra cada 25 años, y deseo que ayude a reconciliarse con nosotros mismos, entre nosotros, incluso con nuestros enemigos."En esta Navidad, inicio del Año jubilar, invito a todas las personas, a todos los pueblos y naciones a armarse de valor para cruzar la Puerta, a hacerse peregrinos de esperanza, a silenciar las armas y superar las divisiones".
El papa Francisco pidió este miércoles en su mensaje de Navidad que callen las armas en Ucrania y se "tenga la audacia de abrir negociaciones para una paz justa" y que en Gaza "cese el fuego, que se liberen los rehenes y se ayude a la población extenuada por el hambre y la guerra".En al balcón de la logia central de la fachada de la basílica de San Pedro, Francisco como suele habitual en su mensaje de Navidad reflexionó sobre los conflictos y males que afectan al mundo ante las cerca 30.000 personas que se acercaron a la plaza de San Pedro.Y continuó: "Que callen las armas en Oriente Medio. Con los ojos fijos en la cuna de Belén, dirijo mi pensamiento a las comunidades cristianas de Israel y Palestina, en particular a Gaza, donde la situación humanitaria es gravísima"."Que cese el fuego, que se liberen los rehenes y se ayude a la población extenuada por el hambre y la guerra", añadió el pontífice sentado en una silla en el balcón de la logia central.Y aseguró que lleva "en el corazón también a la comunidad cristiana del Líbano, sobre todo del sur, y a la de Siria, en este momento tan delicado" y animó a buscar soluciones que permitan la reconciliación nacional en Libia."Que se abran las puertas del diálogo y de la paz en toda la región, lacerada por el conflicto". añadió.Francisco recordó que este martes se abrió la Puerta Santa con la que inició el Jubileo, que se celebra cada 25 años, y deseó que ayude "a reconciliarnos con nosotros mismos, entre nosotros, incluso con nuestros enemigos"."En esta Navidad, inicio del Año jubilar, invito a todas las personas, a todos los pueblos y naciones a armarse de valor para cruzar la Puerta, a hacerse peregrinos de esperanza, a silenciar las armas y superar las divisiones".En su mensaje, el papa también pidió "que el nacimiento del Salvador traiga un tiempo de esperanza a las familias de miles de niños que están muriendo a causa de la epidemia de sarampión en la República Democrática del Congo, así como a las poblaciones del oriente de ese país y a las de Burkina Faso, de Malí, de Níger y de Mozambique".También pidió paz para los países del Cuerno de África y "el acceso de la población civil de Sudán a las ayudas humanitarias y poner en marcha nuevas negociaciones con el propósito de un alto el fuego"."Que el Niño Jesús inspire a las autoridades políticas y a todas las personas de buena voluntad del continente americano, con el fin de encontrar lo antes posible soluciones eficaces en la verdad y la justicia, para promover la armonía social, en particular en Haití, Venezuela, Colombia y Nicaragua", pidió también el papa en su mensaje.No olvidó a los habitantes de Myanmar, que, a causa de los continuos enfrentamientos armados, padecen grandes sufrimientos y son obligados a huir de sus casas".Y deseo que "el Jubileo sea ocasión para derribar todos los muros de separación: los ideológicos, que tantas veces marcan la vida política, y los materiales, como la división que afecta desde hace ya cincuenta años a la isla de Chipre y que ha lacerado el tejido humano y social".El papa recordó también "a todos los niños que sufren por la guerra y el hambre" a "los ancianos, obligados muchas veces a vivir en condiciones de soledad y abandono" a "los que han perdido la propia casa o huyen de su tierra, tratando de encontrar un refugio seguro" , "a cuantos han perdido o no encuentran trabajo" y "a los encarcelados que, a pesar de todo, siguen siendo hijos de Dios".Francisco aprovechó también la ocasión para pedir "que el Jubileo sea la ocasión para perdonar las deudas, especialmente aquellas que gravan sobre los países más pobres".Y concluyó deseando a todos "una serena y santa Navidad" e impartiendo la bendición 'Urbi et Orbi'.
El papa Francisco empezará esta tarde de martes su agenda de Navidad que, en esta ocasión, coincidirá con la inauguración formal del Jubileo, un evento que cada cuarto de siglo ofrece la indulgencia de los pecados.Este Año Santo, que según las previsiones atraerá a Roma a unos 32 millones de personas a lo largo de 2025, comenzará a las 19:00 horas locales (18:00 GMT) con la apertura por parte del papa de la Puerta Santa de la basílica de San Pedro, un umbral que deberá ser cruzado por los peregrinos para obtener la indulgencia.Una vez iniciado el Jubileo, Francisco, que acaba de cumplir 88 años y ha pasado un nuevo resfriado, dará inicio a los ritos navideños con la tradicional Misa del Gallo de Nochebuena.Mañana 25 de diciembre presidirá la misa de Navidad y después impartirá su bendición 'Urbi et Orbi' (A la ciudad y el mundo) desde la logia central de la basílica, ante la plaza de San Pedro.Un día después, el 26 de diciembre, Francisco llevará el Jubileo a la cárcel romana de Rebibbia abriendo en su interior una Puerta Santa, como símbolo de esperanza y perdón, y después rezará el Ángelus.Los ritos proseguirán la semana próxima, el martes 31 de diciembre, con la celebración de las Primeras Vísperas y el canto del 'Te Deum' de agradecimiento por el año que termina.Mientras que en la mañana del 1 de enero oficiará la primera misa del 2025 por la Solemnidad de María Santísima Madre de Dios. Las fiestas terminarán con la misa por la Epifanía del Señor el día 6 de enero, tras la noche de Reyes.Francisco no tiene previsto abrir personalmente las Puertas Santas de las otras tres basílicas papales de Roma, las de San Juan de Letrán, Santa María La Mayor y San Pablo Extramuros.A pesar que la primera sí que la abrió en el Jubileo extraordinario de la Misericordia que celebró durante 2016 (estos eventos cristianos pueden ser ordinarios, cada 25 años, o extraordinarios, convocado ante hechos de particular importancia).