Colombia se posiciona en el sexto lugar del ranking de mejores economías de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) en 2024, según el informe elaborado por la revista británica The Economist. Este reconocimiento resalta el desempeño sobresaliente del país en indicadores clave como el producto interior bruto (PIB), el desempleo, la inflación subyacente, el desempeño bursátil y el déficit público, métricas utilizadas para elaborar la clasificación.En la lista, que evalúa a 37 países miembros de la OCDE, España ocupa el primer lugar y se consolidad como la mejor economía del grupo este año, mientras que Estonia cierra la tabla en la última posición. Después de España, los primeros puestos están ocupados por Irlanda, Dinamarca, Grecia e Italia, destacando la recuperación económica de los países del sur de Europa.Un logro significativo para ColombiaEl sexto lugar de Colombia la ubica como la nación mejor clasificada entre las latinoamericanas en este ranking, supera a Israel, que se encuentra en el séptimo puesto. Por su parte, Chile figura en el puesto 11 y México en el 16. En contraste, potencias tradicionales como Estados Unidos (puesto 20), Alemania (23), Japón (25) y el Reino Unido (31) han mostrado un desempeño menos favorable en el informe. Según The Economist, las economías del norte de Europa, tradicionalmente sólidas, como Alemania y el Reino Unido, han "decepcionado" en su desempeño, mientras que el dúo báltico formado por Letonia y Estonia ocupa nuevamente las últimas posiciones.Recuperación global en 2024El informe también destaca el contexto global, señalando que la economía mundial ha registrado un sólido desempeño este 2024. El Fondo Monetario Internacional (FMI) prevé un crecimiento global del PIB del 3,2 %, acompañado de una moderación en los niveles de inflación y un crecimiento sostenido del empleo.España, en particular, sobresale con un crecimiento del PIB proyectado superior al 3 %, impulsado por un mercado laboral robusto y una alta inmigración, que ha contribuido al incremento de la producción económica. Este contexto de recuperación económica mundial ha permitido que países como Colombia brillen en los rankings internacionales.
La economía colombiana crecerá este año un 1,8 %, que se ampliará al 2,7 % en 2025 y al 2,9 % en 2026, niveles que todavía están por debajo de los alcanzados antes de la pandemia, señala el informe semestral de Perspectivas de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE), divulgado este miércoles."El crecimiento volverá a su senda moderada" tras el 0,6 % de 2023 y "se espera que se recupere en 2024 y alcance su potencial de poco menos del 3 % en 2025 y 2026", indica el estudio.Estas proyecciones suponen una mejora para este año con respecto al 1,2 % previsto en el anterior informe semestral, presentado el pasado 2 de mayo, pero al mismo tiempo rebajan en 0,6 puntos el 3,3 % que el organismo había calculado para 2025."La inversión seguirá recuperándose a medida que se relajen las condiciones financieras, aunque la incertidumbre la mantendrá por debajo de los niveles de prepandemia", señala el documento, que apunta además a un "crecimiento moderado" del consumo apoyado en "la fortaleza del mercado laboral", mientras que las exportaciones se mantendrán sólidas.Las proyecciones de la OCDE son ligeramente inferiores a las del BBVA Research, que en su informe de octubre pasado calculó que el PIB colombiano crecerá un 2 % este año y acelerará en los dos próximos para llegar al 2,8 % en 2025 y al 3,5 % en 2026.En cuanto a la inflación, la OCDE considera que "seguirá disminuyendo lentamente, dada la alta indexación de precios, y volverá al objetivo del 3 % para finales de 2026".La inflación interanual de Colombia en octubre fue del 5,41 %, inferior en 0,4 puntos porcentuales a la de septiembre.Prudencia fiscalLa OCDE considera además que los principales riesgos de la economía colombiana son "los crecientes déficit fiscal y de cuenta corriente (...) que no dejan margen para riesgos", por lo cual recomienda "prudencia fiscal"."Una política fiscal prudente es clave para la sostenibilidad de la deuda" y para "mantener la senda prevista de consolidación fiscal y cumplir con la regla fiscal", agrega.Las proyecciones también llaman la atención sobre la tasa de interés, que sigue siendo elevada, del 9,75 % en noviembre, pese a que en diciembre de 2023 el Banco de la República (autoridad monetaria) inició un ciclo de recorte de los tipos."La flexibilización de la política monetaria debería continuar con cautela", justamente por los abultados déficit fiscal y de cuenta corriente, añade la OCDE, según la cual "se espera que el banco central pueda continuar su ciclo de flexibilización gradual" apoyado en la bajada de la inflación.Las proyecciones también subrayan la necesidad de, en el mediano plazo, "reducir las rigideces presupuestarias" y hacer "una reforma tributaria integral" para reequilibrar la carga desde el ingreso corporativo al personal, así como "reducir los gastos tributarios, simplificar el sistema y abordar la evasión fiscal".
La Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico respaldó algunas de las reformas del Gobierno de Gustavo Petro a las que calificó como un paso en la dirección correcta, pero sugirió cambios importantes a la reforma tributaria que plantea el Gobierno en medio del bajo crecimiento económico que podría tener el país en los próximos años.Para la OCDE, la reforma pensional avanzó en varias de las recomendaciones pasadas sobre el sistema de pensiones, incluyendo eliminar la competencia entre el régimen privado y el público y la creación del pilar solidario. Sin embargo, la entidad advirtió que a futuro se necesitará reducir el tamaño de las pensiones y posiblemente bajar el umbral de cotización a Colpensiones.La entidad también destacó que la reforma laboral propuesta por el Gobierno está en sintonía con los compromisos de Colombia después de su acceso a la OCDE especialmente en lo que tiene que ver con la negociación colectiva. La entidad dice que será un desafío sacar este punto adelante, ya que el capítulo sobre derechos colectivos se hundió en el Congreso.Subir el IVA y poner a más personas a pagar renta: las recomendaciones de la OCDE para la tributariaLa entidad también alabó la reforma tributaria de 2022, pues avanzó en la dirección correcta al eliminar exenciones. Sin embargo, es hora de una reforma tributaria integral."Una reforma tributaria integral, debidamente secuenciada e implementada gradualmente, no solo podría aumentar los ingresos para financiar las necesidades sociales, de infraestructura y de cambio climático, sino también mejorar la productividad y reducir las desigualdades”, indicó la entidad en su informe sobre el país.¿Qué debería tener esa reforma? Por un lado, una reducción del impuesto a las empresas, pero, por otro lado, un aumento de los impuestos a las personas. Según la organización, todos los colombianos deberían declarar renta y un mayor número de colombianos deberían pagar el impuesto. A su vez, el país debería igualar el IVA a la tarifa de 19 % para todos los productos y servicios y no solo para algunos.El Gobierno propuso desaparecer el régimen simple de tributación, la organización, en cambio, considera que es mejor mantenerlo y permitir que la economía popular pueda ser incluida en él. Al mismo tiempo, es hora de revisar de nuevo los beneficios tributarios a ciertos sectores y desmontarlos.“Facilitar una transición fluida entre el régimen simplificado y el general, ayudando y guiando a las empresas, incentivaría a las empresas a crecer y cambiar al régimen general”, agrega el documento.Otras recomendacionesFinalmente, la OCDE recomienda desmontar los subsidios a los servicios públicos en el país (energía, gas y agua), pues el 80 % está llegando a hogares que no son pobres. El país debería cambiar el sistema por un subsidio en dinero a hogares pobres o entregar el subsidio usando el Sisben y no los estratos.“En lugar de utilizar subsidios, sería mejor apoyar a los hogares vulnerables mediante transferencias monetarias focalizadas. Si no se pueden eliminar los subsidios a los servicios públicos, es necesario mejorar su focalización”, indicó.
Los salarios están recuperando poder adquisitivo en los últimos meses con la moderación de la inflación pero siguen estando en términos reales por debajo del nivel que había antes de la crisis del COVID en 16 de los 35 países de la OCDE en los que hay datos disponibles, España incluida.En su informe anual de perspectivas del empleo publicado este martes, la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) explica que de media en el primer trimestre de este año los salarios eran un 1,45 % superiores a los del cuarto trimestre de 2019, justo antes de que estallara la crisis del coronavirus.Sin embargo, la capacidad adquisitiva de los salarios sigue siendo inferior en países como Alemania (-2 %), Italia (-6,9 %), Suecia (-7,5 %), Australia (-4,8 %), España (-2,5 %) o Estados Unidos (-0,8 %).Eso contrasta con aquellos en los que los salarios reales (una vez descontado el impacto de la inflación) han subido más del 5 % en ese tiempo, como Costa Rica (5,1 %), Letonia (8,2 %), Lituania (16,5 %), Polonia (9,3 %), Hungría (13,5 %), Eslovenia (9,2 %), México (5,4 %) o Israel (6,8 %).En la presentación del informe a la prensa, el director del departamento de Empleo de la OCDE, Stefano Scarpetta, hizo notar que las pérdidas de poder adquisitivo que se acumulaban desde la crisis de la covid se están corrigiendo con la atenuación de la inflación.En el primer trimestre de 2024, el salario real había crecido en términos interanuales en 29 de los 35 países con cifras disponibles, con una media de progresión del 3,5 %, pero sólo del 1,1 % en España o del 1 % en Estados Unidos.La mayor progresión en doce meses se constataba en Costa Rica (16,4 %), aunque también superaba el 5 % en Letonia, Lituania, Polonia, Hungría, Eslovaquia, Eslovenia, México (5,7 %) y Austria.Las únicas excepciones a esas revalorizaciones eran las de Bélgica, Nueva Zelanda, Suecia y sobre todo Japón, donde los salarios habían perdido un 1,76 % de poder adquisitivo en doce meses.La evolución de los salarios mínimos en los países que los tienen ha sido notablemente diferente, ya que desde la crisis de la covid (en concreto entre mayo de 2019 y mayo de 2024) han aumentado en términos reales en todos salvo en Israel (-0,9 %) y en Estados Unidos (-18,46 %).En el caso de Estados Unidos, hay que tener en cuenta que si bien el salario mínimo federal no ha cambiado desde 2009, sí que lo han hecho los que están establecidos en los estados.Fuera de esa situación particular, de media en los 30 miembros de la OCDE en los que hay un salario mínimo nacional, el incremento en esos cuatro años fue del 12,8 %.Las progresiones fueron menos pronunciadas en Francia (0,9 %), Japón (6,3 %) o España (6,5 %), mientras estuvieron por encima de la media en Colombia (12,5 %), Alemania (13,2 %) o Reino Unido (13,3 %), por no hablar de Polonia (32,1 %), Turquía (41,7 %) y, sobre todo, México (86,6 %).En abril había en la OCDE 662 millones de empleos, una cifra un 3,8 % superior a la que había antes de la crisis de la covid.La tasa de paro estaba en únicamente un 4,9 % de la población activa, sólo una décima por encima del mínimo de la serie histórica que comienza en 2001. El aumento fue mayor para las mujeres (5 %) que para los hombres (3 %). Desarrolla este titular: La mitad de los países de la OCDE ya han recuperado los salarios: así le fue a Colombia
La Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) pronosticó para Colombia "otro año de crecimiento modesto", con una previsión del 1,2 % para 2024 y un repunte de hasta el 3,3 % en 2025, según su nuevo informe sobre perspectivas económicas para este y el próximo año.En estos nuevos pronósticos, difundidos este jueves, la OCDE mantuvo su previsión respecto al crecimiento de Colombia para 2024 que ya había hecho en noviembre del año pasado.El PIB colombiano creció en 2023 tan solo el 0,6 %, la mitad de lo esperado. En cuanto a la inflación, el documento señala que se está ralentizando gradualmente en Colombia, aunque sigue siendo elevada, y no se situará dentro del intervalo objetivo hasta el segundo semestre de 2025.Colombia registró una inflación interanual del 7,36 % en marzo pasado y el Banco de la República (autoridad monetaria) espera que el año próximo converja hacia la meta del 3 % anual.Además, la OCDE predijo una recuperación parcial de la inversión, que repuntará a partir del segundo semestre de 2024 "a medida que se relajen las condiciones financieras", aunque la incertidumbre "seguirá lastrando la inversión privada".También ayudaría a un incremento de la inversión una pronta resolución de la incertidumbre política sobre las reformas sociales, una mayor seguridad sobre la normativa de transición energética y una aplicación más rápida de la política de reindustrialización, según el informe de la OCDE.El organismo añadió que, mientras tanto, los planes fiscales prevén un aumento de la deuda pública en 2024, con varios factores que sugieren que el cumplimiento de la regla fiscal podría ser un reto.El consumo privado se mantendrá "sólido", apoyado por la desinflación, la relajación de la política monetaria y las importantes remesas; y las exportaciones crecerán moderadamente. De hecho, el consumo es un 20 % superior al de 2019, antes de la pandemia.En cuanto a los tipos de interés, la OCDE considera que el Banco de la República, que inició una política de relajación en diciembre de 2023 y este martes decidió bajarlos al 11,75 % anual, seguirá recortándolos, con "los tipos reales volviendo a una posición neutral a partir de mediados de 2025".RecomendacionesEn un contexto de caída de la inflación y una brecha de producción negativa, "la política monetaria debería continuar con su ciclo de relajación prudente y basado en datos, asegurando un retorno gradual de los tipos de interés reales hacia niveles neutrales", recomendó la OCDE a Colombia.La OCDE insistió en que es "necesario" mantener la consolidación fiscal y respetar las reglas fiscales para evitar el aumento de los niveles de deuda y responder a las preocupaciones de los inversores sobre la sostenibilidad fiscal."Revitalizar la inversión es esencial no sólo para el crecimiento a corto plazo, sino también para mejorar el potencial de crecimiento de Colombia, y es necesario para acelerar la convergencia de ingresos con los países avanzados y reducir la pobreza", añadió.La recuperación de la inversión pasa por "un compromiso continuado y demostrado con el tradicionalmente sólido marco macroeconómico, incluido el cumplimiento de la regla fiscal", agregó la proyección del organismo internacional.
Colombia y Grecia fueron en febrero los países de la OCDE que experimentaron el mayor incremento en la tasa de desempleo, de tres y cuatro décimas, respectivamente, con el indicador más alto, de 11 %, para este país mediterráneo, solo por detrás de España (11,5 %).La Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) señaló este miércoles en la publicación de sus datos mensuales que para el conjunto de sus miembros la tasa de desempleo se mantuvo estable en febrero en el 4,9 %, una décima por encima del mínimo histórico de la serie, que comenzó a contabilizarse en 2001.En el segundo mes del año la caída más significativa, de nueve décimas, la registró Noruega, mientras que para países como Australia (3,7 %), Corea del Sur (2,6 %) y la República Checa (2,6 %) fue de cuatro décimas.En la Unión Europea (UE) y en la zona euro, el desempleo se mantuvo sin cambios y en su nivel récord más bajo, 6 % y 6,5 %, respectivamente.El paro entre los más jóvenes, entre 15 y 24 años, se mantuvo estable en el 14,8 % en la UE y el 14,6 % en la zona euro, mientras que en el conjunto de la OCDE subió cinco décimas hasta el 10,9 %, con las subidas más notables en Colombia (+1,3 puntos, hasta el 21,7 %), Estados Unidos (+5 décimas al 8,8 %), Italia (+7 décimas al 22,8 %) y Japón (+5 décimas al 4,2 %).En cifras absolutas, los países con más desempleados de los 38 miembros eran Estados Unidos, que continúa este 2024 al alza tras haber superado en febrero los 6,45 millones, Turquía (3,07 millones), Colombia (2,70 millones) y España (2,77 millones).
Colombia fue en enero el país de la OCDE en el que más se redujo la tasa de desempleo, cuatro décimas, hasta el 10,4 %, con los datos de todos los miembros publicados este jueves.No obstante, Colombia siguió siendo el segundo con el nivel de paro más elevado de los 38 miembros sólo por detrás de España, que tenía un 11,6 % y una décima menos que en diciembre, explicó la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE), en un comunicado.La tasa de desempleo en el conjunto de la OCDE en enero se mantuvo estable en enero en el 4,8 %, es decir, en el mínimo de la serie histórica, que comenzó en 2001.En el primer mes del año hubo caídas significativas, además de en Colombia, en Austria (cuatro décimas al 5 %) y en Corea del Sur (dos décimas al 3 %).Por el contrario, el paro aumentó en seis países (Dinamarca, Finlandia, Lituania, Noruega, República Checa y Turquía).En la Unión Europea y en la zona euro, el desempleo se mantuvo sin cambios en niveles históricamente bajos (6 % y 6,4 %, respectivamente).En cifras absolutas, los países con más desempleados de los 38 miembros eran Estados Unidos (6,12 millones), Turquía (3,21 millones), España (2,79 millones) y Colombia (2,61 millones).
La Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) ha proyectado un crecimiento del 2,9% para la economía mundial en el año 2024, lo que representa un aumento de dos décimas en comparación con su estimación previa. A pesar de los riesgos relacionados con las tensiones en Oriente Medio, la OCDE sostiene su optimismo.Tensiones Geopolíticas y RiesgosLa OCDE señala que las tensiones geopolíticas actuales representan un riesgo significativo a corto plazo para la actividad económica y la inflación. Esto es especialmente relevante si los conflictos en Oriente Medio perturban los mercados energéticos, lo que podría tener un impacto en el costo del transporte a nivel mundial. Las recientes acciones de los rebeldes hutíes contra buques en el mar Rojo, una ruta marítima crucial que conecta Europa y Asia sin rodear África, han resaltado este riesgo.Perspectivas de crecimiento globalEn 2023, el crecimiento global se mantuvo resistente, alcanzando un 3,1% del Producto Interno Bruto (PIB). Sin embargo, se espera que la expansión global retroceda al 2,9% en el presente año, antes de experimentar una ligera recuperación al 3% en 2025, según las estimaciones de la OCDE.El informe también destaca el fuerte crecimiento en Estados Unidos, con un 2,5%, y en muchas economías emergentes, lo que compensó la desaceleración observada en la mayoría de los países europeos, incluyendo a Alemania, cuya economía se contrajo un 0,1%.Factores de apoyo al crecimientoLa OCDE anticipa que el gasto de los hogares y la solidez del mercado laboral continuarán respaldando el crecimiento en 2024. Además, se prevé una disminución más rápida de la inflación, que caerá al 2,2% este año, en comparación con el 2,8% proyectado previamente.Perspectivas RegionalesEn cuanto a las economías individuales, se espera que la economía de Estados Unidos crezca un 2,1% en 2024, lo que representa un aumento del 0,6% en comparación con la estimación anterior de noviembre. Por otro lado, la zona del euro experimentará un crecimiento del 0,6%, siendo afectada por un crecimiento menor de lo previsto en Alemania (0,3%) y Francia (0,6%). Italia y España, por su parte, crecerían al 0,7% y al 1,5%, respectivamente.Entre las economías emergentes, China se espera que registre un crecimiento del 4,7% en 2024, mientras que India experimentará un crecimiento del 6,2%, superando a Brasil (1,8%) y Rusia (1,8%).La economía de México se proyecta que crezca un 2,5%, mientras que Argentina enfrentaría una recesión del 2,3%, antes de recuperarse en 2025 con un crecimiento del 2,6%.La OCDE ha mantenido sin cambios sus previsiones para el Reino Unido en 2024, con un crecimiento del 0,7%, y para Japón, con un crecimiento del 1%. Estas son las perspectivas económicas actuales para el año 2024 según la OCDE, con un enfoque en la proyección de crecimiento global y regional.
En un breve comunicado en su cuenta de X, la embajada de los Estados Unidos en Colombia afirmó que el avance de una reforma laboral consensuada en el país asegurará que la mano de obra de Colombia sea competitiva en el mercado mundial y le dio su respaldo explícito a la intención de fortalecer los derechos sindicales.La comunicación llega en un momento propicio para el Gobierno que la está usando como un respaldo a su proyecto de ley en el momento en que se debate en el Congreso de la República. De hecho, el viceministro de Trabajo, Edwin Palma, y otras figuras del Gobierno le están dando difusión mientras que un grupo de congresistas aliado al Gobierno leyó el texto durante el debate.Por su parte, la oposición está leyendo el mismo texto de una forma distinta resaltando la necesidad de construir un consenso cosa que, dicen sus representantes, no ha ocurrido.Este es el texto completoEstados Unidos apoya los esfuerzos de Colombia para cumplir con sus compromisos laborales internacionales, incluidas las recomendaciones de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE), por medio de las discusiones de una reforma laboral.El Gobierno Biden-Harris está de acuerdo con que los trabajadores tengan voz colectiva y poder para influir en las normas que rigen sus lugares de trabajo.Nos complace que Colombia esté buscando abordar directamente las recomendaciones de la OCDE para reducir la informalidad laboral, eliminar la subcontratación abusiva, prohibir el uso indebido de los pactos colectivos y fortalecer los derechos de negociación colectiva.Estamos de acuerdo con que los sindicatos libres, fuertes, independientes y democráticos son un medio necesario para este fin y esenciales para la democracia.La firme adhesión a las normas laborales internacionales establecidas por la Organización Internacional del Trabajo ayuda a los trabajadores de todo el mundo a beneficiarse del crecimiento económico y a contribuir a democracias vibrantes.El avance de una reforma laboral consensuada asegurará que la mano de obra de Colombia sea competitiva en el mercado mundial.Le puede interesar:
Después de que el país se rajara en los resultados de las pruebas PISA en las que no les fue bien a los estudiantes en matemáticas, ciencia y lectura, el Ministerio de Educación anunció una reestructuración en el plan de clases que tienen los niños y jóvenes en el país para enderezar los resultados de los estudiantes que solo van a la baja.La ministra de Educación, Aurora Vergara, encargada de poner en práctica este ‘plan de choque’ para mejorar los resultados de los menores en el país aseguró que su cartera busca “en conexión con las conclusiones de los directores de educación de la OCDE es fundamental que los niños estén más tiempo en las escuelas. Es una apuesta de formación integral y resignificación de la jornada escolar es una respuesta a esos retos”, dijo la ministra.La hoja de ruta planteada por la ministra Vergara consiste en “incorporar en el currículum la formación integral que permita que cada escuela integre la formación socio emocional, la convivencia, la formación para el cuidado del medio ambiente y la formación para el reconocimiento de la equidad”, aseguró.Según el Ministerio de Educación se espera que el 30 % cuente con una oferta más diversa agregando espacios de cultura, música, artes, deportes y programaciónLos estudiantes colombianos obtuvieron en 2022 puntuaciones inferiores a la media de los países miembros de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) en matemáticas, lectura y ciencias, según la octava edición del informe PISA publicada este martes.El documento también señala que en Colombia el 17 % de los estudiantes declararon no sentirse seguros de camino a la escuela, cuando la media de la OCDE se sitúa en el 8 %, y el 7 % declaró no sentirse seguro en sus aulas, esto dentro de la media de la OCDE, agregó el informe del Programa Internacional para el Seguimiento de los Alumnos (PISA).En cuanto al rendimiento en las materias, el 29 % de los alumnos colombianos alcanzó al menos el nivel 2 de competencia en matemáticas, es decir, que pueden interpretar y reconocer, sin instrucciones directas, cómo se puede representar matemáticamente una situación sencilla.Esa cifra es significativamente inferior a la media del 69 % de los países de la OCDE, según el estudio.Le puede interesar: