El régimen de Nicolás Maduro dio a conocer un video del momento en el que funcionarios de la policía venezolana allanaron la habitación de un hotel en Caracas en el que dicen, se estaba escondiendo Roalmi Alberto Cabeza, el joven que conducía la moto en la que se transportaba María Corina Machado el jueves 9 de enero luego de asistir a las manifestaciones a las que ella y la oposición convocaron previo al día de la posesión presidencial.De acuerdo con la información entregada ese mismo día por el “Comando con Venezuela”, el conductor de la moto había resultado herido de bala. El viernes 10 de enero María Corina Machado publicó un video con los detalles sobre la retención de la que fue víctima por parte de uniformados al servicio del régimen venezolano y habló sobre el estado de salud del joven que la acompañaba cuando salió de las protestas en el este de Caracas.“Me tomó varias horas poder alejarme de la zona y resguardarme. Fue entonces cuando me enteré de que al conductor de una de las motos que me acompañaba a la salida de la manifestación le habían herido de bala en una pierda cuando efectivos de la guardia Nacional Bolivariana nos dispararon. También se lo llevaron preso”, dijo Machado.Sin embargo, en el video dado a conocer por el Ministerio del Interior venezolano, dirigido por Diosdado Cabello, el hombre identificado como Roalmi Cabeza no se ve herido como había dicho la oposición. En las imágenes, Cabeza aparece en pantaloneta mientras los funcionarios de la policía lo graban y le preguntan si está herido, a lo que el hombre responde que no. Además, le piden mostrar las piernas para verificar si presenta alguna lesión. Mientras registran el lugar, los policías lo graban “supuestamente” narrando cómo había sido la detención momentánea de María Corina Machado.Finalmente, Cabeza fue detenido y de acuerdo con las autoridades, le imputan los delitos de asociación para delinquir y simulación de hecho punible con el objetivo de generar zozobra en el país. La detención fue confirmada por el fiscal, Tarek William Saab.Aún no se conoce ninguna reacción de la familia de joven que había denunciado su desaparición desde el pasado jueves.
En diálogo con Mañanas Blu, Antonio Ledezma, exalcalde de Caracas y uno de los líderes más visibles de la oposición venezolana, analizó la situación actual del país tras la controvertida posesión de Nicolás Maduro. Ledezma afirmó que "nada los ha tomado por sorpresa", refiriéndose a la resistencia del régimen frente a una transición pacífica. Ledezma describió la situación política actual como la lucha contra una "banda delincuencial" que ha destruido el Estado de derecho en Venezuela. Criticó los intentos de Edmundo González y María Corina Machado de entrar al país, señalando que "para que él [González] pueda jurar como presidente, tiene que estar vivo y libre". Según Ledezma, las maniobras del régimen incluyen amenazas a la vida de los opositores. En ese sentido, aseguró que Venezuela se ha convertido en una corporación criminal, donde no existe un liderazgo único y la desconfianza predomina entre los líderes del régimen. "Como mafias, se reparten el poder y se desconfiaban entre ellos", detalló. A medida que la situación en Venezuela se vuelve crítica, Ledezma enfatizó la importancia del apoyo internacional formal, canalizado a través de mecanismos legales establecidos por organizaciones como la ONU. Habló sobre la posibilidad de sanciones dirigidas a los violadores de derechos humanos. "En Venezuela hay un régimen, un Estado fallido. Ya se perdió el Estado de derecho", dijo. A esto agregó que, "una vez sale Chávez y entra Maduro no hay un liderazgo claro (...) Entre varios se alternan la toma de decisiones". Intervención militarEn relación con la propuesta de intervención militar multinacional por parte de otros líderes, Ledezma prefirió no comentar sobre acciones específicas, destacando la importancia de respetar los mecanismos legales internacionales antes de considerar acciones de este tipo. "Nicolás Maduro sabe que Diosdado Cabello es el único que lo puede sacar del juego", dojo sobre cómo se mueve el poder en el país. "Seguimos luchando porque nos asiste la razón", con la firme determinación de buscar un futuro mejor para el pueblo venezolano. Su mensaje final fue claro: la lucha no se detendrá hasta lograr la justicia y la libertad en Venezuela. Escuche aquí la entrevista:
En entrevista con el programa Mañanas Blu, el ministro de Relaciones Exteriores de Colombia, Luis Gilberto Murillo, aclaró la posición del país respecto a la participación del embajador colombiano en el acto de posesión de Nicolás Maduro, y dijo que dicha presencia no implica un reconocimiento al Gobierno venezolano ni a los resultados de las últimas elecciones en ese país."Colombia no reconoce los resultados en Venezuela porque, sin actas públicas y transparentes, no podemos avalar ese proceso", afirmó Murillo. No obstante, el canciller subrayó la importancia de mantener canales de comunicación abiertos entre ambos países debido a la compleja dinámica fronteriza, que abarca temas de seguridad, comercio y relaciones humanitarias.Relaciones de Estado a Estado: una necesidad estratégicaEl canciller Murillo insistió en que la decisión de enviar al embajador colombiano a la ceremonia fue resultado de una evaluación prudente, tomando en cuenta factores históricos y geopolíticos. "Nosotros hemos tomado unas decisiones y que han sido muy claras: no reconocemos, obviamente no reconocemos y se tomó la decisión de que ni el presidente Petro, ni los funcionarios de alto nivel de Bogotá, como le llaman en el mundo diplomático de capital, irían al acto de posesión. El embajador, pues ustedes allá, es el embajador, tiene que hacer presencia. Yo usaba mucho eso de que tiene que hacer presencia en un acto de estos, porque tenemos una relación de Estado a Estado y de ninguna manera esto significa el reconocimiento de los resultados electorales ni del Gobierno. Eso se estila obviamente en la relación diplomática", dijo.El diplomático también destacó que la reanudación de las relaciones con Venezuela, tras años de ruptura, ha tenido impactos positivos en la economía y la seguridad de las regiones fronterizas. "Desde la reapertura, el comercio bilateral ha crecido, pasando de cero a más de $1.200 millones de dólares en intercambio comercial. Además, se ha registrado una notable disminución en las tasas de homicidio en Cúcuta y su área metropolitana", agregó.Impacto en la paz y la seguridad regionalOtro punto clave que mencionó el canciller fue el papel de la frontera en el proceso de paz en Colombia. Murillo recordó que en estas regiones actúan grupos armados ilegales, cuya dinámica influye directamente en las negociaciones de paz que adelanta el gobierno de Gustavo Petro. "Cualquier manejo imprudente de la relación con Venezuela podría desencadenar un aumento de la actividad criminal en la frontera. Por eso, mantener el diálogo es una cuestión de seguridad nacional", precisó.Asimismo, reiteró la importancia de la colaboración entre ambas naciones en asuntos humanitarios, considerando que Colombia alberga cerca de tres millones de migrantes venezolanos y que una parte significativa de la población colombiana reside en territorio venezolano."Nuestra política exterior debe responder a esta realidad. No podemos permitir que decisiones precipitadas afecten a quienes dependen de una relación estable entre los dos países", puntualizó.Una postura diferente a la de otros paísesAnte la pregunta sobre la decisión de Chile de no enviar representantes al acto de posesión de Maduro, Murillo reconoció que cada país maneja sus relaciones exteriores según sus propios intereses y contextos. "Respetamos la posición de Chile, pero su situación es distinta. Colombia comparte una frontera de más de 2.200 kilómetros con Venezuela y cualquier cierre abrupto podría causar un caos humanitario y económico", sostuvo el canciller.El jefe de la diplomacia colombiana concluyó señalando que la postura del gobierno de Petro es "responsable y prudente", y que continuará promoviendo el diálogo y la búsqueda de soluciones pacíficas en Venezuela, siempre velando por el bienestar de la población fronteriza. "La política exterior no se mide solo por los principios, sino también por su capacidad de proteger a los ciudadanos y fomentar el desarrollo", enfatizó.
Desde el estado fronterizo de Venezuela y Colombia Táchira, su gobernador, Fredy Bernal arremetió fuertemente contra el expresidente Álvaro Uribe Vélez por cuenta de su propuesta de una intervención en el vecino país, esto luego de la posesión del presidente Nicolás Maduro. Vestido de policía y acompañado de demás militares y alcaldes de municipios de ese Estado, arremetió fuertemente contra el exmandatario. "Resulta que este personaje mafioso de Colombia, artífice de masacres de asesinatos, socios de Pablo Escobar, se atreve a pedir una intervención militar en Venezuela. Ya lo dijo el comandante Chávez: no te faltó tiempo, Uribe, te faltaron cojones: con Bolívar, Chávez y Nicolás te esperamos", aseguró. El líder chavista Nicolás Maduro, quien juró este viernes como presidente de Venezuela pese a las denuncias de la oposición y del desconocimiento de gran parte de la comunidad internacional, dijo este sábado que en el país "nadie quiere la intervención militar", después de que del exmandatario Álvaro Uribe solicitara la "intervención internacional", sin precisar de qué tipo."Nadie quiere la intervención militar (a la) que llama Uribe. Nadie quiere más sanciones, nadie quiere más violencia", afirmó Maduro, al intervenir en la clausura del Festival Mundial Internacional Antifascista, convocado por el chavismo como parte de las actividades paralelas al acto de investidura.Este sábado, Uribe (2002-2010) solicitó una "intervención internacional" en Venezuela, que esté avalada por Naciones Unidas, para sacar del poder a Maduro."Pedimos una intervención internacional, preferiblemente avalada por las Naciones Unidas, que desaloje a esos tiranos del poder y convoque de inmediato a unas elecciones libres", expresó el exmandatario durante un acto político en Cúcuta, que tiene el principal paso fronterizo de Colombia con Venezuela.La propuesta fue apoyada por el exgobernante Iván Duque, quien indicó en su cuenta de X que González Urrutia, "debe convocar a la comunidad internacional y especialmente a los países del sistema interamericano, al igual que otros países comprometidos con la democracia, para que adelanten una intervención humanitaria en Venezuela que permita la protección de los Derechos Humanos y el restablecimiento del orden democrático".
En la mañana de este lunes, 13 de enero, se habilitó nuevamente el paso por los puentes Simón Bolívar y Francisco de Paula Santander, que conectan a Colombia y Venezuela en el departamento de Norte de Santander. La movilidad en la frontera se normalizó en ambos sentidos tras el cierre de 72 horas ordenado unilateralmente por el gobierno venezolano el pasado viernes.De acuerdo con la Cancillería colombiana, la decisión del cierre fue tomada sin previo aviso por parte del régimen de Nicolás Maduro, afectando a millas de personas que dependen del tránsito fronterizo. Durante este período, se instalaron contenedores en los pasos fronterizos, bloqueando el paso vehicular y peatonal.Impacto en la comunidad fronterizaEl cierre generó caos y dificultades para los habitantes de la región, especialmente para los ciudadanos venezolanos que cruzan diariamente hacia Colombia en busca de alimentos, medicamentos y otros productos básicos. Desde la madrugada del viernes, se reportaron largas filas y escenas de tensión en los puntos de acceso, mientras los habitantes intentaban adaptarse a las restricciones impuestas.Reacciones y reaperturaLa reapertura de los pasos fronterizos fue recibida con alivio por parte de la comunidad. Autoridades locales y organismos internacionales han reiterado la importancia de garantizar el libre tránsito en la región, especialmente en una zona donde millas de familias dependen del comercio y la movilidad entre ambos países.Aunque no se han detallado las razones detrás del cierre, se espera que las relaciones diplomáticas entre Colombia y Venezuela sigan siendo determinantes para evitar este tipo de medidas unilaterales que afectan a la población de la zona fronteriza.La situación en la frontera fue monitpreada constantemente por el canciller Luis Gilberto Murillo que viajó en compañía del ministro del Interior, Juan Fernando Cristo, y de delegados de Migración Colombia. También tendrá comunicación con las autoridades venezolanas para conocer lo que pueda estar sucediendo. Y es que la preocupación del Gobierno colombiano recae en que lo sucedido con la posesión de Nicolás Maduro desate una nueva ola migratoria.
El Gobierno de Cuba rechazó este domingo el pedido del exgobernante Álvaro Uribe de una "intervención internacional" en Venezuela para sacar del poder al líder chavista Nicolás Maduro y advirtió que tendría consecuencias "impredecibles" para la región."Las irresponsables peticiones de una intervención militar internacional en Venezuela, que formulan varios actores, son un hecho grave que rechazamos y que, de avanzarse en dicha aventura, tendría consecuencias considerables e impredecibles para la paz y seguridad regionales", señaló el canciller cubano Bruno Rodríguez en redes sociales.Maduro juró este viernes ante la Asamblea Nacional (AN, Parlamento) como mandatario para un tercer sexenio consecutivo en el poder (2025-2031), pese a que la oposición mayoritaria reclama el triunfo electoral de su líder, Edmundo González, quien asegura que fue el ganador de los comicios de julio pasado.El líder del chavismo fue proclamado ganador de los comicios presidenciales del pasado 28 de julio por el Consejo Nacional Electoral (CNE), controlado por el chavismo, con base en unos resultados que aún se desconocen de forma desglosada, a pesar de que el cronograma oficial aprobado para la celebración de estas votaciones contemplaba su publicación.Este sábado, Uribe (2002-2010) planteó la posibilidad de una "intervención internacional" en Venezuela, "avalada por las Naciones Unidas, que desaloje a esos tiranos del poder y convoque de inmediato a unas elecciones libres", propuesta que fue apoyada por el también expresidente colombiano Iván Duque (2018-2022).En respuesta, Maduro avisó que Venezuela se prepara junto con Cuba y Nicaragua para "tomar las armas", de ser necesario, con el fin de defender "el derecho a la paz, a la soberanía y los derechos históricos de nuestra patria", y recalcó que "nadie se equivoque" con el país suramericano.Además sostuvo que, "si se diera el caso", deberían tener la capacidad de "enfrentarlo con las armas en la mano" y "con la lucha armada legítima"."Nadie quiere la intervención militar (a la) que llama Uribe", concluyó.