El viceministro de Diálogo Social y Derechos Humanos, Gabriel Rondón, negó de manera categórica que grupos armados estén movilizando a comunidades indígenas en el departamento del Cauca. Durante una entrevista en Mañanas Blu con Néstor Morales, Rondón enfatizó que sería “irresponsable” y una “estigmatización total” afirmar que los indígenas Misak, quienes han estado involucrados en recientes protestas y bloqueos, están siendo dirigidos por organizaciones criminales.La situación en el Cauca: un panorama complejoEn medio de las tensiones actuales en el Cauca, el Gobierno ha desplegado esfuerzos para mantener un diálogo con las comunidades indígenas que protagonizan las protestas. El viceministro Rondón, quien se encuentra en la región, explicó que las negociaciones con los Misak y otros pueblos indígenas han estado centradas en demandas relacionadas con la agricultura, la salud, y la educación, entre otros temas.Este reconocimiento es crucial para los Misak, ya que les permitiría un mayor acceso a recursos públicos y un reconocimiento político dentro del marco institucional colombiano. Sin embargo, Rondón destacó que este tipo de decisiones no pueden ser tomadas unilateralmente por el Gobierno sin romper con la autonomía de los pueblos indígenas. Rechazo a la violencia y a la estigmatizaciónEl viceministro fue cuestionado sobre la posible participación de los Misak en un atentado con una motobomba que se produjo cerca de las protestas, a lo que respondió que estos hechos están bajo investigación por parte de la Fiscalía General de la Nación. Subrayó que, si bien hay investigaciones en curso, no hay evidencia de que los Misak estén involucrados en actos de terrorismo. "Decir que detrás están organizados o dirigidos por grupos armados sería una irresponsabilidad", insistió Rondón al enfatizar que hay hacer una clara distinción entre la protesta social legítima y las acciones terroristas que podrían aprovecharse de estas movilizaciones.El ministro también aclaró que, aunque algunos grupos armados podrían intentar “camuflarse” en el contexto de la protesta social para cometer actos de terrorismo, esto no implica que las organizaciones indígenas estén colaborando con ellos.La coordinación de las protestas indígenas: ¿coincidencia o estrategia?Otro tema abordado durante la entrevista fue la coincidencia temporal de varias protestas indígenas en diferentes partes del país, lo que ha generado sospechas sobre una posible coordinación nacional.En la última semana, se han registrado bloqueos en la Panamericana, la vía entre Risaralda y Quibdó, y entre Medellín y Urabá, así como la llegada de la Minga Indígena a Bogotá.Al respecto, Rondón atribuyó estas coincidencias a las dinámicas internas de las organizaciones indígenas y no a una conspiración orquestada por grupos armados.“Son dinámicas propias de las organizaciones. Claramente los pueblos indígenas tienen coordinaciones a nivel nacional, no digo que esto esté pasando, pero pues digamos, hay unas coincidencias que también podrían entrar un análisis un poco más profundo”, comentó.
En entrevista con Mañanas Blu, con Néstor Morales, Édgar Velasco, líder indígena misak, defendió la toma de la sede de la revista Semana, ocurrida el pasado viernes, en medio de su visita a Bogotá. Velasco enfatizó en la necesidad de aclarar y desvirtuar información errónea que se había difundido sobre las acciones de su comunidad. Según sus declaraciones, la toma de la revista Semana fue una protesta pacífica, originada por una supuesta desinformación de la directora del medio, que reportaba el ingreso a la fuerza de miembros de su comunidad a la Casa de Nariño."Una afirmación que hizo Vicky Dávila, que prácticamente nosotros intentamos entrar a la fuerza a la Casa de Nariño. Así que mejor dicho decía que intentamos, prácticamente, casi tomar la casa. Creo que es muy importante que antes de hacer aseveraciones, afirmaciones, es muy importante llamarnos, o sea, tan simple y sencillo como es llamar, preguntar, investigar, y de manera objetiva poder dar una o dos noticias sobre lo que acontecía en ese momento", declaró Velasco.El líder indígena también explicó que la presencia de los misak en la Casa de Nariño se debió a una cita con la viceministra Lilia Solano, que no había sido cumplida. Sin embargo, negó rotundamente que su comunidad hubiera llegado a la puerta de la Casa de Nariño, como se sugería en algunos informes. Según él, se encontraban a varias cuadras de distancia de dicha ubicación y nunca intentaron ingresar a la residencia presidencial."Somos jueces"Durante la entrevista, Velasco afirmó que los indígenas misak también son jueces en Colombia, haciendo referencia a su sistema de justicia tradicional en sus territorios. Si bien Velasco aclaró que no se consideraban jueces en Bogotá, defendió el derecho de su comunidad a la protesta pacífica en cualquier parte del país. La entrada de los indígenas a SemanaUn grupo de indígenas entró el pasado viernes a la fuerza a las instalaciones en Bogotá de la revista Semana, donde causaron destrozos en un vidrio de la entrada del edificio e intimidaron a las personas que allí se encontraban.Ante esa situación, que no dejó personas lesionadas, a la sede de Semana, ubicada en el norte de la ciudad, llegó el Escuadrón Móvil Antidisturbios de la Policía (Esmad) y retomó el orden.La Fiscalía señaló que miembros del Cuerpo Técnico de Investigación se desplazaron a "las instalaciones de la revista Semana, en Bogotá, para investigar la irrupción de un grupo de personas que, al parecer, ingresó a la sede de manera violenta".