Un juez de un tribunal de segunda instancia de Brasil concedió este lunes la libertad al expresidente Michel Temer (2016-2018), preso preventivamente desde el pasado jueves por sospechas de corrupción, confirmaron fuentes oficiales. La decisión fue tomada por el juez Antonio Ivan Athié, del Tribunal Regional Federal de la 2 Región, corte de segunda instancia que tenía previsto analizar el miércoles de esta semana y de forma colegiada un recurso de habeas corpus interpuesto por la defensa de Temer. El exmandatario, de 78 años, permanecía en una sala especial en la Superintendencia Regional de la Policía Federal de Río de Janeiro, tras su arresto por su supuesta implicación en un caso vinculado con la Operación Lava Jato, el mayor escándalo de corrupción de la historia del país.
La Policía Federal brasileña arrestó este jueves al expresidente Michel Temer (2016-2018) en un caso vinculado a la Lava Jato, como es conocida la mayor operación de combate a la corrupción en la historia de Brasil y que destapó un gigantesco escándalo de desvíos de la petrolera estatal Petrobras. La detención de Temer fue ordenada por el juez federal de Río de Janeiro, Marcelo Bretas, que también solicitó el arresto del exministro Wellington Moreira Franco, un importante colaborador del expresidente y su correligionario en el partido Movimiento Democrático Brasileño (MDB).Conozca más: Corte Suprema brasileña autoriza levantamiento de secreto bancario de Temer La Fiscalía llegó a solicitar dos veces ante la Corte Suprema la apertura de juicios por corrupción contra Temer pero el Congreso se negó a autorizar los procedimientos, por lo que todas las causas en su contra dependían de la pérdida del fuero privilegiado con el fin de su mandato.Los procesos contra el exmandatario fueron remitidos a jueces de primera instancia una vez que perdió el fuero privilegiado, por lo que ya se esperaban medidas judiciales en su contra. Temer se ha convertido en el segundo jefe de Estado en ser detenido en Brasil por casos vinculados al Java Jato ya que Luiz Inácio Lula da Silva (2003-2010) cumple desde abril del año pasado dos condenadas de 12 años de prisión por corrupción y lavado de dinero.Vea también: Corte Suprema brasileña autoriza levantamiento de secreto bancario de Temer Temer, que era el vicepresidente del país desde 2011 y asumió la jefatura del Estado en 2016 luego de que el Congreso destituyera a Dilma Rousseff por irregularidades en la presentación de las cuentas públicas, fue detenido en la mañana de este jueves en su residencia, en Sao Paulo, la mayor ciudad de Brasil. De acuerdo con fuentes judiciales, el exmandatario será trasladado a Río de Janeiro este mismo jueves para el respectivo examen de cuerpo de delito y para que rinda indagatoria ante el juez que ordenó su detención preventiva, es decir sin plazo para su liberación. Lo más probable es que sea recluido en las celdas de la sede de la Superintendencia de la Policía Federal en Río de Janeiro, a donde son conducidos los detenidos por casos de la Lava Jato en esta ciudad. La detención fue ordenada en el marco de una investigación abierta para verificar supuestas irregularidades en contratos firmados por empresas ya condenadas por la Lava Jato y Eletronuclear, la estatal que opera las plantas nucleares del país.En contexto: Empresario brasileño confiesa sobornos a Temer desde 2010 Según la denuncia, las empresas que se adjudicaron los contratos con Eletronuclear pagaron sobornos para favorecer a dirigentes del MDB, la formación liderada por Temer y cuyos dirigentes controlaron por muchos años todas las estatales del sector eléctrico del país. Tales contratos sospechosos fueron firmados en 2016 cuando Temer ya presidía Brasil. La denuncia fue hecha por el propietario de la empresa Engevix, José Antunes Sobrinho, que aceptó colaborar con la Justicia y delatar a sus cómplices en diferentes corruptelas a cambio de la reducción de sus condenas. El empresario aseguró que pagó sobornos a petición del coronel de la reserva Joao Baptista Filma Filho, un amigo muy cercano de Temer y cuya prisión también fue ordenada, para adjudicarse uno de los contratos en la construcción de la central nuclear Angra 3. De acuerdo con Antunes Sobrinho, el pago de las comisiones ilegales para favorecer al MDB era de conocimiento tanto de Temer como de Moreira Franco, que fue secretario general de la Presidencia y secretario de Aviación Civil en el Gobierno de Temer, así como secretario de Asuntos Estratégicos de la Presidencia en el Gobierno de Rousseff. El expresidente responde actualmente a diez procesos, cinco de los cuales estaban en manos de la Corte Suprema por el fuero privilegiado pero que ya comenzaron a ser analizados por jueces de primera instancia. Las otros cinco investigaciones fueron abiertas en enero de este año, cuando Temer ya no contaba con el fuero privilegiado, por orden del magistrado Luis Roberto Barroso.
La Policía Federal pidió que once de los investigados en un escándalo de corrupción, entre ellos el presidente de Brasil, Michel Temer, sean imputados por la Fiscalía por los delitos de asociación para delinquir, corrupción y lavado de dinero, informaron fuentes oficiales. La petición fue hecha en el informe final que la Policía Federal entregó a la Corte Suprema sobre la investigación que realizó para verificar un supuesto pago de sobornos que salpica directamente al jefe de Estado y en el que concluyó que existen indicios contundentes contra los acusados que justifican su imputación. Las autoridades investigan si un decreto sancionado por Temer en 2017 y que alteró la ley de puertos benefició a algunas de la empresa del sector, entre ellas Rodrimar, a cambio de sobornos pagados al partido Movimiento Democrático Brasileño (MDB), que lidera el propio jefe de Estado. El informe final de la investigación sobre el escándalo de los puertos fue remitido al magistrado Luis Roberto Barroso, responsable por el caso en la Corte Suprema, quien divulgó este martes una decisión judicial en la que dio a conocer las conclusiones de la Policía Federal. En su decisión, el magistrado le pide a la Fiscalía que analice los indicios recogidos por la Policía Federal y determine si pide la imputación de los acusados y la apertura de un juicio o el archivo del caso. En la lista de acusados a los que se les pide su imputación, encabezada por Temer, la Policía incluyó a una de las hijas del mandatario, Maristela Temer; al coronel retirado de la Policía Joao Baptista Lima Filho, un viejo amigo del mandatario; y al exdiputado Rodrigo Rocha Loures, quien fue asesor especial del jefe de Estado. La Policía Federal también le pidió a la Corte Suprema que ordene la detención preventiva de Lima Filho y de otros tres de los investigados para evitar su posible fuga o la destrucción de pruebas. Tras 13 meses de investigaciones, la Policía Federal concluyó que las empresas Rodrimar y Libra, dos de las beneficiadas por el decreto de Temer, pagaron a cambio millonarios sobornos mediante una operación financiera que utilizó como intermediarias empresas de propiedad de Lima Filho. De acuerdo con la Policía Federal, las empresas del amigo de Temer financiaron, entre otras cosas, una millonaria reforma arquitectónica en la residencia de la hija del jefe de Estado que fue pagada con dinero en efectivo. Rodrimar y Libra son concesionarias del puerto de Santos, un reducto de influencia política de Temer, y sus contratos fueron prorrogados sin contrapartida gracias al decreto del jefe de Estado. Los investigadores tuvieron acceso a las cuentas bancarias y fiscales de todos los acusados, incluyendo las de Temer, luego de que el respectivo sigilo fuera levantado por la Corte Suprema. La Policía llegó a detener en marzo pasado a diez de los investigados, entre los cuales Lima Filho y otros dos allegados a Temer, pero la Fiscalía solicitó la revocación de las detenciones pocos días después. La investigación del decreto de puertos fue instaurada en septiembre de 2017 a partir de revelaciones y pruebas recogidas en acuerdos de colaboración premiada con algunos acusados. En su defensa, enviada por escrito, el presidente alegó que su decreto no favoreció indebidamente a ninguna empresa; que jamás recibió sobornos por sus actos como gobernante y que Lima Filho no estaba autorizado a recibir dinero en su nombre. Desde que asumió la Presidencia, en 2016, Temer ha sido objeto de diversas sospechas de corrupción que incluso, en dos ocasiones, llegaron a convertirse en denuncias formales presentadas por la Fiscalía General ante la Corte Suprema. Sin embargo, en ambos casos, la Cámara de Diputados se negó a despojarle de sus fueros e impidió la eventual apertura de un juicio penal en su contra. Las investigaciones continúan, pero en cualquiera de los casos solamente podrán llegar a los tribunales a partir del próximo 1 de enero, cuando Temer concluirá su mandato y le entregará el poder al ganador de las elecciones que se celebrarán el 18 de octubre.
Los presidentes de Brasil Michel Temer y su homólogo de Colombia Juan Manuel Santos, advirtieron que ha incrementado el número de venezolanos huyendo a estos países y le hicieron un llamado al gobierno de Venezuela para que acepte ayuda humanitaria.Según Temer, el tema se ha convertido en un dolor de cabeza para ambas naciones. “La diáspora venezolana, para Brasil y Colombia, perturba a los países de Latinoamérica. Hay que dejar claro que nuestra relación con Venezuela es institucional, de estado para estado, pero no quiere decir que nosotros auspiciamos lo que hacen en Venezuela en el enfoque político”.Vea aquí: Presidente Santos respaldó a Reino Unido tras envenenamiento de exespía rusoPor su parte, el presidente Santos volvió a hacerle un llamado a su homólogo Nicolás Maduro.“Hacemos un llamado al presidente Maduro para que acepte la ayuda humanitaria que varios países de la región han ofrecido. No entendemos cómo se rehúsan a recibir la ayuda cuando la crisis humanitaria crece día tras día”, señaló. Ambos mandatarios anunciaron que seguirán cooperando y buscando la pronta recuperación de la democracia en Venezuela. El encuentro también se concentró en temas de comercio y seguridad.
Este lunes, en horas de la noche, aterrizó el presidente Juan Manuel Santos en Brasilia, Brasil, donde hará una visita oficial.La agenda iniciará este martes con una cumbre empresarial cuyo propósito es fortalecer las relaciones comerciales.Hay que destacar que en la actualidad hay cerca de 50 empresas brasileñas establecidas en Colombia.Lea también: Colombia fortalece cooperación en economía y medioambiente con Mónaco. A las 9:00 de la mañana, hora Colombia, el presidente Santos llegará al Palacio de Planalto, sede presidencial, donde será recibido con honores militares.Allí tendrá una reunión bilateral con el presidente Michel Temer y un encuentro ampliado con los ministros. Se abordarán temas de coyuntura y de interés regional, como la migración de venezolanos, la lucha contra el crimen organizado, el comercio, la paz, entre otros temas.A mediodía de Colombia, Santos participará en un foro sobre la inversión en la primera infancia para mejorar las políticas y los programas dirigidos a los más pequeños.En su visita a Brasil, Santos estará acompañado por los ministros de Relaciones Exteriores, María Ángela Holguín; Defensa Nacional, Luis Carlos Villegas; Agricultura y Desarrollo Rural, Juan Guillermo Zuluaga; Comercio, Industria y Turismo, María Lorena Gutiérrez, y Ambiente, Luis Gilberto Murillo; el embajador en Brasil, Alejandro Borda; el gerente para la frontera colombo-venezolana Felipe Muñoz, y una delegación empresarial.
El magistrado Luís Roberto Barroso, de la Corte Suprema de Brasil, autorizó el levantamiento del secreto bancario del presidente Michel Temer en el marco de una investigación abierta en su contra por supuesto fraude en un decreto del sector portuario, informaron hoy fuentes oficiales.Vea aquí: Policía Federal de Brasil tiene indicios de actos de corrupción del presidente Michel TemerEn ese caso, las autoridades investigan si un decreto sancionado por Temer y que alteró la ley de puertos benefició a la empresa Rodrimar a cambio de sobornos pagados al partido Movimiento Democrático Brasileño (MDB), que lidera el propio jefe de Estado.
La Fiscalía denunció al presidente brasileño, Michel Temer, por corrupción pasiva, cargo que solo será aceptado tras un análisis del Supremo y con el aval de la Cámara Baja, informaron fuentes oficiales. El primer análisis de la denuncia será hecha por el juez Edson Fachin, instructor del caso en la Corte Suprema, quien decidirá luego si la remite a la Cámara Baja, que tendrá la última palabra sobre el asunto por normas constitucionales, según las cuales Temer será suspendido de sus funciones por 180 días si fuera aceptada. Es la primera vez que un mandatario brasileño en pleno ejercicio del poder es acusado formalmente de haber cometido delitos de tipo penal, como es el caso. En medios políticos y jurídicos esta denuncia se daba como un hecho, sobre todo porque el fiscal general, Rodrigo Janot, adelantó la semana pasada su convicción de que Temer "recibió ventajas ilícitas" del grupo JBS, que supuestamente negociaba su antiguo asesor Rodrigo Rocha Loures, hoy en prisión por ese mismo asunto. El mismo convencimiento ha mostrado la Policía Federal, a cargo de las investigaciones y que en un informe preliminar entregado la semana pasada al Supremo sostuvo que existen "serios indicios" de que el mandatario incurrió "con vigor" en prácticas corruptas. En otro informe entregado hoy, la Policía Federal concluyó que Temer también intentó "obstaculizar investigaciones" y "dejó de comunicar a las autoridades" sobre maniobras corruptas de las que tuvo conocimiento, lo que pudiera generar otras denuncias. Las sospechas se desprenden de confesiones hechas por directivos del grupo JBS, quienes han declarado que sobornan al mandatario desde 2010 y además han entregado a la justicia unas grabaciones que comprometen al gobernante. En esos audios, Temer escucha en silencio y hasta consiente unas maniobras irregulares que el dueño de JBS, Joesley Batista, dice que realiza en favor de su grupo tanto con autoridades del Gobierno como con representantes del poder judicial. Esas grabaciones fueron hechas por Batista durante una visita que hizo a Temer en marzo pasado, por lo que la sospecha que se teje en torno al mandatario se refiere a hechos ocurridos en el ejercicio de su mandato, algo que la Constitución impone como requisito para que un gobernante pueda ser objeto de un proceso penal. En caso de que el juez Fachin considere procedente la denuncia, la decisión final será tomada por la Cámara de Diputados, que la analizará primero en la Comisión de Constitución y Justicia y luego en el pleno del órgano legislativo. En caso de que los diputados avalen la denuncia con una mayoría de dos tercios del pleno, Temer sería suspendido de sus funciones durante un plazo de 180 días y su vacante sería cubierta en forma interina por el presidente de la Cámara Baja, Rodrigo Maia. Si fuera finalmente condenado, en un plazo de treinta días Maia debería convocar a las dos cámaras legislativas para elegir en forma indirecta a quien completaría el período presidencial, que en este caso concluye el 1 de enero de 2019. Sin embargo, todo eso quedaría en nada si los diputados rechazan la denuncia, pues eso obligaría al Supremo a archivar el caso y el presidente continuaría en el poder. El actual mandato presidencial lo inició el 1 de enero de 2015 Dilma Rousseff, quien fue destituida por irregularidades fiscales el año pasado y sustituida por Temer, quien entonces ocupaba el cargo de vicepresidente. En caso de que la Fiscalía finalmente denuncie a Temer, será la primera vez que un mandatario brasileño en pleno ejercicio del poder sea acusado formalmente de haber cometido delitos de tipo penal.
El dueño del gigante cárnico JBS, Joesley Batista, prestó testimonio ante la Policía Federal de Brasil este viernes y ratificó las denuncias contra el presidente Michel Temer que hizo por un acuerdo de delación con la Fiscalía, informó el portal G1. Entre otros puntos, Batista afirmó que el presidente Michel Temer fue partícipe de un esquema de pago de sobornos, y presentó una grabación en la que él y el mandatario conversaban sobre el tema, en la residencia oficial el 7 de marzo. Batista "reforzó (ante la PF) la verdad dicha en su testimonio en el marco de la colaboración (con el Ministerio Público), apenas la verdad de los hechos, o sea, confirmó lo que ya fue dicho y probado", dijo la defensa del empresario, según G1. A mediados de mayo, la Fiscalía General de la República pidió a la corte suprema investigar al presidente Temer por corrupción pasiva y obstrucción de la justicia, en base a las revelaciones de Batista. Se estima que Rodrigo Janot, máxima figura de la institución, presente la denuncia contra el mandatario conservador la próxima semana ante el tribunal. La delación de Batista sorprendió y sacudió al escenario político nacional el 17 de mayo, cuando fue revelada por el diario O Globo. Desde entonces se rumoreó que el empresario se encontraba en Estados Unidos con su familia, sin embargo su asesoría de comunicación emitió un comunicado esta semana informando que en realidad habían viajado a China por motivos de seguridad. "Él se ausentó de Brasil en los últimos días para proteger a su familia, que sufrió reiteradas amenazas desde que él se dispuso a colaborar con el Ministerio Público", apuntó el texto. Batista llegó a Brasil el domingo pasado y el lunes prestó testimonio ante el Ministerio Público, acompañado de Ricardo Saud, director ejecutivo de JBS, detalló la institución. La defensa del empresario afirmó en un comunicado esta semana que la delación de Batista supera en impacto a todas las antes registradas en Brasil, incluyendo la de Marcelo Odebrecht firmada en diciembre de 2016. De acuerdo con su equipo legal, Batista cita a 1.893 políticos, entre ellos el presidente, cinco ministros, seis senadores y cuatro gobernadores.
La justicia electoral absolvió en una ajustada votación a Dilma Rousseff y Michel Temer de las supuestas irregularidades denunciadas en la campaña que compartieron en 2014, con lo que mantuvo en su puesto al actual presidente brasileño. Aunque el juez Herman Benjamin, instructor del proceso en el Tribunal Superior Electoral, consideró "comprobado" que esa campaña se financió con dinero de la corrupción, sólo dos de los otros seis miembros de la corte le respaldaron y los cuatro restantes formaron la mayoría que acabó exculpando a Rousseff y Temer.
El Tribunal Superior Electoral de Brasil retomó el proceso que decidirá si la campaña que Dilma Rousseff y Michel Temer compartieron en 2014 fue financiada con dinero de la corrupción, lo que pudiera desalojar del poder al actual mandatario. El presidente de la corte, Gilmar Mendes, declaró abierta la primera de las audiencias reservadas para este caso, que por primera vez en los 85 años este tribunal sienta en el banquillo a los dos miembros de una fórmula elegida en unos comicios presidenciales. El juicio había comenzado el pasado abril pero fue suspendido para escuchar a nuevos testigos, y ha sido retomado en medio de una gravísima crisis que se cierne sobre Temer, también investigado en la Corte Suprema por los supuestos delitos de corrupción pasiva, obstrucción a la justicia y asociación ilícita.