Sobre la supuesta relación sentimental con el actor norteamericano, se limitó a asegurar que no puede comentar nada, dejando la puerta abierta para que la prensa de ese país siga especulando con su vida privada. Además, aseguró que mudarse a Estados Unidos para desarrollar su carrera como presentadora del canal Univisión representó una gran oportunidad “no solo a nivel laboral sino también personal. Ha sido súper duro porque no es fácil, la gente no dimensiona lo que uno tiene que pasar para seguir paso a paso, pero sigo con calma, aprendiendo”. “Para mí ha sido un regalo de Dios, un aprendizaje fundamental y me siento la misma Jessica Cediel que salió de Colombia hace un año y nueve meses, no olvido mi país, no olvido a mi gente, los extraño mucho”. Agregó que “lo principal es que cuando uno sale de Colombia ya la competencia se vuelve mundial, ya no estas de tú a tú con gente de nuestro propio país (…), estás remando en un río revuelto lleno de diferentes nacionalidades”. Finalmente, se refirió a la denuncia que adelanta contra el cirujano Martín Carrillo, a quien pide 400 millones de pesos como indemnización tras un procedimiento estético realizado en 2009 de manera ilegal, dado que Carrillo no contaba con los respectivos certificados al momento de la cirugía. “Ni porque me den los 400 millones de pesos o todo el oro del mundo mi cuerpo recuperará el daño físico, el daño psicológico. Eso es un daño de por vida, es una condición con la cual tengo que vivir”. Finalizó diciendo que el caso representó toda una pesadilla en su vida: “gracias a Dios no me deformé pero sí tengo secuelas físicas, es una cuestión de por vida que tengo que estar pendiente, tuve que dejar de hacer muchas cosas de mi vida debido a eso. Le pedí perdón a Dios y dejaré todo a la justicia divina, no quiero abrir la boca y juzgar”.