El primer ministro italiano, Mario Draghi, presentará este jueves su dimisión, después de perder la mayoría parlamentaria que le sustentaba, según anunció él mismo al inicio de una comparecencia en la Cámara de Diputados, donde fue acogido con aplausos.Draghi pidió que se suspendiera la sesión porque iba a acudir de inmediato a comunicar su renuncia al jefe del Estado, Sergio Mattarella, quien se espera que convoque elecciones anticipadas, aunque también podría encargarle buscar otra mayoría para agotar la legislatura u otorgar esa misión a otra figura técnica o institucional.La decisión de Draghi llega después de que tres socios de su coalición de gobierno, la conservadora Forza Italia (FI) de Silvio Berlusconi, la ultraderechista Liga de Matteo Salvini y el populista Movimiento 5 Estrellas (M5S) de Giuseppe Conte, le retirasen su apoyo en una moción de confianza este miércoles en el Senado.La sesión en la Cámara de Diputados, que se retomará a las 12.00 horas (10.00 GMT), cerrará el proceso parlamentario iniciado ayer en el Senado a instancias de Mattarella, quien el pasado jueves rechazó su renuncia por el abandono de uno de sus socios, el Movimiento 5 Estrellas (M5S), y le instase a acudir al Parlamento para intentar reconstruir la coalición gubernamental.El primer ministro fue al Senado para intentar reconstruir la coalición de unidad nacional que le apoyaba, pero terminó perdiendo el apoyo de tres miembros de su Gobierno, el populista M5S, la conservadora Forza Italia (FI) de Silvio Berlusconi y la ultraderechista Liga de Matteo Salvini.Draghi abandonó el Senado tras conocer las intenciones de sus socios y antes del final de la votación, que terminó ganado con 95 votos a favor y 38 en contra, aunque sólo votaron 133 del total de 320 senadores.El economista encabeza una coalición de unidad nacional desde febrero de 2021 en la que estaban casi todos los partidos del hemiciclo, excepto los ultras Hermanos de Italia de Giorgia Meloni.La semana pasada la crisis se desató en su coalición después de que el M5S no votara una moción de confianza, desmarcándose del resto de sus socios, lo que empujó a Draghi a presentar su dimisión.Sin embargo, el presidente Mattarella rechazó su renuncia y le emplazó a buscar una solución en el Parlamento, lo que había empezado hoy en el Senado y continuará mañana en la Cámara de Diputados, aunque se trata de una misión imposible por el enfrentamiento entre el M5S y la derecha.Berlusconi y Salvini ven con buenos ojos la convocatoria de elecciones anticipadas, que podrían celebrarse a principios de octubre y que es la opción que desde hace días exige su socia electoral y líder ultra Meloni, sola en la oposición y primera fuerza del país según la mayoría de las encuestas.En los últimos días, sindicatos, patronales, numerosas asociaciones de toda índole e incluso la Iglesia católica habían animado a la continuidad de Draghi debido a la crisis económica, energética y social en curso.
El Movimiento 5 Estrellas (M5S) fue objeto este lunes de numerosas críticas en Italia, que le llegaron desde todos los frentes, acusado de intentar torpedear al gobierno dirigido por Mario Draghi con el único objetivo de frenar su caída en las encuestas.Este partido, profundamente dividido y que ha formado parte de la coalición gubernamental, afirma que le fue imposible votar a favor del Ejecutivo el jueves durante una votación clave en el Senado, denunciando los ataques del resto de formaciones de la amplísima alianza en el poder contra las políticas que había puesto en marcha el M5S cuando estaba en su apogeo.Para la mayoría de los observadores, se trata más bien de una táctica para reconquistar a su electorado, que se ha ido reduciendo progresivamente, después de haber obtenido el 33% de los votos en las últimas elecciones legislativas (2018), lo que lo convirtió en el primer partido del parlamento.El jefe del movimiento, Giuseppe Conte, predecesor de Draghi, apostó por que el todavía primer ministro siguiera gobernando sin él, para que su formación pudiera ganarse de nuevo el favor del electorado desde la oposición, de cara a los comicios de 2023.Una apuesta que podría haber perdido, pues Draghi presentó inmediatamente su dimisión, pero el presidente italiano, Sergio Mattarella, la rechazó.Además, varios partidos de la coalición y un millar de alcaldes instaron también a Draghi, exjefe del Banco Central Europeo, a que permaneciera en su cargo. Los ediles expresaron su "incredulidad y preocupación" por la conducta irresponsable del M5S.La decisión final de Draghi, que se prevé que anuncie el miércoles durante una intervención parlamentaria, podría desembocar en elecciones anticipadas este otoño, un periodo en el que se suele adoptar el presupuesto."Vendetta política"El ex primer ministro Matteo Renzi, jefe del pequeño partido Italia Viva (centro), acusó al M5S de "destruirlo todo", mientras que el exjefe de Gobierno Silvio Berlusconi, conservador, y el líder de la Liga Matteo Salvini (extrema derecha) denunciaron su "incompetencia e imprevisibilidad".Para Daniela Preziosi, periodista política del diario Domani, el origen de la crisis viene de la escisión orquestada por el ministro de Asuntos Exteriores Luigi Di Maio, un firme defensor de Draghi, que abandonó el mes pasado el partido del M5S junto con unos sesenta diputados.El movimiento "ya no era el partido más grande dentro de la mayoría (gobierno) y, por lo tanto, se ha vuelto insignificante", analiza.Fundado en 2009 como una formación antisistema, el M5S vio su base electoral desmoronarse a lo largo de sus alianzas de gobierno, primero con la Liga y luego con la izquierda, lo cual desorientó a sus votantes.Conte lideró dos gobiernos antes de tener que retirarse en 2021, privado de mayoría, en beneficio de Draghi, que luego se hizo cargo de un Ejecutivo de unidad nacional.Por su parte, Di Maio acusó el domingo a Conte de "no haberse recuperado de haber tenido que abandonar el palacio Chigi", sede del gobierno, y de "llevar a cabo una 'vendetta' política contra Draghi".Tanto si el gobierno permanece en el poder como si no, "el M5S se radicalizará" para poder sobrevivir, predice Preziosi."Es por eso que la próxima víctima será Conte, un dirigente totalmente institucional que no puede dirigir un movimiento que vuelva a sus raíces 'anti-establishment'", apunta.Giovanni Orsina, director de la escuela de gobierno de la Universidad Luiss de Roma, va aún más lejos: el Movimiento ha sido "un gran catalizador de descontentos que ha sido incapaz de transformar en un proyecto positivo. Y desapareció disolviéndose en el vacío".Le puede interesar: podcast 'Bien Puesto'
El primer ministro italiano, Mario Draghi, presentará su dimisión esta tarde después de la crisis desatada en su coalición gubernamental por uno de sus principales socios, el Movimiento Cinco Estrellas (M5S).Así se lo comunicó hoy Draghi a los componentes de su Ejecutivo en el Consejo de Ministros, según comunicó su entorno, y presentará su dimisión esta noche al presidente de la República, Sergio Mattarella.Su decisión llega después de que el M5S decidiera esta mañana no votar una moción de confianza en el Senado, desmarcándose del resto de socios de la coalición de unidad nacional que Draghi preside desde febrero de 2021."Quiero anunciaros que esta tarde presentaré mi dimisión ante el presidente de la República. La votación de hoy en el Parlamento es un hecho muy significativo desde el punto de vista político", señaló Draghi ante el Consejo de Ministros, reunido en Roma.Y agregó: "La mayoría de unidad nacional que ha sostenido este Gobierno desde su creación ya no existe y ha terminado el pacto de confianza que basaba la acción del Gobierno".Draghi ya había avisado de que no gobernaría sin el M5S, a pesar de que su salida de la coalición no impedía su continuidad, pues seguía contando con el apoyo de una holgada mayoría parlamentaria.El último escollo entre Draghi y el líder del M5S, Giuseppe Conte, precisamente su predecesor en el cargo, ha sido un decreto con ayudas contra la inflación que el partido "anticasta" ve "insuficiente" y que critica por incluir medidas como la financiación de una incineradora de basuras para la ciudad de Roma.Pero antes habían mantenido notorios desencuentros, dados los recelos del M5S de seguir armando a la resistencia ucraniana."En estos días por mi parte ha habido el máximo compromiso para seguir un camino común, incluso tratando de entender las exigencias que las fuerzas políticas me han avanzado. Como evidencia el debate y la votación hoy en el Parlamento, ese esfuerzo ha sido insuficiente", lamentó el economista.Draghi se puso al frente del Ejecutivo en febrero de 2021 para hacer frente a la crisis de la pandemia, tras la caída de Conte, y lo hizo con una coalición en la que estaban todos los partidos excepto los ultras Hermanos de Italia de Giorgia Meloni."En mi discurso de investidura en el Parlamento siempre he dicho que este Gobierno debía seguir solo si tuviera clara la perspectiva de poder poner en marcha el programa de Gobierno que todas las fuerzas políticas habían votado", explicó."Esta unidad ha sido fundamental para afrontar los retos de estos meses. Estas condiciones ya no existen", terminó Draghi ante sus ministros, a los que agradeció y animó a estar "orgullosos" por los objetivos logrados en "un momento tan difícil".Cuando Draghi dimita ante Mattarella, será este quien decida los pasos a seguir, que pueden ir desde encargar gobernar a otra persona o incluso convocar un adelanto electoral y no esperar al término de la legislatura, en marzo de 2023, como reclaman cada vez más partidos políticos.La más interesada en unas elecciones generales es Meloni, que como única oposición a Draghi es la que más crece en las encuestas y ya la sitúan como primera fuerza del país.Escuche aquí el podcast Se está poniendo viejo: