La recuperación económica de Colombia está comenzando, según el gerente del Banco de la República, Leonardo Villar.Villar y su equipo han recibido una oleada de críticas del sector privado y del Gobierno nacional por no bajar las tasas de interés más rápidamente. Las tasas de referencia hoy están en el 11.75 %, mientras la economía creció un 0.7 % en el primer trimestre del año."Después de que todos estaban proyectando, entre una caída -0.2 % y un aumento de más de 0.6 %, creció 0.9 % y la noticia fue publicada como el gran desastre demostrado por la economía colombiana. La verdad es que todos los analistas se sorprendieron al alza. Se trata sin lugar a dudas de un crecimiento bajo, pero fue superior al de 2023, y de acuerdo con las proyecciones del equipo técnico del banco, podría indicar el comienzo de un proceso de recuperación tras el fuerte ajuste que hemos tenido en el último año y medio", dijo Villar en la instalación de la cumbre de Asobancaria en Cartagena.El Banco mantiene su pronóstico de un crecimiento del 1.4 % para este año y un 3.2 % para el 2025. En contraste, la inflación seguiría bajando y llegaría finalmente a la meta oficial a mediados del año 2025."Todos los indicios sugieren que lo peor y más doloroso del proceso de ajuste ya quedó atrás. Como ya lo vimos, la perspectiva hacia adelante es de un crecimiento económico en proceso de recuperación y de menores costos de fondeo", agregó el funcionario.Cuando se conocieron los datos de crecimiento económico el Gobierno nacional también dijo que eran signos positivos sobre la recuperación del país hacia adelante y le pidió al Banco de la República una rebaja más fuerte a las tasas de interés para avanzar en ese proceso.Villar, sin embargo, sigue defendiendo la cautela a la hora de bajar las tasas de interés, con el argumento de que ir demasiado rápido podría interrumpir la rebaja de la inflación. Para el Banco hay aspectos de la inflación que se están 'enquistando' en la economía, como el aumento del salario mínimo por encima del costo de vida y eso tiene disparados los costos de servicios. En la categoría de servicios se contabilizan, entre otros, los servicios públicos, las comidas fuera del hogar, un corte de pelo, entre otros.A diferencia de lo que ocurre en otros países, en Colombia, la reducción de la inflación después de la pandemia ha sido más lenta, lo que ha llevado a tener que convivir con tasas de interés elevadas por más tiempo también.
En su sesión del viernes, 30 de julio, la Junta Directiva del Banco de la República decidió, por mayoría, mantener la tasa de interés de política monetaria en 1,75%. Esta decisión se tomó teniendo en varias consideraciones.En primer lugar, según el Banco de la República, la tendencia de crecimiento retornó, esto luego del retroceso en la actividad económica que produjeron los bloqueos a las vías y los problemas de orden público, según lo sugieren los más recientes indicadores. Al revisar este comportamiento, el equipo técnico incrementó su proyección de crecimiento para 2021 desde 6,5% a 7,5%.Por otra parte, el banco explicó que la inflación aumentó desde un nivel inferior a 2,0% en el primer trimestre, a 3,3% en mayo y a 3,63% en junio. El gerente del Banco de la República, Leonardo Villar dijo, “las presiones sobre los precios tuvieron un origen interno y externo”. Sin embargo, la inflación sin alimentos ni regulados continuó en un nivel bajo, de 1,87% en junio.“Algunas de estas presiones inflacionarias podrían tener persistencia en el contexto de una economía que continúa recuperándose y reduciendo sus excesos de capacidad, afectando las expectativas de inflación”, agregó.Para esta decisión también se tuvo en cuenta la recuperación de la economía global, pues aseguran que se ha afianzado acorde con el avance en la vacunación, particularmente en las economías más poderosas. No obstante, las nuevas cepas del virus continúan siendo un riesgo significativo de deterioro para el contexto económico internacional, ya que, por las presiones inflacionarias en los Estados Unidos y otras economías avanzadas, “surge el riesgo de que las condiciones financieras internacionales se tornen más apretadas.”Por último, el equipo técnico prevé que el déficit de la cuenta corriente aumentaría de 3,4% del PIB en 2020, a 4,5% en 2021 y a 4,3% en 2022. Dicen que esta proyección está en línea con la recuperación prevista de la demanda interna, en la que se destaca el repunte del consumo de los hogares y la inversión. “La moderación del déficit de cuenta corriente a partir de 2022 sería coherente con la implementación de la reforma fiscal recientemente presentada por el Gobierno.”De esta manera, los miembros de la Junta Directiva coincidieron en que se estaría cerrando el espacio para mantener la magnitud actual del estímulo monetario, dado el comportamiento de la inflación y su posible persistencia, como también la revisión al alza de los pronósticos de crecimiento. Así, bajo estas condiciones y teniendo en cuenta el balance de riesgos, la Junta decidió, por mayoría, mantener inalterada la tasa de intervención de política monetaria. Cinco miembros votaron a favor de mantener la tasa en 1,75% y dos votaron por incrementarla en 25 puntos básicos.En otras noticias económicas:El Dane reveló que en junio de 2021 el desempleo en Colombia se ubicó en el 14.4%, cifra inferior al 19.8% registrado en igual mes de 2020El presidente Iván Duque señaló que los próximos tres días sin IVA serían a finales de este añoCundinamarca y Rionegro, los mejores departamentos en la gestión de sus finanzas territorialesFindeter lanza línea de crédito directo para apoyar entidades territoriales en implementación de catastro multipropósitoLa Dian dispone, por tercer año consecutivo, la declaración sugerida de renta para personas naturales, en esta ocasión, para más de 4.000.000 de contribuyentesEscuche el programa completo de Negocios BLU:
En su sesión de este lunes, la junta directiva del Banco de la República decidió por unanimidad mantener la tasa de interés en 1,75%. Esta decisión se tomó teniendo en cuenta que en el primer trimestre de 2021 la economía alcanzó un crecimiento mayor al esperado, dinamismo que se mantuvo en abril, como lo mostró el Índice de Seguimiento Económico.Sin embargo, Leonardo Villar, gerente del Banco de la República, explicó que con la tercera ola de contagio del COVID-19, y en mayor medida por los bloqueos a las vías y los problemas de orden público se reflejarán en una menor actividad económica durante el segundo trimestre.Por otra parte, el buen desempeño hasta abril justificó una revisión del pronóstico de crecimiento del PIB para 2021 de 6% a 6,5% en el escenario central. Aún en ese escenario el nivel de actividad económica seguiría siendo inferior al de 2019. Además, las tasas de desempleo e informalidad se mantienen en niveles particularmente altos.La inflación anual en mayo de 3,3% superó los pronósticos. La presión alcista provino del grupo de alimentos (9,52%), y en especial de los alimentos perecederos (18,16%), debido a las dificultades de abastecimiento en diversas ciudades. El incremento en la inflación básica se mantuvo por debajo de la meta y fue similar a lo proyectado.Parte del incremento reciente de la inflación podría tener alguna persistencia y afectar las expectativas, las cuales permanecen ancladas.Y con la situación fiscal y de endeudamiento público, de no lograrse el ajuste fiscal requerido en las finanzas públicas se comprometería el acceso al financiamiento y aumentaría su costo, lo cual eventualmente reduciría el espacio de la política monetaria para seguir apoyando la recuperación de la actividad económica y el empleo.
El Banco de la República mantuvo estables las tasas de interés en 1,75%, informó en rueda de prensa su director, Leonardo Villar."La decisión de mantener estable la tasa de interés se fundamenta en gran medida en la confianza de que el Congreso aprobará un programa de ajuste fiscal adecuado para lograr el retorno a una senda sostenible de las finanzas públicas y de crecimiento económico", aseguró.De acuerdo con el organismo, la decisión se tomó con base en las siguientes consideraciones:La inflación anual hasta febrero de 1,56% fue inferior a la meta. Las expectativas de inflación continúan estables y son en promedio de 2,7% y 3,1% para fines de 2021 y 2022 respectivamente.Los pronósticos de crecimiento para el presente año se han revisado al alza. El equipo técnico lo estima preliminarmente en 5,2%.Los indicadores del mercado laboral continúan siendo muy débiles. La tasa de desempleo en enero llegó a 17,3%.El sistema financiero continúa presentando condiciones favorables y estables de solvencia y liquidez. En ese contexto, la cartera de crédito y las tasas de interés siguen respondiendo a los estímulos de política monetaria.Las condiciones financieras externas siguen siendo favorables para la financiación de la economía colombiana. Sin embargo, algunos factores, incluido el reciente aumento en las tasas de interés de mediano y largo plazo en los mercados financieros internacionales, sugieren que, en el margen, estas condiciones se han apretado.
Leonardo Villar asumirá la gerencia del Banco de la República el próximo 4 de enero, en reemplazo de Juan José Echavarría, quien no buscó su reelección por asuntos familiares.Villar ya había sido codirector del Banco de la República entre 1997 y 2009. También ejerció como viceministro de Hacienda y como director de Fedesarrollo, uno de los centros de estudios en economía más importantes de América Latina.El nombramiento de Villar recibió el respaldo de los tres gerentes que ha tenido la entidad desde que la Constitución de 1991 la volvió independiente del gobierno: Juan José Echavarría, José Darío Uribe y Miguel UrrutiaVillar derrotó al ministro de Hacienda, Alberto Carrasquilla, en su aspiración por ocupar el cargo en medio de la polémica que despertó la posibilidad de que Carrasquilla pasara directamente del Gobierno al banco central. En las últimas horas, una lluvia de críticas en redes sociales convirtió en tendencia la elección.Es economista de la Universidad de los Andes, con maestría en Economía.Esta semana, Villar tuvo que salir a hacer una aclaración: no tiene doctorado.El hecho se dio pues así lo decía la hoja de vida de Villar en el sitio web del Banco de la República, antes del 8 de diciembre, en donde se afirmaba que contaba con un PhD en Economía de la London School of Economics, fechado en 1987.El miércoles 9 de diciembre apareció una anotación en dicha hoja de vida que reza: "*Esta información fue actualizada y corregida el 8 de diciembre de 2020 porque contenía datos incorrectos". Ahora en su historial educativo ya no tiene el PhD sino: "cursó estudios de doctorado en el London School of Economics, Londres, Inglaterra, 1987".El pasado 30 de octubre, la junta directiva del banco central anunció que Juan José Echavarría dejaría la gerencia del Banco de la República al completar su primer periodo en el cargo."Razones de índole familiar, que se anteponen a cualquier otra consideración, llevaron al gerente Echavarría a declinar a esa aspiración", señaló el Banco de la República en un comunicado.