Los trabajadores de Comfenalco Antioquia le están pidiendo al Gobierno nacional que no le entregue la administración de la caja de compensación al círculo político del cuestionado senador conservador Carlos Trujillo, según una carta conocida por Blu Radio.Comfenalco Antioquia fue intervenida por el Gobierno nacional en septiembre del 2023 y la intervención, que inicialmente era solo por un año, hoy está extendida hasta el 15 de abril del 2025."Según la información que circula en los pasillos de la política antioqueña, hay cambios al interior de la Superintendencia del Subsidio Familiar, con la llegada de la doctora Sandra Viviana Cadena. Se nos ha manifestado que se corre el riesgo que la Caja sea entregada a un equipo Político Conservador de Antioquia, el cual es liderado por el senador Carlos Andrés Trujillo, que ya en varias oportunidades se ha visto salpicado en recientes escándalos de la UNGRD, en el caso de los carrotanques relacionados con el señor Olmedo López. Así mismo, se nos informó de la cercanía del senador en mención, con la nueva Superintendente, cercanía que se originó cuando la recién nombrada fue secretaria general de la Superintendencia de Transporte", señala la carta que la Unión Sindical de Trabajadores y Empleados de las Cajas de Compensación Familiar de Colombia le envió en las últimas horas a la directora del Dapre, Laura Sarabia.Vale recordar que, en diálogo con Mañanas Blu, el director de la Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo de Desastres (UNGRD), Carlos Carrillo, hizo graves acusaciones que vinculan a políticos con el escándalo de corrupción de carrotanques en La Guajira y específicamente al senador Carlos Andrés Trujillo.Según los sindicatos, la intervención de Comfenalco Antioquia ya cumplió su objetivo y es hora de pensar en devolver su administración a los trabajadores y empleadores de la región, como ocurre con las demás cajas de compensación en todo el país.Sin embargo, las decisiones sobre el futuro de Comfenalco Antioquia están en manos de la nueva superintenente quien llegó a su cargo apenas hace una semana. Cadena viene de ser secretaría general de la Superintendencia de Transporte.En la misiva, la petición de los sindicatos es clara: no entregarle la caja a la politiquería."Sabemos de los enemigos que tiene el actual gobierno, esos mismos, medios de comunicación y representantes del poder económico y politiquero, que manifestaron que la intervención de Comfenalco Antioquia, en cabeza del actual Gobierno, es un paso para estatizar el Sistema de Compensación Familiar. Si permitimos que nuestra caja le sea entregada a un sector politiquero, con ello, les estaremos dando la razón", concluye la carta.
La directora del Dapre, Laura Sarabia, denunció penalmente a Sandra Ortiz por el delito de injuria y calumnia tras sus declaraciones señalando un presunto “complot presidencial” en su contra.Jorge Mario Gómez Restrepo, abogado de Sarabia, presentó la denuncia alegando que las acusaciones de Ortiz carecen de fundamento y están diseñadas para dañar la reputación de su clienta. Según el abogado, Ortiz, al hacer señalamientos de una conspiración que involucraba a figuras de alto nivel en el Gobierno, entre ellas la fiscal y la procuradora, estaría difamando sin pruebas claras. Este comportamiento, según Gómez, tiene como fin obstruir la justicia y generar un clima de desconfianza en las instituciones del Estado. La denuncia se incorpora ahora como prueba en el expediente judicial de la exfuncionaria.¿Qué dijo Ortiz sobre Sarabia ante la juez?El origen de la disputa se remonta a las recientes declaraciones de Ortiz, quien denunció lo que considera un complot orquestado desde la Presidencia para desacreditarla. En un enfrentamiento mediático, la exfuncionaria relató que fue víctima de una campaña de desinformación, diseñada para hacerla pasar como chivo expiatorio de las irregularidades ocurridas en la UNGRD. Ortiz asegura que la supuesta pérdida de computadores que fue ampliamente divulgada en los medios nunca ocurrió, y que la información presentada por ella demuestra que no hubo tal pérdida.Ortiz también señaló que una mujer con gran poder dentro del Gobierno sería la responsable de haber liderado este supuesto complot, acusando incluso a la funcionaria de tener vínculos cercanos con la Fiscalía y la Procuraduría. “Tengo pruebas y certificados que demuestran que nada se perdió, pero el show mediático que armaron durante semanas dañó mi nombre”, manifestó Ortiz en su declaración. Además, advirtió sobre el temor por su seguridad y la de su familia, al considerar que la red de poder que la involucra en este conflicto es peligrosa.En cuanto a la acusación de corrupción dentro de la UNGRD, Ortiz insistió en que los responsables no han sido identificados y que ella fue utilizada como un chivo expiatorio para encubrir a los verdaderos implicados. Según su versión, el escándalo mediático desviado hacia su figura fue parte de una estrategia para ocultar un entramado de corrupción más amplio.
En medio de las especulaciones por un remezón ministerial, fuentes cercanas al alto Gobierno aseguraron que la condecoración que entregó hoy el presidente Gustavo Petro a la directora del Dapre, Laura Sarabia; el canciller Luis Gilberto Murillo y la ministra de Ambiente, Susana Muhamad, podría ser la despedida de los funcionarios en sus cargos actuales.Precisamente, ante la pregunta de si se iría o no del Gobierno antes del 31 de diciembre, el ministro de Relaciones Exteriores respondió: “Yo llevo tres años en el Gobierno y el compromiso con mi familia era de dos, todo esto se mezcla y diciembre es una época de reflexión para mirar nuevos capítulos”.El presidente Gustavo Petro condecoró a estos funcionarios con la orden de la estrella cívica, categoría Gran Oficial de la Policía, por sus “actividades trabajando en defensa de la paz pública y las instituciones democráticas”. Este acto se llevó a cabo en la Escuela militar de cadetes José María Córdova, durante una ceremonia de ascensos.El canciller Luis Gilberto Murillo tendría aspiraciones presidenciales y por eso presentaría su renuncia en los próximos días. En esta lista de ministros que se van también estaría la de Ambiente, Susana Muhamad; el de Salud, Guillermo Alfonso Jaramillo; y el de Minas, Andrés Camacho.Cabe mencionar que los cambios en el gabinete se conocerían antes del 31 de diciembre.
Laura Sarabia, directora del Departamento Administrativo de la Presidencia de la República (DAPRE), se pronunció frente a las acusaciones realizadas por Sandra Ortiz, exfuncionaria del Gobierno, quien lanzó una serie de denuncias sobre las irregularidades en la Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo de Desastres (UNGRD).A través de la red social X (antes conocida como Twitter), Sarabia publicó un mensaje en el que defendió su actuación como funcionaria pública y respondió directamente a las declaraciones de Ortiz.Luego, en declaraciones a los medios de comunicación, Sarabia agregó que se trata de "una historia fantasiosa".>>> Lea también: Sandra Ortiz señala a una mujer "poderosa" que desde la Presidencia le "armó un complot""No tiene pruebas; es lo único que puedo manifestar. (…) El que las hace se las imagina y lo único que yo he hecho es cumplir mi labor como funcionaria. (...) Tal vez Sandra (Ortiz) no recuerda que yo no era la directora del Dapre, que el director era Carlos Ramón González, quien era su jefe, entonces yo respondo por la dirección desde el 28 de febrero y en esa época ya la opinión pública conocía las denuncias sobre la UNGRD”, añadió Sarabia.Declaraciones de Sandra OrtizDurante su declaración ante un juez, Ortiz afirmó que había advertido a Sarabia sobre presuntas irregularidades en la UNGRD, particularmente relacionadas con la contratación de carrotanques para llevar agua a La Guajira. Este caso generó amplio rechazo social y político debido a las denuncias de corrupción que implicaban recursos destinados a una de las regiones más vulnerables del país.“Yo misma denuncié la corrupción de los carrotanques. Cuando la periodista Paula Bolívar destapó lo de 30 carrotanques, a mí me avisaron de 10 más, y yo envié alertas mensuales donde informé a Laura Sarabia sobre esas irregularidades”, declaró Ortiz, quien también insistió en su compromiso con la transparencia. “Soy incapaz de quitarle un vaso de agua a los niños de La Guajira”, agregó.Además, Ortiz denunció un presunto complot desde la Presidencia que, según su versión, buscaba desacreditarla. Entre sus argumentos, Ortiz afirmó que la pérdida de computadores que se le imputó fue una fabricación mediática. “Eso nunca existió, y tenemos las pruebas y trazabilidad de los correos que lo demuestran”, aseguró.
Sandra Ortiz, exfuncionaria del gobierno, aseguró durante su declaración ante la Corte que alertó de irregularidades en la Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo de Desastres (UNGRD) a Laura Sarabia, quien en ese momento ocupaba un alto cargo en el Gobierno. Según Ortiz, su advertencia incluyó denuncias sobre la contratación irregular de carrotanques para La Guajira, un caso que generó amplio rechazo social y político.“Yo misma denuncié la corrupción de los carrotanques. Cuando la periodista Paula Bolívar destapó lo de 30 carrotanques, a mí me avisaron de 10 más, y yo envié alertas mensuales donde informé a Laura Sarabia sobre esas irregularidades”, afirmó Ortiz, quien defendió su inocencia y su compromiso con la transparencia. “Soy incapaz de quitarle un vaso de agua a los niños de La Guajira”, enfatizó.>> Lea también: A la cárcel Sandra Ortiz por escándalo de corrupción en la UNGRDOrtiz también se refirió a lo que calificó como un “complot” en su contra desde la Presidencia, señalando que se manipuló información para desacreditarla. Según su testimonio, la pérdida de computadores que se le imputó fue una fabricación mediática. “Eso nunca existió, y tenemos las pruebas y trazabilidad de los correos que lo demuestran”, sostuvo.Además, señaló que su papel como denunciante de corrupción la convirtió en un blanco político. “Sabían que yo era una piedra en el zapato para quienes están realmente implicados, y querían un chivo expiatorio. Esa mujer con poder en la Presidencia armó este complot contra mí”, afirmó, sin dar nombres específicos.Por último, Ortiz expresó preocupación por su seguridad y la de sus cercanos, aludiendo al alcance de las personas que, según ella, están detrás de estas acciones. “Lucharé por sacar la verdad a la luz. Este país merece saber quiénes están implicados realmente”, concluyó.
El regreso de Armando Benedetti al Gobierno nacional ha suscitado un debate significativo en el ámbito político colombiano. Con un historial de controversias y cuestionamientos, su retorno no solo plantea interrogantes sobre su eficacia, sino también sobre el mensaje que envía a la ciudadanía. Cristina Carrizosa, abogada y analista, expone la complejidad de la situación en una charla donde reflexionó sobre el impacto de Benedetti en la administración de Gustavo Petro.Desde presunta participación en corrupción hasta quejas de violencia de género, su figura está marcada por sombras que parecen pasar desapercibidas en el debate público. La pregunta que surge es: ¿Cómo es posible que un individuo con tales antecedentes regrese a una posición de influencia?Carrizosa también menciona la ética política como un tema central en la discusión. Asegura que este regreso no puede ser visto como un acto aislado, sino como parte de un contexto más amplio donde las responsabilidades políticas son frecuentemente olvidadas. "En otro país, Benedetti habría salido de la política hace años", afirma, destacando la anormalidad de su situación en el sistema colombiano.El análisis destacó la importancia de cuestionar el papel de Benedetti dentro del Gobierno y lo que su regreso significa para el equilibrio de poder, especialmente en un momento crítico antes de las elecciones de 2026. La figura de Benedetti se convierte, así, en un símbolo de los retos éticos que enfrenta la política colombiana.Por otro lado, la relación de Benedetti con Laura Sarabia añade otro nivel de complejidad a la dinámica de poder en el gobierno. La posibilidad de que su ansia de poder socave la estabilidad política se convierte en una preocupación para aquellos bajo su influencia. Sin embargo, Carrizosa enfatiza que Benedetti podría no tener tanto poder como se piensa, sugiriendo que su rol es más simbólico que práctico.Elecciones 2026El análisis concluye que el futuro cercano para Benedetti y el gobierno de Petro es incierto. Mientras los preparativos para las elecciones de 2026 ya comenzó, los movimientos estratégicos dentro de la coalición de gobierno serán cruciales para determinar no solo la próxima campaña, sino también la dirección de Colombia. La discusión sobre la ética y la responsabilidad política cobrará mayor relevancia en este marco, invitando a la reflexión de los ciudadanos sobre el tipo de liderazgo que desean en su país. Escuche la entrevista completa acá:
La directora del Departamento Administrativo de la Presidencia (Dapre), Laura Sarabia, concedió una reveladora entrevista al periódico El Tiempo, en la que abordó las tensiones y divisiones que atraviesan el Gobierno de Gustavo Petro. En sus declaraciones, Sarabia no solo confirmó las fracturas internas, sino que también reafirmó su posición como una figura clave en la Casa de Nariño, a pesar de las críticas que enfrenta.Una figura polémica dentro del Gobierno“Soy una piedra en el zapato para muchas personas. Por mi puesto, por el papel que he desempeñado y por lo que he significado en los últimos tres años al lado del presidente”, declaró Sarabia, quien también recordó que su colaboración con Petro comenzó desde la campaña presidencial, incluso durante su embarazo.La directora del Dapre afirmó que su compromiso con el Gobierno se mantiene firme: “Lo único que tengo es mi nombre y lo voy a defender hasta el último momento como una leona porque es lo único que tengo”. Además, subrayó que todas las acusaciones en su contra carecen de pruebas concretas, ya que “todo ha quedado en fantasías, especulaciones y rumores”.Tensión en la Casa de NariñoLa entrevista también dejó en evidencia las diferencias dentro del gabinete presidencial. Sarabia confirmó la existencia de una reunión previa al Consejo de Ministros en la que varios miembros del gabinete habrían expresado su inconformidad con su presencia y poder en la Casa de Nariño.Aunque Sarabia no estuvo presente en dicha reunión, afirmó estar al tanto de los cuestionamientos hacia el presidente Petro por su decisión de mantenerla en su cargo. “Un gabinete no puede ser un jardín infantil. El país merece adultos que atiendan las necesidades a la altura del país”, respondió contundentemente, dejando clara su postura frente a los críticos.Su relación con Armando BenedettiOtro punto crucial abordado en la entrevista fue la llegada de Armando Benedetti como asesor presidencial. Sarabia aseguró que el trabajo de Benedetti está definido por el presidente y que ambos tienen roles claros, aunque admitió haber compartido en privado su opinión sobre esta decisión con Gustavo Petro.Cuando se le preguntó si consideraba la posibilidad de ser canciller, Sarabia no confirmó ni descartó esa opción, dejando la decisión en manos del presidente.Las declaraciones de Sarabia llegan en un momento crítico para el Gobierno, marcado por señalamientos de corrupción y fracturas en el gabinete. Este mismo día, Sandra Ortiz, exalta consejera presidencial para las regiones, enfrenta una audiencia de imputación de cargos en el caso de corrupción relacionado con la Unidad Nacional de Gestión del Riesgo de Desastres.Al ser cuestionada sobre su permanencia en el Dapre, Sarabia reiteró su compromiso con el país y su intención de continuar en el cargo. “Me voy a dedicar a defender mi nombre hasta que el país sepa quién es Laura Sarabia”, concluyó.
La senadora María José Pizarro, del Pacto Histórico, lanzó un contundente mensaje en contra del regreso de Armando Benedetti al Gobierno como asesor político del presidente Gustavo Petro.A través de su cuenta en X (antes Twitter), Pizarro enfatizó la importancia de proteger los principios del proyecto político progresista y rechazó categóricamente la presencia de personas cuya conducta ha sido cuestionada.“Hoy nuestra mayor responsabilidad es CUIDAR el proyecto político progresista. Un proyecto en el que hemos puesto nuestro corazón y vidas. Un proyecto que tiene historia, principios y legitimidad. Me sumo al llamado de nuestras ministras y ministros que ayer plantearon una reflexión crítica sobre el fortalecimiento de personas cuyas posturas y acciones han sido incompatibles con nuestros principios. Como mujer no justificaré a quienes nos violentan”, escribió la senadora.El polémico regreso de Benedetti al GobiernoArmando Benedetti, quien ha sido centro de controversias políticas y personales, confirmó este lunes su regreso a Colombia tras renunciar como embajador ante la FAO en Roma. Benedetti asumirá un cargo como asesor directo del presidente Petro, un puesto que, según él, lo acercará al mandatario y le permitirá estrechar relaciones con el Congreso. "Llego en calidad de asesor político del presidente de la República debido a la amistad y a la cercanía que tengo con él", afirmó Benedetti tras reunirse con Petro y Laura Sarabia, directora del Departamento Administrativo de la Presidencia (Dapre), en la Casa de Nariño.Benedetti señaló que entre sus responsabilidades estará fortalecer el diálogo con el Congreso y dijo que su rol no se limitará a temas de "politiquería" o "mermelada". También mencionó que retomará funciones este martes y que su oficina estará al lado de las de Petro y Sarabia.Un historial cargado de polémicasEl regreso de Benedetti al Gobierno no está exento de controversia. Su salida como embajador en Venezuela estuvo marcada por un escándalo de interceptaciones ilegales y amenazas de revelar supuestas irregularidades en la campaña presidencial de Petro en 2022. Además, en julio pasado, Benedetti fue denunciado por violencia machista por su esposa, Adelina Guerrero, durante un viaje a Madrid, lo que llevó a la Cancillería a abrir un proceso disciplinario en su contra.A esto se suma que el político admitió haber pasado por un proceso de rehabilitación para tratar su adicción al alcohol y las drogas antes de regresar al país. Según Benedetti, esta decisión fue tomada en conjunto con su familia y también representó una "rehabilitación" en su relación con Laura Sarabia, con quien protagonizó fuertes enfrentamientos en el pasado.
La llegada de Armando Benedetti a la Casa de Nariño despertó rumores sobre una posible salida de Laura Sarabia; sin embargo, la directora del DAPRE se mantendrá en su puesto.Pasó un año y medio para que Laura Sarabia, Armando Benedetti y el presidente Gustavo Petro estuvieran de nuevo juntos alrededor de una mesa. La foto de esta reunión, revelada en primicia por Blu Radio, se dio tras otros encuentros previos. El primero fue entre el ministro del Interior, Juan Fernando Cristo, Sarabia y Benedetti. En este primer acercamiento, se buscó limar asperezas del pasado, incluidas las generadas por los famosos audios del ahora exembajador refiriéndose despectivamente a la directora del DAPRE. Los funcionarios también discutieron temas de agenda legislativa.El rol de Benedetti será el de asesor del presidente Gustavo Petro en temas políticos, por lo que trabajará de la mano del ministro Cristo. Su salario, como el de cualquier funcionario público, provendrá de los recursos de la nación.Posteriormente, se realizó otra reunión entre el presidente y Laura Sarabia, a la que luego se sumó Benedetti. Durante la conversación, se establecieron varios compromisos. El principal: Sarabia será la jefa de Benedetti, con el respaldo del presidente Gustavo Petro. La instrucción fue clara: respetar las jerarquías.Laura Sarabia, por ahora, no dejará el Gobierno. Su relación con el presidente Gustavo Petro sigue siendo fuerte, y buscará trabajar en conjunto con Benedetti.Dos datos son clave en esta historia: el primero, que Benedetti pierde su fuero al dejar la Embajada de Colombia ante la FAO, por ende, las investigaciones en su contra pasarían a la justicia ordinaria. El segundo tiene que ver con la denuncia por violencia de género que había interpuesto Laura Sarabia contra Armando Benedetti; esta se mantiene porque la directora ya fue a declarar ante la Fiscalía.
Armando Benedetti, luego de anunciar su renuncia como embajador de Colombia ante la FAO, confirmó que asesorará al presidente Gustavo Petro, en especial en temas políticos, pues considera que es necesario mejorar la relación con el Congreso, “no es solo mermelada y politiquería”. Además, contó que está en proceso de “rehabilitar” su relación con Laura Sarabia, quien también estuvo en la reunión con el presidente Gustavo Petro.“Vengo de un proceso de rehabilitación, estuve 35 días interno en un proceso personal bastante duro, entonces también, 'mamando gallo' y en serio, digo que estoy en un proceso de rehabilitación con Laura Sarabia”, dijo Benedetti en diálogo con Voz Populi.>>> En contexto: ¿Limando asperezas? Benedetti y Sarabia se reúnen en Casa de Nariño: esta es la fotoBenedetti también dio detalles de cómo será el asesoramiento al presidente Gustavo Petro, sobre todo en el Congreso, donde se están tramitando reformas fundamentales para este Gobierno. Además, dio a entender que su salida de la FAO y llegada como asesor presidencial fue iniciativa del mandatario.“Yo creo que a él no lo han entendido mucho. Por ejemplo, ahorita que está el tema de la ley de financiamiento, que no busca gravar a los pobres. Entonces empiezan los controvertidos con el Congreso y de eso se trata, que no haya esos entendimientos, sino comunicación”, agregó.En la conversación con Voz Populi, Benedetti también respondió a dos serios cuestionamientos: uno relacionado con la denuncia por maltrato intrafamiliar y otro por el dinero que, en su momento, él señaló que había entrado a la campaña del presidente Gustavo Petro.“Me crucificaron. Me quedé callado en su momento porque es un tema familiar, pero no hubo ningún maltrato. De hecho, un juez ya dijo que no hubo violencia física ni psicológica. Todo lo que me inventaron fue una cosa perversa. De una u otra forma me está victimizando por segunda vez porque nada de eso pasó”, respondió el exembajador a quienes rechazan que volviera a la Casa de Nariño como asesor.En cuanto al dinero, reiteró que "fue una rabieta", pues él no tenía "nada que ver con plata" durante la campaña presidencial.