Para Londoño este acto tiene dos miradas que dejan en evidencia el fracaso de la política de embargo de Estados Unidos y el colapso del régimen socialista implementado en Cuba. “Un encuentro de estas característica hace algunos años se consideraba un imposible, a mi juicio este encuentro tiene una doble connotación, por una parte el fracaso de la política norteamericana de bloqueo hacia Cuba y por otro, el colapso evidente del régimen socialista cubano”, dijo Londoño. El excanciller indicó que esta puede ser una gran oportunidad para la economía de la isla, siempre y cuando se desprenda de esta visita un avance en el tráfico de turistas norteamericanos hacia Cuba. (Lea también: Discurso de Barack Obama en Cuba será transmitido en toda la isla). “Los cubanos cambiarán su condición si de este encuentro sale la posibilidad de que el gobierno norteamericano autorice de una forma abierta a los ciudadanos norteamericanos a viajar a Cuba, los cubanos están esperando hace muchísimos años el turismo norteamericano”, agregó el excanciller. Para Londoño es evidente el cambio de pensamiento del gobierno estadounidense frente al bloque a Cuba, y considera que aquella generación que lo promovía ya no está tan activa al interior de la diplomacia norteamericana.
Londoño explicó que es importante destacar que si una de las partes decide no asistir al momento de entregar los alegatos de fondo (en este caso sería Colombia) “la contraparte, es decir, Nicaragua, podría pedir que se falle a su favor”. Aseguró que considera que el Gobierno ya está “estudiando las opciones que se tienen frente a las decisiones de La Haya de este jueves que es importante decir, no fueron de fondo”. Afirmó que se han presentado casos en los que los países deciden no asistir “como uno de Estados Unidos frente a Nicaragua. No es una situación normal pero sí ha pasado”. El excanciller dijo que considera que el Gobierno ha hecho “lo que debía hacer y era presentar las excepciones preliminares en ambo casos”.