Aunque con respecto al año anterior las cifras son menores, la problemática migratoria sigue generando preocupación en autoridades de la región, pues según reveló el presidente de Panamá, José Raúl Mulino, ya son 300.634 las personas que han cruzado la selva del Darién camino a Norte y Centroamérica.El mandatario destacó que si bien se trata de una reducción de hasta el 41 % de personas que han realizado esta travesía con respecto a 2023, la cifra inquietante la registran 55 personas que han perdido la vida en este peligroso paso en el que venezolanos, colombianos y ecuatorianos siguen encabezando la lista de nacionalidades.Menores de edad también han quedado a la deriva, se han perdido 180 de ellos que han quedado a disposición de las autoridades del vecino país."Lo preocupante es que han quedado 180 menores no acompañados a la disposición de las autoridades. Es un problema muy serio porque, de donde tengo entendido, son menores de distintas edades", aseguró el presidente Mulino.Mulino reconoció que, si bien la migración de Venezuela no terminará hasta que dicho país pueda resolver su situación interna, esperan seguir trabajando de la mano con otros países de la región para garantizar menores flujos y muchos más seguros, además en los que no estén involucrados grupos armados que se lucran de estas rutas.
El gobierno del presidente Joe Biden pide el pleno acceso de los venezolanos "a las urnas" el domingo para que puedan votar y que sus votos se contabilicen "con precisión y transparencia", afirmaron este viernes funcionarios estadounidenses.Venezuela elige mandatario este domingo entre diez candidatos, de los cuales solo dos tienen posibilidades. Se trata del mandatario chavista Nicolás Maduro, en el poder desde 2013, y el opositor Edmundo González Urrutia, representante de la líder María Corina Machado, que no pudo ser aspirante por una inhabilitación política.Estados Unidos, que no mantiene relaciones con Venezuela por considerar fraudulenta la reelección de Maduro, insiste en que las elecciones sean transparentes."Lo esencial hoy (...) es que se permita a los venezolanos acceder plenamente a las urnas", declaró a periodistas un funcionario estadounidense que pidió el anonimato."Estados Unidos no prejuzgará el resultado de estas elecciones" pero es "vital" que "reflejen la verdadera voz del electorado, libre de manipulación y coerción", afirmó.Los venezolanos "deben de poder votar con seguridad y que sus votos se contabilicen con precisión y transparencia en presencia de testigos, como estipula la legislación venezolana", reiteró otro alto cargo, que también solicitó el anonimato.El gobierno estadounidense "está preparado para trabajar con el ganador de estas elecciones, siempre y cuando haya un proceso electoral transparente y justo que sea verificado por observadores nacionales e internacionales", afirmó el primer funcionario.El presidente panameño, José Raúl Mulino, denunció este viernes que autoridades venezolanas impidieron el despegue de un vuelo que debía transportar a exgobernantes latinoamericanos para ejercer de observadores.Washington llama a "reconsiderar esta decisión y permitir una mayor presencia internacional, en particular de los ilustres expresidentes de la región", declaró el segundo funcionario.Según los altos cargos, si Maduro pierde Estados Unidos estaría dispuesto a apoyar un periodo poselectoral "pacífico y negociado y considerar medidas que faciliten una transición pacífica del poder".La administración de Biden apostó por una diplomacia del diálogo con Caracas, aunque manteniendo las principales sanciones, en contraposición a la mano dura de su predecesor republicano Donald Trump, candidato de nuevo a la Casa Blanca en las elecciones de noviembre.Como moneda de cambio, Biden usó las sanciones, que aflojó como recompensa a compromisos o concesiones de Maduro y las reimpuso cuando Caracas incumplía sus promesas.Ahora "Estados Unidos está preparado para calibrar nuestra política de sanciones en función de los acontecimientos que puedan desarrollarse en Venezuela", afirmó el primer funcionario.Tomará una decisión basándose no solo en un resultado verificable sino el escenario poselectoral hasta la investidura, que no se espera hasta enero, es decir tendrá muy en cuenta si hay "represión política o represalias", añaden las fuentes.Según la oenegé de derechos humanos Foro Penal, desde enero se han producido "149 arrestos arbitrarios por motivos políticos", de los cuales 135 "están directamente vinculados" con la campaña de González Urrutia.
El nuevo presidente de Panamá, José Raúl Mulino, anunció este viernes un proceso de "depuración" en los cuerpos de seguridad para impedir su cooptación por parte del crimen organizado, así como la compra de equipamiento para elevar su "moral" y operatividad."Viene también un proceso de depuración a lo interno de cada estamento para no dejar que el delito, el narcotráfico o el crimen organizado impere o trate de imperar a lo interno de cada uno de ustedes como estamentos", dijo Mulino.El nuevo presidente de Panamá, que asumió el cargo el pasado 1 de julio para un período de 5 años, se expresó así durante la ceremonia de cambio de mando en la Policía Nacional (PN), el Servicio Nacional Aeronaval (Senan) y el Servicio Nacional de Fronteras (Senafront).Analistas locales denuncian corruptelas en las filas de la Policía Nacional que se evidencia, por ejemplo, con el tráfico de armas o drogas en las cárceles, y no es extraño que agentes de la fuerza pública sean atrapados trasegando drogas.Mulino habló de elevar la "moral" de los agentes de seguridad del Estado, a la luz de que "vienen tiempos complejo" para el país, que atraviesa una crisis económica que ha prometido enfrentar con disciplina fiscal, austeridad y atracción de inversiones."Desde ya iniciaremos un proceso de levantamiento de la moral a todos los cuerpos policiales, fronterizos y navales del país", para lo que, entre otras, se está ya coordinando "para la compra de todo su equipo, desde uniformes, botas, zapatos, armas, municiones, automóviles" , así como "pagar los seguros que corresponda".Panamá abolió el Ejército en 1990, tras la invasión en 1989 del Estados Unidos para capturar al dictador Manuel Antonio Noriega (1934-2017), y creó en su defecto la Fuerza Pública que a la postre y tras cambios legales quedó representada en los actuales cuerpos de seguridad, que están integrados por más de 30.000 efectivos de acuerdo con los datos disponibles.
El presidente colombiano, Gustavo Petro, llegó este domingo a Panamá para asistir a la ceremonia de investidura el lunes del presidente electo panameño, José Raúl Mulino.Petro, que llegó antes de lo esperado según la agenda oficial, fue recibido por autoridades del Gobierno panameño en el Aeropuerto Internacional Panamá Pacífico, antiguamente una base de la fuerza aérea de EE.UU., en la entrada del canal interoceánico.La visita del presidente colombiano es una de las más esperadas, después de que a principios de este mes aplazara una visita oficial que había anunciado a Panamá, y que Mulino confirmó, donde ambos mandatarios iban a hablar de "todos los temas" y entre ellos de la creciente migración por la selva del Darién.La visita del mandatario colombiano se aplazó "por motivos de agenda de Gobierno".Petro había anunciado el pasado 1 de junio que visitaría la provincia panameña de Bocas del Toro (oeste) para pedirle al Gobierno de Panamá el poder "desenterrar" los cuerpos de colombianos que murieron a finales del siglo XIX y "recuperarlos" como parte de la historia colombiana.Durante esta visita se producirá la primera reunión de Petro con el presidente electo.El acto de investidura de Mulino, en la capital panameña, contará con la presencia del rey de España, Felipe VI; y otros presidentes como la de Honduras, Xiomara Castro; Costa Rica, Rodrigo Chaves; República Dominicana, Luis Abinader; Ecuador, Daniel Noboa; y el primer ministro de Belice, John Briceño, entre otros.También asistirán los ministros de Asuntos Exteriores de España, José Manuel Albares; Ecuador, Gabriela Sommerfeld; de Paraguay, Rubén Ramírez; Perú, Javier González Olaechea; Colombia, Luis Gilberto Murillo, y de Nicaragua, Denis Moncada.Estados Unidos estará representado por el secretario de Seguridad Nacional, Alejandro Mayorkas, mientras que por parte de China estará el enviado especial del presidente Xi Jinping y ministro de la Administración General de Aduanas, Yu Jianhua.
José Raúl Mulino fue elegido como nuevo presidente de Panamá, imponiéndose con una amplia diferencia a sus adversarios directos, que vieron cómo se dividían los votos entre ellos mientras se imponía el candidato que prometió devolver el dinero a los bolsillos de los panameños."Me complace, en nombre del Tribunal Electoral, comunicarle que de acuerdo a nuestro sistema de transmisión extraoficial de resultados es usted en estos momentos de forma extraoficial el ganador a la presidencia de la República en las elecciones generales de 2024", informó a Mulino en una videollamada el presidente del Tribunal Electoral, Alfredo Juncá.En diálogo con Mañanas Blu, Mulino se refirió, sobre todo, al tema de la migración ilegal, una problemática que tiene tanto Panamá como Colombia, por el tapón del Darién. El presidente electo anunció que hará todo lo posible para cerrar esa frontera.En ese sentido, sobre el cierre de la frontera y la repatriación de migrantes, Mulino reconoció que no será una tarea fácil, pero afirmó que se tomarán medidas firmes para frenar este flujo migratorio. "Haremos todo lo que tengamos que hacer para cerrar esa frontera. Iniciaremos un proceso de repatriación en coordinación con los países involucrados y respetando los derechos humanos de las personas", declaró Mulino. Finalmente, el presidente electo enfatizó su compromiso de gobernar con independencia y trabajar para un gobierno de unidad nacional. Su objetivo principal es sacar adelante a Panamá y brindar oportunidades a los panameños.