A la cárcel fueron enviados finalmente tres integrantes de una misma familia, el padre, la madre y el tío de una bebé de un año a quien habrían abusado sexualmente, torturado y asesinado el pasado 14 de agosto, en la localidad de Kennedy, suroccidente de Bogotá.Los tres acusados fueron capturados por integrantes CTI y de la Sijin de la Policía y fue un fiscal el que les imputó a estas personas, de acuerdo con su posible participación, los delitos de feminicidio, acceso carnal violento y tortura. Todas las conductas agravadas. Los cargos no fueron aceptados.Lo que ocurría con la menor de edad quedó en evidencia cuando sus padres la llevaron inconsciente al Hospital de Kennedy. Allí los médicos constataron que estaba sin signos vitales y había fallecido horas antes de su llegada.Posteriormente, el Instituto Nacional de Medicina Legal y Ciencias Forenses estableció que la bebé tenía signos de violencia sexual y dictaminó que la muerte fue producto de asfixia por sofocación, ocasionada presuntamente por el tío.Los padres, dice la Fiscalía, omitieron su deber de cuidado y protección de la niña y por eso son señalados de participar y permitir actos en contra de la formación sexual e integridad física de su hija, por lo que finalmente también fueron enviados a la cárcel.
Sicarios acabaron con la vida de un joven de apenas 15 años en el sur de Bogotá. De acuerdo con las primeras versiones de testigos en el lugar, el hecho se registró exactamente en la Cra 82B con 40B sur, barrio Dindalito, cuando dos jóvenes se encontraban en plena vía pública y fueron abordados por un hombre armado, quien les disparó en repetidas oportunidades.En medio de labores de patrullaje, la comunidad por voces de auxilio alertó a los policías, quienes hicieron presencia en el lugar y se encontraron con el cuerpo de la víctima de 15 años tendido en plena vía pública con graves heridas, por lo que de inmediato lo trasladaron a un centro asistencial en un taxi.A pesar de que el menor logró llegar al centro médico, momentos después murió por la gravedad de las lesiones ya que, de acuerdo con las autoridades, había recibido un disparo mortal a la altura de la cabeza. En el momento del ataque, la víctima vestía pantalón negro, camisa negra y tenis blancos.Según el reporte, en el mismo sector fue ubicado otro ciudadano de nacionalidad extranjera, identificado como José Parra de 19 años, también con heridas de arma de fuego en la zona lumbar, por lo que fue trasladado al Hospital de Kennedy donde a esta hora recibe atención médica.Le puede interesar:
En el Hospital de Kennedy, único Centro de Excelencia en Epilepsia de la red pública colombiana, se pudo realizar la primera cirugía pediátrica de epilepsia refractaria en un menor de 14 años.Dairo Arley Vergara Gonzales, quien desde sus dos años padece de epilepsia, fue el primer joven en someterse a este procedimiento en la nueva torre de urgencias del Hospital Kennedy. Esta cirugía ya se ha realizado más de 120 veces en pacientes adultos en las últimas décadas.Los encargados médicos de realizar este procedimiento son un equipo interdisciplinario integrado por neurocirujanos, neurólogos, neuro psicólogos, psiquiatras y psicólogos especialistas en epilepsia, lo cual reduce el riesgo de algún inconveniente.Suscríbase a nuestro canal de WhatsApp aquí:👉🏻 bit.ly/42ZQznF“En las epilepsias muy complejas, los neurocirujanos implantan electrodos intracraneales para monitorizar su actividad cerebral durante una o dos semanas con una finalidad diagnóstica: ubicar y delimitar la zona donde se originan las crisis para determinar si es posible extirparla, dicha técnica se denomina estereoelectroenenfalografía. Este es el procedimiento que se siguió en el caso de Dairo Arley”, comentó Sandra Riveros, neurocirujana de la Subred Sur Occidente.Este programa de cirugía epiléptica es una solución y opción para los pacientes cuyo tratamiento farmacológico para el control de las crisis no sea efectivo y también para aquellos pacientes en los que es posible determinar el origen anatómico y eléctrico de la enfermedad.“El servicio de neurología de la Subred Sur Occidente cuenta con el programa Centro de Excelencia en Epilepsia, con más de 20 años de funcionamiento y al servicio de toda la ciudad. Nuestros especialistas en esta enfermedad han realizado 23 procedimientos quirúrgicos desde enero de 2022 y hasta la fecha, en el marco de la atención integral e interdisciplinaria, lo que permite mejorar las condiciones de salud y calidad de vida de nuestros pacientes y sus familias”, resaltó Martha Yolanda Ruíz Valdés, gerente de la Subred Sur Occidente.Vea también
Casi 13 años tuvieron que esperar millones de habitantes de Kennedy, una de las localidades con más habitantes en Bogotá, para poder recibir la torre de urgencias del Hospital de Kennedy. Este mega elefante blanco duró todo este tiempo bajo la sombra y, según la alcaldesa Claudia López, siendo víctima de la corrupción de la alcaldía del exalcalde Samuel Moreno.La obra quedó abandonada en 2013 cuando se declaró el incumplimiento del contrato y no fue sino hasta 2018 que arrancaron nuevamente los estudios y diseños para finalmente, en 2020, arrancar nuevamente las obras en ese punto de la ciudad.Y fue entre lágrimas, recordando a los médicos que murieron atendiendo la pandemia del COVID-19 en ese hospital, que la mandataria capitalina anunció su entrada en funcionamiento a partir de esta semana. En total fueron invertidos 124.000 millones de pesos, que beneficiarán a más de 2,5 millones de personas que habitan la localidad de Kennedy.“Hoy recuerdo a Andrés Carranza, por quien vine a rezar aquí con sus compañeros en 2020. Andrés, como todos los médicos y enfermeras de Bogotá, nunca pensó si su vida estaba en riesgo para cuidarnos en la pandemia, nunca dudó en venir a trabajar todos los días. Como él, cerca de 200 personas del sector salud perdieron la vida cuidándonos del COVID”, indicó llorando la alcaldesa de Bogotá.Son 13.300 metros cuadrados y cuatro pisos los que se tendrán para atención de urgencias y trauma; salas de procedimientos y cirugías; observación médica, ginecología, salas de parto y unidades de cuidados intensivos para niñas y niños, incluidos los recién nacidos; además, tendrá el único banco de leche materna distrital, que brindará alimentación a los bebés que lo necesiten en la ciudad.Le puede interesar:
Una mujer y su pareja fueron enviados a la cárcel por golpear, lanzar agua fría, escupir, amarrar al techo y agredir de distintas maneras a sus tres hijos, menores de edad, en una vivienda ubicada en la localidad de Bosa, en el sur de Bogotá.Una de las víctimas es una bebé de apenas dos años, quien ingresó inconsciente y de urgencias al Hospital de Kennedy el pasado 13 de febrero con varios hematomas y fracturas en distintas partes del cuerpo. De acuerdo con la investigación, la pareja le daba patadas indiscriminadamente a la menor, algunas en la cabeza que le ocasionaba la pérdida de consciencia a la niña.Fue el padre biológico de los tres niños, que fueron víctimas de esta pareja, quien los denunció, por lo que inició la investigación que dio como resultado la captura del hombre y la mujer, quienes sometían a golpes a los niños de dos, cinco y siete años.“Con abundantes testimonios y elementos de prueba en su contra, la pareja fue capturada en diligencias realizadas por unidades de la Policía Nacional en el barrio El Recreo de la localidad de Bosa, en el suroccidente de Bogotá”, indicó la Fiscalía.Al hombre y la mujer, de 25 y 35 años, se les imputó los delitos de tentativa de homicidio y violencia intrafamiliar, ambas conductas agravadas, por lo que fueron enviados a una cárcel.Le puede interesar: 'Titulares Deportivos'
En Bogotá se registró un nuevo asesinato, esta vez en la localidad de Kennedy, específicamente en la avenida Primero de Mayo #69 - 84 en el barrio Carvajal. Allí un joven, identificado como Brayan Ayala García, a quien por robarle una gorra lo apuñalaron dos veces.El hombre, de 20 años, presentó dos heridas a la altura del tórax. Según manifestó por el cuadrante de la Policía Nacional la víctima se encontraba departiendo dentro del establecimiento público y sobre las 04:30 de la mañana se presentó una fuerte riña.A la víctima le querían robar la gorra y al poner resistencia resultó gravemente lesionado con un puñal en dos ocasiones.El joven fue trasladado en un taxi al Hospital de Kennedy donde se reportó su muerte por la gravedad de las heridas. En el lugar se ubicaron dos testigos presenciales, quienes ayudarán a las autoridades a esclarecer los hechos.El joven asesinado tenía antecedentes judiciales por Fabricación, tráfico y porte de armas de fuego o municiones.Escuche el podcast “Zorros y Erizos” y conozca por qué la brecha de género es tan grande en Colombia:
Un lamentable hecho sacudió la localidad de Bosa, luego de que un menor de 9 años fue hallado sin signos vitales por su padre en un apartamento de esa localidad. A través de un comunicado, la Secretaría de Educación, confirmó la muerte de este pequeño, la entidad rechazó el hecho y mencionó el apoyan al proceso de investigación para esclarecer los hechos detrás de la muerte del menor.El niño estudiaba en el colegio Alfonso Reyes Echandía de Bosa. Según las versiones que entregó el padre de familia, encontró a su hijo en el piso del apartamento, luego de ausentarse por unos minutos.Una de las hipótesis que manejan las autoridades es que la bala pudo ser consecuencia de un robo. Sin embargo, los investigadores no descartaron otros escenarios que llevaron a las lesiones del pequeño.El menor de edad se encontraba en una unidad de cuidados intensivos del Hospital de Kennedy, donde en las últimas horas se confirmó su fallecimiento.
Un niño de ocho años recibió un impacto de bala mientras estaba en su apartamento en el barrio Villa Javier, de la localidad de Bosa. El papá del menor lo encontró en el suelo del baño con una herida en la cabeza, lo que de inmediato lo llevó a pensar que se trataba de un golpe.El Ojo de la Noche habló con el papá del niño, quien en el momento de los hechos estaba atendiendo una situación en el local que tienen cerca a la vivienda y al llegar a su casa se encontró con esa escena.El padre del menor le explicó a los médicos que durante el traslado al hospital de Kennedy, el niño le alcanzó a entender algunas palabras y le apretó la mano, por lo tuvo alguna esperanza del estado de salud de su hijo.Sin embargo, los médicos le informaron que la herida en la cabeza no correspondía a un golpe, sino a un impacto de bala.Según explica el papá, de su casa se perdió una gruesa suma de dinero, por lo que se maneja la hipótesis de que un delincuente ingresó a la vivienda para efectuar el robo. Pero se desconoce quién disparó.La indagación de lo sucedido está en curso y tanto el papá como la madrasta del niño de ocho años son investigados por las autoridades.Escuche el informe del Ojo de la Noche en Mañanas Blu:Le puede interesar:
Leydi Johana Beltran Ortiz, una joven mujer fue asesinada en el barrio Patio Bonito, localidad de Kennedy, en el occidente de Bogotá. Según denuncia la familia de la mujer, el asesino fue su propia pareja sentimental, quien, en un ataque de celos, le dio una puñalada en el corazón. Ella alcanzó a llegar viva al hospital, donde murió.Al hombre lo capturaron y momentos después lo dejaron en libertad, según dijo el hermano de la víctima, quien, además, reveló que dos niñas, que no son hijas del asesino, quedaron huérfanas.El hombre denunció que su hermana ya venía recibiendo amenazas contra su vida por parte de este hombre, que fue identificado como Waldo Rojas.El asesinato ocurrió cuando ella estaba en su casa acompañada de sus dos hijas, una de 5 años y otra de 10 años. El hombre la llamó y la citó fuera de la casa, donde, después de una discusión, le propina la puñalada mortal-La mujer fue traslada al hospital de inmediato, donde llegó con signos vitales, pero momentos después falleció.“Ella fue asesinado por su cónyuge, propinándole una puñalada en el corazón. Él la traslada al hospital y pasando un tiempo fallece. No se tiene ninguna comunicación con la familia, hasta pasadas las 4:00 de la mañana, que nos informan que ya había fallecido”, dijo.El hombre, fue capturado, pero, según denuncia la familia de la víctima, lo dejaron en libertad porque negó rotundamente ser el autor del asesinato.Le puede interesar: Ser campeón viene con manual
El Instituto Colombiano de Bienestar Familiar, Icbf, anunció sobre el caso del homicidio de Cristian David, un niño de 8 años de edad, quien su padrastro le quitó la vida en medio de una pelea por celos, que su hermana de 6 años fue dejada en las manos de la entidad."De manera inmediata, la Policía de Infancia de Adolescencia nos pone a disposición su hermanita de 6 años, aquí en la Defensoría de Familia, que le abre un proceso administrativo de restablecimiento de derechos y para garantizar su protección es ubicada en un medio institucional", indicó Martha Tovar, directora del Icbf regional Bogotá.El menor fue asesinado el 3 de enero cuando al interior de su vivienda en el barrio Jackeline, al sur occidente de Bogotá, cuando su madre y su pareja discutían. El hombre de 42 años apuñaló a Cristian David en el tórax y perdió la vida en el Hospital de Kennedy. Le puede interesar: Entérese de los hechos deportivos más importantes del momento:
Un juzgado especializado condenó este viernes a Edwin Raúl Murcia Rodríguez y Kevin Sebastián Hernández Socha por el delito de terrorismo agravado, tras comprobarse su responsabilidad en el ataque al CAI del barrio La Aurora, sur de Bogotá, durante el estallido social, la noche del 4 de mayo de 2021. En el lugar se encontraban refugiados 15 policías, y los agresores emplearon piedras, palos y bombas incendiarias para llevar a cabo el ataque.La sentencia se basó en pruebas contundentes presentadas durante el juicio. Los videos de las cámaras de seguridad, el reconocimiento fotográfico y los testimonios de las víctimas señalaron a Murcia Rodríguez y Hernández Socha como los responsables del ataque. Además, se encontró que los artefactos explosivos incautados en la vivienda de Murcia Rodríguez coincidían con las sustancias empleadas contra las instalaciones policiales.El juez desestimó las pruebas presentadas por la defensa, y las calificó de inconsistentes y contradictorias. En su fallo, afirmó que quedó demostrado “más allá de toda duda razonable” que los acusados actuaron con dolo y que las conductas punibles fueron ejecutadas con premeditación y violencia.El Ministerio Público también respaldó la condena. El procurador enfatizó que no se trató de una protesta social, como argumentaba la defensa, sino de un acto deliberado de terrorismo destinado a intimidar y generar temor. “Se comprobó la materialidad de las conductas y la responsabilidad penal de los procesados”, afirmó, añadiendo que el allanamiento realizado en la vivienda de Murcia Rodríguez cumplió con todos los protocolos legales.
La Superintendencia Nacional de Salud encabezada por Giovanni Rubiano, ha decidido adelantar la toma de posesión de la EPS Coosalud en Cartagena tras ordenar su intervención forzosa para la administración. Esta medida se fundamenta en una serie de hallazgos que según la entidad evidencian serias falencias, esta EPS tiene a más de 3.3 millones de afiliados.La intervención llega en el momento en el que Coosalud se encuentra dentro de las cuatro EPS que están siendo investigadas por la Fiscalía General de la Nación, a raíz de las denuncias presentadas por Luis Carlos Leal, el anterior superintendente por presunta corrupción.En un contexto de grandes reformas al sistema de salud, el presidente Gustavo Petro había declarado con firmeza durante la posesión de Giovanni Rubiano como nuevo superintendente, que la vigilancia de las EPS es una de las tareas cruciales en el marco de la reforma al sector. "Antes de la aprobación del proyecto de reforma a la salud, la Superintendencia debe vigilar las EPS" había dicho el mandatarioY es que recordemos que durante esta posesión el mandatario solicitó a la Fiscalía General de la Nación investigar a fondo nuevas denuncias sobre corrupción en EPS. Al respecto, se refirió a la EPS Coosalud "Esta EPS no responde a las intervenidas, hoy por hoy es privada, aunque en mi opinión debería ser intervenida", señaló PetroLa intervención de Coosalud es la octava de este tipo y es la primera intervención ordenada por Rubiano desde su nombramiento. Durante la intervención el superintendente posiciono como agente interventor a Mauricio Camaro Fuentes. Coosalud es una de las EPS más grandes del país, ocupando la quinta posición en número de afiliados, con un total de 3.369.583 personas cubiertas bajo su servicio.
Un accidente de tránsito dejó tres personas lesionadas, dos de ellas de consideración grave, en un choque múltiple que involucró tres motocicletas y un bus. El incidente ocurrió en el kilómetro 14+180 de la vía Medellín-Bogotá, en el sector conocido como Peñolsito.De acuerdo con las primeras versiones y un video difundido en redes sociales, el accidente se presentó en condiciones de baja visibilidad debido a la niebla. En el siguiente video se observa cómo un bus se detiene en la vía, momento en el que uno de los motociclistas no logra frenar a tiempo y choca contra la parte trasera del vehículo. Tras el impacto, el motociclista cae sobre la calzada, provocando que las otras dos motocicletas que venían detrás también se estrellaran y terminaran en el suelo.Las autoridades de tránsito acudieron rápidamente al lugar para atender la emergencia y coordinar el traslado de los heridos a centros asistenciales cercanos. Se informó que dos de los lesionados presentan heridas de consideración y están bajo observación médica, mientras que el tercero sufrió lesiones menores.El tráfico en el sector se vio afectado durante varias horas mientras se realizaban las labores de atención y limpieza de la vía. Las autoridades hicieron un llamado a los conductores para extremar las precauciones, especialmente en condiciones de baja visibilidad, y recordaron la importancia de mantener distancias seguras y respetar los límites de velocidad para evitar este tipo de accidentes.
La Sección de Apelación de la JEP decidió declarar improcedente la solicitud de nulidad que presentó el general en retiro Mario Montoya Uribe, excomandante del Ejército, quien fue imputado por su responsabilidad en casos de falsos positivos que se registraron en Antioquia mientras él comandó la Brigada Cuarta.“La Subsala consideró que tenía bases suficientes para señalar, entre otros, al compareciente MONTOYA URIBE como máximo responsable en calidad de autor por crímenes de guerra de homicidio en persona protegida y desaparición forzada y los crímenes de lesa humanidad de asesinato y desaparición forzada, en su calidad de comandante de la Brigada IV del Ejército Nacional, dada su posición de garante por competencia institucional y en atención al ejercicio de tal calidad en la configuración de los patrones macrocriminales analizados por la SRVR en el ADHC”, explicó la JEP.Montoya pidió anular dicha imputación y en una primera medida esa solicitud fue negada, por lo que su abogado volvió a apelar.“Mediante escritos del 17 y 24 de mayo de 2024, el representante judicial del compareciente interpuso de forma oportuna el recurso de apelación contra el auto 024 del 6 de mayo de 202445. Fundamentó su inconformidad en cuatro ejes temáticos: (i) Sobre la imputación como autor por instigación a título de dolo, cuestionó la decisión de la SRVR pues en su criterio los títulos de “autor” e “Instigador” usados por la Sala de justicia implican una mixtura de figuras legales, en tanto el primer vocablo alude al dominio del hecho y el segundo no. Situación que resulta confusa, incoherente e incomprensible para el compareciente y deviene en un vicio del consentimiento de cara a una posible aceptación46. (ii) La falta de enunciación de los hechos” explica la JEP.La defensa aseguraba que algunos hechos imputados se encuentran fuera del rango temporal en el que Montoya ejerció la comandancia en dicha Brigada y que habría violaciones a los derechos en el proceso.“ninguno de los disensos que elevó el representante judicial del señor MONTOYA URIBE configura una violación a sus garantías y derechos fundamentales, pues de lo conocido por la SA en el trámite, no es posible acreditar los principios, reglas y subreglas que regulan las nulidades ante la JEP. Por un lado, esta Sección referirá que lo alegado respecto al ADHC son aspectos sustanciales que no pueden ser objeto de nulidad pues hacen parte de la esfera valorativa de la SRVR, lo que deviene inevitablemente en una improcedencia de la solicitud de nulidad respecto a la controversia tanto en la imputación realizada por la Sala de Justicia como por la forma en que relacionó los hechos jurídicamente relevantes en el ADHC. Luego de analizar los argumentos de disenso, el a quo consideró que el procedimiento dialógico adelantado cumplió con las garantías procesales que le asisten al compareciente y que, contrario a lo sostenido por el recurrente, no hubo afectación de los derechos fundamentales al debido proceso. Como quedó reseñado, en la solicitud de nulidad se realizó una amplia serie de reproches, por lo que cabe aclarar que la SA sólo se ocupará de verificar el cumplimiento de los requisitos para la procedibilidad de los cargos de nulidad, en los que se insiste en la vulneración de garantías procesales por la indebida valoración de ciertos elementos materiales probatorios y por otra parte, debido a la ausencia de traslado de algunas versiones voluntarias que lo incriminan”, resolvió la JEP.Ante esta situación la Sección de Apelación declaró desierta la solicitud de Montoya.“REVOCAR el numeral CUARTO del auto SUB-D SUBCASO ANTIOQUIA- 024 del 6 de mayo de 2024 y en su lugar, DECLARAR IMPROCEDENTE la solicitud de nulidad presentada por el representante judicial del compareciente señor Mario MONTOYA URIBE, frente a los cargos de formulación de imputación, determinación de los hechos y conductas y valoración probatoria, por las razones anotadas en la parte motiva de este proveído.Segundo.- DECLARAR DESIERTO el recurso de apelación interpuesto por el abogado del compareciente MONTOYA URIBE en relación con la vulneración del debido proceso por la ausencia de traslado probatorio deprecado, al no cumplirse por parte del apelante la carga argumentativa conforme lo expuesto en la parte motiva de este proveído.Tercero.- En firme esta providencia, DEVOLVER las diligencias a la Subsala D de la Sala de Reconocimiento de Verdad, de Responsabilidad y de Determinación de los Hechos y Conductas, para lo de su competencia”, dice el auto.De esta manera el general en retiro Mario Montoya deberá enfrentar un juicio adversarial, de ser vencido podría pagar 20 años de prisión.
Luis Fernando Llano se ha convertido en una de las voces que ha denunciado a lo largo de los años al sacerdote Darío Chavarriaga. Públicamente, Llano, de 62 años, lo acusó de abuso sexual, delito que, aseguró, se repitió en varias ocasiones y que también cometió contra sus siete hermanas, cuando eran todos menores de edad.En diálogo con Mañanas Blu con Néstor Morales, Llano contó su historia. Según recordó, los abusos por parte de Darío Chavarriaga, quien falleció en 2015, ocurrieron cuando tan solo tenía 14 años y era estudiante en el Colegio San Bartolomé de Bogotá en 1976.En ese entonces, el sacerdote, que era el segundo al mando, le otorgó una beca por su rendimiento académico y, de a poco, se ganó su confianza y la de su familia al punto de que Llano se llegó a quedar a dormir en los aposentos de Chavarriaga varias noches, donde ocurrieron parte de los abusos.Cadena de complicidadHoy, años después, Llano se pregunta cómo fue posible que en ese momento nadie, incluyendo sacerdotes, preguntara por las conductas inapropiadas que tenía Chavarriaga con él. Por eso, dijo que eso lo hace pensar en que, tal vez, se dieron cuenta, pero “guardaron silencio”.“Hubo gente alrededor, porque es muy raro que llegue un niño al colegio a las 11:00 de la noche a dormir, es algo muy raro. De esto puedo dar fe, que cuando bajábamos en la mañana, que yo bajo con el pelo mojado y mis libros, me siento en la mesa donde estaban sacerdotes y gente de la comunidad, cómo es posible que ninguno de ellos se haya levantado a preguntarle: ¿usted qué hace en el cuarto con este niño?”, comentó Llano.El día que se reencontró con su abusador: un hecho que lo animó a denunciar públicamenteLlano contó que fue en el 2014, en un evento al que asistió con parte de su familia, que se reencontró por casualidad al sacerdote Darío Chavarriaga. Cuando lo vio solo tuvo el impulso de irse contra él para enfrentarlo e, incluso, golpearlo por todo lo que le había hecho en la infancia, pero uno de sus sobrinos lo detuvo y lo calmó, pese a que nadie entendía qué pasaba.“No tenía previsto ese encuentro. Era un capítulo en mi vida que tenía sepultado, tapado con cerrojo, pero las circunstancias de la vida me llevaron a reaccionar de esa manera (…) Él me vio y vio mi reacción, se dio vuelta y subió a sus aposentos”, detalló.Denuncia al padre Francisco De RouxLuego de eso, Llano decidió denunciarlo y no seguir guardando silencio con su caso. Ese mismo año, lo acusó ante el padre Francisco De Roux, quien en ese entonces era el jefe de la comunidad en Colombia. Unos años más tarde lo hizo también ante el sacerdote alemán Hans Zollner, profesor en la Universidad Gregoriana de Roma y muy cercano al papa Francisco.“Él (De Roux) tomó unas medidas canónicas. Dijo que iba a obtener toda la información posible para una máxima sanción, pero, como lo dice en nuestra carta, la solicitud de llevarlo a la Fiscalía pues no se habló; era presentarlo a las autoridades, pensamos que con eso ya quedaba resuelta la solicitud”, agregó.Insistió que por la gravedad de los delitos denunciados, era suficiente para que Chavarriaga fuer apuesto en manos de la justicia ordinaria.“Yo pienso que él ha de ir más lejos porque los delitos que se estaban denunciando no eran simples faltas disciplinarias o una cuestión muy leve. Así como pedimos que llevara esto a las autoridades, esperábamos que fuera un paso más adelante. No lo juzgo, pero las cosas pudieron hacerse de otra manera en ese momento”, recalcó.Otros abusos: un recuerdo dolorosoFue año después de ese incidente que su hermana Sofia, en una conversación mientras conducía, le preguntó qué había pasado esa vez. Luis Fernando decidió contarle que había sido abusado por el cura.En ese momento, según recordó, su hermana “se tacó a llorar” y le reveló que ella también había sido abusada por él.Cuatro de los hermanos Llano, a partir de ahí, dijeron: “A mí también me pasó” y luego los demás. “Es muy difícil decirlo”, añadió sobre su lucha todos estos años.