El mundo del arte, la cultura y la política en Colombia están de luto; la muerte de la gran gestora Gloria Zea sorprendió al país. Mientras eso ocurría en Bogotá, en Medellín su hija y el artista Fernando Botero, su esposo, presentaban el documental Botero, una mirada íntima a la vida y obra del maestro, quien cumplió 70 años de carrera. Lina Botero fue la encargada de presentar esta producción realizada durante 19 meses en 10 países, tiempo en el que ella tuvo la que considera una de las más arduas tareas: convencer a su padre de aparecer ante las cámaras. “Mi papá, inicialmente, no quería hacer parte del documental, le parecía una pérdida de tiempo. Además, él como todos los artistas, es muy pudoroso a nivel personal y prefiere expresarse través de su obra, como es normal. Fue un trabajo de convencimiento y logramos que nos acompañara y nos colaborara”, dijo Lina Botero, horas antes de enterarse de la muerte de su madre, Gloria Zea. Lea además: Murió Gloria Zea, exdirectora del Museo de Arte Moderno El documental incluye material inédito y de archivo de la familia, un trabajo sobre Botero en el que también será protagonista Zea. Botero estará en las salas de Cine Colombia en las principales ciudades del país del 11 al 19 de abril.
A los 83 años falleció Gloria Zea en una clínica del norte de Bogotá, una de las más representativas y reconocidas gestoras culturales de Colombia. Desde finales de los 60, Gloria llevó el mando del Museo de Arte Moderno de Bogotá hasta el año 2016, cuando el MAMBO quedó a cargo de la hoy directora Claudia Hakim.Reviva la entrevista de Gloria Zea con El Radar de BLU Radio: Esto comenzó con una caja de cartón: Gloria Zea se despide del MamBo tras 46 años “Lamentamos profundamente el fallecimiento de Gloria Zea, una mujer que dedicó su vida a la cultura del país. Paz en su tumba y fortaleza para sus familiares y allegados”, se expresó desde el Teatro Colón.El Museo de Arte Moderno, que presidió durante 47 años, manifestó en un comunicado de prensa que su paso por el MAMBO “fue memorable” pues llevó a ese espacio “a escenarios internacionales y convocó a artistas de talla mundial hasta nuestro país”.Claudia Hakim, directora actual del Museo, recordó: “ella me extendió una invitación muy generosa a ser la directora de esta prestigiosa institución y representaré su legado en cada paso que demos al frente del MAMBO”.Esposa por algunos años del maestro Fernando Botero, Gloria Zea estuvo ligada al arte y la cultura, pese a tener sangre política, pues su padre, el liberal Germán Zea Hernández, fue ministro en varias ocasiones y tuvo lazos estrechos con esa forma de vida. “En mi casa se respiraban varias cosas: el partido liberal, el amor por este país, la política que era el campo de vida mi padre; jamás la cultura y jamás el arte. Sin embargo, para mí fue una vocación clarísima desde el primer minuto, no lo dude un instante”, destacó en una entrevista en El Radar de Blu Radio en abril de 2016.Dentro de sus acompañamientos a la cultura más representativos, fue llevar el mando del Museo de Arte Moderno, estar detrás de la construcción del edificio actual del museo diseñado por Rogelio Salmona, la restauración del Teatro Colón, el Camarín del Carmen, el Museo de Arte Colonial de Bogotá, el Museo Nacional y la Biblioteca Nacional.En diálogo con Ricardo Ospina, relató cómo era su relación con Fernando Botero, quien fue su profesor y tiempo después, su esposo. “Estando en la clase de pintura en uno de esos bellísimos salones del campito entró mi profesor; un muchacho buen mozo, arrogante, brillante y nos empezó a dictar la clase de pintura, a los cinco minutos nos habíamos enamorado locamente”, contó. En los Estados Unidos fue también integrante del Consejo Internacional del Museo de Arte de Nueva York.
Gloria Zea fue profesora a la edad de 20 años del departamento de humanidades de la Universidad de los Andes en lo que ella describe como “un acto de locura” que todavía no sabe cómo ocurrió. “Cuando entraba a clase, todos empezaban a silbar y me ponía como un tomate (…) la cosa más divertida es que me encuentro con unos ancianitos que me dicen que yo les di clase, porque la mayoría de los alumnos eran mayores que yo”, afirmó Zea. Su padre fue Germán Zea, un importante político del país y quien llegó a ser ministro varias veces, sin embargo ella nunca se relacionó con el tema político y el arte fue el que la cautivó. “En mi casa se respiraban varias cosas: el partido liberal, el amor por este país, la política que era el campo de vida mi padre; jamás la cultura y jamás el arte. Sin embargo para mí fue una vocación clarísima desde el primer minuto, no lo dude un instante” aseveró. En cuanto a su relación con Alberto Lleras, quien fue rector de la Universidad de los Andes, comentó que fue Lleras quien la invitó a estudiar en los Andes cuando su idea era estudiar en los Estados Unidos. En la universidad se conoció con Fernando Botero, quien fue su profesor y tiempo después, su esposo. “Estando en la clase de pintura en uno de esos bellísimos salones del campito entró mi profesor; un muchacho buen mozo, arrogante, brillante y nos empezó a dictar la clase de pintura, a los cinco minutos nos habíamos enamorado locamente” comentó Zea. En Estados Unidos fue integrante del consejo internacional del museo de arte de Nueva York. Al regresar a Colombia Marta Traba, quien había sido profesora suya en los Andes, le dio la noticia que iba a ser la nueva directora del museo de arte moderno de Bogotá.
Gloria aseguró que su permanencia en el cargo fue “en realidad toda una vida, asumí la dirección en 1969 y cuando yo llegué, recibí una caja de cartón con la personería jurídica, 80 cuadros, pero sobre todo, recibí una visión y un sueño que fue a lo que me dediqué durante estos 46 años”. Dijo que si bien tuvo momentos difíciles en su cargo “no voy a detenerme en ellos porque los buenos fueron tantos y tan maravillosos que definitivamente borraron todos los sinsabores de la vida”. Afirmó que ha trabajado con cientos de artistas colombianos “a los que le estoy eternamente agradecida, uno de los que más marcó fue Fernando Botero, que terminó siendo mi primer esposo y padre de mi tres hijos”. Se declaró orgullosa de ser la madre de los hijos del maestro Botero “porque él ha llegado muy lejos y mis hijos han ayudado de cierta forma en sus obras y eso me hace feliz”. Describió el arte en Colombia como algo “extraordinario, con una creatividad y una calidad que se va a terminar comiendo el mundo entero”. Dijo que hay inagotables opciones en el talento colombiano “que va a ser para todos”. Reveló que la nombraron presidente honoraria del Museo, junto al expresidente Belisario Betancur, y “voy a seguir colaborando en la expansión del Museo por lo que no puedo imaginarme un último día de trabajo”. “Yo no me imagino sentada todo un día tejiendo, he trabajado 46 años de mi vida y lo seguiré haciendo”, dijo Gloria Zea.