En las últimas horas, la Policía Nacional incautó más de 80 kilogramos de tres tipos de marihuana que pretendían ingresar a Bogotá. De acuerdo con las autoridades, dentro de los estupefacientes hay una nueva mezcla que están usando los delincuentes para generar mayor adicción en los consumidores.“Se hallaron 81 kilogramos de estupefacientes en tres tipos: Creepy, Tangie y Morada. Los uniformados de la Sijin, al revisar al interior, se encuentran con lo que, al parecer, sería marihuana tipo ‘Creepy’, la cual sería una de las sustancias más traficadas. Asimismo, la Tangie que es una marihuana de sabor a mandarina y a naranja. La morada, la cual se caracteriza por su mezcla de cannabis, fentanilo, tramadol, formaldehído y lo que al parecer serían extractos de huesos humanos”, dijo el coronel Juan Arango, oficial de Guarnición de la Policía Metropolitana de Bogotá.El operativo de dicha incautación se llevó a cabo en una de las entradas de Bogotá, justo donde los traficantes pretendían ingresar la droga en una camioneta (el estupefaciente se encontraba escondido en bolsas de basura). “Estos hechos se presentan cuando los uniformados le realizan él pare a este vehículo el cual emprende la huida, luego de unos minutos esta persona al verse rodeado, decide abandonar el vehículo”, afirma el reporte policial.Con esto, y en lo corrido del año en Bogotá, las autoridades han incautado alrededor de tres toneladas de marihuana. El total de la droga se encuentra avaluado en más de 6 mil millones de pesos, permitiendo que se saquen del mercado más de 3 millones de dosis por las calles de la ciudad.
El trabajo por varios meses de la DIJIN con la Fiscalía General de la Nación permitió la desarticulación de una banda delincuencial que fabricaba y comercializaba drogas sintéticas en Medellín y Bello. En los operativos de las autoridades se logró la captura de cuatro personas y la ubicación de tres laboratorios clandestinos.Según el reporte entregado por la Policía Judicial lo que llamó la atención de los uniformados fue el hallazgo de 47 ampolletas de fentanilo que eran usadas para contaminar la fórmula de otras drogas como el tusi, el éxtasis o el LSD. Además, se conoció que los lugares en donde realizaban las drogas sintéticas estaban ubicados en el barrio La Paralela de Medellín y en el barrio Madera de Bello.Durante el procedimiento, además de las capturas, se incautaron más de 2.500 gramos de tusi, 30 cajas de ketamina, cerca de 1.200 pastillas de éxtasis, 780 pastillas de Metadona, 15 kilos de cafeína y cinco millones de pesos en efectivo, entre otros elementos que eran usados por 'Los Sintéticos' para la fabricación de las drogas que posteriormente comercializaban.Una vez con la producción lista se presume que el grupo delincuencial se contactaba, entre otros, con organizaciones como 'Los Pachelly' a los que les vendían las drogas sintéticas. Incluso, las autoridades insisten que alias 'Sebas', presunto cabecilla de 'Los Sintéticos', pagaba a otros grupos delincuenciales para que les dieran permiso para operar en diferentes barrios del Valle de Aburrá.Finalmente, se destaca que también usaban las redes sociales para promocionar y vender su productos que eran contaminados con el fentanilo para darle un "plus" a la droga que fabricaban y que fuera más atractiva para los compradores.
En un puesto de control instalado en el sector La Gallera, de Sincelejo, la Policía de Tránsito y Transporte descubrió a un vehículo de servicio público que movilizaba en su interior 1.300 ampolletas de fentanilo, como si se tratara de un paquete de encomienda.La mercancía viajaba en una caja de cartón rotulada y embalada que al verificarla contenía otras 13 cajas más pequeñas, cada una con 100 unidades de fentanilo, en presentación de 0,5 mg/10 ml de solución inyectable.La supuesta encomienda salió desde Cartagena y aparentemente se dirigía hacia el municipio de Sahagún, Córdoba, confirmó la Policía de Tránsito y Transporte de Sucre, en cabeza del mayor Germán Ortiz Rincón."De igual manera se logra la incautación de 5 kilos de marihuana, los cuales iban a ser distribuidos en la ciudad de Sincelejo y Corozal", agregó el mayor Ortiz.Las ampolletas, avaluadas en aproximadamente 65.000.000 pesos, fueron dejadas a disposición de la Fiscalía, que ahora investiga de quién era la mercancía y cuál era el uso que pretendían darle a este potente medicamento de uso intrahospitalario, teniendo en cuenta que “tiene un alto poder adictivo y es considerado 50 veces más potente que la heroína”, tanto así que “puede causar daños permanentes en el cerebro de los consumidores y en el peor de los casos ocasionar la muerte”, informó la Policía.Y es que las alertas están encendidas en este departamento, ya que esta incautación se suma a la realizada en diciembre pasado, cuando las autoridades decomisaron 158 ampolletas de fentanilo de 10 mililitros cada una, en presentación farmacéutica, que también eran transportadas como encomienda en un vehículo de servicio público.Esa vez, la incautación se realizó en la vía que del municipio de Corozal conduce a Sincelejo y la mercancía había sido enviada desde Barranquilla.
El marido de la dueña de una guardería del distrito de El Bronx (Nueva York) donde un niño de 1 año murió envenenado con fentanilo el año pasado se declaró culpable de tres cargos federales este lunes.Félix Herrera García, nombre del individuo de 35 años, admitió ser culpable de conspiración para distribuir narcóticos, de un cargo de posesión de drogas que resultó en la muerte del pequeño y también otro de posesión que desembocó en lesiones graves de tres niños más en el mismo jardín de infancia.Cada uno de los tres cargos conlleva una pena mínima obligatoria de 20 años de prisión y una máxima de cadena perpetua.En el suceso, ocurrido a mediados de septiembre de 2023, falleció un niño de 1 año y otros tres -de edades comprendidas entre los 8 meses y los 2 años- fueron hospitalizados y tratados con Narcan, medicamento usado para revertir sobredosis, tras verse expuestos a fentanilo.Según las autoridades, aquel día Herrera García fue visto saliendo de la guardería con varias bolsas pesadas mientras los pequeños sufrían los efectos de ese opioide, considerado hasta cincuenta veces más potente que la heroína.Los detalles de escabroso caso de violencia intrafamiliar en SoachaEl sospechoso huyó a México después del incidente y finalmente fue detenido allí tras una persecución que se prolongó durante una semana.El fentanilo estaba almacenado, en parte, en una trampilla bajo el suelo de la guardería y aparte había otro kilo de esta droga debajo de las alfombras de juego de los niños, según la Policía de Nueva York, que también encontró una prensa para fabricar pastillas dentro del centro infantil.La propietaria de la guardería y esposa de Herrera García, Grei Méndez, sacó a su hijo de 2 años de su propia escuela para niños antes del incidente porque le preocupaba que presentara signos de exposición al fentanilo, detallaron meses atrás las autoridades encargadas de la investigación.Y añadieron que Méndez nunca informó a la Policía de la exposición al fentanilo y no permitió que el niño volviera a la guardería, pero aún así la mantuvo abierta.Tanto la dueña del jardín de infancia como su prima, también implicada en el caso, se enfrentan a once cargos cada una, que van desde asesinato y homicidio involuntario hasta causar lesiones graves y posesión de narcóticos.Unas 107.500 personas murieron por sobredosis relacionadas con el fentanilo y otros opioides sintéticos en 2023, según datos del Centro para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC, por sus siglas en inglés) de EE.UU.La cifra fue un 3 % inferior a la registrada en 2022, pero el fentanilo sigue preocupando en el país hasta el punto de ser considerada una epidemia que deja cada año más víctimas mortales que el total de soldados estadounidenses caídos en las guerras de Vietnam, Afganistán e Irak juntas.Le puede interesar:
Anner Milgram, directora mundial de la DEA, se reunió con el general William René Salamanca y se solidarizó por la muerte de los policías tras la oleada terrorista en el Cauca. Sin embargo, entre los temas centrales del encuentro, estuvo el incremento del uso de cuentas bancarias para lavar dinero del narcotráfico.De acuerdo con la directora de la DEA, es fundamental fortalecer la cooperación internacional contra las criptomonedas. Por eso, se conformará un equipo especial para enfrentar el fenómeno a través de la capacitación y el fortalecimiento de agentes para el desarrollo de investigaciones de alto impacto.“Se fortalecerán los grupos de la DEA en Colombia, especialmente contra el ciberdelito, rastreo de capitales, armas de fuego y sustancias químicas”, indicó.Milgram se comprometió, además, en que la DEA colaborará con la captura de los llamados narcos invisibles, de los cuales la Policía ha identificado 170 y capturado 37 de ellos. Además, reconoció que se ha incrementado en un 4 % el consumo de cocaína en Estados Unidos, porque los delincuentes la están usando mezclada con fentanilo con el fin de generar mayor adicción.De otro lado, la directora de la DEA manifestó su preocupación por el creciente tráfico de drogas sintéticas, en especial porque su producción no se detiene durante todo el año, en la medida en que solo la limita la obtención de los precursores químicos, por lo que destacó que Estados Unidos ya tiene abiertas varias investigaciones contra empresas relacionadas con el tráfico ilegal de estas sustancias.El general Salamanca, por su parte, indicó que la corrupción es un desafío que se debe abordar desde el contexto global, por lo que se articularán estrategias para contener este flagelo. “Colombia es un aliado estratégico, e incluso el más importante para Estados Unidos en este hemisferio”.
Las autoridades lograron la captura, por tráfico de estupefacientes, de un hombre con diez ampolletas de fentanilo y diez de morfina en el municipio de Copacabana, en el departamento de Antioquia. En su poder también fueron hallados una aguja hipodérmica usada y una navaja con rastros de sangre.Los hechos ocurrieron tras el reporte de un taxista en la estación de Policía de esa localidad del norte del Valle de Aburrá, donde, en un establecimiento de comidas cercano, indicó que había un hombre de camiseta gris con un bolso negro mezclando lo que, al parecer, eran medicamentos e inyectándose delante de todas las personas que se encontraban allí presentes.Tras el requerimiento de las autoridades y notar cierto nerviosismo en sus gestos, este hombre de 38 años de edad fue llevado a la estación de Policía donde, tras el registro de su bolso negro, encontraron una caja de morfina con un total de diez ampolletas y el mismo número de ampollas de fentanilo.Delitos por los que deberá responderEl hombre fue capturado por las autoridades de Antioquia por el delito de fabricación, tráfico o porte de estupefacientes, luego de que no lograra demostrar lo que decía, que era enfermero y que le estaba suministrando estas sustancias a pacientes que visitaba a domicilio.Según el reporte de las autoridades del departamento de Antioquia, esta persona no presentó ningún documento que le permitiera portar bajo autorización de una entidad de salud competente estos fármacos o en su defecto la fórmula médica para suministrarlos.
Entre 2013 y 2023, al menos 30 individuos perdieron la vida en Colombia debido a circunstancias relacionadas con el uso de fentanilo, según un reporte del Observatorio de Drogas del Ministerio de Justicia. Aunque se enfatiza que el consumo no es generalizado.El informe, publicado este viernes, indica que el 53,3 % de estas fatalidades, equivalente a 16 casos, ocurrieron entre 2021 y 2023, según datos del Instituto Nacional de Medicina Legal y Ciencias Forenses."Esta situación contrasta fuertemente con la de naciones como Estados Unidos, donde entre 80,000 y 100,000 personas mueren anualmente por este tipo de consumo", explicó el viceministro de Política Criminal, Camilo Umaña, al presentar el informe.En el 34,8 % de los casos de muerte por fentanilo en Colombia, se detectó la presencia de otras sustancias sintéticas, principalmente ketamina."Si bien el uso y consumo de fentanilo en el país no alcanza dimensiones masivas, el Sistema de Alertas Tempranas (SAT) y otras instituciones públicas se están preparando en términos de prevención y tratamiento de esta problemática", agregó Umaña.El funcionario también señaló: "Aunque en Colombia no hay patrones generalizados ni masivos de consumo, ni tampoco se ha detectado hasta ahora producción local, sí observamos que algunas ampollas destinadas al mercado legítimo están siendo desviadas hacia el mercado ilegal para su consumo".El fentanilo está clasificado por la Organización Mundial de la Salud (OMS) como una sustancia controlada, aprobada en Colombia como anestésico y analgésico, especialmente para el manejo del dolor en ciertas condiciones de salud.El informe también revela que entre 2021 y 2022, 21 personas iniciaron tratamiento por trastornos relacionados con el uso de fentanilo, siendo la mayoría hombres de entre 27 y 40 años.Hasta la fecha, las autoridades colombianas no cuentan con información sobre la producción de fentanilo y sus análogos, ni sobre la existencia de laboratorios clandestinos para su síntesis en el país.
El Observatorio de Drogas de Colombia (ODC), vinculado al Ministerio de Justicia y del Derecho, emitió el informe sobre la problemática del fentanilo y opioides sintéticos en el territorio nacional a corte de 2023.Según el documento basado en datos proporcionados por el Instituto Nacional de Medicina Legal y Ciencias Forenses, entre 2013 y 2023, se han registrado un total de 30 muertes asociadas al consumo de fentanilo, siendo el 53,3 % (16) de estos casos reportados entre 2021 y 2023.Asimismo, el informe resalta que el 34,8 % de las muertes relacionadas con el fentanilo había presencia de otras sustancias sintéticas, principalmente ketamina. Además, se han identificado 21 casos de uso de fentanilo en centros de tratamiento, predominantemente en hombres adultos de entre 27 y 40 años procedentes de las regiones de Bogotá y Antioquia.“Entre 2018 y 2023, se registraron 36 casos de incautación realizada por la Policía Nacional en diferentes ciudades del país como Bogotá, Medellín, Pereira, Villavicencio, Cartagena y Maicao”, señala el informe del observatorio.Destaca el incremento en la cantidad incautada, con casos recientes que oscilan entre 100 y 280 ampollas, como el suceso acontecido en Maicao en febrero de 2024, donde se encontraron más de 2.000 ampollas, marcando así la incautación más significativa registrada en ColombiaEl ODC subraya que el fentanilo confiscado en el país suele presentarse en forma de ampollas farmacéuticas, lo que sugiere un desvío de medicamentos de la industria farmacéutica hacia el mercado ilegal, en contraste con otros países donde proviene de la producción ilegal en forma de polvo o pastillas.“Se puede deducir que se trata de un desvío de medicamentos provenientes de la industria farmacéutica hacia el mercado ilegal; una situación distinta a la de países como Estados Unidos y México donde se fabrica de manera ilegal”, afirmó el viceministro de Política Criminal y Justicia Restaurativa, Camilo Umaña.
En medio de los controles que realiza la Policía de Tránsito y Transporte del Magdalena Medio a los vehículos de mensajería que llegan a Barrancabermeja, las autoridades hallaron en una de las encomiendas 110 ampolletas de fentanilo, un medicamento de uso exclusivo intrahospitalario.La droga fue enviada desde Cúcuta y según la investigación de la Policía iba a ser usada para la producción de Tusi en el Puerto Petrolero.“En medio de un puesto de prevención en el kilómetro 148 en un vehículo de servicio de transporte de mensajería que cubría la ruta Cúcuta - Barrancabermeja logran la incautación de 110 ampolletas de fentanilo en presentación de 10 ml cada una”, confirmó el coronel Luis Alejandro Cubillos, comandante de la Policía del Magdalena Medio.El medicamento está avaluado en $28 millones y según las autoridades está siendo usado por organizaciones criminales para la producción de estupefacientes tipo tusi.“Hacemos un llamado a todos los padres de familia y a la comunidad en general para que nos suministre información que nos permita la incautación de este tipo de sustancias que tienen un alto poder adictivo y es más potente que otros estupefacientes”, señaló el oficial de la Policía.El fentanilo incautado fue puesto a disposición de la Fiscalía. Las autoridades indicaron que continuarán con los operativos de control en las carreteras del Magdalena Medio y Barrancabermeja.Según la Policía, este es el primer decomiso de esta droga que se ha hecho en el departamento de Santander por lo que están en alerta frente a posibles nuevos casos de transporte de fentanilo en carreteras del departamento y el Magdalena Medio.
En Colombia preocupa el fácil acceso que tienen los jóvenes frente a una sustancia peligrosa como lo es el fentanilo, pues al generar reacciones más intensas que cualquier otra droga, es atractiva para el público.De acuerdo con la Unidad de Antinarcóticos de la Policía, en lo corrido del año se han incautado 2024 ampollas de la sustancia. Por otro lado, un informe de Medicina Legal muestra que en 10 casos de necropsias que han practicado, confirman que el organismo tuvo contacto con el fentanilo.Son cifras que preocupan a las autoridades. Desde la Secretaría de Educación de Bogotá le pusieron la lupa al caso y adelantan tareas de mitigación con enfoque pedagógico en colegios públicos y privados con respecto al uso y consumo de fentanilo.El fentanilo es una sustancia que produce sensación de euforia, relajación, somnolencia, náuseas, confusión, estreñimiento, sedación profunda, problemas respiratorios y para quienes no está medicada o formulada, puede causar adicción, llegando a tener una sobredosis y causando la muerte.Edwin Usa, jefe de la oficina para la convivencia escolar de la Secretaría de Educación, confirma que el enfoque del distrito sobre este tema es preventivo y promoción de derechos potenciando las habilidades del equipo de prevención de riesgo de cada uno de los colegios de la ciudad.Estas estrategias fueron aplicadas después de la denuncia en el Concejo de Bogotá por parte del concejal Julián Sastoque.“Es necesario tomar medidas preventivas y contundentes sobre el fenómeno del fentanilo, que no solo es de carácter global, sino que ya está afectando a la capital. Es necesario tomar un enfoque preventivo y de salud pública sobre el riesgo en el consumo”, enfatizó Sastoque.Desde la Secretaría de Salud, a través de un reporte preliminar, afirman que en lo corrido del 2024 no se han reportado casos de intoxicación ni muerte por fentanilo. La entidad aplicó un plan de respuesta con:Acciones de monitoreo del uso y comercialización.Acciones de información y pedagogía para brindar la respuesta ante alertas en IPS y droguerías.Implementación de mesas de trabajo de análisis y monitoreo de la situación.La Administración para el Control de Droga (DEA) confirma que el uso de fentanilo ha incrementado en varias zonas al ser de fácil acceso en precio y al tener reacciones más intensas la hace más atractiva. Además, confirman que es una droga con alto potencial de adicción, pero que es un riesgo significativo para la salud.