Germán Palacio, presidente de Fedepapa, respondió a la pregunta que se hacen muchos colombianos de por qué está tan cara la papa, que se suma al incremento de precios de otros alimentos de la canasta familiar. Explicó que son varias las causas, incluyendo bloqueos en 2021, aumento en el precio de los insumos y la baja producción en Cundinamarca, Boyacá y Nariño, principales departamentos productores de papa.“En el segundo semestre de 2020, el precio de la papa estuvo supremamente bajo, no se recuperaba ni el 20 % de los costos de producción. En 2021, empezamos con mucho optimismo, pero los bloqueos y los cierres de vía en el sur del país, que es cuando sale la cosecha que surte la mesa de los colombianos, no se pudo sacar y se perdió gran parte de la cosecha”, comentó en Mañanas BLU.“Los altos costos de los insumos agropecuarios, por ejemplo, el precio del fertilizante se duplicó, han hecho poco viable la producción de papa, que en este 2022 ha sido baja (…) Normalmente, en el primer trimestre los precios son altos”, añadió Palacio.¿Bajará el precio de la papa en el país?“El precio de la papa empieza a bajar a partir de junio, que es cuando entra la cosecha de Cundinamarca y Boyacá. Los precios no suben más, están en su nivel máximo”, aseveró.A esto se suma que, según explicó, de 100.000 productores de papa, entre un 10 y 15 % se está pasando a otra actividad, como la ganadería, por lo que las cosechas se ven afectadas.“A los niveles que se está vendiendo la papa es muy difícil que los colombianos tengan los recursos para comprarla, por eso consideramos que se pueden desplazar a consumir yuca, plátano y pastas. Esos productos también están altos en precios”.Recalcó que a final de este año los precios volverán a “bajar y los perjudicados ahí serán los pequeños y medianos productores”.
Uno de los sectores más afectados en de medio de la crisis económica provocada por el coronavirus en el país es el agropecuario, pues pequeños productores de papa hacen un esfuerzo enorme por mantener vivo su mercado pese a las pocas ganancias que están generando.La semana pasada se conoció una carta que la Dignidad Agropecuaria de Colombia envió al ministro de Agricultura, Rodolfo Zea, para que los ayude a encontrar una salida a la crisis por los precios del producto.El cultivador de papa Fabián Gómez habló con BLU Radio y aseguró que, actualmente, el sector de los paperos en el país atraviesa por una crisis en la que los campesinos son los más afectados.Por su parte, el gerente general de Fedepapa, Germán Palacio afirmó que la situación es muy difícil en el país, tanto así que, en este momento se estarán pagando entre el 30% y el 40% de los precios de producción.Asimismo, agregó que las pérdidas mensuales de los productores de papa rondan en los 100 mil millones de pesos y alrededor de 360 mil personas que dependen de los cultivos se han visto afectadas por la crisis.Escuche la entrevista competa en el audio adjunto:
El presidente de Fedepapa, Germán Palacio, dio a conocer una decisión del Ministerio de Industria y Comercio que va a obligar a tres compañías europeas a rectificar el precio de sus importaciones de papas a la francesa. Estas compañías desde hace varios años estaban cobrando un precio mucho menor del que deberían, inclusive por debajo de los costos de producción, afectando a las compañías nacionales. Esta práctica se conoce como dumping y el Ministerio de Comercio detallará en los próximos días si cabe alguna otra sanción a las compañías. “Estamos celebrando la imposición de medidas antiduping frente a las importaciones de productos de países de la comunidad económica europea. Estas importaciones representan el 74% y vienen deteriorando a las empresas nacionales”, explicó el presidente del gremio. Lo que va a suceder es una corrección al valor de las importaciones para estos productos. Según Palacio, todas las empresas nacionales se vieron afectadas por esta situación. Hoy en Colombia se importan 52.000 toneladas de papa al año y eso causa un desplazamiento de la papa nacional”, argumenta. Sobre la reforma tributaria, Palacio dijo que es “desastrosa para consumidores y productores”. “Hay 350.000 familias que devengan su sustento directa o indirectamente de la papa. Hay 20 millones de jornales que se van a ver afectados y el deterioro en la demanda y el consumo está entre un 10 y 15%. No se puede amenazar la seguridad alimentaria. Hay que buscar otras alternativas”, expresó finalmente el economista.