El príncipe Harry cumple 40 años este domingo, con su residencia fijada en Estados Unidos, alejado de la familia real británica y sin visos de una pronta reconciliación.Hace cuatro años cortó sus lazos con la monarquía británica, enfrentado a su hermano Guillermo, heredero de la corona, y fijó su residencia cerca de Los Ángeles, junto a su esposa estadounidense, Meghan Markle, y sus dos hijos.A pesar de su alejamiento físico, la opinión pública y los medios de comunicación británicos siguen muy pendientes de sus pasos."Estaba ansioso por los 30, estoy entusiasmado por los 40", afirmó este viernes el príncipe en un comunicado transmitido a la BBC, añadiendo que convertirse en padre le había dado una "nueva perspectiva de la vida"."Ser padre es una de las mayores alegrías de la vida y sólo me ha hecho sentirme más motivado y comprometido a hacer de este mundo un lugar mejor", añadió en el texto.Con su traslado a Estados Unidos, alejó a su familia de la presión mediática que había sufrido desde su nacimiento, el 15 de septiembre de 1984.Enrique dejó de percibir fondos públicos en 2020, al renunciar a ser miembro activo de la familia real, pero ha conseguido su anhelada independencia económica.Con su autobiografía, "En la sombra", publicada en enero de 2023, la prensa británica afirma que logró unos ingresos de 22 millones de libras (28,7 millones de dólares), al tiempo que se habla que la pareja cobró en 2022 unos 100 millones de dólares de Netflix por un documental que protagonizaron."La vida es hoy más difícil que nunca para los jóvenes miembros de la familia real británica. Tienen que desarrollarse como personas y crear un papel que valga la pena para sí mismos, mientras están constantemente bajo la atención de los medios" explica Mark Garnett, profesor de ciencias políticas en la Universidad de Lancaster.- Huida de la presión mediática -Una de las causas de esa 'huida' a Estados Unidos fue librar de esa presión mediática a sus dos hijos, Archie y Lilibet, de cinco y tres años respectivamente, como confesó Meghan Markle en una entrevista televisiva que hizo a ambos, en Estados Unidos en 2021, la presentadora Oprah Winfrey."La presión de los medios fue particularmente difícil para el príncipe Enrique, quien probablemente nunca se iba a convertir en rey y perdió a su madre cuando era un niño, en circunstancias trágicas. El público británico ha mostrado simpatía por él, pero la opinión está dividida ahora que su compromiso con el país prácticamente ha terminado", añade Garnett.Los duques de Sussex viven en Montecito, en California, en un barrio que cuenta entre sus vecinos a la actriz Gwyneth Paltrow y a la cantante Katy Perry. Su casa, de nueve piezas, está valorada en unos 14 millones de dólares, y tiene vistas al Pacífico, gimnasio, cine y piscina.Desde Estados Unidos, el príncipe mantiene una lucha encarnizada con los medios de comunicación británicos, contra los que ha presentado varias demandas judiciales, a los que acusa de conseguir información de manera ilegal.- Viajes a Londres -El duque de Sussex reprocha también a esos periódicos haber maltratado a su esposa, lo que contribuyó a su marcha a Estados Unidos.También los considera culpables de la muerte de su madre, la princesa Diana, en un accidente automovilístico en 1997 en París, cuando era perseguida por 'paparazzi'.Sus esporádicos viajes al Reino Unido por estos asuntos judiciales escenifican el alejamiento de su familia, al no mantener contacto con ella."Está completamente aislado. Cualquier sugerencia de un regreso, incluso con un papel menor dentro de la monarquía, me parece completamente irreal", afirma Pauline MacLaran, profesora de la Universidad Royal Holloway.Solo rompió ese aislamiento el 6 de febrero pasado, en un viaje relámpago a Londres para visitar a su padre tras el anuncio del cáncer que padece Carlos III.Pero evita a su hermano mayor, el heredero Guillermo. Las acusaciones de Enrique en su autobiografía, en las que lo califica de irascible y violento, los alejaron definitivamente.Ni siquiera acercó a ambos el cáncer de la esposa de Guillermo, Catalina, anunciado casi al mismo tiempo que el de Carlos III."La idea de una familia real dividida sólo aumenta la atención no deseada de los medios", predice Mark Garnett.
El príncipe Enrique y su esposa, la actriz estadounidense Meghan Markle, duques de Sussex, visitan Colombia desde este jueves por invitación de la vicepresidenta Francia Márquez, con quien asistirán a diferentes encuentros con mujeres y jóvenes para rechazar la discriminación y el ciberacoso.La visita del hijo menor del rey Carlos III del Reino Unido "tiene como propósito tender puentes y abrir puertas que nos permitan sumar esfuerzos para visibilizar y atender un problema que hoy preocupa a toda la humanidad: el ciberacoso y las violencias en entornos digitales y la discriminación", dijo Márquez temprano en una rueda de prensa.Horas más tarde, Enrique y Meghan visitaron un centro cultural en el corazón de Bogotá junto a la vicepresidenta. Se les vio sonrientes acompañados de bailarines y otras personas disfrazadas de animales.La agenda indica que luego asistirán un foro universitario sobre "futuro digital responsable".Márquez recibió a la pareja en la sede de Vicepresidencia, donde tuvieron una breve reunión y reveló que los conoció a través de medios de comunicación y después de que viera la serie documental que ambos protagonizaron en Netflix, lo que la llevó a invitarlos a Colombia. "Los conocí en medios de comunicación, pero sobre todo vi la serie en Netflix sobre su vida e historia y me conmovió", contó.El sábado la pareja estará en Cartagena. La prensa loca informó que la pareja irá a San Basilio de Palenque, considerado el "primer pueblo libre de Sudamérica", pues fue fundado en el siglo XVIII por esclavos fugitivos.La última parada del viaje que culmina el domingo será la ciudad de Cali (suroeste), la capital del Pacífico colombiano. El alcalde de la ciudad adelantó hace algunas semanas que asitirían al festival Petronio Álvarez de música de origen afro.El príncipe también se reunirá con el equipo de Colombia que participa en los Juegos Invictus, las justas que creó tras vivir los horrores de la guerra de Afganistán.Su visita es la antesala a la Conferencia Ministerial Mundial para la Eliminación de la Violencia Contra la Niñez, que se realizará en Bogotá entre el 7 y 8 de noviembre próximo.La pareja rompió lazos con la monarquía británica en 2020 y ahora reside en el estado de California, en Estados Unidos.Márquez elogió su historia en la rueda de prensa y calificó a Meghan como una "una mujer afrodescendiente" comprometida con la lucha contra "la violencia en redes sociales", que afecta la "dignidad" de las mujeres.
El rey Carlos III y su esposa, Camila, visitan este martes un centro hospitalario y de investigación contra el cáncer en Londres en el primer compromiso público del soberano desde que el 5 de febrero se anunció que estaba en tratamiento oncológico.Aunque este es su primer acto oficial fuera de palacio, el monarca de 75 años fue visto al asistir a sendos servicios religiosos privados ese mes y durante la pasada Semana Santa, y ha mantenido en este tiempo sus labores de despacho.El monarca sonrió y saludó a la multitud, así como a sus anfitriones, antes de entrar al Centro Oncológico Macmillan del University College Hospital, en el que, según el Palacio de Buckingham, departirá con pacientes y examinará un nuevo equipamiento médico para luchar contra la enfermedad.Esta visita de Carlos III, al que se vio relajado con un traje azul oscuro y corbata clara, se considera muy simbólica dado que él mismo está en tratamiento y se interpreta como un gesto de solidaridad y empatía con otros afectados.Al igual que el rey, que acaba de asumir el patrocinio de la unidad de investigación Cancer Research UK, la reina, de 76 años, también está vinculada a entidades de lucha y apoyo frente a esta enfermedad.Camila, que en los últimos meses ha asumido buena parte de las labores de la monarquía, estuvo este martes en todo momento al lado de su esposo, ataviada con un vestido estampado tipo piel de leopardo.El hospital que visitan recibió a sus primeros pacientes en 2012 y está especializado en el diagnóstico y tratamiento de una amplia gama de cánceres, además de otras dolencias.El director ejecutivo, David Proberto, y la presidenta, Julia Neuberger, condujeron a la pareja a ver las instalaciones, en particular unos escáneres de diagnóstico punteros, y se prevé que al final del recorrido reciban de pacientes jóvenes un ramo de flores.En 1997, siendo príncipe de Gales, el rey ya se convirtió en patrón de la organización benéfica Macmillan Cancer, que brinda apoyo y promueve una mejor atención, y desde 2008 la reina preside el servicio de asesoramiento Maggie's, que ofrece asesoramiento gratuito en centros del país.Buckingham anunció la semana pasada que Carlos III regresaría este martes a sus compromisos públicos gracias a sus buenos progresos en el tratamiento que recibe, si bien esto no es garantía de que vaya a asistir a otros actos en el futuro.Esto se decidirá en base al consejo médico, apuntó el palacio, que precisó que siempre se tratará de limitar el riesgo para su recuperación.La monarquía prevé recibir el próximo junio a los emperadores de Japón, en una visita de Estado auspiciada por el Gobierno británico.Carlos III y la reina Camila celebrarán el 6 de mayo el primer aniversario de su coronación, después de que él asumiera el trono tras la muerte de Isabel II el 8 de septiembre de 2022.Además del soberano, Catalina, la esposa de su heredero, el príncipe Enrique, también está en tratamiento oncológico, después de revelarse en marzo que fue diagnosticado de un cáncer que no se especificó.Le puede interesar:
El rey de Inglaterra, Carlos III, regresará el próximo martes 30 de abril a sus compromisos públicos tras un "periodo de tratamiento y recuperación" por el cáncer que padece, según informó este viernes el palacio de Buckingham.En un comunicado, el palacio indica que el rey y la reina Camila realizarán ese día una visita conjunta a un centro de tratamiento contra el cáncer, donde se reunirán con especialistas médicos y pacientes.Esa será, según apunta la nota, la primera visita de una serie de "compromisos externos" que acometerá el monarca en las próximas semanas.El comunicado revela además que Carlos III y su esposa recibirán a los emperadores de Japón, que vendrán al Reino Unido el próximo junio en una visita de Estado.El palacio señala que al acercarse el primer aniversario de la coronación del monarca, el próximo 6 de mayo, los reyes continúan estando "profundamente agradecidos por los muchos buenos deseos y la amabilidad que han recibido de todo el mundo a lo largo de las alegrías y desafíos del pasado año".Un portavoz de Buckingham subrayó que "los médicos están suficientemente satisfechos con el progreso realizado hasta ahora para que el rey pueda retomar un número de actividades de cara al público".Estos compromisos "se adaptarán en lo necesario para minimizar cualquier riesgo en la recuperación de Su Majestad", añadió la fuente.De esta forma, su agenda pública de cara al verano se verá reducida respecto a la habitual otros años y su presencia en los actos se anunciará poco antes de su celebración, sujeta siempre a la opinión de los doctores.Se quiere aprovechar que el mejor tiempo permitirá a Carlos III asistir a más eventos al aire libre, que minimicen el riesgo del contacto con otras personas."El ritmo del programa del rey será calibrado cuidadosamente según continúe su recuperación, en estrechas consultas con su equipo médico", dijo el portavoz.La casa real difundió al mismo tiempo una foto para marcar el primer aniversario de la Coronación de los reyes, que se cumple el 6 de mayo, una imagen tomada el pasado 10 de abril con motivo del 19 aniversario de la boda de Carlos y Camila.El pasado 31 de marzo, Carlos III asistió con Camila al servicio religioso de Pascua en la iglesia de San Jorge del castillo de Windsor (a unos 40 kilómetros de Londres), en su primer acto público desde febrero.Aquella fue la comparecencia más destacada del monarca británico, de 75 años, desde que se anunció su diagnóstico de un cáncer no especificado el pasado 5 de febrero.Además de Carlos III, su nuera, la duquesa de Gales, Catalina, esposa del heredero al trono británico, Guillermo, también recibe actualmente tratamiento de quimioterapia por un cáncer que tampoco ha sido especificado.El primer ministro británico, Rishi Sunak, mostró su alegría por el regreso del monarca a sus compromisos."¡Gran noticia para terminar la semana!", escribió el jefe del Gobierno conservador en su cuenta de la red social X.Por la misma vía se manifestó el líder de la oposición, el laborista Keir Starmer, quien se mostró "encantado de ver a Su Majestad con tan buen aspecto" y envió sus mejores deseos tanto al rey como a Catalina.Le puede interesar:
El palacio de Kensington difundió este martes una nueva fotografía sin retocar del príncipe Luis con motivo de su sexto cumpleaños, tomada por su madre, la princesa de Gales.La foto, que no ha sido editada, muestra un primer plano del hijo menor de los príncipes de Gales, Guillermo y Catalina, muy sonriente mirando a cámara, tumbado en el césped.La instantánea fue tomada hace unos días en Windsor por su madre, quien se somete actualmente a un tratamiento de quimioterapia por un cáncer no especificado, y que se encuentra apartada de los compromisos oficiales, al igual que el rey, Carlos III.La foto se colgó en la cuenta oficial de redes sociales del palacio unas seis semanas después de que otra imagen familiar difundida por Catalina y editada por ella misma desatara una enorme polémica en este país al haber sido retirada de sus servicios por varias agencias gráficas que cuestionaron la credibilidad de la monarquía ante los retoques.Acompañando a la nueva imagen del príncipe, se lee el siguiente mensaje: "¡Feliz sexto cumpleaños, príncipe Luis! Gracias por todos los amables deseos hoy".La imagen va también acompañada de un emoticono y se atribuye a la princesa de Gales.La manera en que se ha publicado ahora la foto de Luis difiere a cómo los príncipes suelen divulgar habitualmente imágenes familiares con motivo de los cumpleaños de sus hijos.Hasta ahora estas imágenes se publicaban un día antes bajo embargo, mientras que la de hoy ha sido colgada directamente en redes sociales de palacio el mismo día del cumpleaños.Le puede interesar:
La princesa Catalina de Gales (Kate Middleton) pidió perdón este lunes por la foto manipulada y publicada el domingo, que fue retirada por las agencias internacionales al descubrir que estaba retocada.La fotografía retocada ha disparado las especulaciones sobre el estado de salud de Kate, que no ha sido vista en público después de su paso por el quirofano por razones de las que no se ha informado."Como muchos fotógrafos aficionados, experimento ocasionalmente con la edición (de fotos)", dijo Catalina a través de la cuenta de los príncipes de Gales en la red social X."Quería expresar mis disculpas por cualquier confusión que haya causado la fotografía familiar que difundimos ayer (domingo). Espero que todo aquel que lo celebrase haya pasado un feliz Día de la Madre", continúa el breve comunicado, firmado "C", la inicial del nombre de la princesa, que fue operada el 16 de enero.Según fuentes de la Casa Real, Catalina hizo "pequeños retoques" sobre la foto tomada originalmente por Guillermo a principios de la semana pasada en su residencia en Windsor (a unos 40 kilómetros de Londres), en la que aparece la princesa de Gales sentada al aire libre rodeada de sus tres hijos, que están de pie a los costados.La Agencia EFE comprobó que había indicios de que la foto remitida por el Palacio de Kensington -residencia oficial de los príncipes de Gales- podía haber sido retocada en origen, por lo que decidió avisar a sus clientes de esta circunstancia.Varias agencias gráficas internacionales retiraron de sus servicios por la presunta manipulación digital la fotografía difundida el domingo, la primera con Catalina desde que fue sometida a una "operación abdominal" de la que se desconocen los detalles el pasado 16 de enero.Catalina difundió la imagen en su cuenta de X con motivo del Día de la Madre en el Reino Unido, con el mensaje: "Gracias por sus amables deseos y continuo apoyo durante los últimos dos meses. Les deseo a todos un Feliz Día de la Madre. C".La imagen sigue colgada en las cuentas de Instagram y X del príncipe y la princesa de Gales.
El rey Carlos III regresó este martes a Londres desde su residencia campestre de Sandringham (este de Inglaterra), donde descansaba tras haber comenzado la semana pasada su tratamiento contra un cáncer no especificado.Según los medios británicos, Carlos III ha regresado a la capital para continuar su tratamiento, que comenzó el 5 de febrero, aunque el Palacio de Buckingham no lo ha confirmado oficialmente.Un helicóptero con el monarca y la reina Camila a bordo aterrizó esta mañana en el Palacio de Buckingham, tras lo cual la pareja se desplazó en coche a su cercana residencia de Clarence House.La pareja fue captada por los fotógrafos de la prensa británica, que difundieron imágenes del rey saludando sonriente por la ventana del vehículo.La casa real anunció la semana pasada que, en el transcurso de una intervención por un agrandamiento de próstata, el rey fue diagnosticado de "un tipo de cáncer", sin especificar al respecto nada más que no afecta a esa glándula.Carlos III agradeció este sábado "de todo corazón" los numerosos mensajes de apoyo y de "buenos deseos" que ha recibido de la población en los últimos días."Como sabrán todos aquellos que han sido afectados por el cáncer, esos pensamientos amables son el mayor consuelo y aliento", escribió el jefe de Estado en un mensaje."Es igualmente alentador escuchar cómo compartir mi propio diagnóstico ha ayudado a promover la comprensión pública y arrojar luz sobre el trabajo de todas aquellas organizaciones que apoyan a los pacientes con cáncer y sus familias en todo el Reino Unido y el resto del mundo", agregó el rey.Pese a haber suspendido todas sus actividades públicas, el monarca continúa atendiendo sus funciones específicas de Estado, como firmas de leyes o los contactos telefónicos semanales con el primer ministro británico, Rishi Sunak.Le podría interesar:
El príncipe Guillermo, heredero de la corona británica, agradeció este los "amables mensajes" que ha recibido la familia real después de que el rey Carlos III fuese diagnosticado con un cáncer no especificado."Realmente apreciamos los amables mensajes de todos. Gracias", dijo brevemente el príncipe de Gales al llegar a una gala del Servicio de Ambulancia Aérea, en el centro de Londres.El hijo mayor del monarca ha tenido que asumir algunas funciones oficiales de su padre mientras éste se somete a unas sesiones para tratar el cáncer que le fue diagnosticado recientemente mientras fue intervenido por un agrandamiento de próstata en un hospital de Londres.El monarca, no obstante, continúa atendiendo sus funciones específicas de Estado, como firmas de leyes o los contactos telefónicos semanales con el primer ministro británico, Rishi Sunak.El heredero al trono volvió además al trabajo tras suspender sus actividades por unas semanas para cuidar a su mujer, la princesa Catalina, de la operación de abdomen a la que fue sometida, pero cuyos detalles no han sido divulgados por la casa real.Guillermo, además, estuvo al cuidado de sus tres hijos, los príncipes Jorge, Carlota y Luis.Este miércoles, el príncipe de Gales concedió títulos honoríficos a distintas personalidades en el castillo de Windsor, a las afueras de Londres, pero no se reunió con su hermano, el príncipe Enrique, que estuvo en la capital británica menos de 48 horas para ver a su padre.Los dos hermanos están distanciados desde que Enrique decidiera apartarse de la familia real en 2020 y criticase a la casa real por el supuesto maltrato que recibió su mujer, Meghan.Los duques de Sussex, Enrique y Meghan, residen en Los Ángeles (EEUU) con sus hijos -los príncipes Archie y Lilibet.
El rey Carlos III abandonó el martes en coche su residencia londinense de Clarence House junto a la reina Camila, en su primera aparición pública desde que la víspera anunció padecer un cáncer, indicó un fotógrafo de la AFP.El monarca, de 75 años, y su esposa saludaron sonrientes a la multitud desde el asiento trasero del automóvil. Según la agencia de noticias británica PA, debían ir al cercano Palacio de Buckingham antes de tomar un helicóptero para dirigirse a su residencia de Sandringham, en el este de Inglaterra.Su hijo Enrique, que durante años ha tenido relaciones difíciles con la familia real, aterrizó pocas horas antes en el aeropuerto de Heathrow, según los medios británicos, para visitar a su padre.Tras 17 meses en el trono, Carlos III, que recibió su primer tratamiento el lunes, estará ausente de la vida pública por tiempo indefinido.Los deseos de recuperación llegaron de todo el mundo después del anuncio, que causó conmoción en el Reino Unido.El primer ministro británico, Rishi Sunak, quiso transmitir un mensaje de tranquilidad sobre la salud del rey y aseguró a la BBC que el cáncer del monarca fue "detectado temprano".El tumor, del que no se ha especificado la naturaleza ni la gravedad, fue descubierto durante la hospitalización de Carlos III a raíz de una operación de hipertrofia "benigna" de próstata, a la que se sometió el 26 de enero.
El viaje desde Los Ángeles a Londres del príncipe Enrique, hijo menor del rey Carlos III, para visitar a su padre a raíz de que le diagnosticaran un cáncer, suscita en el Reino Unido esperanzas de reconciliación, tras años de asperezas entre ambos.Según la prensa británica, Enrique, de 39 años, reaccionó con celeridad al impactante anuncio el lunes del cáncer del monarca, descubierto durante su hospitalización para una operación de próstata a la que sometió el 26 de enero.El príncipe debía llegar el martes a Londres, en un viaje que hace en solitario, según la prensa británica, sin su esposa Meghan ni sus dos hijos, Archie y Lilibet, como ya ocurrió con su visita relámpago con motivo de la coronación de su padre en mayo."¿Ha llegado el momento de que Enrique vuelva a casa?", se pregunta el tabloide Daily Mirror que, como la mayoría de los periódicos británicos, dedica el martes amplios artículos a una posible reconciliación real, en tiempos difíciles para la monarquía británica.Del cáncer del rey, de 75 años, no se conoce en detalle su naturaleza ni su gravedad, aunque el primer ministro, el conservador Rishi Sunak, lanzó un rayo de esperanza, afirmando a la BBC que se había "detectado temprano".La enfermedad del monarca llega en un momento en que su nuera Catalina de Gales, esposa de su otro hijo, Guillermo, primogénito y heredero de la corona, también se encuentra en una larga convalecencia tras una misteriosa operación abdominal.Esta repentina enfermedad del rey deja a la reina Camila, de 76 años, y a Guillermo, de 41, a cargo de representar públicamente a la monarquía, cuyo círculo se ha ido reduciendo progresivamente en los últimos años con la marcha de Enrique a Estados Unidos en 2020 y la marginación del príncipe Andrés, hermano de Carlos III, tras unas acusaciones de agresión sexual a una menor que él niega.Ambos perdieron desde hace casi un año su papel como posibles sustitutos de Carlos III en caso de ausencia o enfermedad del monarca, al dejar de ser "miembros activos" de la familia real británica.La última visita del duque de Sussex, título oficial del príncipe Enrique, al Reino Unido, se remonta a junio de 2023, para asistir a uno de los numerosos juicios que le enfrentan a los diarios sensacionalistas británicos, a los que responsabiliza de la muerte en 1997 de su madre Diana, perseguida por los 'paparazzi', y del reciente acoso a su esposa Meghan.En la sombraPero la relación tensa de Enrique con su padre se extiende también a su hermano Guillermo.Ambos, que tenían 14 y 12 años cuando murió la princesa Diana, estuvieron muy unidos hasta que empezaron a surgir tensiones.El distanciamiento se hizo más latente tras el matrimonio de Enrique en 2018 con la actriz mestiza estadounidense Meghan Markle, en un contexto de presión constante de la prensa sensacionalista británica.La pareja acabó dando un portazo a la familia real y renunciando a sus obligaciones oficiales para exiliarse en Estados Unidos en 2020, criticando duramente a la monarquía británica en entrevistas y en una serie documental en Netflix.En su libro "En la sombra", el príncipe Enrique se muestra especialmente crítico con su hermano mayor, y relata su frustración por haber sido su "sombra, suplente, plan B".En una entrevista concedida a la influyente presentadora estadounidense Oprah Winfrey, Enrique y Meghan afirmaron que algún miembro de la familia real se había interrogado sobre el color de piel que tendría su hijo Archie, iniciando un debate en el Reino Unido sobre el racismo en el país y dentro de la monarquía.A principios de diciembre, los nombres del rey Carlos III y de la princesa Catalina fueron mencionados en relación a esa conversación en la versión holandesa de un nuevo libro sobre los Windsor, rápidamente retirado de la venta por su editor, debido a un "error de traducción", informaron los medios británicos.La última vez que los príncipes Guillermo y Enrique aparecieron juntos fue en septiembre de 2022, con sus esposas, tras la muerte de Isabel II.