Para el funcionario de la ONU que completó 3 años en el país, la situación actual del proceso de paz hace inminente la creación de una pedagogía que permita preparar a la ciudadanía sobre los cambios que va a vivir el país. “El equipo de la paz es un equipo no muy grande y muy enfocado en la negociación (…) yo creo que habiendo llegado a un punto donde hay unanimidad y aunque pueden venir muchas crisis, ya no hay vuelta atrás, haber llegado a ese punto da urgencia de implementar una pedagogía”, indicó Hochschild. El coordinador residente humanitario de Naciones Unidas en Colombia, señaló que durante su paso por Colombia vio cómo el país ha evolucionado, esto, debido a que fue protagonista de las diferentes épocas que ha vivido el conflicto en cada una de las regiones. Los falsos positivos y la crudeza de la guerra en 1997 fueron épocas que marcaron su estadía en el país y asegura que poder comparar esas situaciones con la Colombia de hoy en día lo llena de entusiasmo y de ánimo para afrontar sus nuevos retos profesionales. “Yo vine por primera vez como funcionario de Acnur en 1997, era una época en el que el desplazamiento y la guerra estaba llegando a un punto alto, vine varias veces para la época de los falsos positivos y venir ahora y aportar algo a los cambios históricos que están pasando fue un privilegio enorme”, indicó Hochschild. “Al ser testigo de los grandes avances en las últimas dos décadas, ver esos cambios históricos como Derechos Humanos y superación de pobreza, me he sentido muy privilegiado y poder aportar al salto más grande que puede hacer Colombia es positivo”, agregó. Frente al proceso de paz, Hochschild dijo que se siente afortunado de haber colaborado con el “cambio histórico más grande que puede dar Colombia” y aseguró que es un privilegio ser testigo de lo que está viviendo el país. “Ser testigo del proceso que va ayudar a que Colombia no siga en ese enfrentamiento constante, es algo enorme y muy pocas veces te toca ser testigo de cambios históricos, ese es el privilegio que he tenido en Colombia”, agregó el funcionario de Naciones Unidas. El partido más importanteHochschild hizo énfasis en que el proceso de paz entre el Gobierno y las Farc puede ser el evento más importante en la historia de Colombia, sin embargo mostró su preocupación por la división que se ha generado en la opinión pública frente al tema. “Colombia está enfrentando el partido más importante de su historia y si algunos entran a la cancha sin darse cuenta lo que está en juego y sin las mismas ganas, obviamente esa oportunidad va a ser menor, eso es lo que preocupa, las divisiones, la polarización, la politización”, dijo Hochschild. El delegado de la ONU también señaló que ese escepticismo no solo se da a nivel político, sino también en el campo social, donde las comunidades muchas veces han sido engañadas por promesas de paz que nunca han llegado. “El pesimismo frente al proceso de paz no es solamente entre ciertos grupos políticos de alto perfil por críticas que son parte de la oposición, ese pesimismo también se escucha en zonas del conflicto que no se atreven, luego de haber sufrido el conflicto armado de varios actores, a creer en la paz porque nunca la han vivido”, agregó. Por eso, Hochschild asegura que ante una eventual firma de la paz, el Gobierno debe actuar de manera inmediata para que la sociedad entienda que Colombia va a sufrir un cambio verdaderamente positivo. “Están acostumbrados a falsas promesas y a nivel central toca hacer cosas muy rápidamente después del acuerdo para mostrar que esta vez sí hay un cambio y que la paz no es una promesa falsa de tres letras que nunca se van a llenar de contenido”, dijo Hochschild.
Por ambas instituciones en el que participaron más de 700 personas de 21 sectores de la sociedad civil con representación de las víctimas más afectadas por el conflicto armado. Dentro de las víctimas se destacan las comunidades indígenas, afrodescendientes, campesinos, asociaciones de mujeres, exmilitares y del sector privado. Alejo Vargas entrega detalles de algunas conclusiones y propuestas. Las inquietudes que más se presentaron y que se pidió llevar a La Habana fueron por ejemplo que el Gobierno y Farc declaren un cese al fuego y de hostilidades bilateral lo más inmediato y ordenado que se pueda, también se pide que se acabe el secuestro, las extorciones y el hostigamiento de líderes sociales. (Vea también: Fabrizio Hochschild dejará su cargo en Colombia antes de eventual firma de paz). También en esas conclusiones del foro Alejo Vargas dijo en su momento que la sociedad civil pedía más participación en procesos de verificación del cese al fuego bilateral. Los asistentes al foro pidieron que se esclarezca más el punto de la dejación de armas y también brindar garantías de seguridad para que la reincorporación no se vaya a presentar nuevos grupos en terreno abandonados por las Farc y para que la vida de los excombatientes y la población no sea afectada. En lo relativo a la desmovilización en ese foro se planteó que se debe concertar con las comunidades en donde se concentrarán las fuerzas de las Farc para no generar tensiones. Alejo Vargas dijo que las dos delegaciones de paz están trabajando intensamente, pero que no se arriesga asegurar que el fin del conflicto sea firmado el próximo 23 de marzo como lo habían pactados las partes.
Lo que Blu Radio conoció sobre las nuevas labores que tendrá que asumir Hochschild es el de coordinar una misión y una cumbre sobre Siria. Además en septiembre de este año el representante del organismo internacional coordinará una cumbre mundial a nivel de jefes de Estado sobre los refugiados. “Es uno de los temas más importantes en el mundo para la ONU”, dijo una fuente cercana a Hochschild.