La altura de Bolivia, especialmente en el estadio Armando Siles Suazo presenta grandes dificultades para los equipos visitantes. Los jugadores de la selección boliviana, acostumbrados a jugar a 3.600 metros sobre el nivel del mar, se enfrentan a un desafío aún mayor cuando juegan a 4.150 metros. Sin embargo, la Federación Boliviana de Fútbol ha utilizado esta situación como una ventaja estratégica para su equipo nacional.Jugar en el estadio requiere una preparación especial. Los jugadores visitantes deben llegar con anticipación para aclimatarse a la altura y descansar adecuadamente. Además, el vestuario del estadio es frío y debe ser acondicionado para garantizar el confort de los jugadores. El contraste de temperatura entre el campo de juego y el vestuario puede dificultar la adaptación de los jugadores. El exfutbolista y técnico boliviano Mauricio Soria habló en Blog Deportivo sobre si existen ventajas deportivas de jugar en la altura.Además, mencionó que es recomendable que los equipos visitantes realicen un precalentamiento previo al partido y realicen corridas para acostumbrarse al aire y la dificultad para respirar. El calentamiento también debe adaptarse a las condiciones del campo, ya que el balón se comporta de manera diferente en la altura."Lo que ha hecho la selección de Colombia al venir a Cochabamba debe ser un poco, si bien no se pueden aclimatar a lo que es la altura, aunque vengan a Cochabamba y se queden cuatro o cinco días, no les va a hacer nada, pero por lo menos en lo en los momentos de los esfuerzos del entrenamiento si el entrenador uno hace que tengan recorridos más largos, seguramente van a asemejar a las dificultades que tienen para recuperar al esfuerzo inmediato. Entonces eso es lo que le puede, digamos, facilitar la estadía y que van a poder tener condiciones no muy adversas", resaltó.Además, se ha observado que los jugadores colombianos, como James Rodríguez y Juan Fernando Quintero, pueden encontrarse en desventaja en las condiciones de la altura. Debido a su estilo de juego más pausado y técnico, pueden tener dificultades para mantener su dinámica habitual. Sin embargo, si logran encontrar espacios y aprovechar las debilidades defensivas del equipo boliviano, todavía pueden ser una amenaza."Sí podrían ahogarse porque no son jugadores explosivos. Son jugadores más jugadores que tienen más el balón en el pie que llevan con pausas. Creo que ellos no sé si podrían estar como para poder, eh lograr tener una dinámica como la tienen cuando juegan en el llano. No me parece que hay jugadores como Díaz podrían ser más liviano, más rápidos que ellos. Sí pueden encontrar algunos espacios o algunas algunas. Algunos momentos de desatención de la defensa de Bolivia que podrían aprovechar", concluyó.Escuche la entrevista completa acá:
Los futbolistas Juan Fernando Quintero, Róger Martínez y Jhon Arias se sumaron este sábado a la concentración que la Selección Colombia realiza en suelo boliviano con miras al partido ante Bolivia del próximo jueves por las eliminatorias suramericanas al Mundial 2026.Quintero y Martínez llegan desde Argentina ya que ambos forman parte del Racing de ese país, mientras que Arias se incorporó en la víspera proveniente de Brasil tras ser cedido por el Fluminense."Desde Avellaneda llegaron nuestros cracks para sumarse a nuestra Selección Colombia", informó en sus redes sociales la Federación Colombiana de Fútbol (FBF) refiriéndose a los jugadores que militan en el equipo argentino.Desde el viernes por la noche comenzó a instalarse la delegación colombiana en la ciudad boliviana de Cochabamba (centro), situada a un poco más de 2.500 metros sobre el nivel del mar.El objetivo es que la permanencia en esa ciudad sirva para aclimatarse a la altitud y luego sea más fácil pasar a los más de 4.000 metros del estadio Municipal de El Alto, que será sede por segunda vez de los encuentros de la Verde.Los primeros en llegar fueron los integrantes del cuerpo técnico comandado por el seleccionador Néstor Lorenzo además del futbolista Matheus Uribe de filas del Al-Sadd de Qatar. Está previsto que hasta el lunes la selección cafetera cuente con una buena parte de sus futbolistas que militan en las principales ligas europeas.La selección tricolor expondrá ante Bolivia un invicto en las clasificatorias suramericanas desde el 24 de marzo 2022, que comenzó cuando en Barranquilla venció 3-0 a este mismo rival. Los dirigidos por Lorenzo ocupan la segunda casilla de la eliminatoria con 16 puntos luego de 8 jornadas y llegan de vencer 2-1 a Argentina, campeona del mundo y de la Copa América. Bolivianos y colombianos se enfrentaron siete veces en Bolivia, la Verde ganó un partido y los cafeteros dos, mientras que los restantes fueron empates.
El expresidente de Bolivia, Evo Morales, está enredado en un escándalo judicial por la presunta "violación" de una menor cuando ejercía el poder, y con quien habría tenido una hija, según denunció el Gobierno de su exministro y adversario Luis Arce.El miércoles, la fiscal del departamento de Tarija Sandra Gutiérrez reveló que fue destituida después de ordenar la aprehensión del líder indígena de 64 años, por el presunto delito de trata de personas.La justicia, según la propia fiscalía, dejó sin efecto la orden de captura.En la resolución de aprehensión contra Morales -cuyos apartes fueron filtrados a la prensa- se señala que en 2016 el entonces presidente se involucró con una menor de 15 años con quien tuvo una hija.Este jueves el ministro de Justicia César Siles reveló que en realidad Morales -cuyo mandato se extendió del 2006 al 2019- está siendo investigado por violación."Hemos observado con indignación delitos graves que pretenden quedar en impunidad: me refiero concretamente a una niña, a una niña violada a sus 15, a sus 16 años", señaló el funcionario en una conferencia de prensa.Según Siles, "producto de esa violación (la madre) engendró otra niña y el padre reconocido en un certificado de nacimiento, (es) el señor Evo Morales Ayma"."Existe un proceso abierto" que "está en curso de investigación", agregó el ministro.Sin aludir al expediente, Morales publicó más temprano en su cuenta en X: "No me extraña ni me preocupa. Todos los Gobiernos neoliberales, incluido el actual, me amenazaron, me persiguieron, me encarcelaron, intentaron matarme. ¡No tengo miedo! ¡No me callarán!".Morales gobernó Bolivia entre 2006 y 2019 e impulsó el triunfo electoral de su sucesor Luis Arce, quien fue su ministro de Economía durante más de una década.Ambos líderes rompieron y hoy se disputan el liderazgo del oficialismo y la nominación presidencial para las elecciones generales de 2025.Conducta negligenteLa fiscal Gutiérrez estaba investigando a Morales a partir de una denuncia que fue presentada la semana pasada con un base en un informe policial de inteligencia.De acuerdo con su versión, fue destituida por el jefe del ministerio público, Juan Lanchipa, después de que una jueza del departamento de Santa Cruz anuló la orden de aprehensión contra Morales."Yo no he renunciado, pero me llegó el memorándum de agradecimiento y lo firma (…) el señor Lanchipa", dijo Gutiérrez a la prensa.Este jueves Lanchipa informó que destituyó a Gutiérrez por "conducta negligente", pero que "en ningún momento dio instrucción alguna" para paralizar el proceso contra Morales.Ninguna autoridad judicial se ha pronunciado sobre el futuro de las pesquisas contra Evo Morales luego de la anulación de su aprehensión.Bajo resguardoAnte el revuelo que causó la declaración de la fiscal Gutiérrez, los seguidores de Morales dijeron que su líder está resguardado en algún lugar de la región cocalera de Chapare, en el centro de Bolivia, ante el riesgo de ser capturado."Hermanos y hermanas del Trópico (Chapare) se han movilizado clandestinamente, se han constituido en los vigilantes, en los guardaespaldas, en los protectores de la vida de Evo Morales", afirmó su exministro y abogado Carlos Romero en una declaración a los medios.Según el portavoz, el Gobierno ha activado al menos cinco procesos contra Morales.El líder indígena, sin dar pistas sobre su paradero, escribió: "Seguiré luchando junto a nuestro pueblo, junto a mis hermanas y hermanos que nunca me abandonaron".Hasta antes del miércoles, ni la Fiscalía, el Gobierno o el propio exmandatario habían informado sobre la investigación que reveló la destituida fiscal de Tarija.
La IX Cumbre de las Américas, marcada por el veto de EE.UU. a Cuba, Nicaragua y Venezuela, puso de manifiesto las grandes diferencias que sufre el continente en materia de integración estratégica y multilateral, aunque logró subscribir algunos acuerdos necesarios en materia migratoria.La abogada Patricia Muñoz, magíster en Estudios Políticos, habló en Sala de Prensa sobre uno de los temas principales tratados en la Cumbre: los acuerdos migratorios.“Nuestra participación sirvió para dialogar sobre el estado de la región, los problemas comunes, cuáles han sido las lecciones aprendidas vividas por otros países y la definición de algunos acuerdos estratégicos hacia futuro para poder revertir esa desconsolidación democrática que vemos en varios países de la región”, indicó Muñoz.La abogada resaltó que aunque el evento fue deslucido por la ausencia de varios jefes de Estado, la nutrida participación de intelectuales, académicos y periodistas que participaron en la Cumbre y enriquecieron el evento.Muñoz hizo énfasis en las insatisfacciones con los gobiernos y la dificultad de los ciudadanos antes las problemáticas sociales y de la necesidad de intentar la cultura para construir valores democráticos.“Lo hemos estudiado y estamos leyendo permanentemente cuando leemos los límites de la democracia en los países de las Américas, cuando vemos la situación que atraviesan algunos de nuestros países, generamos alertas… Dentro de ese deterioro, de esas tendencias que estamos viendo a nivel regional, identificamos problemas sobre los cuales trabajamos; sobre la creciente influencia del crimen organizado, sobre el efecto de la corrupción, sobre el problema de la migración, sobre el efecto de la polarización y la entrada de estos populismos en la región”, indicó.La también directora de posgrados del área de Ciencia Política en la universidad Javeriana en Bogotá se refirió a lo que significa este tipo de encuentros y su implicación en el tema de migración, teniendo en cuenta el panorama que se vive del continente.“Reconocer que esta migración trae consigo una serie de dificultades económicas y sociales para los migrantes y países receptores y reconocer también que hay que hacer un esfuerzo común para aceptar las realidades y de manera conjunta brindarle unas salidas más efectivas a los migrantes”, resaltó Muñoz.Además, contó cómo se vivió esta Cumbre de las Américas pospandemia y lo que se encontró en cuanto a la estrategia de cooperación de los países.“Esta cumbre y otras iniciativas dejan el mensaje de buscar alternativas y salidas comunes, problemas como el de la migración, el de la corrupción y el del crimen transnacional no van a poder debidamente solucionados si los países no entienden que solo a través de soluciones compartidas se pueden enfrentar… El mensaje de estas cumbres es cooperación, trabajo mancomunado, estrategias y compromiso”: finalizó MuñozEl encuentro, que se celebra cada tres o cuatro años, estuvo empañado por la exclusión de esos tres países por ser considerados antidemocráticos por el Gobierno estadounidense, anfitrión de la cita, pero esa decisión provocó numerosas críticas entre los líderes presentes, y además otras ausencias, como las de los presidentes de México, Andrés Manuel López Obrador; Honduras, Xiomara Castro y Bolivia, Luis Arce, quienes declinaron la invitación en protesta por la decisión estadounidense.
En medio de la pandemia y la crisis, Perú y Ecuador celebran elecciones presidenciales este domingo y Bolivia una segunda vuelta de comicios para elegir a los gobernadores de La Paz, Tarija, Chuquisaca y Pando.En el caso de Perú, no hay favoritos para los comicios y ningún candidato supera el 10%, según los últimos sondeos publicados en el país, que desde 2018 ha visto pasar a cuatro presidentes.Debido al peligro de exposición al virus, las mesas de votación se han duplicado y se han ubicado en lugares al aire libre, como parques y campos deportivos, además de extender el horario de votación hasta doce horas continuas.Ecuador, en cambio, celebra una reñida segunda vuelta entre el candidato de izquierdas Andrés Arauz -un delfín del expresidente Rafael Correa- y el banquero de derecha, Guillermo Lasso.Los colegios electorales en Ecuador abrieron sus puertas este domingo a las 07:00 hora local en la segunda vuelta presidencial, convocatoria a la que están llamados a depositar su voto más de 13 millones de electores.
La expresidenta interina Jeanine Áñez denunció que "en un acto de abuso y persecución política" el Gobierno del MAS la "ha mandado arrestar", minutos después de que el ministro de Gobierno boliviano, Eduardo Del Castillo Del Carpio, confirmara su detención.Al respecto, el ministro de Justicia de Bolivia, Iván Lima, dijo que el Gobierno de Luis Arce no está detrás de la detención y que, por lo tanto, no se trata de una detención por razones políticas.“Lo que garantizaremos siempre es el debido proceso. No vamos a tomar partido porque la Justicia es independiente”, expresó el ministro en Mañanas BLU.La Justicia boliviana envió a la expresidenta interina y a sus exministros Álvaro Coímbra, de Justicia, y Rodrigo Guzmán, de Energía, a prisión preventiva durante cuatro meses por el caso conocido como "golpe de Estado".La Fiscalía realizó la solicitud de detención preventiva por el "riesgo de fuga" de los tres, acusados de "sedición, terrorismo y conspiración" en la crisis de 2019 a raíz de las fallidas elecciones que derivó en la renuncia de Evo Morales a la Presidencia de Bolivia.
Este domingo el presidente Iván Duque viajó a La Paz, Bolivia, con el fin de realizar una visita de estado y asistir al acto de posesión de Luis Arce, nuevo presidente de ese país.Cuando llegó, varias personas que se encontraban en el lugar lo recibieron con gritos y lo llamaron paramilitar.El hecho, que quedó registrado en un video, se convirtió en viral, pues lo que llamó la atención de los usuarios en redes sociales fue la reacción del Duque ante la acusación de la multitud.En el video se puede observar cuando un hombre le gritó “paramilitar, paramilitar”; enseguida, el mandatario se devolvió y le respondió, “¿por qué me dices paramilitar, si no lo soy?”.Durante la corta conversación, el presidente Duque estuvo acompañado de su esquema de seguridad. Vea el video aquí:
Un año después de la caída del mandatario izquierdista Evo Morales, Luis Arce asumió este domingo como nuevo presidente de Bolivia prometiendo un gobierno "para todos y todas", con el desafío de cerrar las heridas políticas y superar la crisis económica.Arce sucedió a la mandataria interina derechista Jeanine Áñez para un periodo de cinco años, lo que marcó el retorno al poder del Movimiento al Socialismo (MAS), liderado por Morales, quien regresará al país el lunes desde su exilio en la vecina Argentina."Iniciamos una nueva etapa en nuestra historia y queremos hacerlo con un gobierno que sea para todos y todas sin discriminación de ninguna naturaleza. Nuestro gobierno buscará reconstruir nuestra patria en unidad para vivir en paz", declaró Arce en su discurso tras ser juramentado por su vicepresidente, David Choquehuanca."Nos comprometemos a rectificar lo que estuvo mal y a profundizar lo que estuvo bien", agregó.El rey Felipe VI de España y los presidentes de Argentina, Antonio Fernández, de Colombia, Iván Duque, y de Paraguay, Mario Abdo Benítez, así como el ministro de Exteriores de Irán, Mohammad Javad Zarif, entre otros, asistieron a la toma de posesión de Arce, un economista de 57 años con maestría en Gran Bretaña y con perfil de tecnócrata más que de político.La ceremonia de traspaso se realizó en la mañana en el Congreso boliviano. Tras su juramentación, el flamante mandatario se dirigirá caminando al Palacio Quemado, la sede de gobierno, situado en diagonal al edificio del Legislativo, también frente a la Plaza Murillo de La Paz.Arce también tiene previsto presidir un desfile de destacamentos del Ejército, la Fuerza Aérea, la Armada y la Policía, y luego recibir los saludos de los jefes de Estado visitantes y de otros enviados oficiales.- "Mejores relaciones con EEUU" -Antes de asumir, Arce expresó su confianza en que las relaciones con Estados Unidos se fortalecerán tras la elección de Joe Biden. Ambos países carecen de embajadores desde 2008."Con un nuevo gobierno auguramos mejores relaciones que se traduzcan en bienestar de nuestros pueblos", tuiteó Arce.Arce ganó de forma contundente las elecciones del 18 de octubre, que sustituyeron los comicios de 2019, que marcaron la caída de Morales tras 14 años en el poder.Durante la campaña, Arce alzó la bandera de la bonanza económica del gobierno de Morales (2006-2019), de quien fue ministro de Finanzas, época de elevado crecimiento del PIB y activa participación estatal en la economía, así como de reducción de la pobreza.Sin embargo, el artífice de ese "milagro" económico tiene retos por delante en un país polarizado y en recesión. Además, debe mostrar que él es quien lleva las riendas de Bolivia y no su mentor, según los analistas.Un enorme desafío para Arce "es afianzar su propia legitimidad ante una figura tan fuerte y además tan agresiva mediáticamente como la de Evo Morales", dijo a la AFP la politóloga Ximena Costa."Hay una parte de la sociedad que no quiere el retorno de Evo Morales y está en manos del próximo presidente hacer un gobierno diferente", declaró por su lado el analista político Carlos Cordero a la AFP.Morales, de 61 años, regresará a Bolivia este lunes, un año después de renunciar tras perder el apoyo de las fuerzas armadas y la policía, en medio de protestas en su contra y denuncias de fraude electoral cuando buscaba un polémico cuarto mandato consecutivo.El exmandatario ingresará en caravana por la frontera con Argentina y emprenderá un recorrido de 1.100 kilómetros hasta el Trópico de Cochabamba, donde emergió como líder de los cocaleros, en una travesía que amenaza con acaparar la atención nacional e internacional y opacar la agenda de Arce en La Paz.- Medidas de ajuste -Otro enorme desafío del nuevo mandatario es la recuperación de la economía boliviana, muy golpeada por la pandemia del coronavirus."Va a tener un gobierno que tomará algunas medidas de ajuste que lo desgastarían de manera muy acelerada si no se las toma como resultado de un consenso con las bancadas de la oposición", expresó Costa.En junio pasado, a economía mostró una tasa de crecimiento de -11%, un déficit fiscal del 9%, mayores niveles de endeudamiento, disminución de ingresos fiscales y pérdida de reservas.En este contexto adverso, Arce deberá demostrar su capacidad de volver a hacer milagros, pero le será difícil sin respaldo político más allá del MAS. Para ello debe dar pasos de acercamiento hacia sus adversarios.Los analistas consideran que para mostrar buena voluntad, el partido debería anular la decisión del parlamento saliente que modificó un reglamento interno reduciendo el quorum para aprobar ciertas disposiciones.Tal modificación de último minuto busca asegurar que el MAS siga controlando el Congreso boliviano a pesar de haber perdido su mayoría de dos tercios, quedando ahora con mayoría simple.
El candidato Carlos Mesa asumió este lunes que su rival electoral Luis Arce será ganador de las elecciones en Bolivia y su formación Comunidad Ciudadana encabezará la oposición.El líder de Comunicad Ciudadana compareció entre los medios en La Paz para reconocer una victoria del candidato del Movimiento Al Socialismo (MAS) Luis Arce, aunque el cómputo oficial de votos sigue en curso.Carlos Mesa dijo que los sondeos en boca de urna publicados anoche auguran que será "claro triunfador en primera vuelta" el exministro Luis Arce, por lo que Comunidad Ciudadana ejercerá de "cabeza de la oposición" para el periodo 2020-2025.El expresidente Mesa (2003-2005) auguró que los resultados oficiales confirmarán los sondeos, aunque a cerca del 19 por ciento del cómputo muestran una segunda vuelta con ambos.La diferencia en las encuestas es suficientemente amplia y Comunidad Ciudadana reconoce al MAS como triunfador, recalcó en una comparecencia sin preguntas.Mesa confió en estar a la altura desde la oposición, sin sentirse triste, sino agradecido por el apoyo de una parte del electorado.El órgano electoral de Bolivia reanudó en esta jornada el cómputo de votos de las elecciones generales, en el que va con ventaja Carlos Mesa con el 43,3 por ciento de los votos y Arce figura con el 36,3.Estos porcentajes suponen que habría segunda vuelta entre ambos, pues ninguno alcanza el 50 por ciento más uno de los votos ni el 40 por ciento con diez puntos de ventaja sobre el siguiente, que se necesitan para ganar en primera.No obstante, tanto Arce como Mesa dan por seguro que el cómputo final será similar al porcentaje cercano al 53 por ciento con que los sondeos auguran que vencerá en primera vuelta el MAS, el partido de Evo Morales, quien ya celebró desde Argentina una victoria que ve segura.Las encuestas dan a Mesa alrededor del 32 por ciento de los sufragios, con lo que no habría segunda ronda.Incluso la presidenta interina de Bolivia, Jeanine Áñez, felicitó al MAS y a Arce, aunque los resultados oficiales van lentos para un censo de 7,3 millones de electores y se desconoce cuándo concluirán.Bolivia vive en esta jornada una tensa calma a la espera de los resultados oficiales de las elecciones del domingo para elegir presidente, vicepresidente, senadores y diputados para los próximos cinco años.
El economista Luis Arce, que fue artífice del milagro económico de Evo Morales y era su hombre en los comicios del domingo, será el próximo presidente de Bolivia, según dos proyecciones privadas.Según el canal de televisión Unitel, Arce, candidato del Movimiento al Socialismo (MAS), se impuso en la primera vuelta de las elecciones con 52,4% de los votos, muy por encima del 31,5% de su inmediato rival, el centrista Carlos Mesa.La fundación Jubileo dio a Arce el 53% de los votos y a Mesa el 30,8%.Bolivia "ha recuperado la democracia, quiero decirle sobre todo a los bolivianos, hemos recuperado las esperanzas", dijo Arce en rueda de prensa junto a su vicepresidente David Choquehuanca.Morales, que se trasladó a Argentina tras su tumultuosa dimisión hace un año entre acusaciones de fraude electoral, reivindicó la victoria de su partido, que dista por el momento de ser oficial, porque sólo se habían escrutado los votos de poco más del 6% de los centros, casi 7 horas después de su cierre."Lucho (apodo del candidato del MAS) será nuestro presidente (...) el devolverá a nuestra patria el camino del crecimiento económico", dijo Morales en una declaración leída a la prensa en Buenos Aires.La presidenta que sucedió interinamente a Morales hasta estos comicios, Jeanine Añez, enemiga acérrima del MAS, también admitió su victoria."Aún no tenemos cómputo oficial, pero por los datos con los que contamos, el Sr. Arce y el Sr. Choquehuanca han ganado la elección. Felicito a los ganadores y les pido gobernar pensando en Bolivia y en la democracia", escribió en Twitter.Arce y Mesa eran los candidatos favoritos en esta votación desarrollada en una jornada tranquila, aunque en medio de temores a que se repitieran los incidentes tras los comicios de octubre de 2019, anulados por denuncias de fraude, y que terminaron con la renuncia de Evo Morales.Las autoridades electorales decidieron suprimir en estos comicios el conteo rápido, basado en la transmisión de las actas de los colegios electorales por foto, ralentizando considerablemente el recuento oficial, que podría alargarse varios días.- El padre del milagro económico de Morales -Economista de 57 años, Arce estudió en la estatal Universidad Mayor de San Andrés en La Paz e hizo una maestría en la universidad británica de Warwick.Trabajó 18 años en el Banco Central, donde ocupó diversos cargos, y fue ministro de Economía y Finanzas casi todo el periodo de Morales, con una pausa de 18 meses. Tiene un perfil más tecnócrata que político.Bajo Morales, Bolivia elevó su Producto Interno Bruto de 9.500 millones de dólares anuales a 40.800 millones y redujo la pobreza del 60% a 37%, según datos oficiales.La bonanza permitió pagar bonificaciones a miles de mujeres embarazadas, escolares y ancianos, e inversiones millonarias para intentar industrializar el litio y el gas natural.- Seguridad y bioseguridad -Unos 7,3 millones de electores acudieron a las urnas en forma tranquila pese a las tensiones de la campaña, con las ciudades bajo resguardo militar y policial.Este domingo también se renovaban las 166 curules del Congreso bicameral.La gente también fue respetuosa de las medidas de bioseguridad por la pandemia, que volvieron más lenta la votación y le quitaron el tinte festivo de otros tiempos, con puestos de venta de comida típica, helados, globos, juegos para niños y música afuera de los centros electorales."Gane quién gane, hay que seguir trabajando, no podemos seguir perjudicándonos como la pasada elección", dijo a la AFP el estudiante Cristian Guaichu, de 26 años.En este país con 41% de población indígena, la gente hizo filas, sentada y con distancia física desde la madrugada, en lugares como Huarina, un poblado a orillas del lago Titicaca, a 70 km de La Paz."El próximo presidente yo quisiera que sea un candidato que ayude al campo, a la gente pobre", dijo allí a AFP Silverio Chirinos, agricultor de 69 años."Es el fin de un ciclo del gobierno de Evo Morales y de la crisis política. Se espera que se inicie un proceso para fortalecer las instituciones", dijo a AFP el politólogo Carlos Cordero, de la Universidad Católica Boliviana.Paralelamente, el país andino atraviesa su crisis económica más profunda en casi 40 años, con una contracción prevista del PIB de 6,2% en 2020.En los comicios de 2019 el conteo rápido fue suspendido por más de 20 horas y al reanudarse Morales apareció con un salto que lo hacía ganador en primera vuelta. La misión electoral de la Organización de Estados Americanos (OEA) afirmó que hubo manipulación.Por tres semanas la oposición y simpatizantes del gobierno coparon las calles con violentos enfrentamientos, que dejaron 30 muertos. Morales perdió el apoyo de las fuerzas armadas y renunció.