El pastor Andrés Corson exhortó a los creyentes a proteger su relación con Dios de las interferencias del enemigo, quien busca debilitar nuestra fe con pensamientos engañosos. Basándose en Apocalipsis 3:20, recordó que Jesús desea una relación íntima con cada uno de nosotros, afirmando: "Estoy a la puerta y llamo; si oyes mi voz y abres, entraré y cenaremos juntos como amigos". Corson señaló que, así como el enemigo incitó a David a realizar un censo (1 Crónicas 21:1) o a Judas a traicionar a Jesús (Juan 13:2), el enemigo hoy pone pensamientos como “Dios no te ama” o “tu oración no sirve”, buscando crear brechas entre nosotros y Dios.Corson enfatizó la importancia de estar atentos a los pensamientos que dejamos arraigar en nuestra mente, comparándolos con un sendero que puede convertirse en una autopista si no lo detenemos a tiempo. "No dejes que el enemigo se meta entre tú y Dios", insistió, exhortando a los creyentes a meditar en la palabra de Dios, tal como lo describe el Salmo 1: “Bienaventurado el que en la ley del Señor está su delicia y en ella medita día y noche”. Además, advirtió sobre la influencia negativa de predicadores que distorsionan el mensaje de amor y gracia de Dios, recordando que Juan 3:16 declara: "De tal manera amó Dios al mundo, que dio a su Hijo unigénito para que todo aquel que en él cree no se pierda".Escuche la reflexión completa aquí:
En su reflexión dominical, el pastor César Castellanos resaltó la importancia de la gratitud hacia Dios por el triunfo en Cristo Jesús. Basándose en Corintios 2:14, recordó que "Dios nos lleva siempre en triunfo en Cristo" y que este triunfo es la victoria espiritual que Jesús conquistó en la cruz. Comparándolo con las procesiones de honor de los generales romanos, Castellanos explicó que, así como ellos regresaban victoriosos tras la batalla, Cristo aseguró la victoria definitiva al proclamar: "Consumado es". Su sacrificio en la cruz rompió las cadenas del pecado y la esclavitud, dejando claro que la verdadera libertad y triunfo se obtienen a través de la fe.El pastor subrayó que el triunfo comienza desde el interior. "El triunfo primero se conquista por dentro, y luego se ve el resultado", afirmó, invitando a los creyentes a apropiarse de las promesas de Dios. Citó ejemplos bíblicos como el ciego que recuperó la vista por obediencia o el leproso que fue sanado al recibir el toque de Jesús, demostrando cómo la fe y la confianza en Dios son esenciales para experimentar su poder.Escuche la reflexión completa aquí:
En su reflexión dominical, el pastor Andrés Corson enfatizó la importancia de la fe como un motor para experimentar milagros en nuestras vidas. Inspirado en el relato de los dos ciegos en Mateo 9:28, Corson recordó que Jesús les dijo: “Que se haga con ustedes conforme a su fe”.El pastor destacó que la fe no solo se activa con la creencia, sino también con la acción. Citó el ejemplo de la mujer que tocó el manto de Jesús en Marcos 5:25-34, quien, impulsada por su fe, visualizó su sanidad y confesó: “Si tan solo tocara su túnica, quedaré sana”. Corson afirmó que debemos seguir este ejemplo al visualizar, confesar y actuar conforme a nuestra fe. “La fe en acción llama la atención de Dios y abre puertas para los milagros”, añadió.Finalmente, Corson animó a los creyentes a alimentar su fe a través de la oración, la confesión y la palabra de Dios. Recordó Hebreos 11:1: “La fe es la certeza de lo que se espera, la convicción de lo que no se ve”.Escuche la reflexión completa aquí:
Día a día salen a la luz nuevos descubrimientos arqueológicos que dan vida a lo que dice la Biblia. Este es el caso de un amuleto que data del siglo V d.C., el cual es descrito como un objeto "espanta demonios", que contiene referencias bíblicas.El amuleto, elaborado con detalles minuciosos, presenta en su anverso una escena cargada de significado: el rey Salomón, una figura clave en la Biblia, aparece montando a caballo mientras atraviesa al diablo con una lanza. Esta representación resalta a Salomón como un símbolo de poder espiritual y sabiduría, atributos que lo han convertido en un referente de protección en varias tradiciones religiosas. En el reverso del objeto, una inscripción refuerza su propósito: "Nuestro señor ha vencido el mal". Además, se incluyen menciones a los cuatro arcángeles - Azrael, Gabriel, Miguel e Israfil.Ersin Celikbas, arqueólogo que lideró la investigación, destacó que este tipo de hallazgos no son comunes en la región donde fue encontrado. "No habíamos identificado piezas similares antes. Este amuleto abre una ventana al pensamiento espiritual de la época", afirmó.Celikbas también sugirió una conexión entre el diseño del amuleto y las tradiciones militares romanas y bizantinas. La figura de Salomón podría haber sido vista como un protector de los guerreros, uniendo las creencias espirituales con el contexto bélico de aquellos tiempos.¿Por qué el amuleto se considera "espanta demonios"?El objeto podría estar vinculado con el Testamento de Salomón, un texto apócrifo que narra cómo el rey recibió de Miguel un anillo con poderes sobrenaturales para someter a los demonios. Este relato combina elementos de magia y religión, reflejando una compleja cosmología donde la lucha entre el bien y el mal es central.Este amuleto no solo revela detalles de las creencias religiosas del siglo V, sino que también refuerza el papel de Salomón como un icono espiritual en diversas culturas. Su representación en este objeto conecta la Biblia con prácticas esotéricas y tradiciones antiguas, mostrando cómo la espiritualidad y la magia se entrelazaron en el imaginario colectivo de la humanidad.
La Biblia, reconocida como uno de los textos religiosos más influyentes de la historia, ofrece numerosas enseñanzas sobre la moral, el perdón y la redención. Sin embargo, también plantea una advertencia clara sobre un pecado que, según las escrituras, no será perdonado por Dios.Este concepto, conocido como el "pecado imperdonable", ha generado amplios debates teológicos, llegando a ser interpretado de diferentes maneras por eruditos religiones a lo largo de los siglos.¿Qué dice la Biblia sobre el pecado imperdonable?El Evangelio de Mateo, en el capítulo 12, versículos 31-32, aborda este tema de manera explícita, donde Jesús declara: “Por tanto, les digo: todo pecado y blasfemia será perdonado a los hombres; pero la blasfemia contra el Espíritu no les será perdonada. A cualquiera que diga una palabra contra el Hijo del Hombre, le será perdonado; pero al que hable contra el Espíritu Santo, no se le perdonará ni en este siglo ni en el venidero”.En este contexto, la blasfemia contra el Espíritu Santo es entendida por los teólogos como un rechazo deliberado y consciente de la obra divina.De acuerdo con expertos bíblicos, este pecado puede cometerse de dos formas. La primera se produce cuando alguien atribuye las obras de Dios al diablo. Por ejemplo, rechazar un milagro o una manifestación divina y considerarla como obra de Satanás. Este acto, según los estudiosos, representa una negación directa de la autoridad divina.La segunda forma, según teólogos citados por portales especializados como GotQuestions y BibleStudyTools, se relaciona con lo que denominan "amar el pecado". Este escenario es más sutil, pero igualmente peligroso: las personas llegan a justificar sus actos pecaminosos como algo bueno, cegándose a la posibilidad de arrepentimiento. En este estado, explican los expertos, el Espíritu Santo no puede actuar en sus vidas, dejando a estas personas fuera del alcance del perdón divino.Es importante señalar que este pecado no se refiere a un error aislado o una falta puntual, sino a un rechazo persistente y consciente de la gracia de Dios. Los teólogos destacan que Dios está siempre dispuesto a perdonar a quienes se arrepienten sinceramente, pero el pecado imperdonable radica en no abrirse a esa posibilidad de redención.Aunque la Biblia menciona este concepto de manera clara, las interpretaciones varían según las tradiciones cristianas. Mientras que algunas denominaciones lo entienden literalmente, otras lo ven como un llamado a reflexionar sobre la dureza de corazón y la necesidad de mantenerse abiertos a la influencia divina.
En su reflexión dominical, el pastor Andrés Corson compartió un mensaje alentador sobre cómo enfrentar las acusaciones injustas, recordando que incluso Jesús experimentó esta prueba. Citando a Pedro 2:23, explicó: “Jesús no respondía cuando lo insultaban ni amenazaba con vengarse cuando sufría. Dejaba su causa en manos de Dios, quien siempre juzga con justicia”. El pastor también abordó historias bíblicas y contemporáneas de personas acusadas injustamente, como José en Egipto, quien terminó en la cárcel por un crimen que no cometió, pero siempre contó con la presencia de Dios. Corson destacó: “Aunque José estaba en prisión, el Señor estaba con él”.Finalmente, Corson recordó que la persecución contra la iglesia y los creyentes es una realidad que debemos enfrentar con sabiduría y fe. Citando Mateo 10:16, animó a los fieles a ser “astutos como serpientes e inofensivos como palomas” y a vivir con transparencia para evitar caer en la tentación de ocultar errores.Escuche la reflexión completa aquí:
El pastor Andrés Corson invita a reflexionar sobre la historia del rey Ezequías, quien a través de su fe, oración y fidelidad, experimentó el favor de Dios en momentos críticos de su vida. Basándose en el libro de Isaías, Corson destaca cómo Ezequías, ante la noticia de su inminente muerte, oró con fervor y lágrimas, recordando al Señor su fidelidad. “Acuérdate, Señor, que siempre te he sido fiel y te he servido haciendo lo que te agrada” (Isaías 38:3). Esta oración no solo le otorgó quince años más de vida, sino que también reveló la importancia de una relación genuina con Dios, construida en fidelidad y comunión constante.Corson enfatiza que la fidelidad de Ezequías se reflejó en su rechazo a la idolatría y en la restauración de la adoración en Judá. “Ezequías hizo lo que era agradable a los ojos del Señor” (2 Reyes 18:3), eliminando prácticas paganas y estableciendo nuevamente el culto a Dios en el templo. Escuche la reflexión completa aquí:
El pastor César Castellanos invita a reflexionar sobre el significado del Reino de Dios y su cercanía a la vida. En su mensaje, destaca cómo el Señor enseñó a sus discípulos a orar diciendo: "Venga tu reino, hágase tu voluntad, como en el cielo, así también en la tierra" (Mateo 6:10). El pastor también señala que el acceso al Reino requiere dos pasos esenciales: arrepentimiento y fe en el evangelio, tal como lo proclamó Jesús en su primer mensaje: "El tiempo se ha cumplido, y el reino de Dios se ha acercado; arrepentíos y creed en el evangelio" (Marcos 1:15). Sin embargo, Castellanos advierte sobre la diferencia entre remordimiento y arrepentimiento genuino, ilustrando este contraste con el ejemplo del rey David en el Salmo 51, quien se humilló sinceramente ante Dios tras ser confrontado por su pecado. "El arrepentimiento es un cambio de actitud, un giro total hacia Dios", destacó, recordando que este proceso permite un encuentro transformador con el Padre.Escuche la reflexión completa aquí:
El papa Francisco volvió a lanzar este domingo un llamamiento para que se alcance la paz en Ucrania, tras casi dos años de guerra y cuando la llegada del invierno "amenaza con agravar las condiciones de millones de desplazados"."La guerra es un horror, la guerra ofende a Dios y a la humanidad, la guerra no perdona a nadie, la guerra es siempre una derrota, una derrota para toda la humanidad", dijo el pontífice ante los miles de personas reunidas en la plaza de San Pedro del Vaticano para escucharle tras el rezo dominical del Ángelus.E instó de nuevo a la paz: "Dirijo una vez más mi llamamiento a la comunidad internacional y a cada hombre y mujer de buena voluntad para que trabajen, de todas las maneras, para detener esta guerra y hacer prevalecer el diálogo, la fraternidad y la reconciliación. Que haya, a todos los niveles, un compromiso renovado".En su mensaje, el papa expresó "su preocupación y dolor por el conflicto que continúa ensangrentando a la atormentada Ucrania. Desde hace casi dos años asistimos a una terrible secuencia de muertos, heridos, violencia y destrucción" y “los niños, las mujeres y los ancianos son las primeras víctimas”.«Creemos que el invierno está a la vuelta de la esquina y amenaza con agravar las condiciones de millones de desplazados. Serán meses muy difíciles para ellos», comentó, subrayando que “la concomitancia de la guerra y el frío es trágica”.«Mientras nos preparamos para la Navidad y esperamos el nacimiento del Rey de la Paz, demos a estas poblaciones una esperanza concreta", pidió Jorge Bergoglio, que insistió en que "la búsqueda de la paz no es responsabilidad de unos pocos, sino de todos"."Si prevalecen el hábito y la indiferencia ante los horrores de la guerra, toda la familia humana está derrotada", concluyó.
En su reflexión dominical, el pastor Andrés Corson recuerda que todos atraviesan desiertos, esas etapas difíciles entre un sueño dado por Dios y su cumplimiento. “El desierto es el espacio entre la esclavitud y la tierra prometida, entre la pobreza y la prosperidad, entre la enfermedad y la sanidad”, explicó. A través de ejemplos bíblicos como José, David e Israel, el pastor mostró como Dios utiliza estas pruebas para formar carácter, probar la fe y preparar para el propósito que tiene reservado. Como lo dice Santiago 1:2-3, “Consideren como un privilegio enfrentarse a pruebas, porque producen resistencia”.Corson destacó que uno de los mayores propósitos del desierto es acercarse a Dios. "En el desierto, Dios nos habla. La palabra hebrea para desierto, midbar, también significa hablar", mencionó, citando Deuteronomio 8:3: “No solo de pan vivirá el hombre, sino de toda palabra que sale de la boca de Dios”.Finalmente, Corson recordó que Jesús mismo vivió un desierto y dio ejemplo de cómo enfrentarlo: con alegría, oración y la palabra de Dios. “Fijemos la mirada en Jesús, quien soportó la cruz por el gozo que le esperaba”, citó de Hebreos 12:2.Escuche la reflexión completa aquí: