Por una nueva barra de sedimentos que se formó en Bocas de Ceniza, la Dirección General Marítima redujo a 9.3 metros el calado autorizado en el canal acceso al Puerto de Barranquilla.Esta restricción obligó a las autoridades portuarias a desviar un buque de 9.8 metros de calado a la ciudad de Cartagena. La embarcación, que venía con 35.000 toneladas de clínker, debió aligerar su carga en el puerto cartagenero para luego poder ingresar a la capital del Atlántico.Esta situación pone en evidencia una vez más que la contratación de una draga permanente no ha sido suficiente para mantener en óptimas condiciones el canal de acceso. Lucas Ariza, director de la Asociación Portuaria de Barranquilla, reconoció que esto “no ha dado los resultados esperados y que es muy frustrante tener que aplicar desvíos aun teniendo una draga en el puerto”.Ariza advirtió que, si no mejoran las condiciones de profundidad en el canal navegable, por lo menos dos embarcaciones más que están programadas para arribar esta semana a Barranquilla deberán ser desviadas a otros puertos de la región.
Oficiales de la Dirección General Marítima (Dimar) realizan varias maniobras para desvarar un buque cargado con 46.000 toneladas de maíz procedente de Nueva Orleans, en los Estados Unidos.La embarcación granelera de bandera panameña nombrada como Inca Queen, tenía programada realizar operaciones de descargue en la Sociedad Portuaria de Buenaventura (SPB).No obstante, durante la maniobra de ingreso al canal de acceso de la Bahía, se salió unos metros del mismo y quedó ‘varada’ a la altura de la boya 41 cerca de la zona de fondeo B, que le han impedido moverse desde hace 12 días.Lea también: Susto en Buenaventura por detonación de explosivo en un centro comercial Los hechos, que son materia de análisis por parte de la Autoridad Marítima Colombiana, no han afectado la operación del puerto y reportaron un libre tránsito de las naves de comercio exterior.“Es oportuno recalcar que el buque no está encallado, solo está fuera del canal navegable y que no afecta la operación de las demás embarcaciones”, dijo el capitán Fragata Andrés Mauricio Zambrano, capitán de Puerto de Buenaventura.Según expertos de la Dimar, para lograr que el buque sea desvarado se necesita que la marea suba y descargar por lo menos 5.000 toneladas de su mercancía que le permitan al navío flotar.Le puede interesar: Alcalde de Buenaventura y su hijo fueron enviados a la cárcel Para esta operación, el pasado jueves llegó desde Barranquilla el buque de nombre ‘Paz Navigator’ procedente de Barranquilla y perteneciente a la empresa Navesco que realiza las labores de descargue de la mercancía.“Hasta las 2:00 de la mañana de este viernes el buque había descargado más de 3.500 toneladas de maíz, pero debido al mal tiempo, la nubosidad y la lluvia se tuvo que detener la actividad”, dijo el oficial.Se espera que a las 5:00 de la tarde, con la marea alta, se reinicien la otra parte del procedimiento y así se pueda reflotar el buque Inca Queen.
En diálogo con BLU Radio, el abogado Martín Cabeza, dijo que esta es una buena noticia y que por ahora espera el reporte de las autoridades panameñas (Lea también: Tripulantes indios que permanecían en Barranquilla podrán zarpar hacia Panamá). El jurista manifestó que es probable que los tripulantes zarpen hacia India esta misma semana. “Ellos salieron el domingo y se espera que lleguen esta tarde a Panamá. Esperamos que apenas lleguen la autoridad marítima autorice la repatriación”, expresó. Agatis, de bandera panameña, está con una tripulación de 18 personas de nacionalidad India, y llegó a Barranquilla desde Marruecos con problemas de máquina que limitan su operatividad, según lo indicó Cabeza (Lea también: Tripulantes del buque Agatis viven en condiciones infrahumanas: Martín Cabeza). “Hay que tener en cuenta que la situación de seguridad del puerto de Barranquilla no es la optima, es algo que se debe tener en cuenta dentro de este escenario”, finalizó. Estas personas no podían navegar en aguas restringidas de Barranquilla y tampoco les permitían su acceso a Panamá debido a fallas mecánicas. De igual manera, los tripulantes serían repatriados en los próximos días.
Hacia la media noche de este 7 de febrero, la embarcación de bandera panameña que permanecía en territorio barranquillero, deberá zarpar hacia Panamá, luego de que las autoridades marítimas de ese país le dieran vía libre para llegar a su territorio con la condición de que tengan el acompañamiento de un barco de guardacostas con el fin de evitar inconvenientes. Martín Cabeza, el abogado asesor del buque, expresó que “la decisión que tomó la autoridad marítima de Panamá fue llevarlos a ese país, pero la autoridad marítima de Colombia le está requiriendo que sean escoltados por un barco de guardacostas para evitar cualquier tipo de inconvenientes que se puedan presentar”. Estas personas no podían navegar en aguas restringidas de Barranquilla y tampoco les permitían su acceso a Panamá debido a fallas mecánicas. De igual manera, los tripulantes serían repatriados a la India entre el próximo 8 y el 9 de febrero.
“Ellos en este momento están atravesando por una situación crítica, en condiciones infrahumanas y presos a bordo de la embarcación porque cometieron el error de venir a Colombia a trabajar en un buque que luego fue abandonado por el dueño de la embarcación”, manifestó Cabezas. “El pasado viernes los tripulantes recibieron provisiones, alimentos, combustible y agua, gracias a la presión que se hizo en los medios por la situación de ellos, pero esto solo les durará 10 días”, añadió el abogado. Agatis, de bandera panameña, está con una tripulación de 18 personas de nacionalidad India, y llegó a Barranquilla desde Marruecos con problemas de máquina que limitan su operatividad, según lo indicó Cabeza. “Hay que tener en cuenta que la situación de seguridad del puerto de Barranquilla no es la optima, es algo que se debe tener en cuenta dentro de este escenario”, finalizó.