La Sociedad Colombiana de Cirugía Plástica, Estética y Reconstructiva (SCCP) ha emitido un comunicado en el que celebra la reciente decisión de la Corte Constitucional que obliga a las EPS cubrir los costos del tratamiento de retiro de biopolímeros, afirman que esta determinación judicial representa un alivio significativo para miles de colombianos que han sufrido las secuelas de procedimientos estéticos mal realizados con biopolímeros por personas no calificadas.Damaris Romero, presidente de la sociedad, destacó la importancia de esta medida para proteger el derecho a la salud de las víctimas, enfatizando que "El retiro de biopolímeros es un procedimiento complejo que debe ser realizado únicamente por profesionales de la salud capacitados y certificados para llevar a cabo este tipo de intervenciones. La SCCP reafirma su compromiso de velar porque todos los procedimientos se realicen con los más altos estándares de seguridad y calidad, protegiendo la salud y el bienestar de los pacientes en todo momento", indicó.Además, la sociedad médica insta a las autoridades y a la sociedad en general a tomar medidas preventivas contundentes para evitar nuevos casos de uso indebido de biopolímeros, reafirmando la importancia de cumplir y hacer cumplir la ley 2316 del 2023, que prohíbe la importación de estas sustancias y establece sanciones para quienes las utilicen ilegalmente.Aseguran que para un procedimiento de retiro de biopolímeros es altamente especializado y debe ser realizado exclusivamente por profesionales de la salud debidamente capacitado, y su compromiso como sociedad es de garantizar que todos los procedimientos se lleven a cabo bajo los más altos estándares de seguridad y calidad, mirando siempre el bienestar de los pacientes.
En una decisión histórica, la Corte Constitucional determinó que los procedimientos médicos para el retiro de biopolímeros están incluidos en el Plan de Beneficios de Salud (PBS).Por medio de la sentencia SU-239/24, se implica que las Entidades Promotoras de Salud (EPS) deberán asumir los costos del tratamiento para el retiro de estas sustancias. Además, establece la obligación de los médicos y las EPS de diagnosticar y tratar los graves síntomas causados por cirugías estéticas, como los implantes mamarios.En diálogo con Mañanas Blu, con Néstor Morales, el doctor Jaime Pachón, cirujano plástico especialista en retiro de biopolímeros, habló sobre los procedimientos y lo que ellos significa para los pacientes que no distingue género. Pachón reflexionó y aseguró que "desafortunadamente aquí en Colombia entran productos falsos y muchas personas se dejan inyectar por manos no calificadas". Y explicó que los procedimientos reconstructivos y de retiro de estas sustancias tienen costos millonarios y muchas veces no se trata de una sola intervención sino de varias. "Lo que que persona se realizó equívocamente, le puede costar 20 o 50 veces lo que le costó inicialmente", dijo. Sobre el papel de las EPS y los costos de dichas intervenciones, dijo que hay paciente que merecen esta atención y "lo ideal es que hubiera el dinero para retirarlo a todas las pacientes.E hizo un llamado en el que exalta que así como existe una prevención en la salud, debería haber una prevención para que esos rellenos no ingresen al país. Casos concretos de biopolímeros:El fallo responde a los casos de seis mujeres que se sometieron a procedimientos estéticos; cuatro de ellas fueron inyectadas con biopolímeros y dos se realizaron implantes mamarios. Allí, estas mujeres argumentaron que su decisión estuvo influenciada y, en algunos casos financiada, por sus parejas sentimentales. Como consecuencia, su salud física y mental se vio seriamente afectada, enfrentándose a barreras cuando intentaron obtener diagnóstico y tratamiento por parte de las EPS.Escuche aquí la entrevista:
En una decisión histórica, la Corte Constitucional determinó que los procedimientos médicos para el retiro de biopolímeros están incluidos en el Plan de Beneficios de Salud (PBS).Por medio de la sentencia SU-239/24, se implica que las Entidades Promotoras de Salud (EPS) deberán asumir los costos del tratamiento para el retiro de estas sustancias. Además, establece la obligación de los médicos y las EPS de diagnosticar y tratar los graves síntomas causados por cirugías estéticas, como los implantes mamarios.Casos concretos de biopolímeros:El fallo responde a los casos de seis mujeres que se sometieron a procedimientos estéticos; cuatro de ellas fueron inyectadas con biopolímeros y dos se realizaron implantes mamarios. Allí, estas mujeres argumentaron que su decisión estuvo influenciada y, en algunos casos financiada, por sus parejas sentimentales. Como consecuencia, su salud física y mental se vio seriamente afectada, enfrentándose a barreras cuando intentaron obtener diagnóstico y tratamiento por parte de las EPS.La negativa de las EPS se basaba en la exclusión explícita de las cirugías estéticas del PBS, argumentando que las complicaciones derivadas de estos procedimientos no estaban cubiertas. Sinembargo, la Corte Constitucional concluyó que, cuando se demuestre que una cirugía estética se realiza para corregir alteraciones que afecten el funcionamiento de un órgano o para evitar perturbaciones en la salud mental y física, el procedimiento debe ser cubierto por las EPS.Fue el propio presidente de la Corte Constitucional, el magistrado José Fernando Reyes, quien señaló: “La corte no estuvo de acuerdo con las conclusiones de los señores jueces que, en alguna medida, estimaban que, dado que estos procedimientos eran asumidos voluntariamente por las pacientes, debían inclusive asumir esos riesgos y, por lo tanto, inclusive si carecieran de recursos para subrogarlos, ellas deberían, en todo caso, atenerse a las resultas”.Por último, la corte llamó la atención del Estado para que impulse medidas que garanticen que las decisiones de las mujeres para someterse a procedimientos estéticos sean libres y sin presiones estereotipadas.
Mediante un comunicado de prensa la Cancillería colombiana afirmó no tener ningún lazo con los colombianos que han participado y han sido víctimas en la guerra entre Rusia y Ucrania, y sacando que no existe ninguna alianza entre Ucrania y Colombia para enviar a estos ex miembros de las fuerzas armadas para pelear en la guerra de disputa al norte de Europa desde el año 2022“Respecto de los ciudadanos colombianos que han resultado víctimas en la guerra en Ucrania, su presencia allí obedece a decisiones de tipo personal y que no existen acuerdos bilaterales en virtud de los cuales se hace posible esa vinculación”, señaló la Cancillería de Colombia.También resaltaron que, pese a no tener un lazo con la mirada de estos exmilitares a participar como mercenarios a favor de Ucrania se han prestado atención a quienes han resultado heridos y van a seguir prestando atención a posibles otras víctimas tanto a sus familias como desde el consulado pertinente.Este comunicado puede llegar a ser considerado como una respuesta directa al ministro de relaciones Serguéi Lavrov, tras pedirle a los países latinoamericanos y detener el peligro de la participación de mercenarios de sus países en la guerra.De igual forma hay que mencionar que durante las últimas semanas varios colombianos han resultado heridos e incluso algunos han perdido la vida en medio de los combates como sucedió el 11 de febrero cuando un exmilitar colombiano falleció después de un ataque ruso con drones el pasado 11 de febrero.¿Por qué los colombianos participan en la guerra en Ucrania?La mayoría de los colombianos, quienes se han ofrecido como voluntarios para combatir en las filas de Ucrania en esta guerra que cumple ya dos años, lo hacen debido a los muy buenos salarios que ofrecen desde este país a los extranjeros que decían defenderlos siendo la razón por la que la mayoría de estos exmiembros de la fuerza pública han aceptado participar en esa guerra.De los casos más llamativos fue de la militar que anunció que iba a ir a Ucrania con el objetivo de quitarse biopolímeros que tenía en su cuerpo, viaje que al final terminó cancelando después de que un naranja anónimo le regalara 35 millones para este proceso quirúrgico, destacando que pese a que este caso terminó de buena forma y no requirió que la joven participará en la guerra, no es el caso de todos, razón de las víctimas colombianas en territorio ucraniano en el marco de esta guerra.
Son varias las medidas que tiene esta ley que sancionó el presidente Petro en materia de sanción a los médicos que usen biopolímeros, pero también tiene medidas para el retiro de las personas que tienen la sustancia en su organismo.Así lo establece el artículo 5 que obliga a que el Ministerio de Salud incluya en tres meses en el Plan de Beneficios en Salud (antes conocido como POS) el diagnóstico, los tratamientos, la rehabilitación y procedimientos de retiro o manejo de sustancias modelantes no permitidas, así como los medicamentos y los tratamientos necesarios de salud mental y apoyo psicosocial que requieran las personas afectadas.También se establece un registro de control de ventas de las sustancias “modelantes” permitidas, la publicación de un listado de entidades y profesionales médicos habilitados para procedimientos estéticos.Pero la almendra de la ley está precisamente en ese artículo 3 donde se adiciona un nuevo artículo al Código Penal, catalogado como ‘lesiones con sustancias modelantes no permitidas’.Allí, se establece que el que inyecte o infiltre en el cuerpo de otra persona sustancias modelantes no permitidas incurrirá en prisión de 32 a 120 meses y multa de 150 a 250 salarios mínimos legales mensuales vigentes.“Si la conducta fuere cometida por profesional de la salud la pena será de 96 a 180 meses de prisión y multa de 200 a 300 salarios mínimos legales mensuales vigentes y la inhabilidad para el ejercicio de su profesión por un término de 5 años”, señala la ley.Y, adicionalmente, advierte que si las conductas descritas previamente se cometieren en menores de 18 años o mediante engaño sobre la sustancia modelante no permitida, “o afectare el rostro”, las penas se aumentarán de una tercera parte a la mitad.