Este viernes 3 de noviembre las altas cortes lideraran una conmemoración de los 38 años del Holocausto del Palacio de Justicia con una ofrenda de luz en memoria de las víctimas y una misa en la Catedral Primada. Al evento asisten magistrados de altas cortes, parte del Gobierno, víctimas del holocausto y exfuncionarios.Hace 38 años el Palacio de Justicia fue el escenario de violentos combates entre el Ejército y el M-19, después de que ese grupo armado se tomó la sede y secuestró a magistrados, consejeros de Estado, funcionarios y visitantes; generando uno de los momentos más violentos en pleno centro de Bogotá.En plena época de la crisis que dejó el narcoterrorismo en el país, la otra guerra se vivió en el corazón del poder de Colombia, cuando la guerrilla del M-19 se tomó el Palacio de Justicia, donde en ese entonces funcionaba la Corte Suprema y el Consejo de Estado, después de las tensiones que se crearon en medio del acuerdo que adelantaba el Gobierno del presidente Belisario Betancourt con ese grupo armado.El 6 de noviembre de 1985 un comando de guerrilleros del M-19 ingresó al Palacio por el costado norte de la Plaza de Bolívar, a pocos metros de la casa Presidencial, el Congreso y la Alcaldía de Bogotá, para secuestrar a más de 300 personas, entre magistrados, funcionarios y visitantes, lo que ocasionó uno de los hechos más violentos que ha vivido el país.La toma y retoma tuvo 28 horas de combates entre el Ejército y ese grupo guerrillero, dejando como saldo un centenar de personas muertas, 11 desaparecidas, de los cuales cinco fueron localizados con el paso del tiempo; y un sin número de cuestionamientos sobre lo que ocurrió ese oscuro 6 de noviembre.Uno de las decisiones controversiales se tomó un par de días antes del asalto, cuando la Policía retiró la vigilancia del edificio y se lo dejó a una empresa privada, pese a las alertas que existían sobre los planes del M-19 contra el Palacio de Justicia y los propios magistrado de la Sala Constitucional de la Corte, quienes para ese entonces habían recibido amenazas de muerte por parte del cartel de Medellín, debido a que tenían a su cargo el tema de la extradición de colombianos por narcotráfico.Finalmente el 7 de noviembre de 1985, después de tres incendios y un absoluto caos ensordecedor por el sonido de las ametralladoras y los rockets disparados desde un tanque, las Fuerzas Militares y la Policía retomaron el control del Palacio de Justicia rescatando a ciudadanos que se encontraban dentro de la sede y que habían sido llevados a la Casa del Florero, donde se dio un nuevo capítulo de violaciones a los derechos humanos.Le puede interesar "El presidente Petro dice que se reunirá primero con gobernadores afines, ¿un mal mensaje? Debate":
Jaime Arias Ramírez, exministro de Salud en el gobierno del expresidente Belisario Betancur y uno de los autores de la Ley 100 de 1993, con la que se creó el sistema de seguridad social integral, habló en Mañanas Blu, cuando Colombia está al aire, de los puntos que se conocen de la reforma a la salud propuesta por el Gobierno, en cabeza de Carolina Corcho, jefe de cartera.“Esa experiencia de haber vivido el Sistema Nacional de Salud, en mi época, y ver lo que tenemos, es muy interesante. Tenemos una inmensa preocupación por lo que está ocurriendo y pueda ocurrir. La gente está muy asustada con todo esto, los pacientes no saben a dónde pueden ir, porque no hay claridad", señaló el exfuncionario.De acuerdo con Arias Ramírez, hay 3 millones de pacientes de que su vida depende del sistema. "Eso nos ha llevado a preguntarle a la ministra una serie de cosas. El debate ha sido muy desorganizado, muy ideologizado y politizado”, indicó.Uno de los puntos más polémicos de la reforma que propone el Gobierno de Gustavo Petro es el punto de las EPS y su futuro en Colombia. Arias Ramírez recalcó que es complejo estatizar el sistema de salud y defendió el papel de las Entidades Prestadoras de Salud.“Es un punto central, porque hay EPS buenas y malas. Pero la EPS, gústenos o no, es el centro articulador del sistema. Si desaparecen, el sistema cambia completamente. La EPS cumple la función de aseguramiento de la calidad, la gestión organizativa de la gestión", puntualizó.En su concepto, es muy riesgoso, pues el estado colombiano y los hospitales públicos -resaltó- no saben manejar un sistema tan complejo como el de hoy. "Y ahí hay uno de los puntos fuertes: estatizar el sistema, y no sabe cómo hacerlo. Se trata de reemplazar un sistema que si bien tiene defectos sabe hacerlo, frente a otro que no tiene idea", finalizó.Escuche la entrevista completa:
El escritor, académico y columnista Carlos Caballero Argáez, habló en Mañanas BLU 10:30 sobre la importancia del exministro de Hacienda Roberto Junguito Bonnet quien falleció este domingo. "Fue un gigante como persona y como economista", dijo Caballero sobre el exministro de Hacienda colombiano que dirigió la cartera durante la administración de Belisario Betancur y en el primer periodo del expresidente Álvaro Uribe. "Todo lo hizo bien y maravillosamente", sostuvo el escritor. Según Caballero Argáez, el papel de Junguito a mediados de la década de los 80 fue fundamental, ya que gracias a su labor se logró el equilibrio cambiario y el acceso a reservas internacionales previniendo el déficit fiscal. En concepto del escritor, Junguito también fue clave en el gobierno de Uribe para que se decretara la conmoción interior y se pusiera un impuesto extraordinario al patrimonio para sufragar los gastos de la política de seguridad democrática. Escuche a Carlos Caballero Argáez en entrevista con Mañanas BLU 10:30, cuando Colombia está al aire:
Junguito Bonnet nació en Bogotá el 5 de marzo de 1943. Se graduó como economista de la Universidad de los Andes en 1965 y luego viajó a Estados Unidos donde cuatro años más tarde (1969), se graduó como doctor en economía en la Universidad de Princeton. Hizo varios cursos en la London School of Economics y en la Universidad Libre de Bruselas durante los años 1972-1973 y 1983-1984.Fue ministro de Hacienda y Agricultura en 1982 y 1983, codirector del Banco de la República entre 1991 y 1999, presidente de la Asociación de Exportadores de Café entre 1988 y 1991 y también fue presidente de la Sociedad de Agricultores de Colombia, (SAC), entre 1981 y 1982.Fue director de Fedesarrollo, experto en el tema cafetero, delegado de la Organización Internacional del Café y asesor de la Federación Nacional de Cafeteros, también embajador en Francia y ante la comunidad europea.Su aporte también vino desde los tanques de pensamiento donde pudo hablar, explicar y analizar la teoría económica, pues entre 1974 y 1978, fue director de Fedesarrollo y durante un año (1979-1980) integró la Misión Finanzas Intergubernamentales.A nivel internacional destacó como representante de Colombia ante la Organización Internacional del Café en Londres (1972-1973), embajador ante la comunidad europea (1983-1984), embajador de Colombia en Francia (1986-1987) y como director ejecutivo alterno del FMI en Washington (1999-2002).Entre 1984 y 1985, cuando fue ministro de Hacienda en el gobierno de Belisario Betancur, impulsó el ajuste económico fiscal y cambiario que sacó a Colombia de una de sus peores coyunturas económicas. Lo hizo de una manera transparente y franca, el país lo entendió y aceptó.En 2002 y 2003 fue el ministro de Hacienda en el primer mandado del expresidente Álvaro Uribe Vélez.Hizo parte de la junta del Banco de la República desde su creación en 1991, el esquema constitucional de independencia y su puesta en marcha fue responsabilidad de Junguito Bonnet.En 1995, aunque las relaciones entre la junta y el Gobierno no fueron las mejores, Junguito siempre estuvo en el centro, defendiendo la independencia de la junta y su función principal de controlar la inflación. Se destacaba como uno de los directores con menor figuración pública, sin desconocer en momento alguno el trabajo de sus colegas en el banco.
En la Casa de Nariño, el presidente Iván Duque dedicó un discurso en memoria del expresidente Belisario Betancur, en compañía de su familia y seres queridos. Duque compartió las enseñanzas que le dejó el exmandatario durante su carrera política.“Cuando empecé el camino de la precandidatura presidencial me dijo: “Iván, tenga presente que cuando vengan las bajezas hay que contestarlas con altura”. Sabios consejos de un amigo que extrañamos”, dijo. También recordó el apoyo que recibió del exmandatario cuando se desempeñó como senador de la República del Centro Democrático.Vea aquí: Presidente Duque habló con Juan Guaidó y le ofreció ayuda humanitaria a Venezuela“Siempre recordaré que cuando llegué al Senado me dijo que la oposición era un caviar que se tenía que saber digerir porque, a veces, tenía facilidades para la crítica, pero que muchas veces eran esas mismas críticas las que se podían volver contra uno cuando se llegaba al ejercicio del poder ejecutivo”, agregó.Al homenaje asistieron congresistas de diferentes colectividades como el presidente del Partido Conservador, Hernán Andrade; el senador Efraín Cepeda, el expresidente Andrés Pastrana, el exjefe del equipo negociador del Gobierno con las Farc, Humberto de la Calle, entre otros.
“Viviste 95 años aunque te creímos infinito”, dice uno de los más sentidos apartes de una carta escrita por Paula Gaviria, su nieta, al expresidente Belisario Betancur. Vea también Trasladan féretro de Belisario Betancur al Gimnasio ModernoBetancur, fallecido el pasado viernes a los 95 años, fue despedido el domingo en Bogotá en una ceremonia íntima en la que se le rindieron honores militares y a la que asistió el presidente Iván Duque junto con su gabinete.La carta de Paula Gaviria, repleta de evocaciones y anécdotas, ha tocado las fibras más sensibles de los colombianos que reconocen en Betancur todo un ejemplo de abnegación y entrega por la paz del país. Lea completa la carta de Paula Gaviria:
Con coronas de rosas blancas, flores amarillas y claveles blancos permaneció la entrada de la Academia Colombiana de la Lengua, en el centro de Bogotá, durante las 24 horas de la velación del expresidente Belisario Betancur en ese edificio, hasta donde llegaron diversas personalidades de la política colombiana, desde el presidente Iván Duque hasta el fiscal Néstor Humberto Martínez, que ingresó sobre las 9:30 de la mañana este domingo.Vea también: Las emotivas anécdotas del pintor de Belisario Betancur Momentos antes, el funcionario recordó el gesto que el fallecido exmandatario tuvo con su padre: “La amistad que trabó con mi padre, Humberto Martínez Salcedo, y su presencia en el entierro de él. Hoy venimos a rendirle un testimonio de gratitud y de solidaridad a la familia”. Hacia las 11:00 de la mañana de este mismo domingo se dio el traslado del féretro de Betancur al Gimnasio Moderno, donde se oficia una misa en la capilla los Santos Apóstoles.
Don Román Roncancio, a sus 83 años, cual roble incansable, acompañó durante toda la tarde del sábado el cuerpo sin vida del expresidente Belisario Betancur. Menudo y de sonrisa cuidada, el hombre no soltó de sus manos un paquete con fotografías del siglo pasado. Una de ellas muestra un cuadro que le entregó a Betancur cuando era presidente de la Colombia, junto a la obra, se ve la presencia de don Román, joven pintor, de la secretaría del presidente y de Belisario. Vea también: Decretan duelo nacional de tres días en memoria de Belisario Betancur “Yo llevé un cuadrito que me nació hacerle: es una plaza, en el pueblo, la gente saliendo. Es un pueblo en campaña, salían los campesinos, uno le llevaba un marranito, el otro una canastica de frutas y así. Le entregué ese cuadro en octubre del 83. Casi no pude llevar el cuadro por el tamaño grande”, recordó el pintor, mientras dijo que esperaba seguir pintando hasta que sus ojos aguantaran. De pie y con su boina bien puesta, don Román recitó la carta de agradecimiento que el mismo Belisario Betancur le envió hace años, en época de campaña antes de ser elegido presidente. “Muy estimado Román: Quiero expresarte mi agradecimiento por tu valiosa y especial contribución al donar una de tus bellas obras, con destino a la subasta de cuadros que realizaremos en Uniclub, con el fin de recolectar fondos para mi campaña presidencial como candidato nacional. Mientras tengo la oportunidad de reiterarte mis efusivos agradecimientos personalmente, recibe mi más cordial y afectuoso saludo. Amigo, Belisario Betancur. Abril 17, 1978”.
A través del Decreto 2272 del 7 de diciembre de 2018, firmado por el Presidente Iván Duque y la ministra del Interior, Nancy Patricia Gutiérrez, el Gobierno ordenó que durante el periodo de duelo se izará el Pabellón Nacional a media asta en todos los edificios públicos del país y las embajadas de Colombia en el exterior, entre otras disposiciones orientadas a "rendir justo y merecido homenaje al ilustre colombiano". A través de este Decreto, el Gobierno Nacional manifestó su profundo dolor por el fallecimiento del expresidente Betancur y expresó sus condolencias y solidaridad a la señora Dalia Navarro Palmar y a los hijos del expresidente Beatriz, María Clara y Diego Betancur Álvarez.Vea también: Expresidente Belisario Betancur lideró programas para rescate cultural de Barichara El Gobierno también dispuso que el Ministerio de Defensa Nacional tome las medidas necesarias para que en todas las guarniciones se tributen los honores militares correspondientes en memoria del expresidente Betancur. Además de estas disposiciones, a través del citado Decreto 2272, el Gobierno Nacional destacó la trayectoria del expresidente Betancur como dirigente político, estadista, líder social, intelectual, prolífico escritor, periodista, humanista, poeta y docente. En este sentido, subraya que el expresidente Betancur "fue uno de los líderes del siglo XX" y "su legado está presente en grandes aportes a la educación, economía, política y sociología".
Escuela Taller de Artes y Oficios, es el nombre de la fundación que Dalita Navarro, esposa del fallecido expresidente Belisario Betancur, creó con el apoyo de su esposo para la formación de los habitantes de Barichara y municipios cercanos. Esta fundación, desde el año 2007, se ha dedicado a la formación de jóvenes, adultos, campesinos y madres cabezas de familia en elaboración de objetos artesanales, joyería, talla de piedra, bordado, gastronomía, entre otros oficios. Lea también: Muere un gran estadista que le sirvió a la patria: exministros de Belisario Betancur Líderes, artistas y personas cercanas al exmandatario aseguran que extrañarán al expresidente, quien vivió sus últimos 20 años de vida en este pueblito santandereano, reconocido por sus tradicionales calles empedradas, la tierra de los ‘patiamarillos’.Carlota Zuleta, allegada a la familia, aseguró que Betancur deja un aporte invaluable al desarrollo cultural del municipio y resaltó su impecable forma de actuar.“El hombre más correcto que yo he conocido en la vida, lo vamos a extrañar mucho porque es una persona que hizo mucho por Barichara; Dalita, su esposa, es una mujer muy encantadora, nos ayuda con el taller, una pareja que hizo mucho por esta ciudad”, expresó Zuleta.La puerta del taller permanece con una cinta morada en señal de luto por el fallecimiento de quien fue uno de los impulsores de programas que rescatan el patrimonio cultural de Barichara.