Como satisfactoria calificó el Parque Explora la evolución del Tiburón Bambú que llegó al acuario del parque el pasado 16 de enero. El animal está en custodia temporal y los expertos del lugar confirmaron que es un recién nacido, de una especie en vía de extinción de 31 gramos de peso que mide 17 centímetros.Los profesionales que lo atienden explicaron que terminó su proceso de adaptación después del estrés generado por los traslados.A través de un comunicado el acuario aseguró que sigue en cuarentena, en un espacio privado y que el Ministerio de Medio Ambiente es el encargado de decidir qué va a pasar con el animal y si se puedo o no exhibir para quienes visiten el Parque Explora.
Según Andrea Ramírez, directora de mares y costas del Ministerio de Ambiente, el tiburón bambú fue entregado en una caja de icopor, con oxígeno y todas las condiciones.La funcionaria expresó que el animal fue recibido en el Parque Explora de Medellín donde gozará de los requerimientos específicos como adaptación a luz y alimentación.“No podemos asegurar que este sea el tiburón bambú que estaba en Atlantis Plaza”, manifestó Ramírez.“Estamos esperando que sea más grande para identificar si es hembra o macho. Por ahora no tiene nombre. En la tarde de este martes, funcionarios del Parque Explora adelantarían exámenes”, dijo Andrea Ramírez.De acuerdo con la funcionaria del Ministerio de Ambiente, el Parque Explora mantendrá al tiburón bambú hasta que la investigación entregue un pronunciamiento oficial.
Según el Ministerio de Ambiente, el tiburón bambú, que mide entre 18 y 20 centímetros y nació en el acuario del centro comercial Atlantis de Bogotá, fue entregado en custodia al parque Explora de Medellín, donde permanecerá en depósito hasta que finalice el proceso sancionatorio, a cargo de la Autoridad Nacional de Licencias Ambientales.De acuerdo con el ministro de Ambiente y Desarrollo Sostenible, Luis Gilberto Murillo, para garantizar la vida y el bienestar del tiburón “realizamos su decomiso como medida preventiva mientras culmina el proceso sancionatorio. El espécimen permanecerá en custodia del parque Explora, que cuenta con un acuario para peces marinos y cumple con los requerimientos técnicos para su permanencia”.El tiburón bambú fue entregado hacia el mediodía por organizaciones ambientalistas al Ministerio de Ambiente y a través de un acta de decomiso se ordenó su traslado, con un salvoconducto de movilización expedido por la Secretaría de Ambiente de Bogotá.En los próximos días la ANLA se pronunciará sobre el proceso sancionatorio ambiental y el decomiso definitivo del espécimen.
La bióloga marina e investigadora de la Universidad Jorge Tadeo Lozano Aminta Jáuregui afirmó que existían otras posibilidades antes de tomar la decisión de aplicar la eutanasia a los peces incautados en el centro comercial Atlantis Plaza. “La ley es muy clara. Antes de la eutanasia, también posibilita acciones intermedias como dejar que haya cadena de custodia, posteriormente existen otras opciones como pasarlas a centros especializados”, señaló. La investigadora dijo que no es válido afirmar que las especies estuvieran contaminando la biodiversidad: “Al hacer los recambios de agua, entrar en el alcantarillado y posteriormente al mezclarse el agua dulce con el agua salada, ahí muere toda la condición”. También enfatizó que probablemente los peces podrían provenir de sitios a nivel mundial donde legalmente se cultivan esas especies. “Estas especies que se han producido en sistemas de cultivo, se han manejado de manera controlada, estos peces de pronto pasaron por un periodo de cuarentena y aclimatación”, recalcó. Con respecto al tiburón bambú, que es el único animal que aún se encuentra vivo, dijo que en caso de que lo encuentren, se podrían abordar los protocolos de transporte y devolución a su medio natural.
El personero delegado para asuntos disciplinarios, Helmult Dioney Vallejo Tunjo, ordenó iniciar una investigación preliminar por el caso del sacrificio de los animales incautados en Atlantis Plaza. “La Personería está interesada en que los funcionarios que estuvieron a cargo de este manejo e incautación de los peces expliquen cuál fue el procedimiento que utilizaron y las normas y reglamentos que se tienen para esta clase de procesos”, manifestó. Al ser preguntado sobre si existen sospechas de que los animales se murieron en la incautación y no fueron sacrificados, dijo que eso es lo que van a investigar “porque todo parece indicar que el manejo no fue el adecuado”. “Tendrán la oportunidad procesal para poder determinar si efectivamente se les dio el manejo y el destino el adecuado de estos peces foráneos”, agregó. El personero delegado de Bogotá explicó que no descartan la posibilidad de que los animales hayan muerto durante el procedimiento. “Sí, por supuesto. La Personería de Bogotá está adelantando esto porque existen algunas dudas respecto a estos procedimientos y es necesario que los funcionarios involucrados expliquen cuál fue el procedimiento que manejaron”, comentó Vallejo.