La comunidad de la Comuna 12 de Bucaramanga, especialmente los residentes del prestigioso barrio Cabecera, expresaron su rechazo a la reciente decisión de la Alcaldía de ampliar el horario de funcionamiento de los establecimientos nocturnos hasta las 4 a.m. "Este acuerdo, alcanzado entre la Administración Municipal y la Asociación de Bares y Discotecas del sector, fue aprobado sin la debida consulta a los vecinos, quienes denuncian serios problemas de seguridad y convivencia, manifestó César Niño, miembro de la junta de acción comuna.Señaló que los desórdenes, la intolerancia, el consumo de alcohol y las ventas de estupefacientes en la zona se han vuelto incontrolables. "Los establecimientos no han hecho los ajustes necesarios en materia de insonorización, seguridad ni salidas de emergencia. Los jóvenes salen en estado de alicoramiento, conduciendo vehículos y ocasionando accidentes", afirmó Niño.La Junta Administradora Local insistió en que la Alcaldía debe reforzar el control en el sector, especialmente en aspectos como la seguridad, el cumplimiento de la normativa sobre insonorización de los locales, donde han hecho caso omiso, la correcta recolección de residuos y el consumo y venta de sustancias psicoactivas que ponen en riesgo la seguridad de la comunidad.En rechazo a la medida, la junta de acción comunal hace un llamado al gobierno nacional, para que interceda ante la situación y que ellos sean escuchados.Durante el primer día de la implementación del horario, unos jóvenes en aparente estado de alicoramiento protagonizaron un accidente de tránsito en la carrera 44 con 64, en el sector de Terrazas.Aunque el accidente no dejó víctimas, desde las 3:00 a.m. que ocurrió el incidente hasta las 9:00 a.m. las autoridades de Tránsito, no se habían acercado hasta el lugar, para hacer el respectivo croquis, ni mucho menos mover los vehículos involucrados.La comunidad exige que la Alcaldía de Bucaramanga reevalúe esta decisión y tenga en cuenta el clamor de los residentes de cabecera que por años han soportado temas de inseguridad.
Luego de cinco horas de bloqueos, los representantes de los bares y discotecas levantaron el bloqueo que se registró desde tempranas horas en la sector conocido como la Puerta del Sol, en Bucaramanga, tras alcanzar acuerdos para tener permiso para laboral hasta más de mdrugada durante lo que resta de diciembre.Según Carlos Mosquera, vocero del gremio nocturno, "los acuerdos son un compromiso, en el que se acordó revisar el tema de insonorización de ruidos y la Alcaldía se comprometió a trabajar en el mejoramiento del espacio público".Así mismo, añadió, acordaron con la administración municipal la creación de espacios "para continuar las conversaciones, los cuales incluirán a la comunidad que se opone a la extensión del horario de funcionamiento" confirmó Mosquera.El Secretario del Interior de Bucaramanga, Gildardo Rayo Rincón, destacó que "se lograron unos compromisos de vital importancia que buscan garantizar la tranquilidad y convivencia de la comunidad en este sector".Resaltó, igualmente, que los establecimientos deben encargarse de brindar seguridad en sus negocios, evitando los desordenes por ingesta de licor y demás altercados, que afecten la tranquilidad de los usuarios; a su vez garantizar las normas del espacio público, y evitar aglomeraciones en estos sitios que colindan con los establecimientos De manera paulatina, deberán realizar los respectivos arreglos necesarios para controlar el nivel de sonido en cada establecimiento, evitando los decibeles por fuera del límite. De acuerdo con lo acordado, los establecimientos podrán operar desde las 10:00 de la noche hasta las 4:00 de la mañana, específicamente los días viernes y sábado.Las mesas de diálogo continúan en la medida en que los representantes de establecimientos nocturnos, buscan que la norma del horario se extienda para el próximo año 2025 ya que durante este año el 70 % de los establecimientos han tenido pérdidas económicas, sumado a que 2000 personas han quedado sin empleo, debido al cierre de varios establecimientos.
La Alcaldía de Bucaramanga, mediante el Decreto 0418 del 24 de noviembre de 2024, autorizó la extensión del horario de atención en establecimientos de diversión, como bares, discotecas y tabernas, durante las festividades de fin de año. Así fue confirmado por el secretario de gobierno Gildardo Rayo: "Nosotros respetamos el derecho de la protesta, de la comunidad en el sector de cabecera, pero tenemos que llegar a acuerdos que sean también benéficos para el gremio económico del sector nocturno", indicó el funcionario.Según la medida, estos lugares podrán operar hasta las 4:00 de la mañana en fechas especiales como el 24 y 25 de diciembre, así como el 31 de diciembre de 2024 y 1 de enero de 2025.Rayo, explicó que "esta decisión busca ofrecer mayor flexibilidad al sector nocturno en la ciudad, en beneficio de los establecimientos comerciales que dependen de las celebraciones de fin de año". Sin embargo, también subrayó que, como parte de la medida, los dueños de estos lugares deberán mantener el respeto hacia las comunidades residenciales cercanas, para evitar alteraciones del orden público.La extensión de horarios de rumba podría intensificar los problemas, de riñas, siniestros viales e intolerancia que ha registrado la ciudad en los últimos días, sumado al incremento de los servicios de emergencia, considerando los videos que son publicados por bumangueses , y el rechazado de los habitantes de cabecera, cada vez que aumentan el horario como lo fue en la Feria de Bucaramanga.La coincidencia de estos problemas con el aumento de la actividad nocturna durante las festividades pone en alerta a las autoridades, que deben equilibrar la reactivación del sector comercial con la seguridad y el bienestar de los ciudadanos.La Alcaldía de Bucaramanga, por su parte, asegura que se buscarán acuerdos con los dueños de los establecimientos nocturnos para mitigar el impacto de la medida, sin descuidar las necesidades de la comunidad y el respeto por los horarios de descanso. Sin embargo, los ciudadanos y autoridades locales coinciden en que la vigilancia y el control serán clave para evitar que el disfrute de las fiestas se convierta en un problema de seguridad pública.
Las caravanas por la seguridad que se están adelantando en parques, zonas comerciales y turísticas de Cali, han generado incomodidad entre algunos comerciantes del sector nocturno de la ciudad, quienes aseguran que estos controles interfieren en la llegada de clientes o incluso, ahuyentan a quienes ya se encuentran en los establecimientos.Ese fue el panorama que planteó el presidente de Asobares Valle, Manuel Pineda, quien aseguró que los operativos generaron un impacto negativo durante la celebración de Amor y la Amistad para el sector nocturno, con pérdidas entre el 60% y el 80%. "Es el peor fin de semana de amor y amistad en los últimos diez años, debido a los controles excesivos y a la actitud prepotente que han tenido algunas autoridades frente al comercio nocturno, haciendo los controles casi al frente de los establecimientos, impidiendo el ingreso de la clientela y ahuyentándola hacia el espacio público, en las calles y barrios donde no hay control y aumenta el riesgo de situaciones fatales", aseguró Pineda.Frente a estos cuestionamientos, el alcalde de Cali, Alejandro Eder, se mantiene firme en la realización de estos operativos, asegurando que es la alternativa para recuperar el orden en la ciudad."En general, la ciudadanía está contenta con los controles. No podemos seguir viviendo en la anarquía en que vivíamos porque en esta anarquía hay más inseguridad para todos, es más fácil que los bandidos, los ladrones, los sicarios se puedan esconder entre el desorden, hay más accidentalidad y menos oportunidades de convivencia, entonces seguiremos trabajando", señaló el mandatario caleño.Las autoridades han señalado que las caravanas por la seguridad no se van a frenar, mucho menos de cara a la COP16, pues lo que se busca es reforzar la presencia institucional en las calles de Cali y frenar así la delincuencia antes, durante y después de esta cumbre mundial.
Inconformes se encuentran empresarios y trabajadores del gremio de bares, gastrobares y restaurantes de Cali, luego de evidenciar que este fin de semana de Amor y Amistad, las ventas no superaron sus expectativas. Según la Asociación de Bares de Cali, se ha registrado una disminución de un 60 %, por lo que son millonarias las pérdidas para el sector.De acuerdo con Manuel Pineda, presidente de Asobares, los excesivos controles por parte de la fuerza pública en los lugares de alta afluencia y de presencia de establecimientos de comercio, sería una de las causas de la disminución de las ventas en la ciudad de Cali."Ha sido el peor fin de semana que ha tenido el sector de entretenimiento y gastronomía en los últimos 10 años de la celebración del Amor y la Amistad. Nos han bajado muchísimo las ventas, en algunos el 60 % y en otros hasta el 80 %, por cuenta de los controles excesivos y la actitud prepotente que han tenido algunas autoridades. Vamos a tener una reunión en los próximos días", dijo Pineda.Igualmente, indico que los constantes operativos realizados en lugares públicos y locales comerciales, han ocasionado que los clientes prefieran trasladarse hacia otros espacios donde no se sientan perseguidos por las autoridades."Han hecho los operativos en frente de la puerta de los establecimientos, casi que impidiendo el acceso de la clientela y ahuyentándola hacia el espacio público, por eso es que los vemos en las calles, en los barrios, donde no hay ningún tipo de control y donde se pueden presentar con mayor facilidad riñas y todo tipo de situaciones", expresó el presidente de Asobares.Ante esta denuncia, desde la Alcaldía municipal señalaron que estos operativos se hacen para garantizar la seguridad de los ciudadanos, y con el propósito de recuperar el control en las principales vías y espacios públicos de Cali."Hicimos actividades de control, no hubo ninguna suspensión de actividad, por el contrario, encontramos establecimientos que cumplen con las normas y su documentación y esto garantiza un excelente servicio hacia los ciudadanos. Los invitamos que sigan cumpliendo con la normatividad que no le teman a las actividades de control, que esto lo que busca es que los ciudadanos puedan disfrutar del mejor servicio y la mejor oferta de la ciudad para sus noches”, Javier Garcés, subsecretario de Inspección, Vigilancia y Control de Cali.Finalmente, desde el sector manifestaron con preocupación que por estos controles y las bajas ventas han tenido que hacer recorte de su personal, ya que aproximadamente 350 negocios en los últimos días tuvieron que cerrar sus puertas por la falta de ingresos.
Con una marcha los habitantes de los barrios Cabecera, Sotomayor y El Prado, marcharon por las vías de la Comuna 12 de Bucaramanga para rechazar la ola de inseguridad y el caos que tienen que vivir todas las noches en la zona de bares conocida como 'Cuadra Play'."Estamos desesperados por el ruido, los escándalos de borrachos y las riñas que a diario se presentan en 'Cuadra Play'. La decisión de la alcaldía de ampliar el horario de servicio de las discotecas hasta las 4 de la mañana por la Feria Bonita, es una ofensa contra la comunidad", afirmó un residente del sector que participó en la manifestación.El presidente del Comité de Seguridad de Cabecera, César Niño, afirmó a Blu Radio que la comunidad protestó por el inconformismo que existe con el alcalde Jaime Andrés Beltrán."Comerciantes y residentes de la Comuna 13, especialmente del barrio Cabecera, nos cansamos de que la alcaldía no escuche las voces que piden una intercesión integral en 'Cuadra Play'", dijo el dirigente comunal.Para el líder comunal la situación se está saliendo de control. “Las riñas y los problemas se han intensificado todas las noches. Los residentes han grabado videos que dan cuenta de los desórdenes que ocurren en las salidas de los establecimientos nocturnos”, señaló.Además del tema de la violencia, Niño señaló que el ruido es otro de los principales problemas que afecta a la comunidad.“La gente no puede dormir. La alcaldía tiene unos medidores de ruido que adquirió hace más de cuatro meses, pero aún no los ponen en funcionamiento. Si los utilizaran, se darían cuenta de lo grave que es”, indicó.El problema de 'Cuadra Play' se extiende por todo el sector desde el parque San Pío hasta la calle 52 y desde la carrera 31 hasta la 36. Incluso, el ruido llega a afectar a la zona hotelera.Durante la marcha, los participantes rechazaron la ineficacia de las autoridades locales para abordar el problema, señalando que la responsabilidad recae en la administración municipal de Jaime Andrés Beltrán.
La Copa América trajo consigo alegrías para los hinchas, pero sobre todo, para los comerciantes, quienes lograron aumentar sus ventas durante el mes de julio, gracias al evento deportivo.Uno de los sectores que más se benefició fue el del entretenimiento, especialmente bares, gastrobares y restaurantes, de acuerdo con Asobares los comercios de este sector tuvieron un aforo de entre 130 % y 150 %, lo que significó un aumento en sus ventas.Para Camilo Ospina, presidente de este gremio, el torneo continental permitió que los empresarios aumentaran sus ventas y a su vez generan nuevos empleos para satisfacer la demanda de los clientes.Por otra parte, la Federación Nacional de Comerciantes (Fenalco), reportó que el sector de entretenimiento creció un 60 % comparado con el año 2023 y que las ventas de los tenderos en el país crecieron un 40 %.Los gremios afirmaron que esperan poder seguir trabajando de la mano con las entidades del orden local y nacional para generar alianzas que permitan el crecimiento del sector.
La campaña nacional para el control de las colillas de cigarrillos llega a la capital antioqueña. “Medellín No es un Cenicero” es una estrategia de concientización mediante la cual se instalarán colilleros masivos en puntos críticos de la ciudad.Se trata de una campaña impulsada desde la Secretaría de Cultura de Medellín, Asobares y Fenalco Antioquia, mediante la cual se pretende generar conciencia en la ciudad sobre la disposición de las colillas de cigarrillo.Uno de los sectores donde se implementará la estrategia es el corredor de la 70 donde se identificó como un punto crítico de la ciudad, pues solo en un año se arrojan más de 100 mil colillas en esta zona. Serán 30 colilleros masivos y 10 interactivos donde también se desarrollarán campañas de sensibilización. Así lo explicó, Sindy Pereyra directora de No más Colillas Colombia. "Nosotros vamos a educar a la ciudadanía, vamos a buscar lugares donde se arrojen muchas colillas y vamos a educar a toda la gente alrededor. Ciudadanos, dueños de bares, políticos. Todas las personas que estén alrededor las vamos a educar durante un tiempo y vamos a instalar colilleros en toda la zona", dijo.Finalmente, recalcó que una sola colilla puede contaminar más de 50 litros de agua y una zona verde con presencia de colillas crece 30 % menos de lo que lo haría en condiciones normales.Si bien son varias campañas a nivel nacional, Medellín será la primera ciudad en que la totalidad de las colillas recolectadas serán recicladas, para garantizar que sea un proceso circular.
Tal y como ocurrió con la Plaza Botero a inicios de este año, la administración desmontó las vallas del cerramiento al parque Lleras, que controlaban el ingreso de los visitantes y desde hace más de un año marcaron restricciones para el ingreso vehicular.Pese a la oferta de prostitución y drogas que se ha evidenciado en inmediaciones de este emblemático sitio de Medellín, la eliminación de las vallas busca que este espacio vuelva a ser seguro y que las personas que visiten el parque ya no tengan ninguna barrera física que impida su acceso, lo que facilitará una mayor afluencia de visitantes tanto locales como extranjeros.La decisión fue celebrada por los dueños de bares y restaurantes del sector, que ante la medida implementada en mayo de 2023, reportaron disminución del 40 % de sus ventas durante el cierre, en especial, de los establecimientos ubicados en la parte trasera del parque, ya que esto impedía la llegada de los visitantes en vehículo hasta el sitio, lo que se sumaba a los pocos parqueaderos en la zona y la falta de celdas de estacionamiento regulado. Lo que sí indicaron representa unas mejores condiciones de seguridad es la presencia de las autoridades en los controles peatonales y los policías asignados al parque. Juan Pablo Valenzuela, presidente de Asobares en Antioquia."Tenía una dificultad económica para el empresario y antes de que pasara todo este tema de la restricción de horario, de lo del Hotel Gotham y todo eso, ya veníamos haciendo la solicitud para que ya se abriera, y por eso celebramos que ya cinco meses después de que la petición haya sido tenida en cuenta", detalló Valenzuela.Ante la posible disminución de policías en el sitio, los comerciantes se preparan para buscar refuerzo con la seguridad privada, como ya se ha hecho en sectores como Provenza.Para mejorar este espacio, la alcaldía informó que está implementando medidas adicionales, como el aumento de la presencia policial, la mejora del alumbrado público y la rehabilitación de áreas verdes y espacios públicos. A su vez, el secretario de Seguridad Manuel Villa confirmó que la presencia policial se mantendrá.Comerciantes del parque Lleras en Medellín protestaron por reducción en horarios de cierre"Con estas medidas estamos permitiendo que haya nuevas dinámicas de apropiación de ese espacio que había sido cooptado por dinámicas irregulares e ilegales. La presencia de las autoridades se mantiene, la oferta social de la Alcaldía se mantiene, ahora todo acompañado con una agenda de contenidos debidamente planeados", agregó Villa.El cerramiento en este sitio de El Poblado fue parte de la estrategia “El abrazo al parque Lleras”, que durante la alcaldía de Daniel Quintero se implementó buscando bajar los índices de criminalidad, en cuanto al tráfico de drogas y la explotación sexual y comercial de niños, niñas y adolescentes.
A raíz de los casos de explotación sexual de niños y niñas que se han registrado en Medellín recientemente, en varios sectores de El Poblado se instalaron carteles con fuertes mensajes que rechazan la presencia de extranjeros, lo que ha generado polémica en la capital antioqueña.Los carteles tienen mensajes como “tocar a las niñas te hace un violador”, "sin clientes no hay trata", "consumo protegido o gringo protegido, no llames turismo a tu pedofilia" o “no gringos” instalados en postes y paredes en cercanías al Parque de El Poblado y en el Parque Lleras. Al parecer muchos de ellos fueron instalados en medio de las protestas y reacciones al caso de Timoty Alan Livingston en abril, pero el pasado martes tres personas volvieron a pegar nuevos carteles, según confirmaron comerciantes de la zona.Los hechos han generado rechazo y preocupación del sector del comercio, que reiteraron que ya vienen adelantando acciones, campañas y actividades en contra de este flagelo y que decir esto puede llegar a ser xenofóbico, además de que generaliza."No podemos caer en la estigmatización. El turismo mayoritariamente trae cosas muy positivas, por eso rechazamos este tipo de manifestaciones y consideraríamos que deberían articularse mejor con esos mensajes y esas estrategias de comunicación que con la administración distrital hemos tenido", detalló Juan Pablo Valenzuela, presidente de Asobares en Antioquia.A su turno, algunos ciudadanos y comerciantes consultados sobre estos carteles indicaron que todo esto es consecuencia de los recientes casos en los que extranjeros son encontrados en exóticas fiestas, llenas de excesos, casos de explotación sexual y algunos hasta muertos, pero que no está bien generalizar."Bueno, eso cierra muchas cosas, pero está bien que vienen muchos extranjeros a hacer cosas malas al país. Por ejemplo, explotación sexual con menores de edad. Eso no debe ser permitido ni aquí, ni en ningún país del mundo", dijo un ciudadano. "El tipo de personas que vienen, que es más el tema de consumir, de otro tipo de actividades, y eso sí es lo que está dañando acá el tema acá en El Poblado", agregó un comerciante de uno de los puntos de los carteles. "Pues la verdad no me parece, pues como lo acorde, porque eso hace parte como una discriminación", dijo a su turno otro ciudadano que transitaba por la zona.Personería de Medellín pide regular fiestas de extranjeros en El PobladoDesde la Secretaría de Seguridad de Medellín indicaron que aunque las vías de hecho no son la solución, esto ocurre por la indignación que ha generado en la ciudadanía esta problemática. "No estamos de acuerdo de eso, no es la forma, pero son reacciones o explosiones también de rechazo que la misma comunidad está haciendo frente a lo que está pasando. ¿Qué pasa? Nosotros pusimos el dedo en la yaga, tocamos un lugar y un tema que había pasado de agache", dijo el secretario Manuel Villa. Por estos días, se conoció que algunos comerciantes retiraron carteles de los postes que hacían alusión a servicios sexuales. Ante esta nueva situación, al parecer, ante la preocupación que puede generar para los visitantes estos mensajes, también los estarían retirando ellos mismos.