Según cifras del Dane y Analdex, los números de exportaciones hacia los Estados Unidos aumentaron un 7,6 % y las importaciones un 2 % de enero a noviembre del 2024. Hay preocupación en el sector, ya que con la renegociación del TLC, no se han invitado a las empresas privadas a estas reuniones.“Entendemos que hay una voluntad de querer nivelar la cancha, pero ojalá no sea en detrimento de otros aspectos en los cuales hemos ganado terreno”. Afirmó Javier Díaz, presidente de Analdex.Por otro lado, desde Analdex afirman que en el primer mandante de Donald Trump no hubo afectaciones para las exportaciones colombianas, pero aseguran que habrá monitoreo constante para conocer de primera mano si hay afectaciones con los nuevos aranceles.Sin embargo, hay preocupación por la relación comercial de Estados Unidos con otros países como China.“Los nuevos aranceles podrían generar un encarecimiento de productos básicos en Estados Unidos, incluyendo alimentos, automóviles y dispositivos electrónicos, impactando directamente a los consumidores estadounidenses. Además, estas medidas amenazan con tensar las relaciones comerciales y diplomáticas entre Estados Unidos y sus principales socios comerciales”, afirma Analdex.Entre tanto, desde el sector, afirman que Colombia debe actualizar la infraestructura aduanera, vial y de transporte, optimizando su cadena de suministro para lograr atraer inversiones extranjeras.
Desde la reapertura de las relaciones comerciales entre Colombia y Venezuela, la balanza económica ha mostrado signos de recuperación, aunque con retos importantes. Javier Díaz, presidente de la Asociación Nacional de Exportadores (Analdex), explicó en entrevista con Sala de Prensa que, aunque las cifras reflejan avances, persisten incertidumbres relacionadas con sanciones internacionales, infraestructura fronteriza y la situación económica del vecino país.El comercio bilateral experimentó un impulso tras la reapertura de la frontera. Según Díaz, en 2024 las exportaciones colombianas hacia Venezuela alcanzaron aproximadamente 885 millones de dólares hasta noviembre, una cifra alentadora si se compara con los escasos 150 millones reportados durante el cierre de fronteras. Sin embargo, esta cifra está lejos de los más de 6.000 millones de dólares registrados en 2008, cuando Venezuela era un importante socio comercial.“En el pasado, Venezuela tenía una economía robusta que hoy es apenas el 25 % de lo que fue en 2008. Su capacidad de compra se ha desplomado, y esto impacta directamente nuestras exportaciones”, comentó Díaz.La mayoría de los productos exportados por Colombia corresponden a bienes de primera necesidad, como alimentos, medicamentos y productos de aseo. Según el presidente de Analdex, Colombia continúa siendo la "tienda de la esquina" de Venezuela, proveyendo lo que su debilitada economía no puede producir.“Si Venezuela necesita aprovisionarse, recurrirá a Colombia. Eso ocurre porque sus opciones son limitadas y nosotros tenemos una ventaja logística evidente”, afirmó Díaz, quien comparó la relación comercial con la dinámica de abastecimiento de una tienda vecinal.El panorama comercial está condicionado por factores externos, como las sanciones internacionales impuestas al régimen de Nicolás Maduro. Restricciones como el sistema SWIFT, que dificulta las transferencias bancarias internacionales, han obligado a los exportadores colombianos a recurrir a bancos en terceros países.“Hoy dependemos de cómo la comunidad internacional maneje las sanciones. Esto afecta desde los pagos hasta la formalización de las transacciones. Aunque las cifras oficiales de comercio son alentadoras, muchas operaciones se trasladan a la informalidad, cruzando por trochas y fuera del marco legal”, detalló Díaz.A pesar de los avances logrados, los exportadores enfrentan una incertidumbre constante. El sistema actual, que muchas veces exige pagos anticipados debido a los riesgos financieros, refleja una falta de confianza en el entorno económico venezolano.“La deuda histórica de Venezuela con los empresarios colombianos ya fue saldada en su mayoría. Sin embargo, hoy nadie corre riesgos: las exportaciones funcionan bajo la premisa de pago anticipado”, aseguró Díaz, destacando la cautela de los comerciantes.Para 2025, Analdex prevé que las exportaciones hacia Venezuela rondarán entre los 800 y 900 millones de dólares, dependiendo de la evolución de las sanciones y del comportamiento del mercado informal.El comercio con Venezuela, aunque crucial para ciertas regiones de Colombia, sigue siendo vulnerable a factores externos e internos. La volatilidad política y económica en el vecino país, junto con las restricciones internacionales, obliga a los exportadores a adaptarse constantemente.
Con la publicación para comentarios del proyecto que busca eliminar el valor del 5 % del arancel sobre las importaciones de los vehículos híbridos para subirla al 35 %, no solo afectaría los precios de los carros en Colombia, sino que los consumidores preferirán comprar o mantener los vehículos a combustión. Según el Gobierno nacional, los vehículos híbridos no están aportando al recaudo nacional.Desde Analdex afirman que el aumento de los precios provocará el aumento en la compra de vehículos que consumen combustibles fósiles, pero que esa decisión no compadece con la política de transición energética que el Gobierno ha presentado."Creo que la decisión del Gobierno nacional de incrementar el arancel para la importación de vehículos híbridos no se compadece con la política de transición energética que el mismo Gobierno ha planteado. Indudable que los aranceles que ahora se le imponen a los vehículos híbridos harán que estos sean mucho más costosos, desestimulando la compra por parte de los consumidores que buscarán nuevamente los vehículos de combustión porque ahora el arancel es indiferente para uno u otro vehículo", afirma Javier Díaz, presidente de Analdex.Cabe recordar que el proyecto, por ahora, permanece para comentarios hasta la primera semana de noviembre. Sin embargo, según cifras entregadas por Fenalco, la venta de vehículos ha tenido una desaceleración del 6 % a comparación del 2023. Por otro lado, se destaca la venta de vehículos de cero emisiones, que, según Fenalco, en junio las cifras de venta fueron positivas con el 48 % en aumento de ventas.
La presidenta de Cerrejón, Claudia Bejarano, también mostró su inconformismo frente al decreto que prohíbe las exportaciones a Israel, por cuanto consideró que es una decisión que "impacta los ingresos de la Nación y de las empresas", cifra que se ha calculado en 650.000 millones de pesos a nivel nacional.Bejarano sostuvo que las empresas privadas deben tener "la libertad y la apertura de poder exportar" a donde ellas consideren, a esos mercados donde tengan la certeza de que les va a comprar su carbón y que les va a generar ingresos."Desafortunado el decreto que limita las exportaciones a un país como Israel (...) Ahora, el hecho de que nosotros no exportemos, no quiere decir que Israel va a dejar de comprarle a otro. Realmente, aquí quien pierde no es Israel, perdemos los mineros de carbón colombianos", dijo.Desde Barranquilla, el presidente ejecutivo de Analdex, Javier Díaz, también se sumó a los cuestionamientos por este controversial decreto del Gobierno Nacional.El ejecutivo sostuvo que dicho decreto que entró en vigencia este 22 de agosto "no está invocado con consideraciones comerciales, sino morales", lo cual no está establecido en la Ley de comercio exterior definida por el Congreso. Según él, esto será suficiente para que la medida sea derogada."El Gobierno, por consideraciones morales, no puede hacer lo que está haciendo y muy seguramente ese decreto se va a caer, pero ya creó el daño, creó la incertidumbre", dijo."Creo que innecesariamente estamos recibiendo señales que son contradictorias, cuando lo que se requiere es aumentar las exportaciones", añadió.El presidente de Analdex cuestionó, a su vez, "por qué la medida no se toma con países como Venezuela, Nicaragua o Cuba, donde también hay represión".
Luego de que el presidente Gustavo Petro anunciara que no exportará más carbón a Israel, la Asociación Nacional de Comercio Exterior aseguró que esta decisión no cumple un mandato constitucional y cruza “líneas rojas” pues, según el gremio, esta medida viola la Constitución Política y el Plan Nacional de Desarrollo.“Esta medida viola la Constitución Nacional porque el ejecutivo no puede hacer este tipo de prohibiciones por razones morales, lo puede hacer por razones o consideraciones de política comercial”, aseguró Javier Díaz, presidente de Analdex.“Colombia suspenderá exportación de carbón a Israel hasta que detenga el genocidio”: PetroSegún el dirigente gremial, en este caso, el Congreso de la República tendrá que intervenir en esta medida, pues viola los contratos privados que se tienen con las empresas mineras y el Tratado de Libre Comercio que se tiene con el país de medio oriente.Colombia e Israel tienen un Tratado de Libre Comercio vigente desde el 2020. Además, y siendo un dato no menor, el país exportó el año pasado unos tres millones de toneladas a Israel, lo que representó un 5,4% de las ventas externas totales. Incluso, es el quinto exportador de carbón a nivel mundial.El gremio finalmente asegura que este decreto resulta inconveniente desde el punto de vista jurídico y desde el punto de vista comercial para ambos países.
La decisión del presidente Gustavo Petro de suspender relaciones diplomáticas con Israel ha generado múltiples reacciones, en su mayoría en contra, teniendo en cuenta los convenios comerciales que hay entre ambos países.Javier Díaz, presidente de Analdex, la Asociación Nacional de Comercio Exterior, aseguró que este anuncio no ayuda en nada a solucionar el conflicto en Gaza, pero sí pone en riesgo a Colombia en términos comerciales y de seguridad.“Nuestro país vendió el año pasado algo más de 1.000 millones de dólares en carbón, esmeraldas, café, flores, confites, galletas, manufacturas de papel. (...) Igualmente preocupa el tema de seguridad. Dependemos de Israel, del Estado de Israel para muchos temas de seguridad, de armamento, de comunicaciones. Entonces nos preocupa lo que pueda ocurrir en este campo”, detalló Díaz.Hamás califica como "victoria" la ruptura de relaciones de Colombia con IsraelEl líder gremial instó a la Cancillería a intentar mediar para que este anuncio no se concrete y se protejan así los convenios comerciales.Otras reaccionesMás temprano, Jaime Alberto Cabal, presidente de Fenalco, calificó la decisión como populista y sesgada políticamente. El vocero de los comerciantes se sumó a esa preocupación para el sector y la seguridad del país.“Los grandes sectores perjudicados serán las Fuerzas Armadas, que reciben repuestos, mantenimiento y apoyo de este país. También se verán afectados sectores como la agroindustria, la tecnología, emprendimientos y transferencia de conocimiento, donde históricamente Israel ha sido aliado”, agregó.
El choque este martes de un portacontenedores contra el puente Francis Scott Key de Baltimore provocó el derrumbe total de esa estructura que cruza el río Patapsco y deja hasta el momento seis personas desaparecidas, en cuya búsqueda están implicados agentes federales, estatales y locales.El suceso tuvo lugar hacia la 1:30 hora local. El carguero Dali perdió propulsión, según los primeros indicios, y se acabó quedando encastrado contra el puente, levantado en 1977, por el que cruzan unos 35.000 vehículos al día y que saltó a la fama en el pasado como escenario de la serie 'The Wire'.El presidente de Analdex, Javier Díaz, habló en Mañanas Blu sobre la caída del puente de Baltimore en EE. UU. y las consecuencias financieras para el mercado colombiano, teniendo en cuenta las exportaciones nacionales.."Hay que mirar qué otros puertos de la parte este de Estados Unidos podrían servir de alternativas. Las exportaciones que se dirigen a EE.UU e ingresan por el puerto de Baltimore ascienden la suma de 138.800 en el último año", mencionó.Diaz comentó que las exportaciones colombianas que pasan por el Puerto de Baltimore ascienden a 138,800 toneladas anuales. Estas exportaciones incluyen principalmente manufacturas de asfalto (37%), seguidas de comida para bebés, café, pulpa de mango, resmas de papel, ferro níquel, confitería y baldosas. Sin embargo, Diaz menciona que el carbón colombiano no ingresa por el Puerto de Baltimore.Ante la caída del puente, Diaz señala que se deben buscar alternativas y cambiar la logística para ingresar al mercado de Estados Unidos. Aunque aún no se tienen detalles específicos, cada empresa deberá hacer su propio análisis y ver qué frecuencias y puertos se pueden utilizar desde Colombia. Además, Diaz menciona que también se debe considerar cómo se podrían movilizar estas exportaciones internamente en Estados Unidos, ya sea por tren o camión.Es importante destacar que las exportaciones colombianas hacia Estados Unidos representan entre el 25% y 30% del total de las exportaciones del país. El Puerto de Miami es el principal puerto de ingreso de nuestros productos a Estados Unidos. Sin embargo, ante la interrupción en el transporte debido a la caída del puente en Baltimore, es necesario analizar si el Puerto de Miami tiene la capacidad suficiente para albergar todas las exportaciones que ahora deben ingresar por la Costa Este de Estados Unidos. También se deben considerar otros puertos en la región que podrían ser alternativas viables."Es decir, la responsabilidad del exportador es poner la mercancía, por ejemplo, en el puerto de Cartagena, al costado del buque, y de ahí en adelante el importador es quien tiene los contratos de transporte con las navieras. Entonces, en muchos casos ni siquiera la empresa colombiana es quien maneja esto, son los importadores que compran en Colombia y ellos manejan los contratos de transporte y toca mirar con los compradores cuáles son las alternativas", dijo.En cuanto a posibles impactos económicos, Diaz comenta que se están evaluando los costos logísticos y los efectos en los fletes. Actualmente, se ha sentido un aumento en los costos debido a problemas logísticos en el Canal de Suez y la sequía en el Canal de Panamá. Aunque aún es temprano para determinar el impacto exacto, se espera que la interrupción en el transporte de mercancías tenga consecuencias en el costo de vida y la inflación mundial, incluyendo la inflación en Colombia.Finalmente, se concluyó que el accidente del puente en Baltimore tendrá repercusiones en la economía colombiana, especialmente en las exportaciones hacia Estados Unidos. Es necesario buscar alternativas y adaptar la logística para superar esta situación y seguir manteniendo nuestra relación comercial con nuestro principal socio comercial.Escuche la entrevista completa:
Hay algunos que podrían pensar que el conflicto en Medio Oriente está muy lejos de Colombia y que no afectaría al país por la distancia. Esos pedidos que usuarios hacen por plataformas como Amazon, Aliexpress o Shein le puede costar más y demorarse más en llegar.Desde la Asociación Nacional de Comercio Exterior lanzan una alerta afirmando que el conflicto en el mar Rojo, por cuenta de los ataques de Hutíes a embarcaciones internacionales y los bombardeos de Estados Unidos y Reino Unido en el estrecho de Bab el-Mandeb, que comunica con el Canal de Suez, pueden afectar esta ruta que representa hasta el 15% del tránsito mundial. A esto se suma también la sequía del Canal de Panamá, la cual podría ser otro dolor de cabeza para los consumidores al hacer subir los precios de los productos y demoras en las cadenas de suministro."La afectación puede ser grande en materia del comercio exterior, particularmente, en las importaciones. No solo los fletes se han incrementado, las navieras les toca dar una vuelta muy grande para no surcar el mar Rojo. Eso toma más días, más combustibles, eso altera las frecuencias y la dificultad para los barcos. Los fletes empezaron a subir hace unos días y ya llevan un 85% de aumento", indicó Javier Díaz, presidente de Analdex.Sequía en Canal de Panamá"El canal de Panamá, la sequía que se está presentando, ha llevado a que se tenga que disminuir el número de barcos que pasan por él, entonces, lo tiempos e espera son muy largo y muchas navieras han optado por no cruzar el canal y usar ferrocarriles. Todo esto termina afectando de manera negativa la importación", afirmó. Afectación en los precios en el mercado colombianoPese a que por el Canal de Panamá no pasan muchos buques colombianos, el país está sufriendo en temas del precio en el mercado."Todo esto termina impactando negativamente a Colombia en materia de precios de productos como el frijol, la lenteja, la harina de trigo. Todo eso es importado y tarde o temprano sentiremos las consecuencias", aseveró.Escuche la entrevista completa aquí:
En plena temporada de Navidad y Año Nuevo los importadores colombianos han perdido unos dos billones de pesos por culpa de las fallas en los sistemas informáticos de la Dian, según Analdex.Los problemas se originan concretamente en el módulo de importaciones. Según las compañías no salen los recibos de pagos, se duplican las operaciones sin ninguna razón, y cuando van a arreglar la información aparece que sí quedó bien la información pero reaparecen los errores una y otra vez. Eso sin mencionar que hay momentos, como hoy, en que la página se cae y simplemente no se puede entrar.Como resultado hay represamiento en la importación de mercancía y las compañías terminan pagando bodegas e incluso otros costos logísticos que no son los usuales a un costo de 50 mil millones de pesos diarios según Analdex.“No hay fecha, no nos dicen nada de cuándo se puede arreglar el sistema. La mayor preocupación es que si la Dian no ha podido arreglar el sistema con esta falla, ¿cómo pretenden desarrollar sus ingenieros un nuevo sistema?”, dijo el presidente de Analdex Javier Diaz.La preocupación es que esto puede impactar a varios sectores de la economía. Una buena parte de las importaciones no son productos terminados, sino materias primas, insumos o maquinaria para industriales y otros empresarios colombianos que en algunos casos también son exportadores.Le puede interesar:
Javier Díaz, el presidente de los exportadores de Colombia, se pronunció sobre la reciente tensión diplomática entre Colombia e Israel en una entrevista realizada en Mañanas Blu, con Néstor Morales. Díaz, quien ha estado siguiendo de cerca este asunto, destacó la importancia de mantener el relacionamiento comercial entre ambos países a pesar de las dificultades diplomáticas.El presidente de Analdex señaló que, a su parecer, la suspensión de relaciones diplomáticas no debería afectar las relaciones comerciales. Hizo referencia a la experiencia con Venezuela, donde la ruptura de relaciones ha tenido un impacto negativo en la comunicación y el comercio entre ambos países. "Yo creo que sería un error lo que pasó con Venezuela. Terminamos rompiendo relaciones y cerrando todo canal de comunicación con el vecino país. Y hoy nos damos cuenta que es un error. Uno puede cerrar totalmente las relaciones. Uno tiene que mantener un relacionamiento con sus socios, tanto comerciales como diplomáticos. Entonces yo esperaría que la prudencia prime en esto y no se pongan en riesgo el comercio", puntualizó.En el caso específico de Colombia e Israel, Díaz resaltó que Colombia exporta una variedad de productos a Israel, incluyendo carbón, flores, productos químicos y café. Estos productos representan una parte importante de las exportaciones colombianas y, en términos de balanza comercial, Colombia vende más a Israel de lo que compra. La balanza comercial entre ambos países es positiva para Colombia.“Nosotros le vendemos alrededor de 1.000 millones de la economía colombiana. Es decir, el balance positivo para Colombia es de alrededor de 800 millones de dólares. (…) Como parte del total de exportaciones, pues es una cifra pequeña, nosotros exportamos alrededor de 70.000 millones y estaríamos perdiendo ventas por 1.000 millones de cerrar totalmente el relacionamiento comercial. Lo que pasa es que cuando uno lo mira en términos de empleo o de las empresas individualmente consideradas, pues para muchas empresas este es un mercado muy importante”, precisó.Díaz también destacó que, en comparación con el total de las exportaciones colombianas, las ventas a Israel representan una cifra relativamente pequeña. Sin embargo, subrayó que estos sectores, como el de las flores y el café, son intensivos en mano de obra, lo que podría afectar el empleo en esas áreas si se interrumpe el comercio.Respecto a la posibilidad de arbitraje en asuntos internacionales, Díaz aclaró que los tratados de libre comercio son acuerdos internacionales que continúan siendo válidos incluso si no hay relaciones diplomáticas entre los países involucrados. La denuncia de un acuerdo internacional debe seguir un proceso específico, como se vio en el caso de Venezuela.Finalmente, Díaz expresó su optimismo en cuanto a la posibilidad de reparar la relación entre Colombia e Israel desde el punto de vista económico y comercial. Hizo hincapié en la importancia de la prudencia en el ámbito diplomático y la tradición de Colombia en ese sentido. Además, destacó que más allá de las exportaciones, están en juego principios de condena a la violencia y al terrorismo, lo que podría ser un factor unificador en esta situación.