La Corporación MilVictimas, que representa ante la JEP a civiles y militares víctimas directas e indirectas del conflicto armado colombiano, pidió al Gobierno nacional que, en medio de los proceso de diálogo que se adelantan con diferentes grupos armados, les exija que dejen de utilizar artefactos explosivos -como las minas antipersona- como una condición para hacer parte de la denominada paz total.
"Pedimos que, como condición para avanzar con el proceso de paz total en nuestro país, grupos armados organizados se comprometan con el cese del uso de armas indiscriminadas, tales como minas antipersona y artefactos explosivos improvisados, que han dejado al principio de este año más de 20 víctimas, siete de ellas miembros de la fuerza pública, en una grave infracción al Derecho Internacional Humanitario (DIH), que no distingue y pone en peligro a la población civil y al mismo tiempo causa daños innecesarios en las víctimas", se lee en un comunicado.
En el mismo sentido, aseguran que el Gobierno debe prohibir, controlar y eliminar estas armas, pero además, exigen que se garantice la protección de las víctimas y su acceso a la justicia, con el objetivo de lograr medidas de reparación para quienes se han visto afectados.
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"Pedimos un compromiso más firme y vehemente en el marco de la protección de líderes de derechos humanos y representantes de víctimas en los territorios y hacemos un llamado a la solidaridad y apoyo de la comunidad internacional en esta importante cruzada. Como Corporación MilVíctimas invitamos a la unión en torno a la defensa de los derechos humanos y el DIH", añaden en el comunicado.
La Corporación MilVíctimas representa ante la JEP a civiles y militares víctimas directas e indirectas del conflicto armado colombiano, algunas de ellas sufrieron las consecuencias de los artefactos explosivos, como las minas antipersona, que utilizaron y siguen utilizando los grupos armados en diferentes zonas del país, como una acción para lograr control territorial. Según datos del Gobierno, en lo corrido del año el uso de estos artefactos explosivos ya deja más de 20 víctimas, 7 de ellas miembros de la fuerza pública.
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