A escaso un día de que sea puesto en funcionamiento el nuevo puente Pumarejo, el alcalde Alejandro Char llamó la atención en cuánto se requiere ampliar la vía Ciénaga-Barranquilla en la que desemboca esta megaestructura.
Precisamente por su dimensión, que abarca tres carriles por sentido, el mandatario recordó que urge buscarle una solución a la estrecha vía, la cual solo
tiene dos carriles y podría convertirse en un ‘cuello de botella’ en la movilidad.
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El mandatario barranquillero también insistió en la necesidad de tumbar, por lo menos, un tramo de la vieja estructura y convertir lo demás en un atractivo turístico.
Lo anterior, en aras de garantizar la navegación de grandes embarcaciones por debajo del nuevo puente.
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