Después de que la reforma pensional fuera aprobada en su segundo debate en el Senado, por medio de un acuerdo con el partido Liberal. El Gobierno Nacional aceptó bajar el umbral que habla sobre la cantidad con la que las personas pasarían a cotizar en el régimen de pensión, finalmente este se redujo de 3 salarios mínimos a 2,3.
La polémica inició porque el presidente Gustavo Petro afirmó que ahora buscará que en la Cámara de Representantes se le apunte al aumento a 4 salarios mínimos, lo que termina siendo más que en la propuesta presentada desde el comienzo.
"Los senadores liberales hicieron el gran oso nacional, no habían pasado 24 horas y ya el presidente de la República estaba anunciando la ruptura de los compromisos y los consensos políticos, por eso lo dijimos desde el principio, no se le puede permitir un solo avance al Gobierno porque no respeta a las instituciones y no reconoce al Congreso, ni reconoce las diferencias", señaló el representante Julián Peinado.
Además, aseguró que en la Cámara de Representantes dejarán esa constancia "se advierte una gran aplanadora en este momento con un número significativo de representantes que van a acompañar esta reforma", concluyó.
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La senadora Paloma Valencia también se pronunció afirmando que el presidente Petro hizo un acuerdo con el partido Liberal y apenas ellos votaron rompió este acuerdo.
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Por otro lado, el expresidente Álvaro Uribe publicó a través de su cuenta de X el siguiente mensaje: "la culpa no es del tigre, la culpa es de aquel que lo creyó herbívoro porque le recibió unas lechugas, pero el tigre finalmente le arrancó la mano". Dicha frase se podría entender precisamente como una indirecta dentro de la discusión sobre el acuerdo que había entre los liberales y el presidente Petro.
El senador David Luna se refirió a esta decisión del mandatario, recalcando que pasar el umbral de 2.3 salarios mínimos a 4, es el mejor ejemplo de la verdadera intención del “falso mesías” de estatizar pensiones para quedarse con más dinero para su proyecto político, el cual podría empezar a disponer al final de su mandato, en plena época electoral.
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